Victorian Vampires
Gale Julien Brandt 2WJvCGs


Unirse al foro, es rápido y fácil

Victorian Vampires
Gale Julien Brandt 2WJvCGs
PARÍS, FRANCIA
AÑO 1842

Nos encontramos en París, Francia, exactamente en la pomposa época victoriana. Las mujeres pasean por las calles luciendo grandes y elaborados peinados, mientras abanican sus rostros y modelan elegantes vestidos que hacen énfasis los importantes rangos sociales que ostentan; los hombres enfundados en trajes las escoltan, los sombreros de copa les ciñen la cabeza.

Todo parece transcurrir de manera normal a los ojos de los humanos; la sociedad está claramente dividida en clases sociales: la alta, la media y la baja. Los prejuicios existen; la época es conservadora a más no poder; las personas con riqueza dominan el país. Pero nadie imagina los seres que se esconden entre las sombras: vampiros, licántropos, cambiaformas, brujos, gitanos. Todos son cazados por la Inquisición liderada por el Papa. Algunos aún creen que sólo son rumores y fantasías; otros, que han tenido la mala fortuna de encontrarse cara a cara con uno de estos seres, han vivido para contar su terrorífica historia y están convencidos de su existencia, del peligro que representa convivir con ellos, rondando por ahí, camuflando su naturaleza, haciéndose pasar por simples mortales, atacando cuando menos uno lo espera.

¿Estás dispuesto a regresar más doscientos años atrás?



NIGEL QUARTERMANE

ADMINISTRADOR

ENVIAR MP
NICOLÁS D' LENFENT

ADMINISTRADOR

ENVIAR MP
ESTACIÓN


Espacios libres: 11/40
Afiliaciones élite: ABIERTAS
Última limpieza: 1/04/24


COPYRIGHT/CRÉDITOS

En Victorian Vampires valoramos la creatividad, es por eso que pedimos respeto por el trabajo ajeno. Todas las imágenes, códigos y textos que pueden apreciarse en el foro han sido exclusivamente editados y creados para utilizarse únicamente en el mismo. Si se llegase a sorprender a una persona, foro, o sitio web, haciendo uso del contenido total o parcial, y sobre todo, sin el permiso de la administración de este foro, nos veremos obligados a reportarlo a las autoridades correspondientes, entre ellas Foro Activo, para que tome cartas en el asunto e impedir el robo de ideas originales, ya que creemos que es una falta de respeto el hacer uso de material ajeno sin haber tenido una previa autorización para ello. Por favor, no plagies, no robes diseños o códigos originales, respeta a los demás.

Así mismo, también exigimos respeto por las creaciones de todos nuestros usuarios, ya sean gráficos, códigos o textos. No robes ideas que les pertenecen a otros, se original. En este foro castigamos el plagio con el baneo definitivo.

Todas las imágenes utilizadas pertenecen a sus respectivos autores y han sido utilizadas y editadas sin fines de lucro. Agradecimientos especiales a: rainris, sambriggs, laesmeralda, viona, evenderthlies, eveferther, sweedies, silent order, lady morgana, iberian Black arts, dezzan, black dante, valentinakallias, admiralj, joelht74, dg2001, saraqrel, gin7ginb, anettfrozen, zemotion, lithiumpicnic, iscarlet, hellwoman, wagner, mjranum-stock, liam-stock, stardust Paramount Pictures, y muy especialmente a Source Code por sus códigos facilitados.

Licencia de Creative Commons
Victorian Vampires by Nigel Quartermane is licensed under a
Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported License.
Creado a partir de la obra en https://victorianvampires.foroes.org


Últimos temas
» Savage Garden RPG [Afiliación Élite]
Gale Julien Brandt NXLYMMiér Sep 18, 2024 9:16 am por Afiliaciones

» REACTIVACIÓN DE PERSONAJES
Gale Julien Brandt NXLYMMar Jul 30, 2024 4:58 am por Frederick Truffaut

» AVISO #49: SITUACIÓN ACTUAL DE VICTORIAN VAMPIRES
Gale Julien Brandt NXLYMMiér Jul 24, 2024 2:54 pm por Nigel Quartermane

» Ah, mi vieja amiga la autodestrucción [Búsqueda activa]
Gale Julien Brandt NXLYMJue Jul 18, 2024 4:42 am por León Salazar

» Vampirto ¿estás ahí? // Sokolović Rosenthal (priv)
Gale Julien Brandt NXLYMMiér Jul 10, 2024 1:09 pm por Jagger B. De Boer

» l'enlèvement de perséphone ─ n.
Gale Julien Brandt NXLYMSáb Jul 06, 2024 11:12 pm por Vivianne Delacour

» orphée et eurydice ― j.
Gale Julien Brandt NXLYMJue Jul 04, 2024 10:55 pm por Vivianne Delacour

» Le Château des Rêves Noirs [Privado]
Gale Julien Brandt NXLYMJue Jul 04, 2024 10:42 pm por Willem Fokke

» labyrinth ─ chronologies.
Gale Julien Brandt NXLYMSáb Jun 22, 2024 10:04 pm por Vivianne Delacour


<

Gale Julien Brandt

Ir abajo

Gale Julien Brandt Empty Gale Julien Brandt

Mensaje por Gale J. Brandt Dom Mayo 29, 2011 7:00 pm

Gale Julien Brandt


-Edad: 25 años
-Especie: Humano
-Tipo y Clase Social: Clase media, extranjero.
-Orientación Sexual: Bisexual
-Lugar de Origen: Alemania
-Habilidad/Poder: -

-Descripción Física:

Spoiler:

Gale es un joven que a duras penas llama la atención. A pesar de ser guapo y atractivo, no es la clase de persona en la que se fijan las miradas de la gente, probablemente debido a su tímida personalidad y a la actitud que deriva de ella. No es especialmente alto ni fuerte, manteniendo el físico que puede tener cualquier profesor, ya que no necesita tener una gran forma física para desempeñar su oficio. No obstante, hay algo que sí resalta en su cuerpo. Las cicatrices. Amargos recuerdos de su estancia en prisión que han dejado un rastro imborrable sobre su piel. Algunas más largas, otras más cortas. Finas y gruesas, profundas y superficiales, curvas y rectas; le recorren la espalda, los brazos y el pecho y lo marcan como el culpable de un crimen que no cometió. Cada una le cuenta un castigo recibido y le trae recuerdos de los años que pasó en una oscura y sucia celda.

Lejos de esa visión que poco tiene que ver con el chico tranquilo y responsable se encuentra un rostro apacible y armonioso, maduro. Sus ojos, de un verde profundo y atrayente, revelan cualquier pensamiento que su mente pueda configurar, incapaces de mentir. Las mejillas, en contraste, son de un pálido casi enfermizo y están cubiertas por pequeñas pecas, que se extienden desde los pómulos hasta el puente de la nariz. No resaltan demasiado, pero le dan un toque infantil a un rostro en ocasiones más adulto de lo que debería. Apenas una ligera sombra de barba asoma por la barbilla y las mejillas del muchacho, que si bien lo hacen parecer más masculino, resulta una prueba tardía de la pubertad.

Sus labios, normalmente curvados en una bonita y calmada sonrisa, no son demasiado gruesos pero resultan suaves y agradables a la vista, aunque poco dispuestos a entregarse al roce de otros labios. En ellos destaca una pequeña cicatriz, cerca de la comisura derecha, producto de un más que acertado golpe de uno de los guardias que le custodiaban.

Por lo que respecta a Julien…nada parece cambiar, ya que el cuerpo es el mismo, pero debido a su actitud y a la confianza que tiene depositada en sí mismo, resulta mucho más imponente que Gale. Quizás sea por la barbilla alzada y la postura orgullosa, pero llama más la atención que él. Aprovecha su físico para imponer respeto y seducir a quien se proponga, haciendo uso de todas las armas que sean necesarias.

-Descripción Psicológica:
¿Quién es Gale? … ¿Y Julien? ¿Acaso son hermanos? ¿Gemelos tal vez? No, no son familia. ¿Son amigos, conocidos? De nuevo, no. Gale y Julien son las dos caras de una misma moneda; solamente estando juntos pueden formar un todo equilibrado y existir. El uno sin el otro está condenado a ser sólo restos, migajas de una existencia que nunca llegará a estar completa. Se necesitan como las dos mitades de una misma unidad; aunque en ocasiones intenten destruirse para llevarse una parte mayor de esa existencia compartida. Dos mentes, un solo cuerpo. ¿Son, no obstante, tan diferentes como cabría suponer? No del todo.

Gale es todo lo que Julien rechaza, Julien es todo lo que Gale querría ser.

-¿Qué demonios haces? ¡Lo estás haciendo mal!-
-Sé exactamente…-
-No, no tienes ni idea, joder. ¡Hazme caso de una maldita vez!-
-Puedo hacerlo yo solo, Julien. Sólo mira…-
- A veces eres tan gracioso que me pregunto por qué ninguna mujer se te acerca…-



Tímido y retraído, Gale acostumbra a adoptar una actitud pasiva frente a la vida, limitándose a ser un mero personaje secundario. No quiere protagonismo, entre otras cosas porque tampoco sabría lidiar con él. No está dispuesto a soportar el peso de una fama que de todos modos no le satisface; es feliz en su oscuro rincón, alejado de toda atención y disfrutando de las pequeñas cosas que le provocan placer de verdad. Prefiere mirar a actuar; prefiere dejarse aplastar frente a las circunstancias antes que aplicar algún remedio y arriesgarse a perder lo poco que tiene. Sabe perfectamente que es un cobarde incapaz de plantarle cara a todo lo que le atormenta, pero eso es algo que tampoco cree que pueda combatir por sí mismo.

No sabe enfadarse, excepto en esas ocasiones en las que sí sabe y deja que todo explote. Que explote él y que explote Julien. Todo a su alrededor, en mil pedazos. Todo ese autocontrol, toda la tranquilidad, la timidez, la paciencia, la responsabilidad…Todo. No dura mucho, pero es una ira intensa y desgarradora, que pronto se transforma en la calma de siempre y sólo deja a un Gale agotado y psicológicamente hundido. No está hecho para las emociones fuertes, no fue moldeado para sobrellevar la rabia, la pasión o la ambición; se mueve mejor en terrenos más neutrales, donde el autocontrol, la paciencia y la serenidad tienen su reino.

-¿Por qué no le has mandado al cuerno?-
-¿Qué habría conseguido con ello? Probablemente una discusión y algunas palabras malsonantes, nada más.-
-Ya sería más de lo que tienes ahora.-


Un tanto conformista, aunque no por elección. Si no lucha es porque apenas tiene confianza en sí mismo; tiende a hacerse críticas poco constructivas y bastante hirientes, casi sin percatarse de ello. Así, si no cree que sus quejas van a tener algún resultado prefiere simplemente callar y interiorizar el malestar, aceptando en muchas ocasiones aquello que le imponen. No le gusta ser así, y se sabe bastante débil en este aspecto, pero no se siente capaz de cambiarse a sí mismo y hacerse más fuerte. Es muy vulnerable, aunque muchas veces no lo demuestre. Que nadie se deje engañar por la pose de tranquilidad y calma que ha estudiado durante mucho tiempo, pues en muchas ocasiones no es más que una fachada para tratar de ocultar que ha sido herido.

Por otro lado, Gale es una persona amable, comprensiva, bondadosa. Es, algunos así lo afirman, bueno. Civilizado y respetuoso, nunca proferirá una maldición o un improperio delante de una dama o un niño, sustituyendo esas respuestas por una sonrisa cordial y un saludo calmado. Es creativo y divertido, especialmente en su trabajo; le gusta probar métodos de enseñanza nuevos y que aprender sea entretenido para sus alumnos. Es bastante bueno consiguiendo la amistad de estos. Es fácil percibir cuando disfruta con algo, pues la alegría brilla en su rostro sin que nadie pueda negarlo.

En la cara opuesta se encuentra Julien.

Julien es, en pocas palabras, aquello que Gale no se atreve a ser. Un vividor, totalmente extremista. Para él no existen los grises, ni el término medio. El todo o el nada. Es bastante obstinado y aún más irresponsable; no conviene llevarle la contraria ni discutir con él, pues no acostumbra a jugar limpio a la hora de conseguir aquello que desea. Los remordimientos no existen para él. Se limita a hacer lo que quiere en el momento en que lo quiere, sin importar por encima de quién deba pasar, ya que no le interesa demasiado lo que los demás puedan opinar de ello, ni siquiera si les hiere con su actitud y su forma de obrar.

Tiene tendencia a insultar y a soltar improperios a diestro y siniestro. Domina las maldiciones como si de un arte se trataran y maneja la injuria con una habilidad que haría palidecer a un experimentado marinero. Es bastante maleducado, pero ni le importa ni tiene intención de cambiarlo; para él las normas sociales tienen poca importancia, así que actúa del modo que le resulta más cómodo en cada situación. Tampoco respeta demasiado la jerarquía, pues le molesta mucho que le hagan sentir inferior en algún aspecto. Es bastante orgulloso. No le gusta reconocer sus errores aunque sepa que se ha equivocado, así que pocas, muy pocas son las veces que se disculpará. Normalmente prefiere seguir adelante en su decisión hasta que se encuentre de frente con las consecuencias y ya no pueda ignorar que ha cometido un error.

- No quería tener que recordártelo, pero…te lo dije.-
- Gale, si algún día dejas de ser tan condenadamente cenizo, te ruego que me lo comuniques. Mientras tanto, cierra la maldita boca.-


Es muy poco paciente; exige las cosas sin pronunciar ningún “por favor” y ya casi ha olvidado la palabra “gracias”. Detesta esperar cuando quiere algo o que le nieguen la atención que está seguro de merecer. No comprende por qué alguien debería ignorar su presencia, así que procura hacerse ver allá adónde va. Eso le ha procurado grandes enemigos a los que estará encantado de humillar siempre que sea necesario, sin ninguna compasión. Es un tanto cruel cuando cree tiene razones para serlo, y lo cierto es que siempre encuentra una justificación para sus actos aunque muy pocos darían por válidos sus argumentos.

-¿Puedes explicarme una vez más por qué has tenido que pelearte con ese hombre?-
- Por todos los infiernos, Gale, tú también estabas ahí. Lo has visto perfectamente.-
- ¿Qué se supone que he visto?-
- ¿Acaso no está claro? Me ha empujado. Quería pelea y yo se la he dado. Punto.-
- Ha tropezado contigo, y después ha disculpado. Eso es lo que yo he visto.-
-¿A quién demonios le importa?-


Es valiente hasta rozar la imprudencia. No le importa demasiado el riesgo que corra, pues las posibles consecuencias pocas veces tienen alguna relevancia para él. Piensa que siempre hay una salida, una solución, así que los problemas que puedan surgir no le inquietan demasiado. Es bastante astuto cuando la situación lo requiere, pero normalmente prefiere dejarse llevar por los instintos, sin pensar demasiado cual será su próximo paso. Se toma la vida como algo que hay que disfrutar, no como algo que haya que calcular. Se deja seducir por las tentaciones y cae en cada una de ellas sin ningún remordimiento, con una completa satisfacción y un mayor placer. Además, disfruta haciendo caer a Gale con él de forma indirecta, tentarle para que le siga en ese camino oscuro.

En cuanto al tema amoroso, Gale se siente tocado y hundido. Después del incidente que le llevó a la cárcel durante seis años no aspira a encontrar a nadie que le ame, ni siquiera busca a alguien que le haga más amena la existencia. El trabajo le satisface y la compañía de Julien le parece más que suficiente para su monótona vida, así que ni siquiera siente necesidad de tener amigos cercanos, entre otras cosas porque teme que descubran sus secretos. Julien, en cambio, disfruta con sus idas y venidas del burdel, pero no piensa entregarse a una relación seria. Le gusta cambiar de persona y escenario y no descarta al sexo masculino.

-¿Por qué has tenido que hacerlo?-
-¿Has visto el tamaño de esos pechos?-
-¡No me importa el tamaño de los pechos de Madame Lefévre! ¡Es una mujer respetable y ahora piensa que eres…que somos unos pervertidos!-
-Tampoco va muy errada…-
-Habla por ti, yo al menos no me acuesto con hombres.-
-Bueno, técnicamente cuando lo hago yo tú también lo haces.-



-Historia:
Gale Julien Eichmann nació el 16 de Mayo de 1775 en el seno de una familia alemana acomodada, tradicionalmente dedicada a los negocios y la banca. Jamás le faltaron la comida, la ropa o los estudios; ¿qué más podía pedir entonces? Ah, el joven Gale extrañaba el cariño de unos padres atentos. El cuidado y el amor de una madre, el apoyo y los consejos de un padre, ambos demasiado ocupados con el trabajo y las fiestas a las que solían acudir sin el muchacho. Pasó gran parte de su infancia rodeado de mayordomos, sirvientas y institutrices que le mostraban el camino a seguir en la vida, y aunque siempre le resultó una buena vida, nunca llegó a sentirse completo.

Empezó a asistir a fiestas y bailes cuando apenas contaba con quince años. Nunca se sintió atraído por ese mundo falso y superficial, donde contaba más una sonrisa sin sentimiento que una verdadera palabra amable, pero se sentía obligado a ir. Era lo que sus padres esperaban de él, así que su deber era obedecer y callar, sin importar realmente lo que opinara. Tampoco es que se creyese con el derecho a protestar o cambiar algo, de modo que acabó aceptando lo que le imponían sin rechistar. Iba de un lado a otro, siguiendo el modelo que le habían enseñado, siendo quien la gente quería que fuese.

Y lo cierto es que le dio buenos resultados. No tardó en hacerse un lugar entre las altas esferas, y hasta llegó a conocer a algunas jóvenes solteras que querían unir linajes con la familia Eichmann. El joven hasta llegó a creer que eso era exactamente lo que había deseado siempre: conocer a otros herederos de familias adineradas, casarse con alguna mujer bella y tener herederos que pudieran portar su mismo apellido. Sí, al principio no sonaba mal del todo, pero Gale pronto se dio cuenta de que le faltaba algo a su vida. Lo tenía todo y, sin embargo, continuaba sintiéndose tan vacío como el hombre más solo de la tierra. ¿Qué le ocurría? ¿Acaso no era esa vida la que todos deseaban con desesperación?

Pronto sus padres le exigieron que se casase. Ni siquiera importaba con quién mientras tuviera un dinero equiparable al de los Eichmann y su familia no estuviera manchada por ningún escándalo. Las exigencias cada vez se hicieron más y más insistentes, presionando al muchacho para que dejara de retrasar algo que de todos modos debía llegar. Finalmente, ante la indecisión de Gale, el matrimonio Eichmann decidió escoger por él. La elegida fue Arabelle Jensen, cuya familia poseía una de las empresas textiles más importantes de Alemania. Era, además, poseedora de una belleza espectacular. No era de extrañar que muchos empezaran a envidiar al joven Eichmann, que poco de bueno veía en esa relación.

Arabelle era bellísima, pero también destacaba por su fuerte carácter. De naturaleza caprichosa y egocéntrica, la joven invertía más tiempo y dinero en comprar vestidos carísimos que en pasar tiempo con el que sería su futuro marido. Gale, mientras tanto, se consumía en un vacío que sólo entendía él. Arabelle le ignoraba la mayor parte del tiempo, pero cuando le prestaba atención solía menospreciarle y humillarle sin importar quién estuviera delante. El muchacho empezó a desesperar, hastiado por los desprecios de la joven. ¿Tendría que compartir toda una vida con una mujer que detestaba? ¿Podría compartir lecho con ella, aunque sólo fuera para traer al mundo a un nuevo Eichmann? La existencia le parecía excesivamente larga y agotadora.

La fecha en que el matrimonio se llevaría a cabo se acercaba, y con cada día el odio que sentían el uno hacia el otro crecía lenta pero inexorablemente, silencioso y amargo. Un par de incidentes pusieron de manifiesto que la relación no mejoraría una vez casados, pero ya era tarde para deshacer un acuerdo muy beneficioso para ambas familias. Los Jensen y los Eichmann decidieron seguir adelante con la unión, esperando que, de algún modo, consiguieran soportarse hasta conseguir al primer heredero.

El día de la boda llegó, pero los acontecimientos resultaron muy distintos de lo que cabía preveer. Arabelle apareció aquella misma mañana muerta en su habitación, con el vestido de novia cubierto de sangre y prácticamente irreconocible. La habían asesinado violentamente y con una crueldad escalofriante, algo más que un acceso de ira: se trataba de un crimen premeditado. Fue el mismo Gale el que la encontró cuando, a primera hora de la mañana, se dirigía a la habitación de la joven para tratar de apaciguar los ánimos en un día tan señalado. Cuando la vio, tirada en la cama, ensangrentada y destrozada, el joven quedó paralizado. Ni siquiera pudo gritar para pedir auxilio. Se quedó en medio de la habitación, observando el cuerpo sin vida de la que iba a ser su esposa, a la que tanto había odiado. Una pequeña parte de sí mismo se alegró. Una parte que Gale se negó a reconocer como suya le inyectó una gota de placer en la sangre al ver que había recibido su merecido.

La impresión duró poco, de todas formas. Instantes más tarde, el grito de la señora Jensen anunciaba a la casa entera el crimen que se había cometido. Las miradas no tardaron en dirigirse a Gale. El odio que la pareja se profesaba era más que conocido, así que poco fue lo que Gale pudo decir en su defensa para poder escapar de la trampa. Nadie creía que fuera inocente, ni siquiera sus padres. El matrimonio Jensen, destrozado, no dudó en utilizar toda su influencia y grandes cantidades de dinero para hacer que el muchacho obtuviera una condena a la altura del delito. Los Eichmann, por su parte, aunque no confiaban en la inocencia de su hijo, decidieron ayudarle para evitar que el escándalo familiar fuese aún peor.

La sentencia, no obstante, fue clara e inamovible: Gale Julien Eichmann fue condenado a cadena perpetua por haber asesinado a Arabelle Henrietta Jensen con premeditación y alevosía.

Los Eichmann se dieron por satisfechos por el simple hecho de que Gale no fuera ejecutado, y decidieron renegar de él para salvar lo que quedaba del estatus de la familia. Su hijo había cometido el peor asesinato que se recordaba desde hacía años en Berlín, pero si renegaban de él la sociedad estaría segura del desprecio que sentían hacia el muchacho y quizás pudieran rehacer sus vidas tal y como estaban antes.

Para el joven, sin embargo, nada volvió a ser lo mismo.

La cárcel se tornó un verdadero infierno para él. Los golpes por parte de los guardias se volvieron algo diario, casi natural. Querían hacerle pagar por lo que le había hecho a la bellísima señorita Jensen, así que aplicaban castigos muy duros incluso sin que hubiera una razón aparente. La comida no siempre llegaba a la celda de Gale y las heridas pocas veces recibían un tratamiento aceptable. La muerte dejó de ser un miedo para el muchacho y acabó convirtiéndose en un deseo mudo, pero siempre presente. Los días y las noches pasaban unos tras otros sin que el chico se percatara de ello, ¿Cuándo amanecía, cuándo oscurecía? ¿Eran suyos esos lamentos o le pertenecían a algún otro preso, agonizando en una celda cercana?

Gale no puede especificar el momento exacto en que ocurrió, pero fue entonces cuando Julien apareció. Al principio sólo era una voz que bien podía confundirse con la suya, hablándole desde el interior de su mente; así que pensó que se trataban de sus propias reflexiones. No tardó en comprobar que aquella voz no pertenecía a sus pensamientos, pues distaba mucho de su forma de ser y su forma de reflexionar. Tampoco coincidían en gustos ni en opiniones, pero Gale no quiso pensar en ello. La voz había llegado en el momento exacto, en el que la agonía y la desesperación estaban a punto de vencerle en aquella celda pestilente y oscura. No siempre le apoyaba, pero le servía para mantenerse distraído.

Los guardias notaron que algo sospechoso ocurría en la celda del 420, número de prisionero que le asignaron a Gale. Se percataron de que el joven solía hablar solo, respondiendo a preguntas que nadie le había formulado, riéndose de bromas que no habían sido pronunciadas. Le tomaron por loco, obviamente. No era el primero y probablemente no sería el último. Ante esta revelación, los guardias decidieron aprovecharse de las circunstancias para divertirse un poco con el 420.

Los golpes aquella vez fueron más fuertes e intensos, durante un periodo de tiempo que puso a prueba la resistencia física y mental del joven Eichmann. Gale perdió la consciencia unos minutos después de recibir el primer golpe. Lo que ocurrió en su mente aún le resulta un misterio; lo único que sabe es que cuando despertó, ya no era el mismo. No era él quien controlaba su cuerpo, sino aquella voz que le hablaba desde la oscuridad de su mente. Se había hecho con el control y él apenas era consciente de lo que hacía, como un niño asustado que se cubre con la sábana para no ver los monstruos que le acechan.

Julien mató a los guardias. Los golpeó y se defendió con una furia ciega, enfermiza, hasta que se aseguró de que los hombres que les custodiaban permanecían inmóviles en el suelo, a sus pies. Escapó de la prisión tan rápido como le permitían sus piernas y se refugió en los bajos fondos de la capital alemana durante varios días. Una mañana, sin más, Gale volvió a tomar el control de su cuerpo. No sabía lo que le había ocurrido, sólo era consciente de que había sido liberado y de que ahora no estaba solo. No obstante, la historia no había acabado ahí. Estaba siendo buscado por la policía berlinesa por un triple asesinato en la prisión, sumado al crimen que supuestamente había cometido contra su prometida, así que debía escapar del país.

Huyó a Francia, donde nadie podía reconocerle ahora que había dejado de formar parte de las clases altas. Cambió su apellido por Brandt y se instaló en París, donde empezó a ejercer como profesor de niños de clase social media y alta. Actualmente busca estabilizar su situación en París, ya que no tiene intención de volver a Alemania, y establecer algunas relaciones que le ayuden a superar los fantasmas del pasado. En cuanto a Julien, esa voz que suele hablarle y que de vez en cuando toma el control de su cuerpo...ha decidido aceptarle, compartir con él mente y existencia para conseguir lo que tanto desea: Sentirse bien consigo mismo, completo.

-Datos Extras:

- Sufre un trastorno de doble personalidad. Cada una de estas personalidades puede oír lo que dice la otra y, en casos de máxima ansiedad y tensión, alternarse para estabilizar la mente.

- A veces se descuidan y hablan en plural, lo que suele desconcertar al interlocutor. A Gale le ocurre con mayor frecuencia.

- Julien es abiertamente bisexual. Suele visitar el burdel para fastidiar a Gale, acostándose con hombres y mujeres indistintamente. Gale, en cambio, prefiere pensar que es heterosexual para sentirse un poco más normal.

- Tiene tatuado en el antebrazo izquierdo el número 420, que le identificaba como prisionero cuando estaba en la cárcel, ya que su condena era perpetua.

- La sangre le provoca una mezcla de miedo y placer extraño.

- Ejerce de profesor porque con los niños no se siente tan amenazado. Son los adultos los que le han herido, pero los niños aún le transmiten confianza y pureza, esa inocencia que les hace incapaz de juzgarle.

- No les gusta que les toquen y no soportan que les aten, les desquicia. Les recuerda el tiempo en que estuvieron presos, y es algo que no están dispuestos a revivir.
Gale J. Brandt
Gale J. Brandt
Humano Clase Media
Humano Clase Media

Mensajes : 19
Fecha de inscripción : 24/05/2011

Volver arriba Ir abajo

Gale Julien Brandt Empty Re: Gale Julien Brandt

Mensaje por Invitado Lun Mayo 30, 2011 8:56 pm

FICHA ACEPTADA
Bienvenido al Foro
Anonymous
Invitado
Invitado


Volver arriba Ir abajo

Volver arriba

- Temas similares

 
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.