پادشاه نهضة (pādišāh nāhdā)

La primera decisión que tomó Constantine tras formar la Philikí Hetairía fue despertar al Gran Señor. No se puede responsabilizar del todo al líder del clan Ypsilantes por tan disparatada resolución. Se encontraba en una situación desesperada tras la traición de sus hermanos en Egipto que provocó su caída y la aniquilación de casi todo su clan.

Constantine quería venganza y decidió acudir al único que podría voltear las cosas en su favor. Aquel que había dado origen a los clanes de vampiros que ahora se encontraban en pugna. Fué guiado hasta el sepulcro del Nosferatu por otro vástago a quien apodaban Almirante «Foulweather» (‘Mal tiempo’) y de quien se decía ya había recorrido todo el mundo en sus navegaciones.

Consigo iban también Kamenski y Moruzi, otros dos líderes, aliados de Constantine que buscaban congraciarse con aquel ser que en otro tiempo encumbró a sus vástagos como los señores absolutos del mundo conocido. Entre los tres abrieron el recinto secreto, descendieron a través de túneles que no figuran en ningún mapa y finalmente frente penetraron en la cámara donde su Señor se encontraba dormitando.

Realizaron la invocación que haría despertar al Nosferatu de su profundo letargo, sin pensar siquiera que el Antiguo los sintió llegar y despertó mucho antes de ser llamado por su nombre. Que los esperaba entre las sombras y se complacía de escuchar de nuevo esas dos palabras: "Pādišāh Mitra"

Así le llamaban aquellos vampiros, con esas palabras pretendían devolverle a la tierra sin embargo, Mitra requería de algo más que palabras para animarse a volver. ¡Necesitaba sangre! Muy tarde descubrieron aquellos tres líderes que después de un profundo sueño, se siente un hambre no menos profunda.

Pero esto representa ninguna tragedia para el Nosferatu. El sabe que cuando un miembro se debilita y muere siempre hay otro que lo compensa, en alguna otra parte. De forma tal que tras haber secado a aquellos pobres vástagos que osaron despertarle, decidió quedarse un momento a saborear las memorias e imágenes que junto con la sangre logró absorber de Constantine.

Aunque en escencia los humanos siempre serán los mismos, el mundo que han edificado desde que Mitra se internara en su sueño estaba sumergido en un caos al cual habría que desenmarañar si de nuevo debía mezclarse en los asuntos de los vampiros y los hombres. Es este un mundo nuevo, donde la Alquimia se ha convertido en Quimica y la ciencia va a la vanguardia de todas las religiones. Hay un tufo a revolución en el aire que al viejo le resulta insoportable. Ahora estaba convencido que lo habían despertado en el momento adecuado para impedir que los Anarquistas (esos humanos rebeldes, seguramente influenciados por la prole de Gaia) destruyan las redes de influencia que con tanta paciencia sus vástagos tejieron sobre los reyes de los hombres. La convicción que arde en el pecho del Nosferatu es que su misión es hacer que todo cambie, para que todo siga igual.

Hay que hacer colapsar las nacientes revoluciones. Para eso ha despertado el Rey Mitra.

Deseaba establecerce de nuevo en esta nación y apartir de aqui extender su reino hacia los cuatro confines de la tierra, pero antes, Mitra sabía que debía haber una purga.  Borrar todo rastro en la tierra de los vástagos que habían traído la decadencia a la estirpe de los vampiros.

Demasiada inercia era lo que había llevado las cosas a su actual estado y era necesario sacudir un poco las cúpulas de poder para que los traidores se vieran expuestos y aniquilados.  El primer paso del plan que comenzaba a trazar es provocar una guerra entre Mamut II, sultán de los turcos y los imperios de Occidente.  De ese modo tras la guerra sería facil imponer un gobierno títere del cual pudiera beneficiarse.

Solo tenía que convencer al ingenuo Mamut por medio de Foulwheather de que sacaran al patriarca de Constantinopla; un desgraciado llamado Gregorio V, y que lo ahorcaran en la plaza, aún con las vestimentas.  Para mayor oprobio deberían dar el cuerpo a algún grupo de judíos enojados para que lo exhibieran arrastrando por todo la ciudad para que al final sea arrojado al mar para que sirva de comida a los peces.

A la naturaleza perversa del vampiro sultán le parecerá una exelente idea para castigar los intentos de rebelión. Lo que no sabe es que Mitra ya ha movilizado a sus esbirros. Van a exagerar la noticia y la esparcirán por todos los reinos de occidente para que presten ayuda a los rebeldes Griegos y de este modo estalle otra revolución.  

Si las revueltas contra la monarquía que en su tiempo instituyó ha sido un error de cálculo, el gran Rey está decidido a usar esos mismos errores como un arma y como un medio de control. El viejo ya lo ha hecho antes, provocar, desestabilizar y luego someter por medio del miedo y la fuerza. Así es como han gobernado sus vástagos a la raza humana por siglos y así habrá de continuar, por toda la eternidad.