¿Mamá? (Mar Estanyol)

por Invitado Sáb Oct 01, 2011 4:56 pm

-Emocionado el pequeño Badou, salto de la cama dándose un respingo que le sacudió hasta el sistema nervioso, la razón bien simple, después de tanto tiempo su quería Atriella le había comprado ropa, tanta era la emoción del cachorro, que tomo un baño, muy a su pesar de que el agua no era su mejor aliado. Pero cuando vistió y arreglo no había nadie en esa magna casa que le halagara, seguro que su hermana mayor había salido y a su mentor lo veía hasta la noche, eso si no tenía nada que hacer.

Se miró repetidas veces al espejo, admirándose, el parecía tanto a esos chicos que miraba en las calles parisina, esos mismos que le molestaban por su aspecto, sonrío y salió de la casa, atravesando el umbral que estaba decorada de flores, cogió una y la llevo a sus fosas nasales hundiendo su nariz en ella, lo que le hizo estornudar y dejarla.

Tenía un poco de francos en el bolso, pero no le apetecía comprar nada, desde que salió de esa jaula para la vida ‘civilizada’; camino por alrededor, buscando algo interesante estrenándose como residente parisino.

Ladeo el rostro cuando observo a una mujer que era forcejada del brazo por un señor insistente, la mujer estaba mirando a todas partes, pero ella no parecía la esposa, aunque era bonita, le recordaba a las mujeres que observaba en la calle con finas ropas, el tipo tenía un rostro que no le gustaba. Se dirigió ahí, porque ella gritaba que le hacía daño y nadie de las personas se dignaba a ayudarle.

Su olfato, su intuición le decía que ese tipo no era de fiar, así que se puso casi frente a mujer, mirando al hombre, si bien las palabras de Badou no iban a ser las correctas pero esperaban que ayudaran – Mamá ¿Este es mi nuevo padre? – sonrío al hombre cariñosamente, si, a pesar de la edad del cachorro este lucia como un niño pequeño. - ¿Mamá? – pregunto el hombre mirando con desconcierto a la mujer, lo que hizo que saliera de la escena, mirando a Badou – Papá, ¿Ya te vas? – sonrío despidiéndole con la manita. Después dirigió sus orbes a la chica. – Perdóname, este truco lo aprendí de mi hermana mayor, ¿Estas mejor? – ladeo la cabeza dirigiéndose de manera dulce.

por **Mar Santini** Mar Oct 04, 2011 2:51 pm

*Maldijo bajo su respiracion cuando aquel hombre se le habia acercado ¿porque tenia esa maldicion? los hombres le acosaban fuera donde fuese y cierto era que vivia de ellos pero no de los pobres que querian un momento de placer y no tenian ni dinero, sino que ella vivia de los ricos o de clase media que podían permitirse esos lujos también era su ropa, constaba de una camisa ancha hasta los muslos y una falda corta que dejaba expuestas sus piernas asi como un escote que aun cuando no era del todo generoso dejaba poco a la imaginación, de todos modos ella siempre vestía de una manera que para las mujeres decentes de Paris siempre se consideraba el colmo de la indecencia.

No pudo sino responder al forcejeo con la respiracion agitada intentando alejar al hombre, quedándose de piedra al escuchar la voz de alguien que le llamaba mama, los labios de mar deletrearon esa palabra sin llegar a pronunciarla en alto pero habia algo en la postura del chico que parecia decirle ' sigueme la corriente ' y eso hizo porque nada mas mirar el hombre al niño y despues a la madre se alejó como si quisiera recorrer todo Paris con sus pies, lo que hizo que una sonrisa se viera más calmada mirando al pequeño* No tienes que pedirme perdon, es más creo que sea mas eficiente pedir yo disculpas y darte las gracias por todo

*Cuando escucho lo de su hermana salio una risa* Tu hermana es lista ¿habeis conseguido mucho utilizando ese truco? *curiosa sonrio besando la mejilla de su pequeño héroe mientras le dedicaba una sonrisa dulce* Perdon *rie* una vez más creo que metí la pata *se incorporó con algo de teatralidad y extendio la mano* me llamo mar estanyol, como indica mi cabello no soy de Paris sino una extranjera y supongo que ya sabes tambien el oficio al que me dedico *Pero en vez de decir lo ultimo con verguenza lo dijo casual, ella no se arrepentia del oficio porque despues de todo le habia dado la vida de pequeña cuando su madre conseguia dinero gracias a la prostitucion y de mayor cuando ella gracias a la prostitucion conseguia tambien comer, le debia bastante a este campo que muchos maltrataban con mentiras o juicios acelerados y nunca pensaba que era vergonzoso depende claro esta de las mujeres o el fisico o como se presentaran ellas*

Ven...vamos de aqui *Vió de lejos un gruo de hombres que intentaban molestar a las personas, tomó al muchacho del brazo alentándolo a que marchasen a otro sitio lejos de la vista de aquellos hombres, eran los ricos, aquellos que paseaban tomando todo destrozándolo y despues dejando unos cuantos francos a las personas incluso menos que un franco eran a veces monedas falsas que traían mas problemas que solucionaban*

por Invitado Jue Oct 06, 2011 1:29 am

Después de la cómica comedia que Badou admiro, no supo que más decir, es que él tenía poco en parís, apenas había librado una gran batalla a manos de su cruel amo, el encuentro con su hermana mayor y la vida que llevaba junto a Spencer su primer amigo después de su cautiverio.

Observo a la mujer que agradecidamente se presentaba, ah, si tal como su mentor le estaba enseñando, pero apenas recordaba los buenos modales – Me llamo Badou –dijo contento con una sonrisa angelical. – Si, mi hermana es muy inteligente – añadió recordando aquellas veces que salvaba al pequeño cachorro, sin embargo no dijo más. Cuando aquella mujer le observo y beso de esa manera casi maternal. ¿Qué clase de trabajo tendría? Pregunto Badou a sus adentros, llevándose un dedo a los labios con una señal de duda evidente.

-No sé a qué se refiere con que ya se en que trabaja –Bajo la cabeza apenando, pensando que de inteligente no tenía nada, pues a pesar de todo era nuevo en el mundo humano, no sabía cómo es que la gente tenía que trabajar para ganarse algo pero recordaba a su amo que siempre le amenazaba diciéndole si no te portas bien, no habrá comida hoy Badou… si seguramente él no era muy inteligente. Casi se sintió triste de pronto, era cierto tenía mucha inocencia. Escucho el nombre de la mujer… y sonrío – ¿Mar?, ¿Cómo el chaco grande que hay en donde están los barcos? –Ladeo el rostro mirándole curioso.

Pero de pronto fue arrastrado y si, su instinto le decía que el miedo abundaba en la ciudad, había mucho peligro a Badou eso no le gustaba, por instantes quería regresar a su jaula y no salir nunca más, pero seguro que extrañaría a Spencer, a su hermana mayor Atriella, a la mujer vampiro, a su mentor Daniil, no, no, a Alexandra, y a su nueva amiga Mar, se rasco la cabecita mirando el suelo mientras era arrastrado por la mujer. – A ¿Dónde me llevas Mar? – soltó con un tono apenas audible.

por **Mar Santini** Dom Oct 16, 2011 7:19 am

*Una carcajada sonora salió de sus labios. La gente siempre habia pensado eso pero nadie se lo habia dicho* en efecto, como el gran charco grande donde estan todos los barcos pero como ves yo no soy tan grande *Cariñosa paseo los dedos en los cabellos de aquel muchacho, ¿de verdad era tan inocente? casi le apenaba decir en que trabajaba pero le apenaba mas que nada por si su comportamiento luego se veia afectado al enterarse de quien era ella, una cortesana de lujo pero seguia siendo una cortesana aunque no estuviera en el burdel*

A un lugar seguro quiero invitarte a comer algo ¿Tienes hambre? los chicos como tu siempre tienen hambre *Le gustaba hablar, era parlanchina cuando le agradaba alguien pero eso era especial ya que el silencio siempre mantenia sus labios sellados en mas de una ocasión, era evidente que aquellos hombres no tendrian tanto respeto por mar como lo habia tenido aquel hombre que se habia asustado al ser llamado papá de seguro estos empezarian a reirse y a asentir diciendo que harian cosas de adultos con su 'mamá'* Mira ahi esta

*Señaló un lugar que parecia desierto, destartalado pero cuando se acercó un poco más un rico aroma era perceptible, ella siempre que huia por los callejones sabia a donde salir, bueno no siempre porque habia sido una cria de primeras cuando llego recorriendo ese laberinto que suponia donde se encontraban, lo odiaba, el hecho de cuando creias tener la salida te encontrabas de bruces con otro callejon y asi hasta que por un golpe de suerte sales a donde hay gente y ya te vas dando cuenta de todos los caminos. Un mechón rebelde paseo por la mejilla de mar quien tenia aferrada la mano del pequeño gran hombrecito - y su nuevo amigo- guiándole hacia una cantina que habia encontrado semanas atrás, no habia podido compartir con nadie lo que habia encontrado sintiendo ese orgullo por enseñarle que habia encontrado*

¿A que es perfecto? *Rió de nuevo, era acogedor porque el interior no tenia nada que ver con el exterior, el cartel lleno de polvo que señalaba aquel bar como "el paraiso de la carne", hacia unos bocadillos de carne realmente buenos era cierto que no podia permitirse venir mucho por alli porque su figura sino se empezaria a resentir y como trabajaba para los hombres no creía que tuviese muchos clientes cogiendo un par de buenos kilos* ¡ Frederick ! pon unos cuantos bocaditos por aqui hoy vengo acompañada *Un hombre de dientes caidos sonrió tanto a mar como a su acompañante hechando mas carne a la sartén*

por Invitado Jue Nov 10, 2011 5:41 pm

El cachorro empezó a reírse despacito. – Claro, no eres un charco – le miro con detenimiento aun pensando en esa pregunta, pero ¿Cómo iba a saber Badou de que trabajaba ella?, que misterios los de ese mundo nuevo que él descubría, apenas empezaba a recibir lecciones para su educación, apenas había descubierto quien era, y de que raza era, de nuevo su libertad tras los barrotes de su jaula, tras perder a su hermana y emprender un viaje solito, cuando muchos hombres y niños le maltrataban en su vida como perro.

Se había hecho de amigos apenas llegado a parís, estaba Spencer, su profesor y mentor Daniil, su hermana, había mucha gente que ya lo quería pero había mucha más que lo detestaba, pobre Badou aún no sabía lo que estar en parís le depararía y ahora estaba la bonita Mar, a la que llamaba mamá y a esa invitación grito con entusiasmo - ¡SI! Vamos a comer – le abrazo como un niño pequeño cuando se le da un caramelo.

-¡JO! – expreso el joven Badou cuando entraron aunque su olfato agudo le permitió recordar ese olor que su antiguo amo tenía, ese mismo que algunos bebían, no dejo de mirar el establecimiento de todo a todo embobado, entusiasmado, ese olor le recordaba los buenos tiempos cuando su amo le abrazaba pero después cuando su cara toda roja se ponía no le gustaba, aun así ahora estaba limpio tenía una casa y estaba con Mar. – Me gusta mucho aquí, hay mucha gente y huele como mi antiguo amo, me recuerda cuando me abrazaba – comento al acercarse a ella.

Y de pronto el aroma a carne hizo que el estómago del cachorro gruñera – gracias Mamá, creo que si tengo mucha hambre – dijo sin pensar en sus palabras mientras ella le hablaba al hombre que echaba la carne, sentándose en un taburete, ahí quietecillo viendo la preparación.

por **Mar Santini** Jue Nov 17, 2011 2:19 pm

~*~ Frederick - ¿Tenias un mozo contigo? quien te ha visto y quien te va

*Ella rió a carcajadas al escuchar a ese chico, era simpático y se encontraba de buen humor, demasiado para desperdiciarlo en pensar que habia perdido un día de compras o busqueda de cliente. Una dama no debia de reir de ese modo pero ella no era precisamente una dama, colocó los codos en la mesa acariciandole los cabellos a ese muchacho que tanto le hacia reir ¿mama? bueno ella no tenia el cuerpo de una madre pero tampoco habia recibido ninguna de las llamadas biológicas que se supone las mujeres debian de sentir y esas chorradas que casi todas las prostitutas contaban* Come todo lo que quieras que hoy invito yo

*Frederick se acercó a badou y le coloco unos buenos pedazos de carne* aprovecha que no suelo ser tan generosa *Frederick rió de nuevo, tenia razon ella era muy privada con lo suyo, lo que era suyo no se lo quitaba nadie ni siquiera sus amigos porque tenia ese instinto de supervivencia mas propio de los animales que de humanos que la mantenian siempre al margen de compartir sus cosas, cuando otro plato llego para ella junto con unas bebidas le dió las gracias pidiendo una ración de carne a la plancha y patatas con algo de pan caliente. Ella odiaba el pescado, le gustaba mas la carne y tambien las verduras pero si habia algo que mas le gustaba era el pan caliente, sabía demasiado bien al paladar, se le hizo la boca agua dandole un codazo de poca fuerza a badou*

Tienes que probar el pan recien hecho de aquí, woah está delicioso una vez lo probe y cada que vengo parece que me como dos kilos de pan *bromeó con la cantidad mientras daba un trago considerable a su refresco, ella no era una dama dama, incluso frederick le dijo que asi la preferia porque las señoritingas ahi no tenian cabida, miró con cariño hacia el muchacho preguntandose la edad que tendria y en cuanto le superaba mar para que le llamase mama* si quieres *dijo bajito* puedo ser tu madre durante un dia ¿que te parece? *pensó sus palabras, las medito y algo le decia que seria tambien onteresante gastar su dinero en alguien más que no fuera ella misma*

por Invitado Jue Dic 22, 2011 2:15 pm

Observo la carne, que decir, Badou no tenía modales, no sabía que era eso, apenas sabía que era una mamá y un papá y también la familia, se dejaba llevar por extraños, pero según su instinto Mar era buena y aunque no lo fuera el sabría como salir, se rasco la nariz por el fuerte olor le gustaba tanto como se veía de jugosa la carne y como emanaba tan ricos jugos, se le hizo agua la boca y comenzó a masticar la carne manchándose la boca y dedos, parecía un niño pequeño, pero es que con la mano sabía mejor que con esos artefactos que ponían a un lado del plato, - Gracias – dijo con la boca llena un sonido apenas audible y miro al encargado que se sorprendía del apetito de Badou, le sonrió tiernamente y se quito la cara de expectación que poseía.

Mamá por un día Mar le gustaba a Badou, su sonrisa le gustaba y sus cabellos, era como las muñecas de la casa donde vivía, se parecía mucho, sí, quizá eso era Mar, una muñequita viva, tan bonita según sus ojos - ¿Y porque no mi mamá para siempre? – dijo tragando el bocado, cuando su olfato se deleito con el pan recién salidito, tomo el primero, casi se quema, pero le gustaba el olor y seguro que el sabor era muchísimo mejor, lo abría y empezó a reír a carcajadas – Mira, Mar, mira, que es eso que le sale – se refería al humo, pero el cachorro hacía un escandalo hasta por la mosca se paraba y limpiaba sus patitas sobre su nariz – Lo comeré – trato de comer el vapor que salía, pero le era imposible y solo la risa de aquel señor le hizo detenerse – no puedo – murmuro bajito y le dio una probada al pan, estaba exquisito, demasiado – Que rico – volvió a hablar con la boca llena, mientras masticaba lentamente y tomaba otro, abriéndolo y viendo el humo.

De pronto se acordó de los francos que traía, aunque el eran como piedritas planas y no sabía para que usarlas - ¿Para que es esto? – murmuro dejándolos caer donde Mar.

por **Mar Santini** Lun Ene 09, 2012 4:50 pm

¿Por siempre? *Seguia riendo, ese chico era muy adorable suficiente como para que el instinto maternal de Mar saliera a la luz, asi que se vió { y sorprendió } pensando en eso ¿porque no adoptarle como suyo? pero la respuesta era evidente porque ela para comer o para tener sus lujos debia de abrirse de piernas y eso no seria un espectáculo muy formal o educado para alguien tan joven pero al verle tan contento ella solo asintio* esta bien pequeño puedes llamarme mama siempre que quieras voy a ser tu madre * le despeinó cariñosamente aunque las mujeres debian de mantenerse siempre educadas pero Mar era lo que se conocia una mujer indecente que no temia actuar como un hombre en muchas ocasiones*

A ver ¿esto? *rie al ver lo que tenia* esto es muy importante cariño los hombres matarían por uno de estos * ella habria podido ser una ladrona y mentir, decir esto no tiene importancia asi llevarse una cominision pero solo lo hacia con los borrachos y con quienes no le caia bien, era como una especie de robin hood femenino pero que en vez de darselo a los pobres lo gastaba en algun vestido nuevo porque debia de desfilar para esos hombres que querian su piel* asi que guardalos * tampoco le preocupo que los chicos lo vieran, ellos no robarian a nadie que ella conocia pero si reconocia que muchas veces se les iba la mano especialmente si alguien se portaba mal*

Otra ronda *Escucho la voz de frederick que le pedia algo de paciencia con los pedidos, tomo un buen mordisco de pan disfrutando de su sabor mientras reia,le gustaba que ese chico no tuviera modales asi no tenia que intentar ver que ella tambien los tenia, todos en esa sociedad se hacian los remilgados incluso los que todos tenian un buen trabajo y unos buenos modales, pero cuando finalmente podias era un gustazo dejar esos remilgamientos que daban dolor de espalda y poder probar un buen filete con las manos, chuparse los dedos e incluso decir al aire que estaba bien rico*

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