Ryssa Lostwood

Nombre del Personaje:
-Nombre falso: Ryssa Lostwood
-Nombre real: Emily Olivietti

Edad:
-Real: 20 Años
-Aparenta: 17 Años

Especie: Vampiro

Tipo y Nivel Social: Clase Alta
Lugar de Origen: Rusia, Berlín
Fecha de Muerte: 12 de Marzo de 1780
Habilidad/Poder:
-Encandilamiento.
-Control mental.
-Fuerza y velocidad.

Descripción Física: Ryssa es una mujer de belleza extraordinaria, casi enviada desde otro mundo. Con un tono de cabello rojizo, natural, una característica muy particular en las mujeres de esta época. Unos ojos de color azul grisáceo, de forma avellanada y hermosas pestañas. Pecosa, tierna, en si una muñeca de porcelana andante. Sus curvas son prominentes, todo bien equilibrado, con un buen busto, trasero y piernas largas y estilizadas.

Descripción Psicológica: Ella en si es un mar de preguntas sin respuesta, por tanto vivir, y sufrir, su propia fuente de recuerdos se ha ido eliminando poco a poco. Tierna, dulce, perfectamente letal. Una mujer con visión, que sabe lo que quiere, cuando y como. Recatada, y sin embargo con el suficiente carácter para pasarle por encima a cualquiera que se le enfrente. Es parte de la soledad, la disfruta y no le teme, la compañía no es su fuerte, pero tampoco es una persona desagradable. La mayor parte del tiempo esta dentro de si misma, y no en el exterior. Callada y lejana. Pero, aún así, Ryssa es una mujer totalmente sensual, extrovertida y única en su mismo universo de realidades. Tiempo y espacio, no significan nada para ella, realmente nunca sabe donde esta o que parte de su vida esta viviendo. Valiente y despreocupada, no le importará nada hasta que consiga algo de esto. Ryssa no cree en los prejuicios, los rechaza con una intensidad casi radical. Se viste con pantalones, botas, añadiéndole detalles femeninos, estando en huelga con toda regla de la sociedad.

Historia: Nació en Berlín, Rusia. Una época de machismo, o tal vez falta de instrucción, en la cuna de la aristocracia nació Emily Olivietti. Una bebé destinada al matrimonio y a un futuro minuciosamente preparado para el beneficio de “ella” y toda su familia. Los Olivietti, un círculo cerrado en el cual solo se podría entrar con un buen fondo monetario detrás de usted. Como toda niña nacida dentro de una familia de este nivel social, fue amaestrada en todo lo que se supone debe saber una mujer. La cocina, los tejidos, todos estos detalles tan importantes para llegar a ser nada. Su mellizo Henry, nunca fue llamado para esta clase de tonterías, él sabía de artes, y era instruido para ir a la universidad, lo que producía en Emily una cólera y envidia totalmente desaprobada por todos. Aún así la hermosa pelirroja se escabullía a todas las clases, siendo tan buena o mejor que todos los chicos estudiados de su casa. Sus amigas tenían el cerebro ligeramente programado para saber que estaba bien y que estaba mal. 15 años y las quejas en sus oídos solo eran “Porque no te casas” “Búscate un marido” Pura mierda para ella. Pronto, sus padres se encargaron de organizar una especie de Entrevista pública para buscarle maridito a su hija de 15 años. Uno tras otro fue rechazado por ella, hasta que un día un hombre de interesante porte se apareció por arte de magia. Era extrañamente atractivo, y a pesar de todos los ideales de la muchacha ella acepto como si hubieran colocado cuerdas en todo su cuerpo, y hubieran mandado las palabras por ella misma. La boda se celebro con todas sus letras, pero Emily era infeliz. Una luna de miel, o tal vez una sorpresa del próximo desastre. Su nuevo marido no era un hombre común, como ella sospechaba el traído consigo algo más. Un vampiro se había convertido en su “dueño” llevándose con él una vida normal. Cada vez que podía él la utilizaba como abastecimiento, como una cena servida cada noche. 2 años pasaron y nada cambio, pronto el mundo se volvió nada, solo la oscuridad era su compañera. ¿Era un cuarto, una celda? No sabía, pero estaba muriendo, por fin estaba muriendo. El vampiro, “su compañero” no pudo conservarla por más tiempo, pero por una extraña razón tampoco podía dejarla ir. 17 años, y Emily se convirtió en parte de otro mundo. Él alzo la manga de su camisa, y le dio de beber sangre de su muñeca, unos colmillos humanos salieron a relucir, mientras el líquido se desbordaba por unos hermosos labios. Jamás había convertido a nadie, ese fue el error del vampiro. Emily se alzo sobre él cuando vio recuperadas sus fuerzas, y bebió hasta matarlo, hasta desnutrirlo. Felizmente lo observo cuando muerto este callo al suelo, por fin algo de justicia. Pasaron algunos meses, y pronto aprendió todo lo que tenía que aprender sobre ella misma, sus poderes y el ambiente, como siempre era una buena alumna de la vida, y aprendía todo con una facilidad impresionante. Hermosa, viva, y viuda de un adinerado hombre, se dispuso a vivir su luto en la ciudad de Paris. Una noche estaba tomando un café, preparándose para asaltar a una presa, cuando se giro, tumbando el café “por accidente” sobre el pecho de un caballero descubrió que era su mellizo, fuerte, diferente. Ahora era un alumno en Paris, uno de los mejores –Maldito seas- Pensó. Su sueño hecho realidad en manos de otros. Era su hermano, pero también era nada para ella. Hasta esa noche vivió este, nadie lo mando a tratar de pasar sobre su hermana. Para disimular, sobre todo por el asesinato que había cometido, se cambio el nombre a Ryssa Lostwood, siendo perfecto y totalmente diferente al verdadero. Una fachada, y una vida que vivir.