Imhotep, sacerdote y guerrero

por Imhotep* Lun Sep 19, 2011 6:34 am

-Nombre del Personaje:
Imhotep

-Edad:
Nació en el 2700 a.C. actualmente tiene 4100 años, aparentemente tiene 28

-Especie:
Vampiro, aunque antes de convertirse domaba las artes mágicas

-Tipo y Clase Social:
Clase alta

-Orientación Sexual:
Heterosexual

-Lugar de Origen:
Egipto, Tebas

-Habilidad/Poder:
- Ilusión: Capacidad para alterar la relativamente la realidad por medio de alguna ilusión, algo no real para confundir a las personas.
- Infringir dolor por medio de la mente: Capacidad que consiste en infringir dolor a una persona, esto solo funciona por medio de la concentración mental y el contacto visual.
- Clarividencia: Es la habilidad de encontrar a cualquier persona, aún sin haberla visto, teniendo como referencia algo de la persona o una foto.

-Descripción Física:

Spoiler:

-Descripción Psicológica:
Antes de su transformación era una persona seria y calculadora, que sabía lo que quería, como lo quería y del modo exacto que le gustaba que sucediera, todo premeditadamente. Sus habilidades innatas le llevaron a conseguir respeto y el favor del faraón Seti I, pero no era suficiente, y se embarcó en proyectos mas ambiciosos como la construcción de grandes lugares emblemáticos. Sufrió un leve cambio cuando conoció a Ank-su-namun, el amor de su vida, cuando la perdió su vida se vino abajo, pero su transformación se produjo pronto. Siguió con su vida altiva y llena de respeto por parte de sus conciudadanos, que llegaban a adorarlo como si de un dios se tratase. Con el paso del tiempo se fue obsesionando cada vez más con que algún día se reencontraría con su amada.

-Historia:
Imhotep vio la luz del sol por vez primera en el año 2700 a.C. en la rica ciudad de Tebas, también llamada por entonces con el sobrenombre de "Ciudad de los Vivos". Desde pequeño Imhotep se dedicó en cuerpo y alma a complacer a los dioses, a todos por igual, pero no por ello en menor grandeza. A penas cumplió los 11 años le presentó al faraón Seti I un papiro con los bocetos y planos de un grandioso templo para conmemorar a los dioses. Esto agradó al faraón que ordenó la inmediata construcción de este bajo la supervisión del pequeño. Para sorpresa de todos, hasta del mismísimo faraón, los dioses le concedieron a Imhotep su favor y gracia pudiendo obrar milagros en su nombre. Lo que nadie sabía era que el pequeño descendía de un linaje ya extinto de brujos, lo cual era el origen del misterioso poder de Imhotep.

Poco después de esto el faraón mandó llamar al chico el día del décimo sexto cumpleaños de este y le hizo una oferta en la que iba incluida una amenaza con el propósito de que aceptase sin rechistar... El faraón quería que fuese su sumo sacerdote. Ya con este cargo fue cuando conoció al amor de su vida, Ank su namun, una mujer bellisima, de linaje matriarcal y ojos color plata, unos ojos únicos. El amor entre los dos floreció rápidamente, pero su relación tuvo que permanecer en secreto, ya que ella estaba prometida con el hijo del faraón. Esto enojó a Imhotep muchísimo, tanto que llegó ha desear la muerte del linaje completo de su protector. Una fría noche mientras observaba el desierto lanzó una silenciosa plegaria llena de odio a los dioses. A la mañana siguiente el faraón ordenó a su sumosacerdote la construcción de la tumba más grandiosa de todo el reino. Imhotep sin saber muy bien porque aceptó el encargo y construyó una gran pirámide.

Fue una obra muy misteriosa, los horarios de trabajo cada vez se fueron volviendo más extraños. Por algún motivo que el chico no alcanzaba ha comprender el sol del desierto empezaba ha dañar su bronceada piel, pequeñas ampollas empezaban ha cubrir su cuerpo tras varias horas a la luz. Debido a esto pidió permiso para construir la pirámide bajo un palio para tapar el sol y estar a la sombra.

Cuando cumplió 28 años la pirámide fue completada, se alzaba majestuosa como nexo entre el mundo de los vivos y el reino de los dioses. Entonces sucedió la mayor tragedia de la vida de Imhotep. Seti I le ordenó oficiar la boda de Anck su namun y su hijo. El ritual transcurrió como debía...pero el dolor que sentía el sumo sacerdote lo veía reflejado en las escasas miradas que se cruzaron durante la ceremonia. La pareja una vez casada hicieron un viaje de una semana a Mauritania en la estación de las lluvias. Cada día Imhotep observaba el horizonte desde el balcón del templo. Finalmente...tras 4 jornadas de retraso el matrimonio regresó.

Una noche, mientras Imhotep paseaba por un oasis fuera de las murallas de la ciudad vio algo a lo lejos... Un anciano tirado en mitad del desierto. Imhotep se acercó para intentar sanarlo. En el momento que le tendió la mano para ayudarlo este le aferró con una fuerza extraordinaria para un hombre anciano, hambriento y deshidratado. Con la misma velocidad que ataca una cobra aquel demente se lanzó sobre su cuello, bebiendo su sangre. A punto de perecer, Imhotep calló de espaldas a la arena, con el rabillo del ojo pudo ver un escorpión negro a su derecha junto al que estaba el anciano en pie. Este se cortó levemente en la muñeca y le dio a beber su sangre. Una gran quemazon empezó ha recorrer su cuerpo, como la ponzoña de los depredadores del desierto, finalmente perdió el conocimiento hasta que despertó unos minutos mas tarde, miró a su alrededor y no había ningún indicio del extraño anciano...Así fue como Imhotep fue maldito con el don de la inmortalidad. Unas pocas noches más tarde fue cuando se descubrió que ya la comida no le saciaba, que necesitaba sangre para poder subsistir. Salió con uno de sus sacerdotes de la ciudad con el propósito de alimentarse de el cuando en el mismo oasis en el que los dioses le hablaron vio a su amor forcejeando con su marido. Este soltó la mano abofeteandola y de un cesto de mimbre sacó una cobra que lanzó sobre ella. Con la velocidad sobrehumana que había adquirido apartó a Seti II en un momento lanzandolo por los aires y se agachó al lado de su amada. La serpiente la había mordido y un hilo de sangre salía de su pierna. Imhotep consiguió de detener el instinto de alimentarse y miró a Anck su namun a sus ojos color plata. La estrechó entre sus brazos y le dijo al oído que no se preocupase más, que él estaba con ella, que estaban juntos bajo el cielo estrellado y ya nada podría separarlos. Tras ello abrazó a su amada y en los últimos alientos de su vida ambos probaron los labios del otro. Cuando el veneno de la cobra alcanzó su corazón la abrazó fuerte...y lloró en silencio hasta que el sol salió.

Pasaron los siglos y el pueblo egipcio rindió tributo durante todo ese tiempo al ser que protegía el país, ya que durante siglos arrasó regiones para unirlas a Egipto bajo el nombre del Rey Escorpión. Una noche cuando se acercaba el comienzo del siglo XIX tuvo una visión y decidió cruzar el mar rumbo a Francia con un extraño sentimiento en su muerto corazón.

por **Nigel Quartermane** Lun Sep 19, 2011 2:41 pm

OBSERVACIONES:

No es posible que tu personaje se haya convertido en vampiro del modo que indicas, todos los vampiros sin excepciones deben ser convertidos de la manera tradicional, es decir, que un vampiro lo muerda y luego le de de beber. Modifica eso y postea avisando para poder aprobar tu ficha. Gracias.