Idunn Granberg | ID

De mirada expresiva y atractivo rostro enmarcado por una brillante cabellera castaña, cuesta no detenerse a mirar a la atractiva mujer de rasgos felinos. Su mirada lo abarca todo y resulta inherente en ella que, al entrar en una estancia o en el lugar que te encuentras entre un grupo de personas, resalte entre todos ellos.

Sus gestos y su comportamiento parecen completamente normales frente a los ojos de los extraños, de manera que nadie podría realmente imaginarse que únicamente están viendo lo que ella quiere que vean, una de las diversas facetas que caracterizan el todo que la conforma, y es que, a la verdadera mujer detrás de la fachada, la conocen muy pocos.

A la cambainte le guían sus instintos en todo momento. A pesar de que parezca estar distraída en una conversación, no deja de prestar atención a todo su entorno, haciendo inmediatas deducciones que le permiten actuar de la manera más adecuada dada la situación en la que se encuentre.

Mantiene sus propias motivaciones, lo cual en sus inicios como soldado casi provoca que sus superiores se deshicieran de ella, por lo que aprendida la lección ahora les presenta una cara que sirva a sus propósitos.  

Bastante meticulosa y certera, es excelente para actuar de forma improvisada y para memorizar los más pequeños detalles recordándolos en algún momento crítico.

Guarda sus propias lealtades hacia aquellos a los que por una razón u otra ha decidido hacerlo, pero son pocos aquellos que logran ganárselo ya que ha descubierto que vive en un mundo de falsedades adonde para sobrevivir primero debe confiar en sí misma.

Es una fortaleza con murallas gruesas y altas que le han permitido sobrevivir en los peores momentos de su vida.

El no poder recordar sus primeros años es algo que la inquieta más de lo que ella misma pueda o quiera reconocer, es una tortura en carne y espíritu que la ahoga en un profundo pozo negro cada día de su vida.
Espécimen X-WN397 la llaman en el expediente guardado en uno de los archivos altamente clasificados de la Inquisición a los que únicamente un puñado de funcionarios de la sagrada organización tienen acceso. Su verdadero nombre le es desconocido, y en cada una de las misiones a las que es enviada utiliza uno diferente.

Ariane, (que es el nombre que ha escogido utilizar la mayoría de las veces) comienza a recordar desde el momento en que despertó en una de las celdas de la Inquisición en la sede francesa. Los años anteriores a lo que los científicos que solían visitarla llamaban su “renacer” se encuentran oscurecidos en su memoria, y nunca le han permitido tener conocimiento acerca de los mismos.

Al no conocer su pasado tuvo que ajustarse a su naturaleza felina, intentando comprender sus instintos e impulsos que marcan quien es a pesar de que la Inquisición insiste en que únicamente es un medio para un fin.

Los primeros años de su renacer comienzan con las sonrisas falsas y almibaradas de los doctores y científicos que la tenían bajo cuidadosa observación y experimentación. Recuerda haber sido reclutada junto a otros sobrenaturales jóvenes, en quienes como en ella, se buscaba encontrar sus máximas capacidades para convertirles en agentes perfectos de la Inquisición.

Desde sus primeros entrenamientos se determinó que contaba con los atributos perfectos para trabajar para la Santa Iglesia y, tras un cuidadoso acondicionamiento a base de medicamentos experimentales y tratamientos extremos, se le consideró lista para realizar su primera misión.

Debido a su facilidad para mimetizarse con el entorno, así como sus sobresalientes capacidades físicas se dudó si debía asignársele el puesto de soldado o el de espía, por lo que en un principio se le envió a misiones como soldado pero debido a que la agente parecía demasiado voluntariosa para seguir los órdenes de la jerarquía se debatió si debía cancelársele.

Uno de los inquisidores de alto rango que había vigilado la evolución de la cambiante en el recinto, propuso reasignarla como espía. Así fue como Idunn se convirtió en una de las mejores agentes y fue rápidamente ascendida y enviada a numerosas misiones que los dignatarios mantienen en el más completo de los secretos. Es enviada no solo a recaudar información si no a terminar con numerosos blancos de diferentes jerarquías por órdenes directas de personajes ilustres que jamás deberán de ser revelados ni llegar a ser del conocimiento público.  
- Cambia su aspecto en cada una de sus asignaciones. Quien la ha visto una vez podría tenerla enfrente de nuevo sin llegar a percatarse.

- En cada una de sus misiones se muestra precisa y eficiente, se ha escapado en numerosas ocasiones pasando inadvertida bajo las narices de las autoridades de distintos países al cruzar las fronteras.

- Domina perfectamente múltiples idiomas europeos y asiáticos.

- Idunn es el nombre verdadero que no recuerda, Ariane es el nombre con el que se hace llamar en la inquisición.

- Nació en Noruega, pero ese origen le es desconocido, ante los demás es francesa.

- Desde que recuerda ha vivido en París, cerca de la sede de la Inquisición.

- Mimetismo
- Telepatía y comunicación con los animales
- Visión compartida y visión remota

- Pantera
- Gato bosque de noruega
- Caracal