Blancanieves

por Invitado Mar Jun 21, 2011 5:02 pm

“Hace muchos años que mi padre se encontraba tan solo, le hacia falta una esposa para poder rehacer su vida y estaba bien visto, era muy hermosa mi madrastra, tan hermosa era que mucha de la gente del pueblo lo comentaba…

Blancanieves, es mi nombre, cuando saludaba la gente de la corte, yo solo me limitaba a asentir, me daba una paz tremenda llevarme tan bien con las personas, y es que todo debía ser bello, dulce Aunque no fuera así... perdí a mi madre hace algunos años, y es que la enfermedad y el peso de cargar con unos años demás la llevaron a la muerte, aunque no sin antes darme un consejo… -Pequeña blancanieves, búscale a tu pa… al Rey una dama con la que pueda ser feliz, no dejes que este solo, apóyele... -luego dirigió su vista en mi ya que anteriormente había estado hablando al aire, y como susurrando me dijo al oído- y nunca olvides que la belleza no solo es exterior si no también interior, cuida de tu pueblo, te amara, te conocerán no solo por lo hermosa que ya estas comenzando a ser si no por lo buena y bondadosa…- eso había sido cuando cumplí los 14 años, y ahora tenia 17 y mi padre se había vuelto a casar con una mujer muy hermosa de la cual yo misma estaba orgullosa por que la había escogido…”

Había algo extraño en las acciones del Rey… padre de Blancanieves y es que parecía no estar tan enamorado de la mujer con la cual había contraído matrimonio y es que había un secreto de por medio, que su madre jamás había revelado…

Paseando por los castillos un día decide ir hacia el apartado de su madre, donde solía estar momentos a solas y disfrutar de las delicias que su propia huerta le brindaban, era una especie de casa de campo, con flores, ovejas, vacas, y verduras y frutas plantadas que ya daban su fruto y hacían del lugar aun mas placentera la estadía, Blancanieves entra a aquella casa, que jamás había pisado, y sin motivo alguno comienza a revisar los papeles que se hallaban encima de la mesa de la habitación que parecía ser la de su madre encontrándose con algo que no podía creer, lee y lee siendo llevada y guiada por aquellas paginas que hace que en su interior comience a crecer un miedo interior…. El Rey… no era su padre…
Salio de aquella casa, delicadamente intentando olvidarse de lo leído, la carta la tenia entre sus dedos, mientras corría hacia el castillo y al entrar en su habitación corre a su cama olvidando que traía la carta en sus manos la cual había resbalado a los pies de la entrada del castillo…

lalala:

por **Junno Kimura** Vie Jun 24, 2011 11:06 pm

Bien, las cosas estaban más que fuera de control. Uno de sus sirvientes había encontrado la carta que la que llamaban su 'hija' había encontrado. Se la habían llevado y viendo su contenido lo que había intentado, con poco esfuerzo, que no se descubriera ahora era algo que la chiquilla conocía. Bueno, seguro que ahora comprendería su actitud en algunas ocasiones pasadas, aunque seguía sin ser de mucha ayuda, seguro que ahora su actitud hacia él cambiaría.

Sonrío... De todo esto había algo bueno, después de todo... aunque aún tenía que cuidar las apariencias y demás...

Si había cedido ante las insistencias de su hija por conseguir una nueva esposa era porque no había podido seguir con aquello. La muchacha le trataba de tal modo que había perdido las esperanzas de algo que había albergado por algún tiempo. Había destrozado sus esperanzas y es que en algún punto había dejado de verle como a una niña y lo que era peor, como su hija... eso había provocado ciertas riñas y demás, pero como ella no sabía la verdad se lo había tomado de una forma diferente a lo que lo había hecho él.

Además, la que ahora era su esposa estaba celosa de ella, porque había notado su interés... lo que no sabía, es que ese mismo sentimiento había ido transformándose por la actitud de Blancanieves y se estaba tornando en algo oscuro y siniestro.

En su interior había nacido una especie de rencor del que no podría deshacerse fácilmente. Incluso le preocupaba un poco. Habían pasado los años y desde la muerte de la mujer a la que había amado con locura algo había cambiado en su interior. Tal vez había sido el dolor lo que había tornado a lo que solía ser una buena persona en lo que era ahora. Pero no se sentía mal por ello, oh, claro que no. De hecho hasta le parecía divertido de algún modo...

Ahora estaba planeando algo que nunca se le hubiese ocurrido con anterioridad, un plan diferente. Ya no deseaba que Blancanieves le viese del modo en que había deseado. No, no... ahora quería simplemente hacerle pagar por sus rechazos y más ahora que ella sabía que su sangre no corría por sus venas.

Qué conveniente resultaba todo. Sin duda, era un buen día...

Spoiler:

por Invitado Lun Jun 27, 2011 3:46 am

Simplemente se hizo a la idea el día paso rápidamente y no tenia ningún tipo de ganas de salir de su habitación, así que se dedico a observar por un ventanal, habían ciertos rumores que corrían y si que corrían rápido, al parecer la corte se movilizaba y hacia que Blancanieves quisiera salir a dar un paseo, y como si le hubieran leído la mente aparece su mucama buscando su mejor vestido por que le avisaba que su padre había ordenado una salida para ella, arreglando sus ropas para luego estar completamente lista se encamino hacia la entrada del castillo donde su padre… mas bien su padrastro aguardaba por ella, ¿el sabría? quería hacerle tantas preguntas se puso su mejor vestido eso decía algo, decía que estaba feliz o al menos eso debía disimular ante aquel hombre Blancanieves por que no temía por su destino si no mas bien temía por la reputación de su padre, a pesar de todo aunque no fuera de sangre le amaba y siempre vería como un padre a quien seguir y respetar, camino hacia el gran salón se encontró con la mujer que se había casado con su padre y esta le señalo una cajita musical junto a una pequeña llave en un collar colgante, no podía creer que hubiera tanta belleza en un cofre por lo que sorprendida de aquel regalo la mujer le susurra el secreto de aquella cajita, tenia música propia por lo que su verdadero amor podría escucharla a kilómetros y aparecer cuando ella mas le necesite… -pero yo no tengo primer amor alteza… - la mujer le da un abrazo que nunca le había dado del tiempo que llevaba en palacio y como si fuera una despedida, blancanieves se sintió con un deje de tristeza por primera vez tener una conversación con ella y que fuera tan corta justo hoy... aun así continuo camino hacia salón emocionada por aquel paseo...

–un paseo?... – le ofrecía un caballero que parecía seria su guía hacia los bosques donde antes tenia estrictamente prohibido ir… aquello le emocionaba un paseo por los bosques seria algo entretenido y diferente, esperaba ver flores y muchos, muchos animales por fin saldría de palacio, por lo que abrazo a su padre –lo veré por la noche padre?...-susurraba antes de besar su mejilla mientras que alguien le entregaba su abrigo para emprender camino hacia el coche que la llevaría hacia los bosques, dirigió una ultima mirada hacia el hombre que la veía desde la entrada del castillo, el Rey… y alzando sus pequeñas manos se despedía feliz y contenta de que todo no hubiera cambiado desde el momento que se entero que no era hija legitima del rey

“pobre, pobre blancanieves, no sabe su destino, no tiene amor y todo esta en su contra… tendrá aquel acompañante compasión?”

Spoiler:

por **Junno Kimura** Mar Jun 28, 2011 4:29 pm

Le vio despedirse. Le quería, sí... era imposible no sentir algo hacia ella con ese carácter que tenía. Antes de ese día el sabía que probablemente su sangre no corría por aquellas venas... ¿Por qué? La verdad es que había un par de cosas obvias que le habían hecho pensarlo... pero bueno, había pasado esas cosas por alto y le había aceptado cuando le vio desde aquella primera vez.

Pero ahora se sentía ajeno a ese sentimiento, no estaba seguro de las razones que ahora le hacían pensar de esa manera. Pero ciertamente no podia mantenerla a su lado ahora que ella sabía la verdad. Porque eso conllevaba muchas cosas.

Probablemente estuviese perdiendo la razón, pero nadie se atrevería a decir eso del gobernante, nadie cuestionaría sus acciones y sus órdenes, como la que le había dado aquel jóven que ahora acompañaba a la que había considerado una de las personas importantes en su vida en algún momento de su pasado. ¿Dónde estaba eso ahora? Probablemente muy fondo en su interior, porque no era capaz de alcanzarlo. Así que su conciencia no actuaría para impedir sus propios planes.

-Por supuesto, querida mía... -dijo en contestación a aquella pregunta. Su mirada dejaba ver más de un sentimiento, pero nadie sería capaz de notarlo a simple vista.

Entre ello dejaba ver que lo que decía no era cierto, no esperaba verle al llegar la noche... según los planes, no debía ser capaz de verla nunca más...

Le dijo adiós con la mano mientras sonreía cálidamente. Cómo eran las cosas, pensó, no estaba fingiendo aquello y sin embargo, había dado la órden de eliminarla, bajo el pretexto de una traición. Pero se preguntaba si aquello funcionaría... Todo el mundo quería a Blancanieves, y es que el tipo de persona que era encandilaba a los habitantes de ese reino...

Suspiró dándose la vuelta y regresando al castillo. Se encontró en el pasillo con la persona que ahora era su esposa. Le sonrió antes de dirigirse al trono y seguir haciendo lo que eran sus deberes como monarca de ese lugar.

No había marcha atrás. Aquel sujeto debía deshacerse de Blancanieves y regresar con una prueba de ello. si no lo hacía lo pagaría con su propia vida...

Spoiler:

por Invitado Sáb Jul 02, 2011 6:13 am

Aquel viaje seria hermoso, no por que se hubiera enterado que su padre no era su legitimo padre cambiaria las cosas, pensó en la carta de su madre en el sufrimiento que ella debió haber pasado apenas se hubiera dado cuenta que no amaba al rey… miraba ventanilla afuera y es que su reino era maravillosamente hermoso, la gente todos cariñosos, amables saludaban el coche real y hacían de su paseo increíblemente agradable, observo ventanilla afuera al joven que le acompañaba, iba en un imponente caballo negro con sus ropas holgadas y un escudo en la parte superior de su brazo era uno de los súbditos del rey, de esos que si o si hacían lo necesario para complacerlo, un caballero que pronto obtendría su titulo si hacia lo que el rey le pidiera, siempre los miro a ellos como grandes personas, incapaces de hacer daño a menos que fuera por defender su pueblo, su país, su rey… ligeramente desvió su mirada hacia la suya buscándola pero no la encontró, blancanieves sentía su mirada ausente, como si una preocupación invadiera su mente y por alguna razón no le dejara averiguar que era lo que sucedía, opto por no molestar mas ni invadir su mente así que volvió su mirada hacia el paisaje en el que sinceramente no esperaba nada, si no mas bien ser sorprendida, el coche era guiado por entre los bosques y algunas colinas, de echo se estaban apartándonos demasiado y nunca habían paseado por estos lugares, pero no había nada de que sospechar, ni temer por alguna razón confiaba en aquel caballero.

El día aun iluminaba demasiado no podrían ir tan lejos ya que volverían para cenar en palacio o si no su padre se preocuparía mucho… apoyo su cuerpo en el asiento del coche observando aquel medallón que le había regalado su madrastra. Y sonriendo lo observo un largo momento, pero de pronto el coche se detuvo y muy emocionada pregunto – ¿Llegamos?- arreglando su abrigo para salir el caballero que la había acompañado abría la puertecilla de su coche dándole la mano caballerosamente para ayudarle a bajar-muchas gracias joven, me temo que no se su nombre… mil disculpas debería saberlo… -susurra con una delicada y suave sonrisa mientras se inclina ante el y este con una mirada confusa responde rígidamente- mi nombre es Gael princesa… - blancanieves repitió su nombre varias veces seguidas por que tenia la costumbre de repetirlos para poderlos memorizar, mientras corría bosque adentro, algo le pareció extraño, era un bosque muy desconocido y a decir verdad casi inexistente, tenia unos árboles de tamaño monumental y cada uno decía cosas diferentes, o al menos eso le daba la impresión. Corría dejando que le siguieran el paso dejando al caballero atrás hasta que se encontró con un río, no muy lejos de ahí.

"Jugaba con el agua cuando de pronto algo le dijo que debía voltearse y se hallo con una escena terrorífica, el caballero con la espada en sus manos y a punto de llevarla hacia mi, no en una forma que pudiera mostrármela si no… para hacerme daño… abrí los ojos y de manera instintiva retrocedí… me mataría… ¿Por qué?¿por que aquel joven de bello semblante y armadura quería hacer algo tan malvado?"

-no puedo… perdóneme usted no se merece esto- susurro mientras Blancanieves se hacia ovillo del miedo y terror que había sentido una amenaza tan real, había visto a pocos centímetros un arma que nunca pensaría que seria amenazada, observo al joven y al escucharle decir su no puedo le miro mientras el dejaba caer la espada y se hincaba a sus pies pidiéndole perdón –princesa, huya… aquí no será feliz, huya fui mandado por su padre a tomar su vida y llevar una prueba de ello, cazare algo por ahí y le arrancare su corazón pero usted debe huir muy lejos de aquí… hágalo… por favor… se corre el rumor de que el rey posee poderes sobrenaturales, y puede usarlos para saber si realmente la mate… por eso debe huir y no volver… - aquel joven acaricio su mejilla y blancanieves asintió sin decir una palabra corriendo lo mas que podía, con pánico y tristeza, su padre la había mandado a matar… ahora solo le quedaba huir y encontrar algún lugar donde refugiarse por que caía la noche…

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