Hyacinth Siff

» Habilidades: Sigilo, sentidos aumentados, buenos reflejos, agilidad, flexibilidad, velocidad y fuerza sobrehumana.

» Atributos: Colmillos afilados, uñas afiladas, piel y cuerpo resistentes e inmortalidad.

» Sanación acelerada: Habilidad para sanar rápidamente heridas y contusiones no tan graves (esto no aplica al desmembramiento, si les arrancan un brazo, el brazo no volverá a crecer). El tiempo de recuperación varía según el personaje y la gravedad de la herida o lesión. Cuando se trata de balas de plata o fuego pueden morir si las heridas son muy graves.

» Percepción del aura: Habilidad para ver las auras de otros seres, cuyos colores indican su humor, identidad y nivel de hostilidad, de este modo saben si están bajo amenaza. Este poder también les permite reconocer a otros vampiros e identificar a los licántropos gracias a su aura colorada y su característico olor.

» Visión compartida y visión remota: Habilidad de poder ver a través de los ojos de los demás o en otros casos, hacer que los demás puedan ver lo que estamos viendo en ese momento. Esta habilidad funciona únicamente cuando se toca a la persona.

» Bloqueo mental: Es la habilidad para bloquear su mente y nadie (ni siquiera los vampiros que leen mentes) pueden saber lo que piensa.

» Fortaleza: Capacidad de resistencia extrema al dolor físico.

» Rastreo: Poder de rastrear la localización de un objeto o criatura. El personaje puede descubrir la situación de cualquier persona a la que conozca, donde quiera que esté el blanco en un radio de veinte kilómetros.

» Levitar: Habilidad para alzarse desde el suelo, para navegar las corrientes de aire. Permite mejor ángulo para patadas y demás golpes.

» Telepatía: Habilidad para sondear los pensamientos superficiales de cualquier sujeto cercano y escucharlos como escucharía hablar a esa persona. Con el tiempo suficiente, puede enterarse casi de cualquier cosa sobre el sujeto.

» Clarividencia: Habilidad para ver y oír sucesos a distancia. Este poder se activa de forma instantánea y sólo tiene que concentrarse en un lugar o persona para ver y oír lo que sucede a su alrededor. Las visiones pueden ser pasadas o presentes.

» Seducción: Esta habilidad hace que cualquier persona se sienta atraída ya sea físicamente o emocionalmente a la persona poseedora del poder. El vampiro seduce a los demás hasta lograr controlar las emociones de su adversario a su antojo. Funciona en cualquiera de los dos sexos. Este poder funciona únicamente como atracción.

» Persuasión: Habilidad para controlar las acciones o el razonamiento de otra persona. Este poder logra que otras personas realicen acciones, sin que éstas puedan negarse o incluso darse cuenta, mediante palabras con entonación imperativa, es decir, ordenándolas.

» Confusión: El vampiro puede hacer que su víctima se sienta completamente desorientada sin más que mirarle a los ojos y hablar con él. La víctima sólo será consciente de fragmentaos sueltos de sus propios recuerdos. Se sentirá confuso constantemente y vagará de un lado a otro, aturdido y sin saber que hacer exactamente. La confusión es temporal.

» Infligir dolor por medio de la mente: Capacidad que consiste en causar dolor a una persona. Esto sólo funciona por medio de la concentración mental y el contacto visual.

» Manipulación de la memoria: Concede la amnepatia y la recuperación mental, además ver los recuerdos de la gente y si se quiere proyectarlos en imágenes visibles para todos. También se puede aturdir a la gente mediante confusiones mentales dejándolos como "Enfermos mentales", pero solo temporalmente. Es muy difícil usar esta capacidad sin contacto ya que se requiere de mucha experiencia.

» Ilusión: Capacidad para alterar la relativamente la realidad por medio de alguna ilusión, algo no real para confundir a las personas. Este poder les sirve para alterar su apariencia física en determinados casos y lucir como cualquier otra persona.

» Capacidad para soportar la luz solar: El Nosferatu puede exponerse al sol sin miedo a morir, ya que sus poderes se lo permiten. No obstante, no suelen hacerlo con frecuencia (no es común que se muestren en el día por simple placer).

Mi historia es algo que no permitiría contar a nadie, ni siquiera a quien escribe; pues deseo que sean mis propias palabras las que al fin y al cabo queden plasmadas aquí.

Fue hace tantos milenios que llegué a este mundo, que la humanidad ni siquiera tiene registro de aquella época histórica. Lo que creen saber no es del todo cierto, y lo que es realmente cierto ellos jamás lo creerían.

Era una época peligrosa en la que vivir, en la gran mayoría vivíamos como nómadas, siempre moviéndonos de un lado a otro, por eso es tan difícil especificar un lugar de origen; de cualquiera manera, para cuando tuve cierto grado de raciocinio, ya habrían pasado unos 4 o 5 años, lo que significa que estaríamos muy lejos del lugar donde nací como para saberlo a ciencia cierta.

A la intemperie, cualquier cantidad de animales y otras bestias acechaban. En aquella época era de conocimiento general la existencia de criaturas como vampiros, cambiantes, licántropos y otras razas, por ello también estábamos preparados para luchar de ser necesario.

En este punto me parece interesante cómo el conocimiento de una amenaza puede pasar de ser muy real a ser considerado un mito, una leyenda urbana.

Volviendo a mi historia… Aquel lejano y cortísimo tiempo que fui una humana no fue realmente interesante. Era la hija del líder, y como tal mi esposo se convirtió en el siguiente en liderar. Fui una humana bastante corriente para la época: cazaba, tuve un par de hijos, y seguí las costumbres que me fueron inculcadas.

El momento de mi muerte no fue menos corriente para la época. El clan fue víctima del ataque una criatura desconocida para nosotros. En pleno día, la bestia con cuerpo desfigurado, atacó sin piedad, matando a todos aquellos a quienes conocía y quería.

Al momento no lo sabía, pero había algo en mí, algo poco corriente, que atrajo a aquella criatura, quien en lugar de matarme como a todos los demás, me convirtió en lo que él era. Ahora sé qué fue lo que él vio en mí: mi instinto de supervivencia y un lado oscuro que había estado siempre presente, oculto muy en mi interior.

Convertida en lo que entonces sabía era un nosferatus, esa oscuridad oculta en mí hasta entonces, salió a flote con toda la fuerza de mi nuevo ser. Todo en lo que creía siendo humana fue dejado atrás, y terminé siendo todo aquello a lo que temía.

Arrasé con clanes enteros sin dudarlo ni un segundo, sedienta de sangre y hambrienta de poder. Cuando la humanidad se convirtió en una raza sedentaria, al principio hice lo mismo, arrasar con ciudades enteras. Pero dejó de ser suficiente. Fue entonces cuando conocí a Yazid, quien me introdujo a un nuevo juego de poder en donde los humanos eran nuestros peones.

Por milenios manipulamos a líderes humanos, quienes hacían lo que ordenábamos. Algunas veces jugábamos en el mismo equipo, en otras nos convertíamos en rivales. Incontables guerras fueron peleadas sólo para nuestro placer y diversión, nuestro juego de ajedrez. Probándonos a nosotros mismos como estrategas y líderes.

Hasta que un día, por primera vez, estuve en el campo de batalla. Presencié con mis propios ojos lo que los humanos se hacían los unos a los otros, y luego el dolor que eso causaba en los familiares de aquellos que fallecían. Recordé entonces que, una vez, yo también había tenido una familia: un esposo e hijos, y que habría dado mi vida sin remordimientos por ellos.

Comencé a cuestionarme, a dudar de mí misma, de si todo aquello era correcto. Sabía que no. Y, aunque me provocaba un placer morboso, decidí encerrar nuevamente esa oscuridad que por tanto tiempo había hecho tanto daño.

Quise salir de aquella vida, y quise que Yazid me acompañara, pero él estaba demasiado feliz consigo mismo que no podía ver todo el daño que estábamos haciendo. Lo dejé entonces, a él y a esa vida que durante tanto tiempo compartí, para volver a mis raíces.

Han pasado alrededor de mil años desde aquella decisión. Ahora vivo como solía hacerlo en mis orígenes, como nómada. De tiempo en tiempo me uno a alguna caravana gitana, como los llaman ahora, y al poco vuelvo a viajar por mi cuenta. Es una vida simple, sencilla, pero me siento feliz de poder ayudar a los humanos. Sé que eso no borra mi pasado y ni los pecados que cometí, pero al menos me permite darle un poco de consuelo a mi alma.

En tiempos recientes, he llegado a lo que ahora los humanos llaman París con la última caravana a la que me uní. En todo este tiempo, Yazid no me ha buscado, o al menos no ha llegado a hablarme, pues en ocasiones puedo sentir su presencia bastante cerca. Sin embargo, algo me dice que eso está por cambiar, y que la paz que tanto me ha costado alcanzar se verá destruida por la sombra de la oscuridad que habita en mí y que no podré ocultar por mucho más tiempo. Y es su derecho reclamarme con él, después de todo, es mi marido.

Hyacinth es la moneda entera, con sus dos caras, sus dos versiones.

Tiene una cara de luz, que representa su lado más humano. Cuando muestra esta cara, es compasiva, respeta la vida sin importar de qué ser o criatura, y es bastante inofensiva. Se alimenta de los humanos, sí, porque no tiene otra opción, pero no es capaz de arrebatar una vida sólo para obtener su alimento. Bebe sin lastimar.

Mientras que su cara oscura es todo lo opuesto. En esta faceta, su sed de sangre es incontrolable, no tiene límites morales ni remordimiento alguno. Ve a los humanos como ellos a una gallina, como simple alimento, y no tiene reparos en acabar con cuántas vidas sean necesarias para saciarse.

En esta faceta es letal y peligrosa para cualquiera que no tenga la fuerza para hacerle frente, lo que es igual a cualquier cosa que viva fuera de otros nosferatus.

En cualquiera de sus caras, es una excelente estratega, se entrenó luchando contra el mejor, y usa dicha habilidad para conseguir lo que quiere. Ya sea ganar una guerra o prevenirla, todo dependerá de cuál faceta la use.

» Durante su larga existencia ha tenido tres nombres. El primero le fue dado por sus padres al nacer, fue Aqua. El segundo, se lo dio aquel que la convirtió, para separar su vida humana de la criatura en que se había convertido, y fue Velle. Hyacinth es el nombre que se dio a sí misma cuando dejó su vida pasada.

» Su "matrimonio" con Yazid, más que una boda fue un rito de sangre hecho hace miles de años, que los mantendrá vinculados por tanto tiempo como ambos vivan. Ella ha decidido llamarle "esposo" aún cuando no lo ha visto hace casi un milenio, pues es la palabra que más se acerca a definir su relación con él ante los humanos, ya que, independientemente del tiempo que han pasado separados, y las muchas o pocas parejas carnales que ambos hayan podido tener, al menos ella conserva cierta lealtad hacia él.