Bianca De Montblanc

Ilusión:
Capacidad para alterar la relativamente la realidad por medio de alguna ilusión, algo no real para confundir a las personas.
Encandilamiento:
Esta habilidad hace que cualquier persona se sienta atraída ya sea físicamente o de cualquier otra manera a la persona poseedora del poder.
Dominación:
Capacidad para controlar la voluntad de otro mortal



Descripcion Fisica:

Bianca:

Bianca es una joven dulce, simpática y pero algo tímida al conocer a gente nueva. La encanta estar rodeada de amigos con los que poder charlar, reír, disfrutar de la vida. Es bastante abierta y extrovertida cuando coge un poco de confianza. Pero si la enfadan, sacará todo su genio y carácter sin importarla la posición o condición de su adversario.
Tiene un toque infantil que la hace disfrutar de cosas que a ciertas edades resulta casi imposible, pasar tiempo en la naturaleza es uno de sus mayores caprichos. Dejando ese aspecto de su personalidad a un lado, es muy madura y considera mucho más apetecible la compañía de alguien mayor que ella, que la de alguien más joven.
En terreno amoroso los hombres mayores que ella, varoniles, son su debilidad, la encantan, el juego de la seducción es para ella uno de los placeres de la vida y no se resiste a él a no ser que su corazón sea ocupado por alguien, al que será fiel y leal siempre que reciba lo mismo a cambio.

Nació hace 22 en París, en un palacete a las afueras de la ciudad. Durante toda su infancia recibió lecciones de piano, baile e incuso algo de canto. Fue educada por las mejores institutrices de la capital francesa. Aunque era algo revoltosa y en más de una ocasión trató de escapar a sus clases escondiéndose en algún recoveco del enorme jardín de su casa, lo cierto es que disfrutaba aprendiendo cosas nuevas y ponía máxima atención en cada una de las explicaciones que sus tutores le daban. Por ello con los años Bianca se fue convirtiendo de la perfecta dama de clase alta de cara a la galería, refinada y educada. Pero su interior era totalmente distinto dejando salir cuando se encuentra confiada a la verdadera Bianca, despierta y vivaracha.

La magia ha formado parte de su vida desde que nació, lo heredó de su madre y fue esta quien la enseño todo lo que sabía de ella. Bianca disfruta siendo lo que es y lo aprovecha al máximo pero sin olvidarse de que en la sociedad en la que vive no está bien visto y es incluso temido y odiado.

De niña nunca la dijeron donde estaba su padre o simplemente de quien se trataba, era un tema tabú que con los años aprendió a aceptar. Hasta que hace dos años llegó una carta para su madre que descubrió una realidad que superaba a las cavilaciones de Bianca. Su madre en uno de sus viajes había ido a parar a Rumanía, donde conoció un hombre, ambos se enamoraron profundamente pero él estaba casado por lo que tuvieron que llevar una relación en secreto durante algún tiempo, hasta que su madre quedó en estado. Fue entonces cuando él la confesó que se trataba del Conde de Rumanía y no podía dejar su país por ella, cada mes le mandó a su madre una jugosa cantidad de dinero para poder mantenerse con facilidad y proporcionarla todas las comodidades que fueran posibles para ella y Bianca.

El condado debía ser heredado por un hijo del conde pero fue imposible engendrar hijos dentro del matrimonio, por lo que recurrió a la que sabía había recibido la misma sino mejor educación de lo que hubieran hecho sus hijos legítimos, Bianca.

Bianca tuvo que partir, junto a su madre hacia Rumanía, al saber de la muerte de la mujer del conde y la enfermedad avanzada de este debido a la gota. Allí se firmaron todos los papeles que concedieron de la noche a la mañana a Bianca el control de un condado. El conde no pudo prestar mucha atención a la hija que acababa de conocer debido a los dolores que le producía su enfermedad pero accedió conforme a que toda su fortuna pasara a sus manos. Su madre y ella se quedaron allí un año hasta que esta falleció y fue enterrada junto al conde. Fue entonces cuando Bianca decidió dejar al cargo del condado a una persona de confianza y volver a su hogar, a Paris.