Ficha de Alexandra

Nombre: Alexandra Jovivich

Edad: 28 años

Especie: Cambia formas canino

Tipo y clase: clase media

Orientación sexual: Heterosexual

Habilidad/poder: Gran fuerza, enorme resistencia a los golpes directos, pero poca agilidad y menos velocidad al correr.

Lugar de origen: Ucrania

Descripción física:
Mi pelo es castaño reñido con el rubio que destaca cuando la luz alumbra mi rostro. Mis ojos son marrones; hay quien dice que en ello solo se ve la desconfianza de ese animal salvaje que hay en mi interior pero en mi opinión están equivocados. Poseo una sonrisa capaz de enamorar a cuál joven se proponga en mis deseos. Mi tez es bastante pálida aunque no en exceso, ya que no me gusta demasiado tomar el sol.
Tengo una altura es de un metro sesenta y mi cuerpo es delgado con alguna curva que realzan mi belleza. Me gusta vestir con ropa cómoda, ligera y no muy ajustada solo lo necesaria y el cuero es el tejido destacado de mi armario.
Parezco frágil aunque se cuidarme sola, ya que se defenderme y cuidar de mi misma. Cuando me transformo soy un enorme lobo de pelaje gris y blanco y unos dientes bastante afilados por si me hacen faltan. O un perro que pase desapercibido ante cualquier mirada indeseada ante el posible descubrimiento de mi presencia.

Descripción sicológica:
Soy una persona muy instintiva ya que mi crianza no fie la normal, Aprendí a conocer a la gente con tal solo mirarla tal como lo hacían los animales que llevo en mi interior. Por ello soy desconfiada ya que eso me hizo ver que la gente no sabia confiar en los demás ni tampoco ser verdaderamente sinceros.
Aparte de desconfiada me guio bastante por los olores y por el tono de las voces. No me gusta meterme en problemas ajenos pero cuando son mis problemas me gusta solucionarlos a mi modo y ya de paso demostrar mi valía antes los demás.
Protejo a los míos, y mi agresividad suele venir regida con el rugido ardiente de las bestias de mi interior. Pero no soy toda agresividad cuando llegas a ser de confianza puedo llegar a ser muy amable y buena. No suelo ver el gris de las cosas solo el blanco y el negro de las situación

Historia:
Naci en Ucrania, con una familia honrada y la verdad no herramos pobres sino todo lo contrario, estábamos bastante adinerados. Me parece que todo empezó cuando tenía catorce años. Recuerdo que empezaba a sentir cosas extrañas y a tener sueños en los que corría como un lobo. Un día no tuve uno de esos sueños sino una pesadilla normal de una chica. Mi madre, fue a mi dormitorio a despertarme debido a los gritos. Se acerco a mi y me cogió de los brazos pero yo estaba alterada y muy asustada y debido a eso me trasforme en un lobo. No sabia como manejar aquel ser y debido a todo eso le mordí brutalmente.
Cuando me di cuenta de que era ella volví a cambiar y grite. Mi padre y mi hermana mayor vinieron. La escena no era muy agradable todo estaba lleno de sangre. Mi padre se asunto y para encubrir el asesinato la llevo a un bosque cercano y la dejo ahí. Después recogimos la sangre y empezaron las preguntas. Las heridas no eran las que podía hacer una cría de cuatro años. A partir de entonces empecé a intentar controlarlo y poco a poco lo fui consiguiendo.
Nada volvió a ser lo mismo, mi padre me tenia miedo y cuando cumplí la edad de dieciséis años decidí irme de casa ya no podía seguir allí.
Sobreviví bien debido a que había cogido bastante dinero que mis padres guardaban. Poco a poco fui criándome y sobreviviendo. Hubo una temporada que por las noches me transformaba en perro e iba a estar con un hombre ajeno a mi existencia humana. Estuve con el hasta que llegue a perder la existencia de mi ser ya llegarme a preguntar si esa vida era o no la real. Llegue a creerme que mi verdadera forma era perruna y entonces decidí irme de allí y dejar el que había sido mi dueño, con unos veinte tres años.
Decidí empezar a trabajar en alguna cosilla y no he tenido muchos problemas o al menos no hasta que me hablaron de mi hermana y de su muerte. Alguien me había descubierto, y no podía quedarme en ese lugar, por ello decidí irme a Paris un lugar donde no me encontrarían y donde podría dejar parte de mi pasado sin meter en la maleta y empezar de cerro. Además mis padres tenían una casa ya pagada allí y por lo tanto tenia un lugar donde quedarme.

Otros datos:
No me gusta las concentraciones de gente.
No me gusta que me levante la voz.