Athelstein Daventry

por **Athelstein Daventry** Lun Sep 03, 2012 9:41 pm

Nombre del Personaje
Athelstein Daventry
Edad
432 años (25 aparentes)
Especie
Vampiro
Tipo, Clase Social o Cargo
Clase alta
Orientación Sexual
Heterosexual
Lugar de Origen
Londres, Inglaterra
Habilidad/Poder:
Agilidad y reflejos sobrehumanos
Sentidos aumentados
Telepatía
Ilusión
Infringir dolor por medio de la mente

Descripción Física

Físicamente sólo tiene 25 años. Cabello negro como la noche, rizado y generalmente alborotado porque lo que menos le importa es lo que la gente tenga que decir sobre él, usualmente se lo peina y se lo despeina maniáticamente con las manos. Ojos negros también, oscuros y cambiantes según el humor en el que esté, con una chispa de diversión, con una sombra de lujuria o simplemente un dejo de crueldad. Antes de nacer en la inmortalidad tenía la piel bronceada pero tantos años sin ver la luz del sol han provocado que palidezca hasta el grado de parecer enfermo. Una nariz grande que le da personalidad y que él particularmente odia por ser tan llamativa. Alto, delgado, no parece tener la fuerza que su condición como criatura de la noche le proporciona. Sonrisa ladeada, nunca completa, ni mostrando los dientes, sólo un atisbo de gesto que te deja sin saber si está contento o sólo preparándose para atacarte.

Descripción Psicológica:

"Si yo fuera un humano normal, tendría que estar encerrado en un hospital psiquiátrico."

| Caprichoso || Explosivo || Infantil || Posesivo || Obstinado || Cruel | Impulsivo ||

Posee más defectos que virtudes pero en 432 años le han jodido la vida de un montón de formas, es celoso y posesivo porque nunca ha tenido nada realmente. Tiene una forma muy peculiar de hacerte saber que eres especial, y eso es no compartiéndote con nadie y mostrándose tierno e incluso pueril cuando está contigo. Juega sucio, se aburre rápido, explota a la menor provocación, es muy voluble y tanto puede mostrarse sereno y serio, como puede ponerse sombrío y cruel o pasar a divertirse y ser normal sólo porque si. Por mucho que considere a los humanos como inútiles y estúpidos, no le molesta relacionarse con ellos. Tiene una debilidad con las mujeres porque todas le recuerdan a su hermana, odia a los que las golpean, que abusan de ellas o que las tratan como basura. Con los hombres ya es otra historia: Quédate en su lado bueno y te será fiel para siempre, saca su vena malvada y se divertirá haciéndote sufrir. Fuera de todo eso, cuando es estrictamente necesario, sabe ser educado y formal pero odia ir a bailes y vestirse decentemente, aunque tiene mucho dinero, prefiere tener un perfil bajo. Tiene cero respeto por la propiedad privada cuando se trata de satisfacer sus caprichos y puede destrozar entera una tienda sólo para encontrar una corbata después de manchar la suya con vino tinto. Tiene el dinero para pagar los daños. A veces no entiende los sentimientos humanos porque habiendo vivido tanto tiempo, cree que sus preocupaciones se terminan con la muerte y la muerte es muy fácil de conseguir, sólo hace falta drenar la sangre, o apretar lugares específicos. Es despreocupado cuando está en sus cinco sentidos, es cruel en medidas increíbles cuando está enojado o deseoso de venganza, es caprichoso hasta el hartazgo cuando quiere algo y alguien le dice que no puede conseguirlo. No cree en el amor eterno porque él es eterno y todos siempre terminan dejándolo solo.

Historia

"Ahora sólo recuerdo el sonido de tus pasos al alejarse"

Nadie sabe quién era antes, nadie nunca lo pregunta y él prefiere guardarlo en secreto. Nadie sabe que mucho antes de ser el vampiro psicópata que es ahora, era un pequeño niño de ojos negros y nariz grande que apenas alcanzaba la mesa de la cocina. Porque antes, hace mucho tiempo hubo una cocina sin apenas comida, una casa muy pequeña y una madre. Tal vez no como las madres que uno conoce, de esas que te arropan antes de dormir, que te dan un beso de buenas noches en la frente y que velan tus sueños dispuestas a ahuyentar los monstruos de tus pesadillas, pero una madre al fin y al cabo. Ahora, en sus recuerdos, esa mujer que lo llevaba de la mano mientras pedía dinero en la calle, que lo alimentaba a base de pan duro y agua sucia, que nuna tuvo una sonrisa qué dedicarle, es sólo un ente sin rostro. No la recuerda. Fue a los seis años cuando lo abandonó. Lo dejó una noche y se fue sin mirar atrás.

El llanto de un niño de seis años al despertar solo en su casa conmueve a cualquiera. Verlo apenas vestido con unos calzoncillos y una camisa causa pena. Ethelbert Daventry no pudo con el sentimiento y se lo llevó de la mano. Un padre desconocido era mucho mejor que una madre ausente y Athel no lo pensó dos veces. Su nuevo "hermano" también había sido huérfano y a sus 15 años se dedicaba a hacer lo mejor que podía con su vida. Athelstein fue el primero de los hermano Daventry. Cuatro chicos conocidos por ser huérfanos y vivir como una familia en el sótano de una Iglesia. Poco después llegó Melannah, la que confundían con ser gemela de Athel, la que era prostituta y sus clientes le pegaban, la que llegó preñada de un niño que después perdió. Al final llegó Siegfried, un rubio diminuto que tenía especialidad en robar de los bolsillos ajenos y que nunca pudo quitarse la mala manía.Athel vivió el amor a temprana edad. ¿La causante? Melannah. Aun con su cuerpo flaco, sus cicatrices, su sonrisa sin un par de dientes, el cabello alborotado que caía sin orden sobre sus hombros, aun así la quiso como a nadia. Tal vez porque fue la imagen maternal que perdió cuando era muy niño pero sólo creció para defenderla y quererla hasta su muerte. Otro niño en su vientre y muchas complicaciones en el parto. Otra que se iba.

Mientras vivieron juntos, los hermanos trabajaban haciendo pequeñas cosas, arreglando cosas, limpiando chimeneas, haciendo encargos, alimentando caballos. Todos llevaban dinero a la casa pero nadie nunca es feliz para siempre, eso es una mentira inventada por los optimistas que quieren que todos seamos igual de estúpidos que ellos. Una noche en que Athelstein estaba solo, Siegfried llegó alegando que lo perseguían. Un hombre a quien le había robado un reloj y que parecía correr más rápido que nadie. No tuvieron mucho tiempo para escapar. Era un vampiro. ¿El final de la historia? Ethelbert muerto, Siegfried llorando sobre el cuerpo de su hermano muerto. Otro menos. Sólo quedaban Siegfried y Athelstein y el último no iba a quedarse con su hermano. Huyó. Esta vez fue él quien decidió abandonar y no ser el abandonado.

De alguna o de otra manera llegó a manos de ella. Una mujer de espectacular belleza que lo cautivó, o más bien se cautivaron mutuamente. Athelstein creyó que era amor, pero al final descubrió que era sólo interés por ambas partes. Él necesitaba un lugar dónde vivir y compañía para no sentir que otra vez se había quedado solo. Ella quería un chico para complacerse. Él le dio su cuerpo, su alma, su sangre y sus pensamientos, no le importó que fuera una vampiro como el que había matado a Ethelbert, enterró a su hermano en sus recuerdos junto a su hermana, a su madre y a ese niño de cabello alborotado y ojos tan negros como la noche que había muerto el día que su propia madre lo dejó a su suerte. Metidos en el fondo de su mente, bajo capas y capas de malos vicios, defectos y locura que fueron haciendo de él lo que es ahora. Ella lo convirtió por egoísmo, por no quedarse sola y habiendo encontrado un chico que estaba dispuesto a dar la vida por ella. Al final también se fue porque Athelstein tiene la cualidad de alejar a todo aquel que entra en su corazón.

Y ahora estaba solo de nuevo, con un cementerio de gente entre sus recuerdos, con un hermano perdido a quien no deseaba encontrar y sin un rumbo fijo qué seguir pero bien dicen que si no sabes a dónde ir, puede ser que cualquier camino que tomes sea el correcto y se fue. Tiempo después descubrió que Siegfried era como él, un chupasangre que vivía de sus robos cada vez más grandes pero el hecho de volver a mirar sus ojos que le recordarían lo que era ser feliz, era demasiado para él. Puso tierra de por medio huyendo del único que quedaba para demostrarle lo horrible que era su vida. Paris lo recibió cálidamente, hizo dinero haciendo trampa en juegos de póker, apostando cada vez más hasta que tuvo lo que tiene ahora. Mucho dinero, una casa enorme y nadie con quién compartirlo.

Datos Extras

- A la única "persona" a la que le tiene miedo es su hermano Siegfried.
- Fuma muchísimo, continuamente lo verás con un cigarrillo encendido en la mano.
- Le divierte muchísimo asustar a la gente.
- Tiene cambios de humor muy bruscos.

por Invitado Mar Sep 04, 2012 9:16 am

FICHA ACEPTADA
Bienvenido a Victorian Vampires

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