Emeline A. Bellarose

-Descripción Psicológica: Emeline, solía caracterizarse por ser una chica alegre, entusiasta y con muchísimas ganas de emprender su labor de cazadora con el fin de seguir la tradición de su familia materna, la cual llevaba haciéndolo desde hacía generaciones atrás. Era de esas chicas que siempre se esforzaba, aunque solo lo necesario porque en general tendía a darle cierta pereza algunas cosas, y aquellas cosas generalmente eran solucionadas por el esfuerzo de su hermano mayor. Era romántica, soñadora y dulce: una chica como cualquier otra de su edad.
Pero a la edad de quince años, todo cambió ya que se volvió una chica sumamente obsesiva, de aquellas que se esfuerzan al límite de su capacidad. Se volvió una chica muy seria, la cual casi nunca hablaba con los demás; aunque poco a poco intentó ir cambiando aquello, sin tener demasiado resultado.
Es una chica que no le gusta ser el centro de atención, odia los trabajos en equipo y prefiere moverse sola arriesgándose a sí misma. No le gusta poner en peligro a las personas que le importan, y trata de mantenerlos a salvo siempre que puede. No soporta las mentiras, los engaños. Por esa razón es de aquellas mujeres que no duda en ser frente a las injusticias. Ni tampoco a dar su opinión.
No es muy analítica que digamos, y tiende a guiarse por corazonadas. Prefiere actuar de inmediato antes de que algo malo pudiese llegar a ocurrir. Sin embargo, cuando se trata de admitir sus verdaderos sentimientos, es una chica un poco cerrada ya que le cuesta admitir lo que siente a la primera, y es capaz de reprimir sus sentimientos por demasiado tiempo.

Era el año 1777, su padre era un hombre heredero de la fortuna que su tío planeaba dejarle cuando muriese, pues éste no había podido tener hijos y su padre era el único sobrino hombre que tenía (aunque quizás nunca en su sano juicio hubiese decidido por voluntad propia heredarle todo a él, sabiendo que este ponía poco empeño a sus estudios y desperdiciaba su tiempo en peleas callejeras), a pesar de que él tenía varias hermanas pequeñas. Si fue cierto, que su padre le llevó grandes disgustos a su tío, y por esa razón un buen día éste se hartó y decidió enviarlo con unos parientes que tenía en el campo. Allí, alejado de todo lo que estaba acostumbrado, su padre conoció a una joven mujer totalmente diferente al resto de las que solía conocer: se trataba de una joven independiente, orgullosa y por sobretodo muy testaruda; era de esas mujeres que no temía a hacer valer sus ideas, expresaba sus pensamientos con total convicción, y quizás fue aquello lo que más cautivó a su padre de esa mujer.
Naturalmente, al principio tuvieron una pésima relación, pues nunca ninguno de los dos quería dar el brazo a toser. Sin embargo, a pesar de que poco a poco fueron enamorándose estor no hizo que todo fuese fácil para ellos. Existió un enorme problema entre la relación de ambos, que les hizo atravesar una gran desaventura: un joven noble, estaba empecinado en proponerle matrimonio a la joven adolescente; y a pesar de que ella se negó en sus buenos modales, tanto el noble como su propia madre querían insistir en que ella aceptara la propuesta, puesto que sería la solución a todos los problemas económicos que estaban atravesando. Su padre quiso proponerle matrimonio a la mujer, y fue a pedirle consentimiento a su tío. El tío de su padre, desdichado por la absurda idea de que su padre quisiera casarse con una mujer de bajo nivel, llevó a la única opción que les quedaba: la de escaparse juntos, y se fueron un expreso intentando salir de Francia hacia España. Sin embargo, en el camino, la joven leyó una nota que su padre traía en la cartera, donde explicaba varias razones por las que él tenía que heredar la fortuna de su tío: su familia, estaba atravesando un mal momento, casi tal y como la de ella; y sus hermanas dependían pura y exclusivamente de él, así como ella dependía también. Fue por esa razón, que la mujer decidió dejar a su padre, porque su corazón era demasiado bueno como para permitir que la familia de él sufriese y quedase en la miseria por culpa de ella.
Descorazonado, su padre no tuvo otro motivo más por el cual aceptar el compromiso que su padre le propuso con una joven doncella de alta sociedad; y luego de que se casaron decidió (sin preguntarle si quiera a su mujer) que su primera hija iba a llamarse igual que aquella joven que lo ‘hechizó’ (no literalmente): Emeline.
Emeline Alexandrie Bellarose, nace siendo la segunda hija del matrimonio y la primera mujer del mismo. Su nacimiento, a diferencia del de su hermano no fue para nada planeado, pero la recibieron con los brazos abiertos. Por parte de su madre, quien desde hacía generaciones que se dedicaban a la cacería de demonios, vampiros, o cualquier cosa sobrenatural; Emeline comenzó sus entrenamientos a la edad de doce años junto con su hermano mayor. Se puede decir, que desde pequeños, ella y su hermano han sido prácticamente inseparables: donde iba uno estaba el otro y viceversa. Sin embargo, en la primera caza en la que Emeline participó, ocurrió un hecho infortunio, en donde su hermano fallece intentando protegerla. El ser que los atacó, desapareció en el momento que ella estaba dispuesta a emprender batalla, y no ha vuelto a verle desde entonces, aunque es capaz de reconocer al asesino de su hermano en cualquier sitio. Desde entonces, Emeline está en la búsqueda de aquel ser que la separó de su hermano mayor, y se ha centrado completamente en su quehacer de Cazadora, intentando mantener a salvo a los miembros de su familia que aún quedan con vida.