Alekséyevna ID

Svetlana es una etapa intermedia entre la madurez de una mujer adulta y decidida y la inestabilidad emocional fugaz de una adolescente. A pesar de esto, siempre se muestra segura en cada una de sus acciones y expresa cada palabra que nace de sus labios con sabiduría, trata de enfocar su mente y sus miedos en acciones positivas aunque poco puede hacer estando oculta de su familia misma. Luchadora incansable en contra del autoritarismo y tiranía. La servidumbre la describe como la clase de mujer que sabe cómo pedir las cosas, pues aunque sea un mandato nadie podría negarse debido a la dulzura y tesón que dan color a su retórica. Incluso muchos llegan a decir que si ella hubiese sido un varón, portaría con honor así como sus hermanos el blasón de la familia Alekséyevich.

Firmeza, otra de sus cualidades. Esa quizás es la palabra que describe a la precisión a la más joven de la familia rusa, pues siempre deja de lado las carencias de su silente corazón. Mismo que ha callado los horrores de la tragedia cernida sobre su familia. Las muertes de su hermano y padres son episodios que no logra superar del todo aún, siendo presa de pesadillas constantes aún. Optimista pese a que su realidad es una horrible forma de vivir. Atrapada dentro de esa vulnerabilidad que no permite la muestren como una niña asustadiza. Quien no conoce sus vivencias y dolor fácilmente la catalogarían como una mujer segura y decidida debido a sus facciones bien delineadas.

Comprensiva y altruista siempre luchando por los ideales que sus padres forjaron en ella y los cuales adoptó como propios no por un asunto de herencia sino por el enriquecido derecho que él protegía. Para Svetlana siempre será importante el bienestar de los demás y el amor por sus tierras natales. Una mujer que desde temprana edad se empapó de la cultura de forma rigurosa para aprender cada detalle que pudiese ser finamente estudiado, su inteligencia siempre fue de la mano con la razón. A pesar de su actual situación la mujer es la composición perfecta para la aristócrata que lucha por el bien común de todos sin excepción. Diferenciada de otros nobles cuyas almas egoístas sólo piensan en privilegios propios. Un ser carismático y que demuestra cuanto puede con los suyos.

El nacimiento de Svetlana se mantuvo oculto al mundo, incluso de sus hermanos quienes nunca sospecharon nada. La pequeña fue entregada después de su nacimiento al cuidado de una nodriza y la servidumbre quienes aguardaron celosamente ese hecho y es que el apellido Alekséyevich siempre estuvo rodeado de poder y magia, pero también de sangre y odio, era principalmente por esta razón que sus padres tomaron semejante decisión. No obstante durante la noche ambos se colaban hasta una vieja casona en el bosque donde la pequeña creció rodeada de amor y la compañía fugaz de sus progenitores y de muchos otros beneficios que conllevaban ser una mujer de noble cuna. Las artes sobrenaturales le fueron permitidas hasta que ella cumplió la mayoría de edad, aunque desde muy pequeña mostró tener un talento nato para la premonición y la sanación, no era de extrañarse y si bien su madre se sentía orgullosa del crecimiento de su pequeña como hechicera también temía que las consecuencias en un futuro fuesen un precio alto.

Y fue ella misma quien presagió la muerte de Yuri, su hermano mayor pero poco pudo hacer ya que se le tenía prohibido alterar el curso del destino, estaba escrito ya que la desgracia persiguiera a la familia y ante la impotencia del suceso huyó de Rusia hacia Alemania oriental donde mantuvo un perfil bajo como enfermera en un hospital que atendía a huérfanos y desahuciados, pues estaba convencida que sus poderes debían ser utilizados para el bienestar de sus semejantes. En ese lapso de su vida conoció a Nikolaj un hombre que servía a la Inquisición, la atracción fue inmediata aunque ninguno de los dos reveló su pasado de ese modo vivieron un romance mientras el servicio del inquisidor perduró en ese lugar. Fue una noche cuando el joven le vio ingresar al hospital, le siguió hasta ahí y quedó perplejo al verle conjurar un hechizo de sanación para ayudar a un pequeño que llevaba semanas con malestares en el corazón, ese hecho fracturó la relación debido a que Nikolaj pensó que la mentira también pudiese estar presente en muchas de las otras cosas que Svetlana le había confesado.

Por amor a esa mujer no le denunció ante los altos mandos pero si fue un factor que determinó la separación de ambos. Svetlana no tuvo tiempo de explicarle tantas cosas y al verse sola nuevamente decidió proteger de lleno a esos pequeños que tanto le necesitaban. Su amor por los niños desarrolló un instinto materno aunque contradictoriamente pensaba que era mejor mantenerse como estaba, por temor a que sus poderes afectaran a quienes le rodeaban. Y entonces una visión fuerte llegó a su mente, una mancha oscura que le llenó de temor e incertidumbre, habituada estaba a percibir las sensaciones ajenas, sus vidas diarias, su dolor y sus sueños, solo que en esta ocasión se trataba de su propia estirpe. Vio así el castillo en llamas, la sangre derramada y a su hermano Fyodor envuelto en sombras, hasta ese entonces no se detuvo a pensar en su familia, en los suyos.

Sintió una culpabilidad enorme por no poder estar con ellos cuando Yuri su hermano mayor murió, incluso se sentía limitada al no poder descifrar del todo que era lo que ocurría en su hogar. A petición de sus propios padres tuvo que mantenerse al margen durante mucho tiempo y ella temerosa de cómo sus hermanos podrían reaccionar ante la noticia de su existencia permaneció como toda su vida había sido, oculta. Un segundo sueño cambió aquel panorama, la visión anunciaba que se encontraría con un pequeño de cabellos rubios en una tierra lejana, en su momento pensó que se trataba de un hijo propio, el hijo que tanto deseaba tener. No obstante el destino le tenía preparada una sorpresa al enterarse que el Castillo de los Duques en Rusia había sido atacado, la noticia le había dado la vuelta al mundo y entonces todo para Svetlana cobró sentido. Con esfuerzo se despidió de los niños en el hospital de huérfanos y confiando en lo que su corazón le dictaminaba partió hacia Paris donde cree hallar más respuestas a sus preguntas.

-Aunque nunca conoció a su hermano mayor y apenas conoce detalles sobre Fyodor, sabe algunas cosas de ellos por las cartas que sus padres le enviaban estando en Alemania Oriental.

-Siente una empatía hacia los niños quienes siempre han sido su debilidad.

-Ha vislumbrado el encuentro con su hermano Fyodor a través de premoniciones que cada vez se hacen más claras y frecuentes.

-Posee conocimientos sobre herbolaria y medicina.