Mariana González ID

por **Mariana González** Vie Jul 11, 2014 9:39 am

DATOS BÁSICOS

▲NOMBRE▲

Mariana Dolores González de la Vega

▲EDAD▲

18 años

▲ESPECIE▲

Humana

▲FACCIÓN A LA QUE PERTENECE▲

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▲TIPO, CLASE SOCIAL O CARGO▲

Clase social baja

▲ORIENTACIÓN SEXUAL▲

Heterosexual

▲LUGAR DE ORIGEN▲

Jalapa, Nueva España

▲HABILIDADES/PODERES▲

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DESCRIPCIÓN PSICOLÓGICA

¿Cómo definir la música? ¿Cómo plasmar el sonido? Existe cierta similitud para poder describir el concepto de Mariana. Su psicología es completa y sencilla al mismo tiempo, pues no es tan difícil entender a una chiquilla cuando conoces la historia, cuando la ves trabajando en el día a día. Su forma de mirar los objetos inanimados, el detalle que presta a las cosas cotidianas; quizás diga algo de ella la memoria de un perfume suave, o la caricia matutina de las sábanas blancas en la cama de un amante. Un cierto distanciamiento al código de conducta moral que todos abrazan como al más tierno amigo; ella lo detesta, le escupe de frente. Sentencia y concluye sin el menor atisbo de remordimiento, como un pequeño felino perdido en las callejas de una ciudad de lobos. Orgullosa, temeraria y una buena mentirosa, ocultando de la vista pública una vulnerabilidad hermosa y frágil.

¿Pero es todo a base de psicología? Quizás su comportamiento pueda explicarse sencillamente por la clase de experiencias en su vida presente y pasada, pero existe una creencia, un amor y un odio. Una forma de sentir única e inamovible. Porque las circunstancias a favor o en contra de su persona no siempre definirán sus decisiones. Llamada "locura" por quienes descansan bajo la sombra de la rutina, Mariana expresa gran parte de sus emociones a base de miradas y caricias, ceños fruncidos y golpes, suspiros y gruñidos. Todo desde la más fina delicadeza hasta la más salvaje violencia.

Es más consciente de su cuerpo de lo que cabría esperar, acunando en sus brazos a diversos amantes sólo con el fin de sentir placer. No piensa en el amor, tampoco en el vicio o los excesos; desea y acepta ser deseada, bajo la condición de nunca convertir el placer en algo obsceno. Ha rechazado invitaciones, ha propuesto muchas otras, y con el tiempo, se ha ganado una reputación que le ha cerrado las puertas al matrimonio, tal como siempre quiso. Su principal motivación siempre ha sido la libertad, como un parajillo demasiado pequeño aún para extender las alas y volar por encima de largas fronteras. Desde su perspectiva, el trabajo es el camino mejor camino para ello.

HISTORIA

A finales del siglo XVIII, Nueva España se había enriquecido por los constantes comercios en puntos estratégicos de la región. Fue un siglo de fundaciones y mestizaje, y a finales de éste, un pueblo denominado por los indígenas como Xallac vio por primera vez un escudo de armas. Los colonos castellanizaron su nombre a Jalapa, y la hermosa ciudad de las flores vio crecer sus primeras cosechas culturales. Mariana nació en esta reciente ciudad, en la que abundaban los bosques y los manantiales, y sólo durante sus primeros años de cómoda estabilidad, se consideró una niña feliz. Puede ser que todos creyeran que siendo de una familia pudiente y española, asegurase que esta tranquilidad permanecería ahí unos años más, o quizás, que nadie desearía romper su burbuja de cristal. Pero a veces el actuar de las personas, el maquinar de la vida, es impredecible.

Ellos, los monstruos que acechaban de noche junto a su cama, los que se ocultaban detrás del periódico matutino y luego discutían por las tardes, planearon tan lenta y detalladamente su ruina que Mariana no pudo evitar darse cuenta. Al principio, cuando era muy pequeña para entenderlo, la sospecha se manifestaba con una mirada insegura y un "¿Me quieres?" extra, siempre antes de la inminente despedida. Las respuestas eran distantes, grises como el cielo y frías como el invierno. En sus ojos adultos no había otra cosa que interés y ambición. ¿Pero qué sabría ella entonces, además del miedo y la esperanza? Dos extremos de una balanza que jamás encontraría el equilibrio soñado.

Llegó una época, justo cuando la feria de flores volvía a la ciudad, en que Mariana ya no fue tan inocente. Encajó las piezas que tenía que encajar, y comprendió mejor el silencio que volvía la relación con sus padres una muralla constante y permanente. Y aprendió el significado de "matrimonio por conveniencia"; sus ventajas, sus condiciones... su maldición. La chica que aún cargaba encima un ramo de abundantes margaritas se había echado a correr, lejos, tan lejos como sus pies le permitieran, levantándose el vestido que ya de por sí le rozaba los tobillos. Y el bosque la recibió con su brillo verdoso y placida humedad. ¿Pero cuánto puede durar una chiquilla oculta en las montañas de una villa? No mucho, no lo suficiente para que sus padres se olvidaran del asunto.

Volvía encadenada a su casa, con una madre gritando y un padre apretando su muñeca con la fuerza suficiente para dejar marcas violáceas en su piel.

Aunque la vida en Jalapa era apacible, y el clima y la gente y la mezcla de culturas avivaban a Mariana y su característica sensibilidad, no lo encontró suficiente para el resto de su vida. No había futuro ahí, ni una pobre y llana esperanza. Así pues, aprovechó la primera oportunidad para huir, sin importar lo irónico que resultara ir de polizón en el barco que transportaba la mercancía de su padre. Llegaría a España unas semanas más tarde, hambrienta y enferma como jamás lo había estado, pues aunque la valentía fluía en ella y la maduraba minuto a minuto, seguía siendo una niña. Ni siquiera en sus tan preciados quince años podía alcanzar el metro sesenta, ni podía soportar la sed más de cinco días consecutivos. Pero algunas monedas de oro robadas a su padre fueron su camino a la comida, la bebida y al tan urgente calor del hogar de una posada cualquiera. Descubrió el olor a viejo que tenía Europa, la moda que circulaba por las grandes ciudades como Madrid y Barcelona.

¿Sería ella española al finalizar la jornada? No, ni siquiera un poco cerca. Pues el acento que había adquirido desde su nacimiento, al haber crecido rodeada de criollos, mestizos e indígenas era imborrable. Todo aquel que la escuchaba le daba un guantazo de los buenos, o la perseguían hasta el cansancio o le echaban agua helada desde lo alto de una ventana. Aquel país al cual había querido refugiarse por el idioma, era un infierno. Pero orgullosa, desafiante y rabiosa por la mala fortuna que en su vida había caído, y melancólica por la falta de sentido a sus pasos que la sacaban lentamente de España, decidió refugiarse en otra capital.

París estaba lejos, demasiado para cruzarla a pie aunque le demorara años. Cuando las monedas se acabaron, tuvo que empezar a trabajar. Cocía, bordaba, se le daba de maravilla al igual que la limpieza y la cocina. Siempre había preferido correr que sentarse a bordar, y saltaba árboles en vez de practicar la danza, pero aceptó que en un mundo cruel como ese, sacrificaría un poco de su libertad para ganar, al final, una verdadera independencia. Llegó a París la noche de su cumpleaños número dieciocho, cuando la fracción de ella que seguía sana moría lentamente. Necesitaba cuidados médicos, un techo bajo el cual descansar. Pero como nos debe haber quedado claro tras todo lo demás, se propuso obtener tales beneficios a base del trabajo duro.

DATOS EXTRA

Aprendió cierta lingüística formal en España, de modo que sus expresiones varían de éstas a las criollas de Nueva España. Ha intentado aprender francés pero hasta el momento no se le da muy bien.

por **Doreen Jussieu** Vie Jul 11, 2014 11:18 pm

FICHA APROBADA
BIENVENIDA A VICTORIAN VAMPIRES

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QUE TE DIVIERTAS.

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