Savannah Doucete

Savannah es una joven de estatura media, rondando el metro setenta, con una complexión delgada pero con unas bonitas curvas femeninas. Desde que descubrió que con el Henna podía tintar levemente su piel hasta adquirir un tono sano y humano, lo hace, incluso llegando a parecer en los meses de verano que luce un precioso tono bronceado. Algo que hace que su cabello dorado y sus ojos verdes destaquen aún más. De apariencia es dulce, pero cierto es que a veces, tiene tendencia a quedarse mirando fijamente a alguien y se olvida de parpadear, dándole así un aspecto algo amenazante.
La mayoría del tiempo sonríe mostrando unos dientes perfectos, pero eso sólo ocurre o bien cuando está feliz de verdad, o bien por puro sarcasmo.


Descripción Psicólogica:
[justify]Savannah es una vampira de más de 1500 años que ha conservado un espíritu joven y adolescente. Gracias a su buena vida, se convirtió en la niña consentida y mimada de Ntina, formando así un caracter en la joven, el cual ha terminado desembocando en una chica algo superficial, caprichosa, con matices arrogantes y muy celosa y posesiva. Acostumbrada a tener siempre lo que desea, no puede evitar ser ambiciosa en todo lo que la rodea. Aunque se confiesa una romántica empedernida, pocas veces ha mostrado ese romanticismo con alguien, pero se sabe que disfruta de las películas clásicas de amor, así como las novelas románticas.
Aún teniendo muchas características psicológicas negativas o complicadas, cabe destacar que es una persona noble, con sentido de la responsabilidad. Actúa de forma correcta y suele pensar con la cabeza antes de actuar. Su mayor temor es algún día perder la cordura por culpa de su fuerte caracter temperamental.

Savannah Doucete, nacida en el año 270 D.C., en aquel entonces en la conocida Monoikos, nombre que le otorgaron los Griegos, y que posteriormente pasó a llamarse como la actualmente conocida Mónaco. Hija de una importante familia noble de la época, fue uno de los principales objetivos de Kostas, el cual se encaprichó de ella desde casi su nacimiento. Las intenciones del noble vampiro eran que la joven Savannah, pronto pasase a sustituir el lugar que en un principio ocupó Ntina. Kostas necesitaba un pasatiempo, alguien que entretuviese su tiempo de ocio, alguien hermoso y juvenil.
Ntina sabía de las intenciones de Kostas, se percató de ello ya que una nueva joya de piedra ámbar (típica entre los vampiros de la corte de Kostas) había sido fabricada con exquisitez para aquella joven, y éste siempre estaba haciéndole regalos para conquistarla.
En un arrebato de celos, Ntina pensó en asesinar a la joven, pero aquello podría traer consecuéncias, y podría hacer que Kostas llegase a tiempo para convertirla, y ciertamente la joven se convertiría en la perfecta sustituta de Ntina. Por ello, en vez de permitir que Savannah se convirtiese en su hermana de sangre, hizo lo que debía hacer, ella misma se encargó de convertirla y hacerla su discípula, sólo así Savannah debería rendir pleitesía a Ntina y no a Kostas.

Poco tiempo después, Kostas fue asesinado por Ntina, y Savannah pasó a formar parte de la familia de ella. Lo normal en aquel entonces es que Savannah hubiese adoptado el apellido de Ntina, pero conservó el original, Doucete. Durante siglos han desempeñado el rol de Tía y sobrina, para pasar facilmente desapercibidas.

Durante un largo tiempo, Savannah se separó de Ntina, cerca del año 1500 D.C. y se marchó a España, dónde empezó a vivir su propia vida, llegando a casarse con un Duque de la época terminando por heredar grandes riquezas. Aquello le dio una gran idea... recorrer el mundo para ''saquear'' a los grandes herederos. Y así fue como empezó su mayor pasatiempo, conocer a jóvenes adinerados, casarse con ellos, y simplemente esperar su muerte y heredar las fortunas. O, ¿por qué no? Acelerar su muerte.

Gracias a esa práctica, el apellido Doucete volvió a tomar renombre poco a poco, volviendo a conocerse como uno de los apellidos más nobles de Mónaco, sabido por todo el mundo la gran cantidad de tierras y riquezas que poseían los familiares descendientes del apellido.

Cerca del año 1797, Savannah empezó a llevar una vida cómoda y productiva, decidió pasar un tiempo haciéndose pasar por una joven heredera, en la ciudad de París. Instalada ya en París, intentaría pasar como una humana la mayor parte del tiempo, aunque la luz del día le resultase mortal, ella siempre encontraría la excusa perfecta.

Su objetivo ahora es mezclarse entre las familias más nobles, ir de evento en evento y poco a poco entrar en ese mundo social refinado y sólo al alcance de los más afortunados como ella.