Heiliges Römisches Reich

por **Ludwig Tobias Wittelsbach** Vie Dic 23, 2011 12:17 am

Heiliges Römisches Reich
Sacro Imperio Romano Germánico

Heiliges Römisches Reich Electorales2-1

LA DIETA O REICHSTAG

Representantes de los Círculos Imperiales
Heiliges Römisches Reich Marco1

Goberantes de los Estados asociados

Heiliges Römisches Reich Marco2

Composición del voto

Las reuniones de la Dieta se dividirían en dos categorías: las relativas a cuestiones internas del Imperio y las relativas a asuntos en materia de relaciones externas.

- Cuestiones internas del Imperio: al no estar sujetos a la legislación imperial en materia interna, los estados asociados no tienen voto en éste tipo de reuniones, aunque tienen la opción de defender su opinión. Cada representante de los Círculos tiene un voto y los emperadores pueden recurrir a uno personal de no ser elegidos como tal por ningún círculo.

- Cuestiones de relaciones externas: al no tener capacidad para hacer una política externa ajena al Imperio, los estados asociados tienen voz y voto en esta clase de reuniones. Cada representante de los Círculos y de los Estados asociados tiene un voto e igualmente los emperadores pueden recurrir a uno personal de no ser elegidos por ningún Círculo.

*Sujeto a cambios para un mejor funcionamiento de la trama

Breve introducción histórica:

El Sacro Imperio fue un conjunto de estados que surgieron a lo largo de los siglos de lo que, en un primer momento, fue el tercio oriental que resultó de la división del Imperio carolingio. La unión entre ellos fue decreciendo con el paso del tiempo, por el poco interés de los estados y del propio emperador en buscar una unidad y centralización, hasta que, en la Paz de Westfalia (1648) el Sacro Imperio paso a ser prácticamente una cuestión formal y sin demasiadas repercusiones reales.

Su nombre tiene una fuerte connotación religiosa, pues hace referencia a la Biblia y al Imperio romano, el cual es considerado el cuarto imperio que precedería al anticristo, algo que los carolingios recogerían, considerándose sus sucesores. La corona imperial, al dividirse el reino franco, terminó cayendo en el reino oriental, el futuro Sacro Imperio, y, por lo tanto, esto es perpetuado. La razón de esto no es otro sino el que justificar un carácter de universalidad al Imperio.

Al margen de eso, su relación con el Imperio romano es mínima y el Sacro Imperio, en su gran mayoría, sería una nación germánica, con algunas excepciones, como los eslavos de Bohemia. De hecho, tras su disolución, Prusia terminaría por arrebatar el dominio de la región a Austria y, pronto, unificó la mayoría de estos territorios en una nueva nación: Alemania.

El Sacro Imperio en el foro:

Los sucesos del Sacro Imperio, a rasgos generales, siguen la historia real hasta 1782, cuando Francisco II de Habsburgo (Franz II von Habsburg), consigue ser designado emperador por el Colegio electoral. Él, de ideas absolutistas y totalmente contrario a las nuevas teorías liberales que llevaban décadas corriendo por el continente, consiguió establecer una serie de reformas que hicieron que la mayor parte del poder dentro del Imperio recayera sobre él. Así se eliminaban siglos de lucha por los privilegios de los estados frente a la unidad del Sacro, centralizando el poder en Viena. Además, eliminó la costumbre germánica de elegir monarca, haciendo el Imperio hereditario, y posibilitando el acceso de una mujer al trono, pues quería que su hija, Katra Di Alessandro, fruto del matrimonio de éste con ¿? Sabrina Di Alessandro, miembro de una de las familias más importantes de Roma, fuese su sucesora.

Los príncipes, contrariados por su política, pronto planearon derrocarle y, en 1790, Sara Ascarlani y la Reina de Prusia, Shanon II Owen, intentaron secuestrar al Emperador. Su intento casi resultó ser efectivo pero, en medio de la coronación, Francisco II apareció, haciendo que ambas dos mujeres tuvieran que escapar y exiliarse.

Sin embargo, en 1799, otro intento por liberar al Imperio del yugo de los Habsburgo fue llevado a cabo. Éste terminó con la desaparición del total de la familia Imperial, ingente, lo cual llevó un laborioso y costoso plan. Sólo una de ellos se salvó: la heredera, Katra. Así, los Príncipes electores, aprovecharon la confusión para recuperar su legítimo derecho a elegir emperador y eligieron en Fráncfort a Luis VII Tobías (Ludwig VII Tobias), Conde del Palatinado, como nuevo emperador, el cual modificó las leyes para posibilitar que hubiese dos emperadores conjuntos gobernando a la vez. Así, Ludwig IV del Sacro Imperio instituyó a Shanon I como emperatriz. Esto no supuso ningún problema ni una división del país, pues el poder regresó a la Dieta Imperial (Reichstag), el Parlamento en el que los príncipes de los estados eran representados (en el que, además, se estableció que los países extranjeros no pudieran votar). La Segunda Reforma Imperial también supuso una reorganización del Imperio y la Dieta, dividiendo éste en once Círculos Imperiales. Los estados en cada Círculo debían elegir un representante que sería quien tendría voz y voto en el Reichstag. Sin embargo, ese menor poder de los emperadores no supuso realmente una vuelta al estado anterior, pues el Sacro Imperio seguía siendo centralizado y mucho más unificado que antes, convirtiéndolo en una potencia aún más fuerte que antes. Los emperadores pronto llevaron a cabo una política aparentemente anticlerical, pues eliminaron uno de los arzobispados más poderosos, el de Colonia, cuyo gobernante era Príncipe elector, sustituyéndolo el Principado capitolino que entregaron a Sara Ascarlani. Además, convirtieron esa ciudad en la nueva capital del Imperio, trasladando la sede de la Dieta desde Ratisbona e iniciando la construcción de un complejo palaciego, a raíz de la fusión y ampliación de dos más pequeños.

En lo relativo a los territorios de la monarquía de los Habsburgo, éstos fueron divididos. El Reino de Bohemia, el Condado del Tirol y los nuevos Archiducado de Baja Austria y Ducado de Alta Austria, serían entregados a varios nobles cercanos a los nuevos emperadores, los cuales eran sospechosos de haber sido partícipes de la conspiración que había habido contra Francisco II. Los territorios en Baviera y Suabia serían anexionados por los estados aledaños y el Principado de Flandes, antiguos Países Bajos austríacos, sería rescatado para Katra, amiga de la infancia de Ludwig IV. En lo relativo a los territorios fuera del Imperio, se crearían los dos Estados asociados: el Reino de Hungría, con capital en Buda, y el Reino de Iliria, con capital en Zagreb, ambos bajo la influencia del Imperio y ligados a él por su propia configuración. Por último, Dalmacia sería vendida a la República de Venecia, dinero con el que se financiarían las reformas en Colonia, entre otras cuestiones.

Temas de la trama Imperial

PRÓXIMAMENTE