Cindy Oehler

por **Cindy Oehler** Dom Mar 09, 2014 5:15 am

DATOS BÁSICOS

▲NOMBRE DEL PERSONAJE▲

Cindy Oehler

▲EDAD▲

16 años.

▲TIPO, CLASE SOCIAL O CARGO▲

Clase baja.

▲ORIENTACIÓN SEXUAL▲

Heterosexual.

▲LUGAR DE ORIGEN▲

Paris.

DESCRIPCIÓN PSICOLÓGICA

Cindy es una jovencita muy alegre, siempre anda con una sonrisa en sus labios y con palabras de ánimos y amabilidad a todos con los que se tropieza en su vida. En especial a la gente desamparada, que como ella no tiene mucho en la vida, pero que como ningunos, saben agradecer los buenos momentos de la vida.

Obediente, su vida le ha hecho aprender de buenas y malas maneras que la gente como ella, debe de obedecer sin rechistar, ni protestar. Y así lo ha hecho, procurando siempre satisfacer con sus cuidados y su obediencia a los que ha servido, llevándose aún así muchas veces castigos por el simple placer o deleite de aquellos, en particular de su padre, si es que alguien así puede considerarse de tal forma después de todo.

Inteligente, sabe leer y escribir mediantemente bien. Le gustaría perfeccionar, aún así agradece que hubiera gente buena en su vida, que le enseñaran aquellos quehaceres tan extraños en alguien como ella, de clase baja. Es curiosa por lo que escapa de su conocimiento y si no consigue descubrir o encontrar un libro que hable sobre aquello, preguntara sobre ello. De inocente corazón y de un espíritu dulce, jamás de sus labios saldrán palabras malsonantes, ni deseará el mal a alguien. Confiada, siempre perdona los errores ajenos. No todos han podido saber que es el amor, darlo y recibirlo, o ese se dice para sentirse segura y exculpar a los que le hacen daño.

Protectora con las más pequeñas que ella, siempre dará un paso para protegerlas, ya que odia ver en sus rostros el dolor o la tristeza. Prefiere así sacrificarse ella, que sabe del dolor y de la desesperanza, que no que les roben los sueños y las sonrisas a las que aún no han descubierto el lado amargo de la vida. A pesar de haberse criada en orfanatos y alrededor de gente cristiana, Cindy no creé en Dios, ya que su vida ha sido muy amarga, y creé conocer el mal. No obstante si creé que si hace todo bien en su vida, al final obtendrá su recompensa, la paz y felicidad que tanto ansía y que algún día espera conocer.

HISTORIA

Desde el inicio todo fue mal. Que más se podía esperar de la amante de cual hombre cristiano traicionó su mujer? Era un secreto a gritos, que solo lo silenciaba el miedo que el señor Luksvotzh provocaba en los demás. Él un joven de clase alta, poseedor de una generosa fortuna y propietario, dueño junto con su mujer de un gran orfanato, tenía una amante de clase media trabajadora. Viéndose muchas noches en la que él se salía del ambiente familia y podía verla, al cabo de unos meses de amorío la joven terminó encinta. Esperaba un hijo de él, un hijo del que su propia mujer había sido incapaz de proporcionarle. La alegría fue inmediata, no obstante duró poco. Él se encontraba en un feliz matrimonio, con mucho futuro por delante por lo que la rechazó, llamándole ramera, diciéndole que aquel hijo no era suyo, que jamás le habría dado un hijo a alguien como ella. Desconsolada, fue a contarle a sus padres, los que tras un enfrentamiento tras no hacerles caso, y alegando que ahora era imposible encontrarle marida, no con la semilla de otro en su vientre ya formándose, la abandonaron, la echaron de casa con apenas 19 años de edad.

La joven madre buscó trabajo y fue alimentándose como pudo, gracias a una vacante libre que encontró en una familia acomodada como su cocinera, pero al llegar a sus últimos días para alumbrar, la echaron y encontrándose en la calle nuevamente no tuvo más opción que acudir en busca de refugia en el orfanato que tenia él, cuando las primeras contracciones parecían indicar que se iniciaba el parto. Al llegar al orfanato, rápidamente la atendieron y la hicieron pasar donde unas monjas la cuidaron durante todo lo que duró el parto. En lo que él dolor se intensificaba, le llamaba a él, buscándole, rogando para que fuera a su lado en aquel agónico momento que sentía como su cuerpo se rompía para abrirse a la nueva vida. Él no apareció en toda la noche y en lo que terminaba de dar a luz, cuando gritó por última vez; se oyeron los lloros de la pequeña criatura, de Cindy su hija y ella tras aquel segundo murió.

El señor Luksvotzh no llegó a tiempo para verla, si por eso para ver a su pequeña hija. Cindy quien en un intento de esconderla de los demás, le puso el apellido de su difunta madre Oehler y así Cindy Oehler pasó a ser una de las niñas que su institución pasó a cuidar. La pequeña niña pronto se hizo con todas las monjas del lugar, incluyendo con el señor Luksvotzh y su señora, que la cuidaba como si de una hija se tratase, sin saber de la sangre de su marido que corría por sus venas. Cindy creció sana, y como toda pequeña niña sonriente, alegre y obediente. Nunca jamás hizo nada apropiado, correcta en todo momento llegó a hacerse con la señora, quien tras convencer a su marido, la adoptó llevándola a su hogar, junto a ellos. Con siete añitos al fin pudo averiguar que era tener una familia. Feliz y radiante fue creciendo bajo la atenta mirada de quien era su padre adoptivo y bilógico, que bajo el techo de su propio hogar fue empezando a verla con otros ojos, dando paso a sueños tórridos en que solo pensaba en ella. Y así cada vez él la buscaba más. Le daba clases y se quedaba absorto en sus labios, en el tacto de sus cabellos. Cindy de mente bondadosa, no pensó que estuviera mal y se fue dejando, hasta que un día su padre la besó. No fue un beso casto a los que estaba acostumbrada, y temblorosa y con miedo se apartó de él. Sintiendo que debía de huir, se alejó hasta que él la retuvo y tras golpearla, terminando en el suelo hizo lo que hacía años había soñado, la hizo suya sin importar los gritos ahogados de la pequeña. A partir de aquel momento la vida de Cindy cambió. Temía cada momento que se quedaba con él a solas, en la que terminaba contra su cuerpo y asqueada debía acallar sus quejidos. Así fue abusando de ella, hasta que ella cayó enferma y con la vigilancia constante de su mujer, le resultaba imposible acercarse a su hija. No importó tampoco, pues empezó a aprovecharse de alguna de las niñas del orfanato en su ausencia, hasta que una noche en que Cindy se aventuró a ir a buscar agua a la cocina, se lo encontró haciéndole lo mismo que le hacía a ella a una de sus amigas del orfanato, mucho más pequeña con ella. Llorando de ver el dolor en el rostro ajeno, jurando proteger a las demás de su padre, le rogó que dejara a las demás, que si él quería ella solo seria para él. Su padre no tardó en aceptar aquello y dejando a la niña, fue hacia su hija haciéndola suya nuevamente y así cada noche en la que pudo pasarse a verla. Cindy sin poder decírselo a su madre al encontrarse esta en un estado débil por una larga enfermedad, se acalló cada golpe y encuentro en que su marido la obligaba a yacer junto a él.

Y a los 15 años, lo que tanto temían se hizo realidad. Una noche la señora siguiendo a su esposo en la noche cuando abandonó su alcoba, lo descubrió avergonzando a Cindy, y desde ese momento, su estado empeoró. Enfadada con su marido, recayó fuertemente en la enfermedad. El señor Luksvotzh hizo volver a Cindy al orfanato y allí como castigo por atraerle, como método por sacar el demonio de ella volvió a verla, con la diferencia que lo único que esta vez acariciaba su piel era el cuero de los látigos o la crudeza de la fusta que empleaba contra ella. Cindy aguantó sus torturas con heroísmo, hasta que a la edad de 15 años, justo en la madrugada de su aniversario la esposa del señor murió y ella, con miedo de las represalias huyó. Pasó un año en las calles, trabajando de lo que encontraba. Pasando una temporada en una cabaña abandonada en los bosques, alimentándose de bayas y frutos, hasta que una dulce y bondadosa señora la encontró y llevándosela del bosque la trajo al orfanato donde trabajaba como cocinera y de donde estaba segura seria bien aceptada y podría trabajar como doncella y asumir así el costo de su alojamiento, si el dueño de la institución lo requería. Confiada y agradecida, aceptó y salió de su vida en los bosques para volver bajo un techo, sin saber que allí volvería de nuevo a sus pesadillas.

DATOS EXTRA

-Lleva siempre con ella un colgante que le regaló a la única que conoció y amó alguna vez como madre, la señora Luksvotzh.

-En las noches que tiene pesadillas, le es imposible dormir.

©Facilis Descensos Averni RPG

por **Nigel Quartermane** Dom Mar 09, 2014 11:34 am

FICHA EN PROCESO

POSTEA A CONTINUACIÓN CUANDO TERMINES TU FICHA PARA QUE UN MIEMBRO DEL STAFF
PASE A REVISARLA Y TE DE COLOR Y RANGO SI TODO ESTÁ EN ORDEN. GRACIAS.

por **Cindy Oehler** Dom Mar 16, 2014 10:18 am

Ficha terminada

por **Tarik Pattakie** Dom Mar 16, 2014 7:20 pm

FICHA APROBADA
BIENVENIDA A VICTORIAN VAMPIRES

TE INVITO A LEER LAS NORMAS QUE TENEMOS EN EL FORO PARA QUE ESTÉS BIEN ENTERADA DE CÓMO SE MANEJA TODO Y ASÍ EVITARTE FUTUROS MAL ENTENDIDOS, Y SI TIENES ALGUNA DUDA O ACLARACIÓN SOBRE CUALQUIER COSA, NO DUDES EN PREGUNTARME A MÍ O A OTRO ADMINISTRADOR, ESTAMOS PARA AYUDARTE.

QUE TE DIVIERTAS.

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