AÑO 1842
Nos encontramos en París, Francia, exactamente en la pomposa época victoriana. Las mujeres pasean por las calles luciendo grandes y elaborados peinados, mientras abanican sus rostros y modelan elegantes vestidos que hacen énfasis los importantes rangos sociales que ostentan; los hombres enfundados en trajes las escoltan, los sombreros de copa les ciñen la cabeza.
Todo parece transcurrir de manera normal a los ojos de los humanos; la sociedad está claramente dividida en clases sociales: la alta, la media y la baja. Los prejuicios existen; la época es conservadora a más no poder; las personas con riqueza dominan el país. Pero nadie imagina los seres que se esconden entre las sombras: vampiros, licántropos, cambiaformas, brujos, gitanos. Todos son cazados por la Inquisición liderada por el Papa. Algunos aún creen que sólo son rumores y fantasías; otros, que han tenido la mala fortuna de encontrarse cara a cara con uno de estos seres, han vivido para contar su terrorífica historia y están convencidos de su existencia, del peligro que representa convivir con ellos, rondando por ahí, camuflando su naturaleza, haciéndose pasar por simples mortales, atacando cuando menos uno lo espera.
Espacios libres: 11/40
Afiliaciones élite: ABIERTAS
Última limpieza: 1/04/24
En Victorian Vampires valoramos la creatividad, es por eso que pedimos respeto por el trabajo ajeno. Todas las imágenes, códigos y textos que pueden apreciarse en el foro han sido exclusivamente editados y creados para utilizarse únicamente en el mismo. Si se llegase a sorprender a una persona, foro, o sitio web, haciendo uso del contenido total o parcial, y sobre todo, sin el permiso de la administración de este foro, nos veremos obligados a reportarlo a las autoridades correspondientes, entre ellas Foro Activo, para que tome cartas en el asunto e impedir el robo de ideas originales, ya que creemos que es una falta de respeto el hacer uso de material ajeno sin haber tenido una previa autorización para ello. Por favor, no plagies, no robes diseños o códigos originales, respeta a los demás.
Así mismo, también exigimos respeto por las creaciones de todos nuestros usuarios, ya sean gráficos, códigos o textos. No robes ideas que les pertenecen a otros, se original. En este foro castigamos el plagio con el baneo definitivo.
Todas las imágenes utilizadas pertenecen a sus respectivos autores y han sido utilizadas y editadas sin fines de lucro. Agradecimientos especiales a: rainris, sambriggs, laesmeralda, viona, evenderthlies, eveferther, sweedies, silent order, lady morgana, iberian Black arts, dezzan, black dante, valentinakallias, admiralj, joelht74, dg2001, saraqrel, gin7ginb, anettfrozen, zemotion, lithiumpicnic, iscarlet, hellwoman, wagner, mjranum-stock, liam-stock, stardust Paramount Pictures, y muy especialmente a Source Code por sus códigos facilitados.
Victorian Vampires by Nigel Quartermane is licensed under a
Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported License.
Creado a partir de la obra en https://victorianvampires.foroes.org
Últimos temas
DAGUENET ID
2 participantes
Página 1 de 1.
DAGUENET ID
Daguenet J. Hipólito
Nombre real: Néstor/Efrén Corvalán Machinea
Identidad actual: Hipólito Daguenet
Apodos: Daguenet – cómo le llaman quienes lo han conocido recientemente.
Fecha de nacimiento: 7 de Septiembre / 20 años / Bisexual /CAZADOR
Clase: Media
Lugar de origen: España.
Ocupación: Cazador
Identidad actual: Hipólito Daguenet
Apodos: Daguenet – cómo le llaman quienes lo han conocido recientemente.
Fecha de nacimiento: 7 de Septiembre / 20 años / Bisexual /CAZADOR
Clase: Media
Lugar de origen: España.
Ocupación: Cazador
- Say Cheese!:
Tiene una altura media (1,85 m.), silueta definida y compacta, pero no musculada.
El rasgo más distintivo de su rostro son sus ojos azules, que cambian hacia tonos aguamarina y ambarinos. Podría definirse de alguien con una cara común, de esas que es sencillo olvidar. Su cabello es castaño oscuro, en ocasiones con reflejos rubios cuando le da el sol. Suele llevarlo algo largo y, por norma, despeinado.
Sus manos lucen diversas cicatrices de quemaduras, y una marca de nacimiento rosácea detrás de la oreja. Tiene una cicatriz ancha cerca del corazón, hecha con una piedra afilada.
En general, resulta difícil definir su edad por su físico, ya que aunque su condición se mantiene anclado en la veintena, puede dar la impresión de ser menor. Aunque esto siempre es algo subjetivo.
Normalmente viste informal.
El rasgo más distintivo de su rostro son sus ojos azules, que cambian hacia tonos aguamarina y ambarinos. Podría definirse de alguien con una cara común, de esas que es sencillo olvidar. Su cabello es castaño oscuro, en ocasiones con reflejos rubios cuando le da el sol. Suele llevarlo algo largo y, por norma, despeinado.
Sus manos lucen diversas cicatrices de quemaduras, y una marca de nacimiento rosácea detrás de la oreja. Tiene una cicatriz ancha cerca del corazón, hecha con una piedra afilada.
En general, resulta difícil definir su edad por su físico, ya que aunque su condición se mantiene anclado en la veintena, puede dar la impresión de ser menor. Aunque esto siempre es algo subjetivo.
Normalmente viste informal.
Hipólito vive en una edad del pavo eterna, es un rebelde sin causa, de sentimientos intensos y extremistas: ama y odia hasta el límite, y es frecuente que ambos sentimientos se entremezclen. Podría considerarse que todavía busca su propia identidad, su lugar en el mundo, aunque es consciente de que nunca lo encontrará. Muchas veces siente cierto vacío -dejado por su hermano- en su interior, del que huye y en el que se regodea según el día.
Desprecia profundamente actitudes como el cinismo, la superficialidad, el narcisismo y la hipocresía, que le son sencillas de identificar en otros. Paradójicamente, su extrema desconfianza hacia los desconocidos le hace adoptar esas características constantemente. Es una persona difícil de tratar en los primeros encuentros.
Impredecible, puede saltar de un tema a otro o pasar de la simpatía a la hostilidad sin motivos aparentes. Le cuesta profundizar en lo que siente, pero lo hará si le hacen las preguntas adecuadas, y ante un buen interlocutor, no mentirá, aunque se calle ciertas cosas.
A pesar de su carácter difícil, es una persona sociable que se desenvuelve con soltura ante cualquiera. No sabe lo que es la vergüenza, porque la gastó de tanto usarla. Ese tipo de persona que conoce a todo el mundo pero a penas se deja conocer, con muchos conocidos pero una lista muy restringida de amigos.
Muchas veces actúa de forma infantil, lo que contrasta con ciertos discursos extremadamente maduros. Que se decante por uno o por otro dependerá de cómo se encuentre en el momento, porque siempre hace lo que le apetece sin cuestionarse el por qué en profundidad. Le gusta sorprender y considera que la buena educación es la mayor de las mentiras, así que no se corta a la hora de decir lo que piensa, casi siempre, con poco tacto.
Odia profundamente a quienes considera sus enemigos, pero solo le preocupan cuando los tiene delante o le llegan noticias de ellos. Si no, ni se acuerda.
De mente inquieta, curiosa y con una enorme sensibilidad para cualquier tipo de arte, especialmente la literatura y la música. Su vida gira en torno de la búsqueda de la belleza. Su filosofía es eminentemente idealista.
El tiempo en el que era miembro de un grupo de cazadores en España y aunque ya no pertenezca a ninguno-, sin embargo, continúa guardándoles lealtad, independientemente de que a veces los idolatre y otras los desprecie. Siempre acude a su llamada, siempre cumple con lo que le piden sin cuestionar los motivos. No sabe exactamente por qué lo hace, o no lo quiere saber, en cualquier caso, ser reconocido por ellos es el mayor placer que conoce. Son la única familia que ha conocido, y de alguna forma, intenta compensarles por la decepción que cree que les supuso. No comparte sus ideales, pero no los cuestiona ante ellos.
Desprecia profundamente actitudes como el cinismo, la superficialidad, el narcisismo y la hipocresía, que le son sencillas de identificar en otros. Paradójicamente, su extrema desconfianza hacia los desconocidos le hace adoptar esas características constantemente. Es una persona difícil de tratar en los primeros encuentros.
Impredecible, puede saltar de un tema a otro o pasar de la simpatía a la hostilidad sin motivos aparentes. Le cuesta profundizar en lo que siente, pero lo hará si le hacen las preguntas adecuadas, y ante un buen interlocutor, no mentirá, aunque se calle ciertas cosas.
A pesar de su carácter difícil, es una persona sociable que se desenvuelve con soltura ante cualquiera. No sabe lo que es la vergüenza, porque la gastó de tanto usarla. Ese tipo de persona que conoce a todo el mundo pero a penas se deja conocer, con muchos conocidos pero una lista muy restringida de amigos.
Muchas veces actúa de forma infantil, lo que contrasta con ciertos discursos extremadamente maduros. Que se decante por uno o por otro dependerá de cómo se encuentre en el momento, porque siempre hace lo que le apetece sin cuestionarse el por qué en profundidad. Le gusta sorprender y considera que la buena educación es la mayor de las mentiras, así que no se corta a la hora de decir lo que piensa, casi siempre, con poco tacto.
Odia profundamente a quienes considera sus enemigos, pero solo le preocupan cuando los tiene delante o le llegan noticias de ellos. Si no, ni se acuerda.
De mente inquieta, curiosa y con una enorme sensibilidad para cualquier tipo de arte, especialmente la literatura y la música. Su vida gira en torno de la búsqueda de la belleza. Su filosofía es eminentemente idealista.
El tiempo en el que era miembro de un grupo de cazadores en España y aunque ya no pertenezca a ninguno-, sin embargo, continúa guardándoles lealtad, independientemente de que a veces los idolatre y otras los desprecie. Siempre acude a su llamada, siempre cumple con lo que le piden sin cuestionar los motivos. No sabe exactamente por qué lo hace, o no lo quiere saber, en cualquier caso, ser reconocido por ellos es el mayor placer que conoce. Son la única familia que ha conocido, y de alguna forma, intenta compensarles por la decepción que cree que les supuso. No comparte sus ideales, pero no los cuestiona ante ellos.
.·. Axel Corvalán .·. Supuesto padre. Muerto
No lo conoció, ya que al parecer murió de un infarto meses antes de que naciese. Era marino mercante. Su madre nunca habla de él, y siempre ha tenido la impresión de que en la familia Corvalán tampoco tenían una imagen demasiado certera sobre él.
.·. Marina Celeste Machinea .·. Madre. Asesinada por una manada de lobos enemiga.
En realidad, nunca conoció a Axel Corvalán, pero cuando se quedó embarazada, pudo conseguir un falso certificado de boda con él, que había muerto días atrás y decidió ir con su familia para que sus hijos se criasen en un ambiente seguro. Posteriormente comenzó a formar parte de la Manada de España, pero cuando se reveló contra la ideología de Zettah, fue asesinada por Álika Güll.
.·. Tyler Morgan .·. Padre
Hombre de medio siglo de antigüedad que se desentendió de sus vástagos, aunque actualmente se deja encontrar por Hipólito. Despreocupado y alegre, vive en una continua búsqueda del placer. Hopólito tiene sentimientos contradictorios hacia él.
.·. Cristina Corvalán .·. Supuesta abuela
Quien se ocupó de él y su hermano en su tierna infancia. Guarda recuerdos cariñosos hacia ella y en ocasiones la visita. Sufre de demencia pero siempre recupera la lucidez durante unos instantes cuando lo ve. Es demasiado duro para él verla en ese estado, por lo que cada vez la visita menos. No sabe nada respecto a su naturaleza. Recientemente le ha confesado que sabe que no tienen vínculo sanguíneo, pero que siempre lo considerará su nieto.
.·. Néstor/Efrén Corvalán .·. Hermano gemelo. Muerto
Murió cuando tenía 11 años, precipitándose por un barranco en una pelea fraternal. Era el gemelo con iniciativa, e Hipólito el que le secundaba. Su muerte le supuso un gran trauma y le generó una sensación de vacío permanente. Al quedarse solo, nadie pudo distinguir cual de los dos gemelos sobrevivió. De ahí, que los miembros de la manada lo llamen Efrén o Néstor según quien creen que es, ya que no existe consenso. Hipólito nunca ha desvelado cual de los dos es, a pesar de la insistencia, y responde a ambos nombres aunque odia que los utilicen para referirse a él. Es una forma idealista de mantener viva la figura de su hermano.
.·. Zettah Novelino .·. Mentora. Segunda Madre.
La alfa de la Manada de España puso mucho interés en los gemelos y tenía grandes expectativas sobre su futuro. Se encargó de entrenarlos personalmente para convertirlos en guerreros. Era estricta pero también cariñosa con ellos cuando debía. Para Hipólito es alguien respetable, y le tiene cariño y veneración, aunque en ocasiones llegue a odiarla. Siempre se muestra respetuoso ante la loba, y siempre le será leal pues considera que está en deuda con ella. Sabe que Zettah tiene debilidad por él y le encanta.
.·. Álika Güll .·.Demonio personal
La relación con la beta de Zettah le resulta especialmente complicada. No se tomó nada bien su renuncia a los planes trazados para él, lo que convirtió en tensa una relación que antes había sido de absoluta devoción por ambas partes. Siempre se ha sentido atraído por ella, aunque actualmente intenta evitarla.
No lo conoció, ya que al parecer murió de un infarto meses antes de que naciese. Era marino mercante. Su madre nunca habla de él, y siempre ha tenido la impresión de que en la familia Corvalán tampoco tenían una imagen demasiado certera sobre él.
.·. Marina Celeste Machinea .·. Madre. Asesinada por una manada de lobos enemiga.
En realidad, nunca conoció a Axel Corvalán, pero cuando se quedó embarazada, pudo conseguir un falso certificado de boda con él, que había muerto días atrás y decidió ir con su familia para que sus hijos se criasen en un ambiente seguro. Posteriormente comenzó a formar parte de la Manada de España, pero cuando se reveló contra la ideología de Zettah, fue asesinada por Álika Güll.
.·. Tyler Morgan .·. Padre
Hombre de medio siglo de antigüedad que se desentendió de sus vástagos, aunque actualmente se deja encontrar por Hipólito. Despreocupado y alegre, vive en una continua búsqueda del placer. Hopólito tiene sentimientos contradictorios hacia él.
.·. Cristina Corvalán .·. Supuesta abuela
Quien se ocupó de él y su hermano en su tierna infancia. Guarda recuerdos cariñosos hacia ella y en ocasiones la visita. Sufre de demencia pero siempre recupera la lucidez durante unos instantes cuando lo ve. Es demasiado duro para él verla en ese estado, por lo que cada vez la visita menos. No sabe nada respecto a su naturaleza. Recientemente le ha confesado que sabe que no tienen vínculo sanguíneo, pero que siempre lo considerará su nieto.
.·. Néstor/Efrén Corvalán .·. Hermano gemelo. Muerto
Murió cuando tenía 11 años, precipitándose por un barranco en una pelea fraternal. Era el gemelo con iniciativa, e Hipólito el que le secundaba. Su muerte le supuso un gran trauma y le generó una sensación de vacío permanente. Al quedarse solo, nadie pudo distinguir cual de los dos gemelos sobrevivió. De ahí, que los miembros de la manada lo llamen Efrén o Néstor según quien creen que es, ya que no existe consenso. Hipólito nunca ha desvelado cual de los dos es, a pesar de la insistencia, y responde a ambos nombres aunque odia que los utilicen para referirse a él. Es una forma idealista de mantener viva la figura de su hermano.
.·. Zettah Novelino .·. Mentora. Segunda Madre.
La alfa de la Manada de España puso mucho interés en los gemelos y tenía grandes expectativas sobre su futuro. Se encargó de entrenarlos personalmente para convertirlos en guerreros. Era estricta pero también cariñosa con ellos cuando debía. Para Hipólito es alguien respetable, y le tiene cariño y veneración, aunque en ocasiones llegue a odiarla. Siempre se muestra respetuoso ante la loba, y siempre le será leal pues considera que está en deuda con ella. Sabe que Zettah tiene debilidad por él y le encanta.
.·. Álika Güll .·.Demonio personal
La relación con la beta de Zettah le resulta especialmente complicada. No se tomó nada bien su renuncia a los planes trazados para él, lo que convirtió en tensa una relación que antes había sido de absoluta devoción por ambas partes. Siempre se ha sentido atraído por ella, aunque actualmente intenta evitarla.
La historia de Hipólito no podría comprenderse si no se enfoca hacia dos protagonistas: los gemelos bautizados como Néstor y Efrén Corvalán. Como suele pasar con este tipo de hermanos, sus vidas transcurrieron juntas y simultáneamente. Se criaron en España, en casa de su familia paterna, ya que su madre era huérfana. Tuvieron una infancia típica, jugaban en la enorme casa familiar, acudían a buenos colegios, tenían gran cantidad de amigos, y aunque casi siempre estaban peleando, no daban un paso sin pedirle permiso al otro.
El punto de inflexión llegó poco después de que cumpliesen los ocho años. Un día, su madre hizo las maletas y partió. No lo comprendieron, nadie les explicó nada, sin embargo, podían notar la repentina hostilidad que Cristina tenía hacia su madre, pero no así hacia ellos. Transcurrieron dos meses sin noticias de su madre, hasta que un día, al regresar de sus clases de música, encontraron todas sus cosas empaquetadas y fueron informados de que partirían para reunirse con su madre en París. Extrañados y asustados, ambos hermanos emprendieron un viaje tras despedirse con amargas lágrimas de su abuela, y sin poder decir adiós a nadie más.
Un amigo de la familia los acompañó hasta Francia. El miedo inicial pronto se convirtió en curiosidad por los nuevos lugares. Luego, se abrió paso la emoción de un cambio de tal envergadura en sus vidas, que se vio truncado cuando se reencontraron con su madre en una humilde casa. Allí, la gente vivía hacinada en chabolas sucias y malolientes, tan distintas al barrio alto en el que se habían criado.
La casa en la que ellos habitarían, sin embargo, era distinta. El exterior de la misma se confundía con las miles de construcciones que la rodeaban, pero el interior escondía un hogar pulcro y con ciertos lujos impensables en aquella zona. Se adaptaron a la fuerza, y pronto olvidaron su vida pasada al ser deslumbrados por los seres a quienes conocieron, y que les desvelaron su propia naturaleza.
Se convirtieron en los niños mimados del grupo. Mientras Álika se aseguraba en que fuesen instruidos en la mejor educación posible: no solo la educación básica, si no también en idiomas, artes, conversación... Pasaba mucho tiempo pendiente de ellos, infundiéndoles delirios de grandeza.
Paralelamente, Zettah los intruía como guerreros. Comenzó a entrenarlos en la pelea cuerpo a cuerpo, la estrategia... Posteriormente, con armas primitivas, más adelante con armas de fuego. También les obligaba a hacer ejercicios de supervivencia, dejándolos en un lugar perdido del bosque de la que, en ocasiones, tardaron semanas en salir. Las sesiones de entrenamiento eran extenuantes, pero Zettah les trataba con especial condescendencia cuando lo hacían bien. Fueron adoctrinados en la ideología de la Manada, y aunque su hermano interiorizó aquellos principios con fanatismo, Hipólito siempre albergó dudas que no dejaba translucir.
En uno de los ejercicios de supervivencia, cuando contaban con once años, Hipólito aprovechó la soledad del bosque compartir con su hermano sus dudas respecto a la supremacía de licántropos y vampiros. Su gemelo era el único en quien confiaba para hacerlo, pero no esperaba su reacción. Se encaró a él, lo tildó de traidor, y decidió que lo mataría. Sobrepasado por la situación, Hipólito se defendió de los ataques de su hermano por inercia, asumiendo que él ganaría, que lo mataría, pues siempre había sido más hábil en todo. La suerte, en cualquier caso, jugó a su favor. En mitad de la pelea, se engancharon y rodaron colina abajo, rumbo al filo de un alto precipicio. El instinto que primó en Hipólito fue el de supervivencia, y no sin dificultad, se aferró a la desesperada de lo primero que tuvo a mano antes de caer. Su gemelo, sin embargo, mantenía las manos ocupadas con una piedra afilada con la que deseaba matarle por traición, y que ya le había clavado en el hombro. El instinto vengador contra su hermano, le impidió soltarla, y no pudo agarrarse con la suficiente fuerza a nada para impedir la caída. Se precipitó por el barranco, lamentando únicamente no haber acabado con su hermano.
Porque alguien se haya muerto no tiene por qué dejar de gustarte, por el amor de Dios. Sobre todo si era mil veces mejor que las personas que conoces y están vivas y todo eso.
Corrió como alma que lleva el diablo, bordeando el acantilado, hasta que los pulmones le parecieron a punto de estallar, hasta que pensó que su corazón reventaría, hasta que no quedaba un solo jirón de su piel sin la marca de los muchos latigazos recibidos por las ramas de la densa vegetación. Pero no paró hasta que llegó a la parte baja del precio, donde encontró el cuerpo de su hermano convertido en un saco deforme de piel ensangrentada. Cayó de rodillas a su lado, y un grito desgarrador asoló los alrededores, haciendo que los animales se escondiesen, los pájaros emprendiesen el vuelo, y todo quedase en un tenso silencio antinatural. Abrazó el cadáver, lloró desesperado sin ser capaz de asimilar, sin preocuparse por la sangre transferida a sus manos, con las que se cubrió el rostro a continuación. La de su hermano fue la primera sangre que entró en contacto con sus labios.
El instinto de supervivencia venció de nuevo, a pesar de estar agotado logró arrastrarse hasta el río, y flotó, manteniendo a duras penas la cabeza flotando fuera del agua, hasta que consiguió la mínima energía para nadar hacia la ribera contraria al incendio. Una vez en tierra, huyó, volvió a correr dejando atrás fuego abrasador que terminó para siempre con quien una vez, fue su hermano. Y al alejarse, al sentirse a salvo de nuevo, sintió el vacío dejado por su gemelo por primera vez, esa sensación que siempre lo ha acompañado desde entonces.
Lo que haría sería hacerme pasar por sordomudo y así no tendría que hablar. Si querían decirme algo, tendrían que escribirlo en un papelito y enseñármelo. Al final se hartarían y ya no tendría que hablar el resto de mi vida. Pensarían que era un pobre hombre y me dejarían en paz.
Dos días más tarde, en un atardecer lluvioso, salió del bosque llegando a casa. No dijo nada a nadie, se encerró en sí mismo, y sobre lo que pasó con su gemelo, solo existieron conjeturas. Los lobos le dejaron su espacio tras desistir de preguntar, y él, comenzó a leer de forma obsesiva, encerrándose en mundos literarios durante varios meses. Nunca volvería a ser el mismo.
Los libros que de verdad me gustan son aquellos que al acabar de leerlos piensas que ojalá el autor fuera muy amigo tuyo.
Los entrenamientos con Zettah se convirtieron en su válvula de escape, en el modo de canalizar toda su rabia y odio contra el mundo. Había esperado que la alfa lo matase por haber perdido a su hermano, sin embargo, ella nunca sacó el tema, lo que le agradeció. Tampoco insistió en saber cuál de los gemelos era él, solo pasó a llamarle Corvalán.
Álika, sin embargo, sí insistía en saber qué había sucedido, por mucho que él lo evitase. Sentía que la beta lo culpaba de haber perdido a uno de los dos, y como una vez le dijo, Cástor y Póllux se convirtieron en Caín y Abel. Continuó versándose en las artes pero de manera independiente, sin seguir las pautas elitistas de Álika, virando hacia lo urbano y popular.
Su madre jamás llegó a perdonárselo. La muerte de uno de sus hijos la posicionó en contra de las salvajes normas de la Manada, y decidió traicionarles. Como era de esperar, fue eliminada por Álika para dar ejemplo, y su relación con Hipólito terminó por romperse, aunque nunca le echó nada en cara.
Hipólito se convirtió en la promesa rota de la manada. Era bueno, pero también una obra incompleta. Así lo sentía, y comenzó a sentirse agobiado por el pequeño mundo en el que se movía. Con miedo a la reacción de Zettah, un día no pudo evitar hablarlo con ella, y para su sorpresa, este lo liberó de sus vínculos con la manada. Le dejó la libertad para irse tras hacerle jurar que regresaría cuando se lo pidiesen. Y con diecisiete años, emprendió el viaje que todavía no ha terminado. Así, se desarrolló su personalidad actual.
Me paso el día entero diciendo que estoy encantado de haber conocido a personas que me importan un comino. Pero supongo que si uno quiere seguir viviendo, tiene que decir tonterías de ésas.
De forma subrepticia, tenía el permiso de Zettah para acceder a los fondos financieros de la manada, aunque intentaba no propasarse demasiado. Se inmiscuyó en el mundo nocturno, buscó fiestas, banalidad, olvidar todo su pasado mediante el placer. Comenzó componer música y poco tiempo después por arte de magia, su padre le encontró, al instante por el lazo que los unía, además de por el asombroso parecido físico. Pasaron un tiempo juntos, intentando recuperar el tiempo perdido, pero pronto se hizo obvio que no funcionaría. Decidieron continuar cada uno por su lado de nuevo, aunque sin perder del todo el contacto.
Desde que abandonó España, fue dejando su marca en cada ciudad que visitaba. Utilizaba un tipo pintura que dejaba en cada pared que encontrara durante las noches. También adquirió cierta fama en ello, firmando como "The Catcher". Tras ser identificado por un mecenas, comenzó a pintar también bajo demanda para ricos que podían costearse sus obras, pero continúa siendo anónimo para el gran público. De ser descubierto, se enfrentaría a costosas multas alrededor del mundo. Continúa dejando su marca en cada ciudad que visita.
Si haces algo bien, o te andas con cuidado o pronto querrás empezar a lucirte y entonces ya no eres tan bueno.
Siempre que Zettah ha requerido su ayuda, se la ha prestado. Es un mercenario a sus órdenes porque le está agradecido por cómo le trató tras la muerte de su gemelo. Es la relación más duradera, aunque en ocasiones le asalten sentimientos encontrados al respecto al no compartir sus ideales. A parte de su padre y los miembros de la manada, su estilo de vida que no le permite permanecer demasiado en un sitio concreto le ha impedido profundizar en cualquier tipo de relación.
El punto de inflexión llegó poco después de que cumpliesen los ocho años. Un día, su madre hizo las maletas y partió. No lo comprendieron, nadie les explicó nada, sin embargo, podían notar la repentina hostilidad que Cristina tenía hacia su madre, pero no así hacia ellos. Transcurrieron dos meses sin noticias de su madre, hasta que un día, al regresar de sus clases de música, encontraron todas sus cosas empaquetadas y fueron informados de que partirían para reunirse con su madre en París. Extrañados y asustados, ambos hermanos emprendieron un viaje tras despedirse con amargas lágrimas de su abuela, y sin poder decir adiós a nadie más.
Un amigo de la familia los acompañó hasta Francia. El miedo inicial pronto se convirtió en curiosidad por los nuevos lugares. Luego, se abrió paso la emoción de un cambio de tal envergadura en sus vidas, que se vio truncado cuando se reencontraron con su madre en una humilde casa. Allí, la gente vivía hacinada en chabolas sucias y malolientes, tan distintas al barrio alto en el que se habían criado.
La casa en la que ellos habitarían, sin embargo, era distinta. El exterior de la misma se confundía con las miles de construcciones que la rodeaban, pero el interior escondía un hogar pulcro y con ciertos lujos impensables en aquella zona. Se adaptaron a la fuerza, y pronto olvidaron su vida pasada al ser deslumbrados por los seres a quienes conocieron, y que les desvelaron su propia naturaleza.
Se convirtieron en los niños mimados del grupo. Mientras Álika se aseguraba en que fuesen instruidos en la mejor educación posible: no solo la educación básica, si no también en idiomas, artes, conversación... Pasaba mucho tiempo pendiente de ellos, infundiéndoles delirios de grandeza.
Paralelamente, Zettah los intruía como guerreros. Comenzó a entrenarlos en la pelea cuerpo a cuerpo, la estrategia... Posteriormente, con armas primitivas, más adelante con armas de fuego. También les obligaba a hacer ejercicios de supervivencia, dejándolos en un lugar perdido del bosque de la que, en ocasiones, tardaron semanas en salir. Las sesiones de entrenamiento eran extenuantes, pero Zettah les trataba con especial condescendencia cuando lo hacían bien. Fueron adoctrinados en la ideología de la Manada, y aunque su hermano interiorizó aquellos principios con fanatismo, Hipólito siempre albergó dudas que no dejaba translucir.
En uno de los ejercicios de supervivencia, cuando contaban con once años, Hipólito aprovechó la soledad del bosque compartir con su hermano sus dudas respecto a la supremacía de licántropos y vampiros. Su gemelo era el único en quien confiaba para hacerlo, pero no esperaba su reacción. Se encaró a él, lo tildó de traidor, y decidió que lo mataría. Sobrepasado por la situación, Hipólito se defendió de los ataques de su hermano por inercia, asumiendo que él ganaría, que lo mataría, pues siempre había sido más hábil en todo. La suerte, en cualquier caso, jugó a su favor. En mitad de la pelea, se engancharon y rodaron colina abajo, rumbo al filo de un alto precipicio. El instinto que primó en Hipólito fue el de supervivencia, y no sin dificultad, se aferró a la desesperada de lo primero que tuvo a mano antes de caer. Su gemelo, sin embargo, mantenía las manos ocupadas con una piedra afilada con la que deseaba matarle por traición, y que ya le había clavado en el hombro. El instinto vengador contra su hermano, le impidió soltarla, y no pudo agarrarse con la suficiente fuerza a nada para impedir la caída. Se precipitó por el barranco, lamentando únicamente no haber acabado con su hermano.
Corrió como alma que lleva el diablo, bordeando el acantilado, hasta que los pulmones le parecieron a punto de estallar, hasta que pensó que su corazón reventaría, hasta que no quedaba un solo jirón de su piel sin la marca de los muchos latigazos recibidos por las ramas de la densa vegetación. Pero no paró hasta que llegó a la parte baja del precio, donde encontró el cuerpo de su hermano convertido en un saco deforme de piel ensangrentada. Cayó de rodillas a su lado, y un grito desgarrador asoló los alrededores, haciendo que los animales se escondiesen, los pájaros emprendiesen el vuelo, y todo quedase en un tenso silencio antinatural. Abrazó el cadáver, lloró desesperado sin ser capaz de asimilar, sin preocuparse por la sangre transferida a sus manos, con las que se cubrió el rostro a continuación. La de su hermano fue la primera sangre que entró en contacto con sus labios.
El instinto de supervivencia venció de nuevo, a pesar de estar agotado logró arrastrarse hasta el río, y flotó, manteniendo a duras penas la cabeza flotando fuera del agua, hasta que consiguió la mínima energía para nadar hacia la ribera contraria al incendio. Una vez en tierra, huyó, volvió a correr dejando atrás fuego abrasador que terminó para siempre con quien una vez, fue su hermano. Y al alejarse, al sentirse a salvo de nuevo, sintió el vacío dejado por su gemelo por primera vez, esa sensación que siempre lo ha acompañado desde entonces.
Dos días más tarde, en un atardecer lluvioso, salió del bosque llegando a casa. No dijo nada a nadie, se encerró en sí mismo, y sobre lo que pasó con su gemelo, solo existieron conjeturas. Los lobos le dejaron su espacio tras desistir de preguntar, y él, comenzó a leer de forma obsesiva, encerrándose en mundos literarios durante varios meses. Nunca volvería a ser el mismo.
Los entrenamientos con Zettah se convirtieron en su válvula de escape, en el modo de canalizar toda su rabia y odio contra el mundo. Había esperado que la alfa lo matase por haber perdido a su hermano, sin embargo, ella nunca sacó el tema, lo que le agradeció. Tampoco insistió en saber cuál de los gemelos era él, solo pasó a llamarle Corvalán.
Álika, sin embargo, sí insistía en saber qué había sucedido, por mucho que él lo evitase. Sentía que la beta lo culpaba de haber perdido a uno de los dos, y como una vez le dijo, Cástor y Póllux se convirtieron en Caín y Abel. Continuó versándose en las artes pero de manera independiente, sin seguir las pautas elitistas de Álika, virando hacia lo urbano y popular.
Su madre jamás llegó a perdonárselo. La muerte de uno de sus hijos la posicionó en contra de las salvajes normas de la Manada, y decidió traicionarles. Como era de esperar, fue eliminada por Álika para dar ejemplo, y su relación con Hipólito terminó por romperse, aunque nunca le echó nada en cara.
Hipólito se convirtió en la promesa rota de la manada. Era bueno, pero también una obra incompleta. Así lo sentía, y comenzó a sentirse agobiado por el pequeño mundo en el que se movía. Con miedo a la reacción de Zettah, un día no pudo evitar hablarlo con ella, y para su sorpresa, este lo liberó de sus vínculos con la manada. Le dejó la libertad para irse tras hacerle jurar que regresaría cuando se lo pidiesen. Y con diecisiete años, emprendió el viaje que todavía no ha terminado. Así, se desarrolló su personalidad actual.
De forma subrepticia, tenía el permiso de Zettah para acceder a los fondos financieros de la manada, aunque intentaba no propasarse demasiado. Se inmiscuyó en el mundo nocturno, buscó fiestas, banalidad, olvidar todo su pasado mediante el placer. Comenzó componer música y poco tiempo después por arte de magia, su padre le encontró, al instante por el lazo que los unía, además de por el asombroso parecido físico. Pasaron un tiempo juntos, intentando recuperar el tiempo perdido, pero pronto se hizo obvio que no funcionaría. Decidieron continuar cada uno por su lado de nuevo, aunque sin perder del todo el contacto.
Desde que abandonó España, fue dejando su marca en cada ciudad que visitaba. Utilizaba un tipo pintura que dejaba en cada pared que encontrara durante las noches. También adquirió cierta fama en ello, firmando como "The Catcher". Tras ser identificado por un mecenas, comenzó a pintar también bajo demanda para ricos que podían costearse sus obras, pero continúa siendo anónimo para el gran público. De ser descubierto, se enfrentaría a costosas multas alrededor del mundo. Continúa dejando su marca en cada ciudad que visita.
Siempre que Zettah ha requerido su ayuda, se la ha prestado. Es un mercenario a sus órdenes porque le está agradecido por cómo le trató tras la muerte de su gemelo. Es la relación más duradera, aunque en ocasiones le asalten sentimientos encontrados al respecto al no compartir sus ideales. A parte de su padre y los miembros de la manada, su estilo de vida que no le permite permanecer demasiado en un sitio concreto le ha impedido profundizar en cualquier tipo de relación.
- Domina el español, inglés y francés.
- Actualmente es absolutamente independiente económicamente.
- Ha aprendido algunas técnicas de lucha Shaolin.
- En un arrebato romántico, besó a una vampiresa neófita. Cuando ella lo besó, perdió la concentración, y otro cazador experto que le estaba persiguiendo, le mató. Desde entonces no cree demasiado en el amor.
- A menudo tiene pesadillas recordando la muerte de su hermano, y también sueños eróticos con Álika.
- Tiene dudas de cual es su verdadero nombre después de años respondiendo al suyo y al de su hermano.
Última edición por Hipólito Daguenet el Mar Sep 08, 2015 11:49 am, editado 1 vez
Hipólito Daguenet- Cazador Clase Media
- Mensajes : 10
Fecha de inscripción : 20/08/2015
Re: DAGUENET ID
OBSERVACIONES
favor de corregir
TU FICHA ESTÁ CORRECTA, SOLAMENTE OLVIDASTE MENCIONAR A QUÉ CLASE SOCIAL PERTENECE TU PERSONAJE. FAVOR DE AÑADIRLO EN LOS DATOS BÁSICOS DEL INICIO.
CUANDO ESTÉ LISTO, POSTEA AVISANDO PARA DARTE LA APROBACIÓN.
GRACIAS.
CUANDO ESTÉ LISTO, POSTEA AVISANDO PARA DARTE LA APROBACIÓN.
GRACIAS.
CODE BY NIGEL QUARTERMANE
Nigel Quartermane- Vampiro/Realeza [Admin]
- Mensajes : 10717
Fecha de inscripción : 11/01/2010
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Re: DAGUENET ID
Ficha Editada
Hipólito Daguenet- Cazador Clase Media
- Mensajes : 10
Fecha de inscripción : 20/08/2015
Re: DAGUENET ID
FICHA APROBADA
bienvenido/a a victorian vampires
¡ENHORABUENA! YA ERES PARTE DE VICTORIAN VAMPIRES Y TE DAMOS LA MÁS CORDIAL BIENVENIDA.
ANTES DE HACER CUALQUIER OTRA COSA, TE INVITO A LEER LAS NORMAS QUE TENEMOS EN EL FORO PARA QUE ESTÉS BIEN ENTERADO/A DE CÓMO MANEJAMOS TODO EN ESTE SITIO Y ASÍ EVITARTE FUTUROS MALOS ENTENDIDOS. A CONTINUACIÓN TE DEJO LOS LINKS MÁS IMPORTANTES PARA QUE PUEDAS CONOCER LA INFORMACIÓN, Y SI DESPUÉS DE LEER SIGUES TENIENDO ALGUNA DUDA, PUEDES CONTACTARME A MÍ O A OTRO DE LOS ADMINISTRADORES; ESTAMOS PARA SERVIRTE.
¡QUE TE DIVIERTAS!
ANTES DE HACER CUALQUIER OTRA COSA, TE INVITO A LEER LAS NORMAS QUE TENEMOS EN EL FORO PARA QUE ESTÉS BIEN ENTERADO/A DE CÓMO MANEJAMOS TODO EN ESTE SITIO Y ASÍ EVITARTE FUTUROS MALOS ENTENDIDOS. A CONTINUACIÓN TE DEJO LOS LINKS MÁS IMPORTANTES PARA QUE PUEDAS CONOCER LA INFORMACIÓN, Y SI DESPUÉS DE LEER SIGUES TENIENDO ALGUNA DUDA, PUEDES CONTACTARME A MÍ O A OTRO DE LOS ADMINISTRADORES; ESTAMOS PARA SERVIRTE.
¡QUE TE DIVIERTAS!
CODE BY NIGEL QUARTERMANE
Nigel Quartermane- Vampiro/Realeza [Admin]
- Mensajes : 10717
Fecha de inscripción : 11/01/2010
DATOS DEL PERSONAJE
Poderes/Habilidades:
Datos de interés:
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Miér Sep 18, 2024 9:16 am por Afiliaciones
» REACTIVACIÓN DE PERSONAJES
Mar Jul 30, 2024 4:58 am por Frederick Truffaut
» AVISO #49: SITUACIÓN ACTUAL DE VICTORIAN VAMPIRES
Miér Jul 24, 2024 2:54 pm por Nigel Quartermane
» Ah, mi vieja amiga la autodestrucción [Búsqueda activa]
Jue Jul 18, 2024 4:42 am por León Salazar
» Vampirto ¿estás ahí? // Sokolović Rosenthal (priv)
Miér Jul 10, 2024 1:09 pm por Jagger B. De Boer
» l'enlèvement de perséphone ─ n.
Sáb Jul 06, 2024 11:12 pm por Vivianne Delacour
» orphée et eurydice ― j.
Jue Jul 04, 2024 10:55 pm por Vivianne Delacour
» Le Château des Rêves Noirs [Privado]
Jue Jul 04, 2024 10:42 pm por Willem Fokke
» labyrinth ─ chronologies.
Sáb Jun 22, 2024 10:04 pm por Vivianne Delacour