Breathe into me [Privado]

- Ah!La brisa de verano es tan placentera como el roce de las alas angélicas..- musitó el hermano mayor,Zared. Las palabras que soltaba eran sabias y controladas ...pero le faltaba aquel toque de sentimiento;algo que no poseía en su interior. Zahir,el cual caminaba a su lado permanente , alzaba la ceja con arrogancia. Detestaba ver a su hermano filosofar tanto y más en público.Según él, estaba estropeando la reputación de ambos -Pues más vale que sean las alas de un demonio..- comentó con el mismo comportamiento descaro y malévolo. Soportar a Zahir era un reto, un laberinto sin salida . Así que Zared no entró al trapo porque conocía suficientemente a su gemelo como para etiquetarlo de inteligente. Algo que no poseía . Siguieron por la misma calle , cada uno hundidos en sus propios pensamientos pero siendo cautelosos de ellos mismos. Adentrarse profundamente en el mar de las reflexiones del pasado, hundirían sus cabezas hasta tal punto de alejarlos de la realidad. Así fue como el silencio se hizo con la situación de los dos. Era sagrado, era intocable, era perfecto...irreal. Tal cual los gemelos se mostraban a la gente. La muchedumbre se volvía, se fascinaban y seguían con los ojos expuestos en aquellas dos figuras tan perfectas e idénticas. Ellos estaban acostumbrados, más de lo que una persona pudiera entender - Debo admitir que París empieza a gustarme. Las putas tienen un precio más elevado, la comida es excelente y las jóvenes menores de diecisiete son...- quiso continuar con aquellas malditas palabras de un hombre insatisfecho sexualmente. Se detuvo al ver a una joven pasar con su madre tímidamente - sensacionales- continuó con el mismo tono, tétrico y sediento .Zared frunció las cejas, en señal de desaprobación - No Zahir, no volverás a cometer los errores del pasado .Mi vida no está atada a tus ...problemas mentales ,no pienso volver a salvar tu trasero o a tus "víctimas" - aclaró con un tono severo. Con el mismo que intentaba detener a su gemelo.

Muchas veces se tuvieron que marchar de los países ajenos por culpa de la oveja negra . Creaba problemas, mataba,violaba, insultaba a la política y a los condes impertinentemente. Esta vez se quedarían más de lo previsto,con o sin el consentimiento de Zahir. A las alturas de Zared, ya no le importaba nada de su hermano y menos las estupideces que realizaba día a día -No seas tan amargado, conseguiré una para ti también. Verás el placer que sientes cuando escuchas sus llantos,cuando sientes sus lagrimas y cuando logras introducir...- Zared le detuvo a tiempo , deteniendo su caminata - ¡ Basta Zahir! Te estás comportando de una manera infantil , irracional e idiota. No consiento que en mi presencia me hables de tus sentidos ,de tus alegrías y satisfacciones al desflorar a una virgen o a violarla. Imbécil- el hecho de alterarse así era el cansancio que le había agotado desde el regreso a Francia. El recuerdo de su madrastra, su amante y la compañía de su gemelo le ponía de un humor sarcástico ,malvado y negro. Zahir se río a carcajadas demoníacas ante la reacción de Zared. Lo cierto era que no deseaba escuchar sus sermones , seguiría pensando a cual de las jóvenes que pasaba sería tan afortunada de tenerle entre sus piernas. Tras aquella pequeña discusión,siguieron andando en silencio. Esta vez era devuelta a la residencia .Una decisión sabia por parte de Zared. Evitaría otra discusión a lo tonto y tenía pensado escribir una carta a su amante - Zared,para!- la exclamación de Zahir impresionó a su hermano y frunció las cejas como los labios - ¿Que ocurre?- preocupado no era su tono de voz,mas bien un tono de voz cansado y pesado - Sht!Siento una presencia extraña..- ambos se detuvieron en un callejón fuera del alcance de la gente y a pesar de que era de noche, la muchedumbre no cesaba. Atentos, con los músculos tensos más de lo debido ,intentaron hacer caso a sus instintos lobunos ,a la espera de una respuesta...

Estaba materializándose en aquél momento.

Se había trasladado desde el bosque sin ningún tipo de problema.

Después de un largo paseo por los caminos y de comprobar que aquella noche tampoco había nadie allí, decidió regresar a las callejuelas que tanto le gustaban. Tal vez encontraría movimiento, y algún cuerpo sediento de amor y calor, que era lo que deseaba en aquél momento.

Mientras su incorpóreo cuerpo iba tomando forma, escuchó unos murmullos.

Una voz grave y otra que se superponía, y no entendió apenas, pero creyó escuchar una palabra realmente desagradable para muchas mujeres, también para algunos hombres, y también para ella... Aunque en su interior algo se despertó, porque aquello insinuaba algo que la excitaba, aunque fuera muy en el fondo.

Se concentró para adquirir una completa apariencia física, cosa que duró ya unos pocos segundos, y salió de su rincón, tapándose un poco más con su estola, porque el frío le calaba hasta los huesos.

Es ridículo, vivo en un mundo en el que el frío nos devora, ¿aún no estoy acostumbrada? - pensó para sus adentros, mientras enfocaba la vista para ver si encontraba al dueño de esa voz tan sobria.

Las luces tililaban, alumbrando zonas y dejando otras en penumbra. Al llegar a una zona descubierta y alumbrada, pudo encontrarse con un par de hombres, jóvenes, que parecían estar a la espera de algo o alguien.

¿Me esperan a mí, acaso? No veo a nadie más aquí.. - pensó de nuevo, sintiendo que algo rabioso y oscuro emanaba de aquellos cuerpos.

- Buenas noches, ccaballeros... - aventuró, y su voz clara rompió el pesado silencio que se había cernido sobre ellos.

Parecen cachorros esperando a saltar sobre una presa.... ¡¡Ja!! Si supieran....