Andrew Fairey Montgomery

DESCRIPCIÓN FÍSICA

DESCRIPCION PSICOLOGICA

HISTORIA

Tiempo atrás, antes de su nacimiento y en un país completamente diferente, su madre, quien había conocido a un hombre que le encantó y le atrajo con el candor de sus palabras, abandonó la Casa de los Montgomery, en los momentos en los que aún poseía la bendición de los gobernantes. Y enterarse de su caída no fue lo mismo que vivirla. Mientras ella vivía en la dicha, aquella otra rama de su familia había perdido todo cuanto le había sido otorgado. Su renombre, las riquezas y todo lo que poseían. Para cuando se enteró de la noticia, ya era demasiado tarde y no pudo contactar con nadie que le hiciese saber el paradero de quienes conocía.

Entonces quedó embarazada y entre la bendición del nacimiento de su hijo se olvidó de todo incluida la desgracia de su hermana y aquellos dos sobrinos que sabía que tenía. El día en que Andrew, cuyo padre reconoció dándole el apellido Fairey, por el cual el título aristocrático que poseería años adelante se le otorgaría. Su infancia transcurrió para él tranquila, bajo las enseñanzas propias de alguien de clase alta y todo lo que se necesitaba. Fuera de aquello que normalmente enseñan a los niños de alta cuna, su madre le inculcó conocimientos diferentes, que se consideraban oscuros. La hechicería fue su segundo estudio, aprendiendo desde muy temprana edad las habilidades en las que su madre vio aquel potencial. Su madre, desconfiada de las personas que sabía hablaban de ella a sus espaldas hizo todo lo posible por criarlo de la mejor forma posible, un tanto entre la paranoia de ella y las exigencias, Andrew creció sin ningún problema, el carácter de su madre le enseñó que no debía confiar a nadie lo que su vida era. Pero al no tener él sus problemas y sin saberlos siquiera, su confianza a otros era más factible de conseguir.

Pasaron los años haciéndole llegar a la juventud, y fue esa ingenuidad la que le otorgó la historia que se desarrolló en esa época. Moviéndose entre los contemporáneos que había conocido en reuniones, fiestas u otras ocasiones, hizo amistad con un par de hermanos que fueron los que marcaron su vida. No se dio cuenta de lo que pretendían y en una trampa que resultó mortal terminaría. Como el único hijo de la pareja que le había dado a luz, aquellos jóvenes buscaban algo que no se esperaría, la muerte fue entonces que la vio de cerca, nigromantes como su madre en un maleficio le harían caer, dejándolo al borde de perder la vida, en una agonía que duró más que unos simples días. Y si su vida continuó fue un hechizo de su madre lo que lo permitió.Su esposo, víctima en su ausencia de aquella magia oscura pereció antes de que pudiese detenerlo. En su desesperación hizo lo que solo una madre podría hacer, cambió el destino del que moría por el suyo, absorbiendo aquello que amenazaba la vida de quien por ella había sido procreado.

Cuando Andrew despertó, se encontró solo, siendo q ue su padre le había heredado la posición que sabía ostentaba. Las personas a su alrededor no le contaron los pormenores, porque así lo había pedido la mujer que había muerto poco antes; le entregaron entre algunas cosas, documentos de su padre, las pertenencias de su madre, Fue al revisar esto que se enteró de aquella familia a la que nunca ella había hecho mención incluso tras sus preguntas en la niñez. Y un par de cartas, las misma por las cuales su madre se había enterado de lo que había pasado. Los nombres que allí aparecían, aunque desconocidos le crearon un sentimiento extraño. Sentía curiosidad, por saber más acerca de ellos. Tardó en acostumbrarse, a tomar el control total de lo que a ese momento ya le pertenecía. Afectado por la muerte de ambos de sus progenitores, incluso si ellos desaparecían a veces días o semanas sin darle una explicación exacta. Hasta ese momento no sabía lo que su madre había tenido que pasar al ser la esposa de un barón, pero poco a poco fue dándose cuenta de la posición en la que se encontraba.

Desea conocer a sus familiares, sabiendo tras haberlo investigado que se encuentran en París y también se ha hecho del conocimiento que uno de ellos posee un título de duque en el Imperio Sacro Romano Germánico. Espera con ansías en día que pueda hacer cruzar sus pasos. Mientras vive bajo esa forma a la que ya se ha acostumbrado.

EXTRAS