Luca R. Lauridsen

por **Luca R. Lauridsen** Vie Oct 07, 2011 1:07 am

Luca R. Lauridsen

-Edad:
21 años

-Especie:
Humano-Cazador

-Tipo y Clase Social:
Inquisidor - Clase alta

-Orientación Sexual:
Heterosexual

-Lugar de Origen:
Roxburghshire - Escocia

-Habilidad/Poder:
A pesar de que es humano, posee todas las habilidades de un cazador al ser entrenado desde pequeño por su abuelo para esto.

-Descripción Física:

Spoiler:

-Descripción Psicológica:
Luca es un chico completamente reservado, logra ser amigable cuando èl lo desea, sin embargo, pocas son las personas que realmente considera sus amigos o a los que deja que realmente lo conozcan como es, y en gran parte, es por ser un cazador de demonios. Vive dos vidas completamente diferentes, siendo un adinerado joven de Escocia tiene que tratar con todas las familias de su misma posicion asi como la realeza Europea y fingir como la mayoría de ellos lo hace, su carisma y encanto personal, suele atraer a la gente pero el chico saber cómo usar eso a su propio beneficio.

Analítico hasta el extremo, prefiere siempre ir un paso delante de todos y preparar cada movimiento que piensa realizar para lograr sus fines. Para él, jugar limpio o sucio, poco le importa, lo único que desea es conseguir lo que quiere sin importar que se lleve a otros en el camino de cumplir sus objetivos. Desde pequeño, la forma en que fue criado por su abuelo lo hizo sr petulante así como frío con sus comentarios o su forma de ser, puede resultar altanero y su orgullo es uno de sus peores defectos.

Suele ser cabezota y testarudo cuando tiene una idea en mente, le gusta arriesgarse más de lo necesario cuando tiene que cumplir con sus obligaciones de cazador, que es realmente cuando se siente libre y sale su verdadera personalidad. A pesar de que en su mayoría los cazadores son sumamente católicos, él tiene un punto de vista diferente, siendo cazador por mera diversión.

-Historia:

¿Dónde empieza la historia de mi vida?... Tal vez un poco antes de que yo naciera, cuando un caballero escocés se enamoro de una doncella en uno de sus tantos viajes que realizaba por el viejo continente. Ella, era de procedencia francesa, hija de una acomodada familia en aquella ciudad y cortejada por muchos nobles de ese país, que fue lo que vio en ese extranjero, hasta la fecha no logro explicármelo, sin duda, su vida habría sido completamente diferente si no se hubiera enamorado del joven escocés. ¿Una historia cursi del amor de esas dos personas?, solo en el inicio. Él, provenía de una familia de dinero, con una apellido de mucho prestigio en su natal Escocia, su padre tenía muchas tierras que su familia habia acomulado con el pasar del tiempo, la familia Lauridsen contaba con el prestigio de una familia noble a pesar de no llevar tal titulo. Sin embargo, muchos secretos se escondían entre esas cuatro paredes de su castillo en Roxburghshire, que se remontaba a varias generaciones, así que ella, nunca imagino los problemas que tendría al haber aceptado la propuesta de aquel hombre.

Fue en el año 1779 cuando yo nací, el primogénito de la familia Lauridsen y el que seguiría con la tarea que se nos había impuesto durante siglos. Por supuesto, que tanto como mi abuelo y mi padre estaban felices de que un varón llegara para seguir portando tan noble apellido, pero sobre todo, para que continuara su legado. Mi infancia, se puede considerar normal si quitamos el hecho de que a mis ocho años sabía manejar a la perfección el arco y la daga, y que para esa edad mi padre me había enseñado a cabalgar y reconocer cada zona del bosque que rodeaba nuestras tierras; junto con mi abuelo, teníamos la costumbre de salir de caza en busca de la cena para el día siguiente aunque no hiciera falta. Consideraba normal cada cosa que ellos me enseñaban o el adiestramiento con las diferentes armas que tenían.

Era normal para mí ver a mi padre partir cada determinado tiempo y verlo regresar después de algunas semanas o incluso meses, mi madre, se mantenía ocupada enseñándole a mi hermana, que era menor que yo por cinco años, a como ser una dama y cada regla esencial para encontrar un buen esposo, mientras que yo seguía las órdenes de mi abuelo. De niño, siempre me pregunté el porqué de las constantes discusiones con mi padres cuando él volvía de algún viaje, del por qué mi madre se negaba a que yo acompañara a mi padre en uno de ellos, pero al final, esas discusiones terminaban igual, el abuelo imponiendo su voluntad y mi madre, como buena esposa, acatando las órdenes de su marido tirada en el piso.

Fue cuando cumplí los once años que el gran secreto de la familia se me reveló, cuando pude acompañar a mi padre y enfrentarme a lo que el junto con la iglesia decían, eran unos monstruos. Brujos, vampiros, licántropos o cambiaformas se fueron presentando en mi vida, cada uno de ellos dejando diversas marcas en mi cuerpo como recordatorio de mis peleas y de lo que se suponía era mi deber como cazador, como perteneciente a la familia Lauridsen. Pero al estar metido entre lo que la iglesia consideraba el bien y el mal, era lógico que mis acciones y la de los míos tuviera consecuencias, que más de un clan buscara venganza.

Tenía quince años cuando tal evento llegó. Había decidido ir cabalgar por el bosque aquel día, sin esperar que cuando llegara de nuevo a lo que consideraba mi hogar se viera envuelto en llamas y gritos provenientes del castillo. Corrí de inmediato al interior con el firme objetivo de ayudar a mi madre y mi hermana que se encontraban ahí, ilusamente esperaba que mi padre las hubiera salvado, pero las llamas hicieron imposible mi paso hacia donde las personas más importantes para mí se encontraban. Luche con esos brazos que querían sacarme del lugar, tire de ellos para escapar pero cada uno de mis intentos fue inútil ante la fuerza de mi padre.

Aùn recuerdo con exactitud esa noche, las palabras que uso…

La rabia, el dolor, la impotencia de no haber podido hacer nada para ayudarlas fue lo que me cegó en el momento en que me dio a entender que no le importaba, que había preferido ir a matar a los brujos junto a mi abuelo que salvar a su propia familia. Fue mi propia daga la que se enterró en su pecho, la que giro sobre este y fue limpiada por su propia ropa después de mirar como agonizaba en mis propios brazos. No me sentí culpable, no me dolió tampoco el enterarme que mi abuelo había muerto a manos de esos brujos, lo único que me importo fue la perdida de mi hermana y mi madre…

Me convertí en el cazador que querían que fuera, dejando aún lado las emociones y portando mi apellido para usarlo como influencia y acercarme al vaticano, para rodearme de otros cazadores y cumplir las misiones encomendadas por estos. Me fui de Escocia tratando de dejar mí pasado atrás, con el único fin de completar mi venganza.

-Datos Extras:
*Siempre carga consigo una daga hecha de plata, así como una cruz del mismo material que cuela por su cuello.
*Un tatuaje con la marca de cain cubre su hombro izquierdo.
*Odia hablar de su familia, en especial de su padre.

por **Tarik Pattakie** Vie Oct 07, 2011 9:38 pm

FICHA ACEPTADA
Bienvenido a Victorian Vampires

Luca R. Lauridsen

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