Una tarde etérea [Esmy]

por **Dawn Nimmet** Dom Abr 08, 2012 10:37 am

Era siempre ella quien atraía las miradas de todos los hombres.
Era ella quien movía de lado a lado sus hermosas curvas.
Ella era aquella capaz de hacer que un hombre quedase derretido a sus pies, suspirando por un beso el cual jamás iba a ser entregado.

También estaba aquella otra mujer que sus ojos eran azules, límpidos, puros.
Esa mujer que con su inocencia, derrite igualmente el corazón de cualquier hombre para que le trajese cualquier capricho que esta deseara.
Esa mujer que por mucho que la mientas, siempre te creerá, que siempre se hará la inocente, pero que siempre actuara bajo la máscara de una niña buena, de una niña que no se entera de nada, pero en cambio, eso no es así.

Cilo Nightleaf, es una de las mujeres de los Nightleaf que es única y especial. Muchos pretendientes pasaron por los ojos de la pequeña Nightleaf, muchas negativas de sus labios recibieron todos los hombres y su hermana parecía estar a su lado todo el tiempo. Pensó en que quizás, hubiera querido que los acontecimientos pudieran haber pasado al revés, podrían haber sido de otro modo.

A veces se preguntaba que como seria el mas allá. Su hermana no se lo iba a decir nunca, aun no había estado allí al cien por cien. Hacia una tarde estupenda y abril se asomaba para traer el calor y el buen tiempo consigo. Eran las cinco de la tarde, había alguna que otra nube por encima de sus cabezas, pero no eran ninguna amenaza. Su vestido de encaje negro con ciertos tonos perla, hacia juego con su parasol que lo utilizaba para cobijarse de los rayos del sol. Ya por el color tostado que había conseguido de su estancia en Paris, ahora le había salido una herida minúscula en su rostro, como si de haber tomado tanto el sol, su piel ahora estaba sufriendo las consecuencias-Esmy....-Miro a su hermana que la tenía a su lado, o al menos ella sola la veía a su lado-Esmy...-Comenzó a susurrar para que no vieran que estaba loca-Esmy...Hoy estas muy guapa...-Dijo alagando la belleza de su hermana, pálida, morena, todo un montón de hormonas femeninas que destacaba más que ella. Cilo, el no destacar, lo agradecía enormemente.

Sonreía a su hermana con amplitud, cariño y se puso mirar hacia el frente. Vio un puesto de helados. Enseguida le apetecía comer y miro a Esmy por si quería compartir su apetito-¿Te apetece un helado Esmy?

por **Esmy Nightleaf** Vie Mayo 25, 2012 6:51 pm

-La sonrisa de Esmy como siempre era obscenamente altiva le gustaba aparentar esa superioridad que muchos veían hasta de lejos, Esmy siempre tenía la costumbre de poseer a las muchachas para que todos los hombres le volviesen a mirar una vez más pero esos hombres se quedaban en un segundo plano siempre y cuando aparecía su hermana. Ella era hermosa la mala en todo caso la pecaminosa mientras su hermana siempre había sido la inocente, la chica más buena de todas juntas habían formado el dúo de hermanas más bellas que los propios cuadros era mejor observarlas a ellas y no a un cuadro de naturaleza muerta o hieratismo de mujeres que no tenían expresión. Su hermana susurraba de ese modo haciendo que una fluida risa saliera de los pintados labios de Esmy- Amor estoy aquí recuerda que he poseído a esta mujer ~

-Ella no bajaba el tono de su voz más bien justo al contrario parecía hablar con normalidad de lo que había hecho, posó su mano en la mejilla de su hermana cerrando los ojos con una sonrisa, que dios la bendijese porque era lo único bueno que había en ese mundo todo lo demás era pura palabrería egocéntrica, ella estaba muerta pero le gustaba sentir como si fuera humana en cambio aunque estuviera muerta sabía que era lo más importante, su hermana ¡ pobre de aquel que le hiciera daño porque le mataría con sus propias manos ! obvio que no podía hablar con esa violencia delante de su hermana para Esmy, Cilo siempre sería su pequeña- Claro, porque no~

-Entró como solía hacerlo colocando la mano en la puerta atrayendo las miradas por la elegancia que poseía, era cierto que la figura de aquella mujer que había poseído habia desvanecido por lo menos durante unas horas, ahora solo quedaba ella con sus caderas, sus cabellos sueltos sus ojos con una mezcla entre azul y verde que dejaba a la gente tan boquiabierta pero lo que sobre todo dejaba así a la gente era el trae de Esmy, como si fuera una bailarina exótica tenía un vestido rojo su color favorito no era muy apegado a su cuerpo sino lo suficiente, tenia una raja a la altura de la rodilla enseñando su pierna, un escote no muy pronunciado que mostraba su pálida piel y un sombrero con plumas que parecía más grande que su propia cabeza- ¿Que pasa?~ -Su tono de voz parecía apacible con una sonrisa incluso dulce pero de haberlo podido habría utilizado palabras más duras-

¿donde quieres sentarte?~ -Vio algunas mesas libres, no quería elegir aunque miraba a su hermana paciente sabía que el efecto de aquella posesión no duraría para siempre, ¿podría saborear el helado? esperaba que las papilas gustativas rememorasen ese sabor delicioso, en verano su hermana y ella siempre tomaban mucho helado mientras veían algunas obras de teatro o rememoraban algunos libros, aunque Esmy siempre salía más que su hermana nunca fallaba a esas noches con ella-

por **Dawn Nimmet** Jue Jul 19, 2012 7:08 pm

Con pies agiles fue a sentarse en una mesa cuadrada y bella en la que había sido deshabitada minutos antes de llegar ellas, sonreía, le dolían los pies de un modo y todo a causa de los tacones que llevaba y le hacían un dolor insoportable. Recordó aquello que aconteció antes de casarse con ese bribón, cuando vio un cuadro de la heladería que le recordó a aquel despiadado hombre-¿te acuerdas de el Esmy?-Su voz era ahogada, triste, como si su felicidad la hubiera abandonado, pero con razón.

Ahora, por su culpa, su hermana estaba muerta, su hermana ahora era lo que era y menos mal que era un fantasma en forma-Esmy...-La miro mientras se sentaba lentamente con cuidado, señalo al cuadro con disimulo-Aquel cuadro me recuerda a...él...-Bajó la mirada, comenzando a jugar con el pañuelo de seda que saco anteriormente de su bolso.

-¿Qué tomarán?-Un camarero se acerco, a Cilo se le había quitado las ganas de tomar nada, aunque negó brevemente, pidió un té de hierbas, eso le ayudaría para tranquilizarla-Además, Esmy... ¿cómo lo haces? El ser tan...atrayente...-De algún modo sentía curiosidad por lo que hacía o el efecto que transmitía su hermana hacia los hombres-Cuando me equivoque de camino y me tope con el burdel y casi me violar...-enseguida se tapo la boca, se tapo con las dos manos la boca, ahogando sus palabras en un trago bien largo y difícil de tragar-Digo... ¿Cuánto tarda el té, no?

Se levanto del asiento para ir al lavabo. No, no volvió después de media hora y en ese momento se sentó en el mismo sitio. No miraba a su hermana, pues era muy cobarde para eso. Sentía miedo, no sabía cómo le estaría mirando su hermana-...Lo..o siento Esmy..no pude evitarlo...-seguía mirando hacia la taza intacta de té-...No era yo misma....-Dijo sin más, porque nada más y nada menos decía la verdad.

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