Ficha de Hetaira

-Nombre del Personaje: Hetaira Delanoue
-Edad: 23
-Especie: Humana
-Tipo y Clase Social: Cortesana de clase media
-Orientación Sexual: Bisexual
-Lugar de Origen: París
-Descripción Física: Joven y de esbelta figura. Aun de ser de clase media baja, tanto su piel como sus cabellos están siempre limpios y bien cuidados. Su cabellos de negro carbón da ligeros brillos a las luz del sol abrasador o de la tenebrosa luna, casi siempre peinado con un rápido recogido que deja más cabellera suelta que atada, dándole un aspecto más informal y agresivo. Mide 1.75. Su piel se mantiene blanca por su vida nocturna, a excepción de pequeñas marcas de guerra de cuando era más joven. Labios rojo oscuro, y unos ojos verdes olivo crea una hermosa imagen en su rostro. En su cuerpo se pueden notar las marcas de algunos huesos que sobresalen de la lisa piel. Sus caderas anchas crean un vaivén al andar cautivador.
-Descripción Psicológica: Observadora, inteligente, picara, manipuladora, coqueta, frívola. Tanto son los adjetivos para describirla que podrían pasarse horas así. Pero lo primero que busca esta joven es su bienestar. Por fuera muestra una sonrisa en sus labios de carmín, pero tras sus palabras de dulzura puede sacarte casi cualquier información o sino alguna de sus cortesanas. Normalmente muestra un carácter alegre y seguro. Le da bastante igual las clases sociales y lo que comenten de ella, pero es destacada por saber siempre la vida de los demás y de vender esa información. Si necesitas algo ve a ella, te hará un buen precio. Parece que le divierte el saber la vida de otras personas, aunque no suele meterse en ellas. Se le da muy bien hacer negocios pues siempre tiene en cuenta las posibilidades y los contratiempos.
-Historia:
Nació en París, en los barrios bajos detrás de una taberna. Su madre no era más que otra existencia sin sentido que apenas ganaba dinero para comer. Cuando nació Hetaira apenas tenía los dieciocho, y una joven sin experiencia y que se veía obligada a trabajar en la prostitución no era el mejor ambiente familiar. La joven Hetaira creció en la cocina de una vieja casa de madera casi podrida, que congelaba la respiración y el suelo de tierra se tapaba disimuladamente con alfombras rasgadas y sucias. Día tras día, hasta donde le alcanzaba la mente, había visto cientos de hombres entrando en aquella casa y encerrándose con su madre en su habitación, cosa que Hetaira no consigue comprender hasta poco más adelante. A la corta edad de cinco años, su madre ya la veía preparada para pasar las tardes fuera de casa, intentando hacerla huir de aquel infierno. Hetaira, tras ser rechazada por el resto de niñas, tanto por su aspecto y forma de ser como por el trabajo de su madre, decidió unirse al grupo de los chicos, que la echaron por ser mujer. Ese día al llegar a casa, cogió las viejas y oxidadas tijeras de la cocina, y se cortó la melena hasta que no podía coger más pelo. Los niños la aceptaron sin saber que era una chica, y le enseñaron a sobrevivir en las humeantes calles, con robos y estafas y se creó un carácter fuerte, superviviente y desconfiado. También tenía la habilidad de escuchar, de escuchar conversaciones ajenas casi sin darse cuenta y poder sacar información importante, cosa con la que aprendió el arte del chantaje. A los 12 años, la joven ya era bastante conocida. Era un vándalo, aun muchos pensaban que era chico, con una pandilla organizada, sin miedo, y los comerciantes preferían llevarse bien con ellos. Por otro lado la joven ganaba bastante dinero con el chantaje; infidelidades, pecados, asesinatos. La joven sabía muchas cosas que era mejor permanecer en la sombra, y por su silencio le pagaba bastante bien.
Poco después, su madre muere de tuberculosis. Apenas aguanto unos meses con el dinero ahorrado. Además su cuerpo empezaba a cambiar para transformándose en una mujer, por lo que dejo la pandilla. Un “amigo” de su madre, le ofreció trabajo como chica de compañía, y Hetaira que siempre había tenido el sexo como algo muy común en su vida, acepto. El trabajo no le pareció tan deprimente como decía su madre. La vergüenza de ser cortesana no estaba presente en ella, por lo tanto aquello era un trabajo como otro cualquiera. Pero aún mejor, descubrió que en la cama, los hombres se volvían débiles, que podía manipularlos a su beneficencia. Curas, condes, panaderos, joyeros… tantos eran y tan variados, y cada uno con secretos inconfesables que la joven le sacaba con vino e incienso de opio. En poco tiempo empezó a ser buscada por algunas personas, para que les contase todo lo que sabía sobre algunos de sus “enemigos”, lo que ella contaba por una buena suma de dinero. A los 16 su fama era considerable. Sus ingresos son regulares y sustanciosos. Dejo el antro donde trabajaba para formar su propio burdel, donde la diversión, alcohol y secretos pasan de unas bocas a otras hasta acabar en la suya.
-Datos Extras:
Aun de ser de clase media baja le gusta vestir con vestido, aunque los decoras de forma que se vea clara su profesión.
No se comporta en absoluto como una prostituta de cabeza baja. Ella va con la cabeza erguida, segura de sí misma
Es capaz de saber más de tu vida que tú mismo
Tras andar con tanta información en sus manos, ha conseguido numerosos protectores, que la defiende de cualquiera que la amenace
Adora los complementos, sobre todo los collares y pulseras que lleva a montones aun de ser claramente de mala calidad.
A veces le llega la noticia de que alguno de sus clientes no es humano. Si consigue un buen trato, lo droga y lo vende a algún cazador.
Por los años pasados en la calle sabe un poco de lucha, aunque si se encuentra en peligro utiliza el arma que lleva en el ligero

Ya me he registrado en todo ^^