Úrsula Kirkpatrick || ID

por **Úrsula Kirkpatrick** Lun Jul 13, 2015 4:06 pm

Nombre del Personaje: Úrsula ~~Viktoria~~ Kirkpatrick
Edad: Aparenta 17 años.
Especie: Humana/Esclava de Sangre
Facción a la que pertenece: Facción dos. Bibliotecarios. Con anterioridad.
Tipo y Clase Social: Clase Alta
Orientación Sexual: Heterosexual
Lugar de Origen: Imperio Austriaco.
Habilidad/Poder:
- Sentidos aumentados.
- Fortaleza.
- Longevidad.
- Sanación acelerada..

Úrsula

Bastante menuda. Es una joven de pequeñas proporciones. Mide un metro con sesenta y cinco centímetros. Sus piernas son largas, tomando en cuenta el tamaño de su cuerpo, de cintura pequeña, pero no exagerado. Su busto no es muy llamativo, pero gracias a la ropa que utiliza lo parece. Su piel es tersa y pálida. En los brazos, piernas y espalda tiene manchas rosáceas, algo que no comprende en realidad. Su rostro es cuadrado, sus labios aunque rosáceos tienen algunas grietas, mismas que busca esconder con lubricante especial. Su nariz es pequeña al igual que sus orejas. Sus ojos son color verde aceituna, aunque algunas veces se notan más oscurecidos por las ojeras que tiene siempre dado que duerme poco.

Le gusta tener sus manos bien cuidadas, al igual que todo su cuerpo, con todo y aquellas imperfecciones debido a su enfermedad de nacimiento. Su mirada suele parecer perdida, o con destellos de tener sueño. Su cabello es largo, ondulado y castaño, mantiene poco brillo.

Cuando se alimenta de sangre toda aquella imperfección desaparece. Su piel se vuelve pareja, no aparecen las manchas, las orejas desaparecen, sus ojos resplandecen, y el brillo de su cabello es notable, incluso el observarla embelesa.

Ursula es una joven temerosa que siempre vive a la defensiva. Se nota de lejos por la postura que siempre toma. Desconfía de todos, y jamás crea un vinculo con alguien. No conoce las relaciones estrechas, sólo aquellas que van de la mano de su doctor. Los pocos momentos que había trabajado para una institución resultaba muy hermética; bastante cerrada.

Siempre han creído que es una joven que está a punto de romperse, y no están lejos de la realidad. La enfermedad que posee la mantiene mayormente débil, o al menos eso es lo que ella cree. Es muy reservada, en ocasiones suele ser tímida, la gran mayoría de las veces lo es, pero también gracias a su temor por lo demás reacciona con salvajismo, y con poco recato.

Suele sonreír de forma natural, siempre da gracias por un día nuevo, por la oportunidad de seguir con vida, pero sus sonrisas las guarda para ella, las reales, dado que actuar muy bien con otra que sólo es una fachada. Para ella el perder a sus padres de forma trágica le hace no querer acercarse a los demás. El miedo de perder a un ser querido de nuevo la abruma, y dado su condición en el tema de salud, tampoco quisiera ocasionarle eso a alguien.

Es muy estricta con sus necesidades. Prefiere tomar agua natural que cualquier otra bebida con endulzantes. Sus horarios de alimentación no pueden pasarse por alto, tampoco su higiene, en ocasiones se baña más de dos veces al día, eso porque creía que quizás la pureza del agua le ayudaría a limpiar su cuerpo de enfermedades.

Le gusta la lectura tanto como practicar algún tipo de actividad física. Practica el nado, pero todo a puertas cerradas para no tener que ser vista. Según su educación, debe asistir a las fiestas o actividades a las que le inviten, aunque también tiene sus reglas al asistir. Poco contacto visual, pocas palabras dadas, y siempre con guantes para no dejar tocar su piel. No dura más de dos horas en dichos eventos.

Para cualquiera puede resultar una joven perfecta, digna para cualquier caballero prometedor, sin embargo está enferma, o al menos eso cree. Tiene una gran adicción, y es la sangre de los vampiros, aunque sólo se alimenta de uno en especial, y es que se dio cuenta que al beber su padecimiento disminuye, y su energía se fortalece, tanto como se alarga su vida.

Viktoria era una prostituta de un burdel de mala muerte. Desde que era muy niña aprendió que la vida era complicada, más aún para personas cómo ella, y aunque en un principio robaba alimentos en los mercados para alimentar a sus hermanos pequeños (todo después del abandono de sus padres), se dio cuenta que aquello no le daba para todos, y menos para cada día, por lo que con el paso del tiempo sus actividades poco licitas iban incrementando. Así fue como a los trece años terminó por aparecer en medio de un burdel. Su pequeño cuerpo estaba ya desarrollándose; una belleza difícil de pasar por alto. Con urgencia pidió trabajo, y aseguró que no se quejaría de nada, y que haría lo que fuera necesario.

Así fue como conoció a Philipp, un hombre de 40 años que al verla se cautivó, y no le importó pagar una gran fortuna con tal de ser el primero en su cama, y también por tener exclusividad en cada una de sus visitas. Siendo tan inocente en un principio, Viktoria se enamoró de su desvirgador, quien parecía sentirse muy a gusto con la pequeña, al grado de hacerle regalos generosos, e incluso enviarle canastas de alimento para sus hermanos. El mundo de la muchacha cambió, al igual que su exigencias, y en lo que esperaba el regreso de su amado, abría sus piernas a cuanto asqueroso se cruzara frente a ella. Eso ocasionó que llegara a adquirir una enfermedad mortal, que en un principio no conocía, y nunca supo de que se trataba.

Al poco tiempo de caer enferma Philipp apareció, preocupado por su estado de salud, la sacó del burdel, le contrató un enfermero, mismo que la atendió. Cuando mostró signos de mejoría, Phillip no dudó en tomarla entre sus brazos, meterla a su cama, y hacerle el amor.

Nueve meses después nació Ursula, y aunque no fue una niña reconocida, sí fue recibida con amor.

Ursula tuvo una hermosa infancia, con todo y los padecimientos de salud de su madre, sin embargo cuando tuvo seis años la misma murió, y la pobre niña tuvo que ir a vivir con sus tíos, quienes no tenían demasiado que ofrecerle. Phillip no supo que tenía una hija hasta que a su regreso a la ciudad le contaron lo ocurrido, y lo primero que hizo fue ir a buscar a su hija; encantados, sus familiares la entregaron, y él se la llevó a su ciudad natal: París, Francia. Aprendió a querer a su padre, mismo que contrató a una nana para poder educar a la niña y mostrarle una figura materna.

La pequeña crecía con normalidad, aunque se notaba que era más débil que el resto, y muchas veces no podía mantenerse de pie. Tras muchos estudios con especialistas de la época, dieron con que la niña tenía una enfermedad poco conocida pero si mortal, por eso su padre se desvivió en darle lo mejor. Sin embargo, después de su cumpleaños 12, Ursula recibe otra noticia fatal: su padre había muerto en manos de ladrones en medio del bosque.

La noticia no le cayó para nada bien, sin embargo tenía a su nana, misma que ahora era la encargada de manejarle el dinero, al menos hasta que pudiera hacerse cargo. La mujer era buena, y su único interés en la vida era cuidar a la niña, una pobre flor que se estaba marchitando.

A los trece años, Ursula paseaba por los bosques cercanos de su casa, en medio de un ataque de tos, la sangre comenzó a emerger, sintió angustia, desesperación, y terminó por desmayarse. Al abrir los ojos tenía frente a ella a un hombre bastante mayor. El mismo le explicó lo sucedido, también sus pocas ganas de dejarla morir, y el como le había dado de beber su sangre en medio de la inconsciencia. Desde ahí su relación con el hombre se estrechó, y cada semana acudía en medio del bosque a platicar con él, y beber de su sangre.

Ursula cumplió los catorce años cuando decidió adentrarse al mundo de la inquisición, intentando buscar otros remedios para su enfermedad, sabía que su adicción no era correcta, y quiso refugiarse en las creencias de Dios. Dejó de beber sangre un tiempo, y aunque había conocido a muchos que la instruyeron, no duró mucho tiempo en el lugar, su condición física no era la mejor, y su enfermedad volvía a aparecer.

Con dieciséis años, Ursula ya era una adicta plena a la sangre de vampiro. Su antiguo salvador la aceptó con los brazos abiertos de regreso. Se dio cuenta que si de querer vivir más años, era necesario seguir alimentándose.

# .. Dentro de la inquisición se hizo muy cercana al entrenador principal, mismo que le ayudó a tener más condición y resistencia física.
# .. Se volvió adicta a la sangre de vampiro dado que le daba fortaleza y vitalidad.
# .. Consume tres veces por semana la sangre.
# .. Debido a su consumo se ha vuelto más sensible con sus cinco sentidos.
# .. Está aprendiendo un poco de administración para poder llevar los negocios que su padre le heredó.
# .. Creé que su enfermedad es contagiosa, por eso no deja que nadie la toque.
# .. El vampiro que la alimenta parece ver en ella a una hija, se tienen cariño y respeto.
# .. Gracias a la sangre de vampiro su enfermedad se ha curado, sin embargo ella no lo sabe.
# .. Los síntomas que le aparecen sino bebe sangre de vampiro como lo hace, son gracias a su mente, todo gracias a ello.
# .. Toca el violín.

por Invitado Lun Jul 13, 2015 4:37 pm

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