Con la venda en los ojos.

-Por favor, mi Amo, mi amado ruiseñor que acompaña siempre mi sueño diurno, no corte mis alas y dejeme escapar. Dejeme ser quien deseo en mis siglos de soledad. Tenga misericordia solo esta vez y vea como su ave vuela más alto que los murcielagos y los halcones; no tema por mi. Mis alas, si bien, devoradas, pueden surcar los espacios más reconditos, no tenga sus ojos sobre mi más tiempo y descanse, sabiendo que sus enseñanzas han sido provechosas para su niña...

Como acabe haciendo un monólogo ante un público mixto? Simplemente debia suplir a una compañera que debio irse por una cuestion personal...seguro le dio panico escenico de la nada. En fin, como yo me meto muy a fondo en el papel de los personajes, ademas de que la actuacion a veces es un lindo pasatiempo nocturno, acepte.
La obra era sobre una joven vampireza que es transformada y criada por un vampiro solitario y muy sobreprotector. En este momento, solo estaba ante él, pidiendole mi libertad, viendole sentado en un sillon, con un semblante de duda.

-Mi amo, mi Maestro...por favor...Puedo volar, usted sabe que si. Quienes han salido encandilados, han sido tambien alejados de mi presencia por siempre. Jamas nadie me ha tocado y ni siquiera mis labios probaron los de ningun otro ser...-camino un poco hacia atras, sentandome en un sillon, con la mano sosteniendo mi mejilla.-Padre mio, no le pido mucho. Quiero tener la libertad de conseguir mi alimento por mi misma...sentirme de verdad una vampireza y no una pobre niña que necesita que le corten su propia carne...

¿ Por que eran tan fácil de engañar?¿aún creían en la magia?.Pensaba, mientras observaba desde la zona de tribuna, una de las más alta que había en el teatro, veía el escenario que tiempo atrás pise y que ahora solo es un vago recuerdo.
Muevo mi cabeza junto a mis pupilas verdes para observar a quienes tenía a mi alrededor, un olor a perfume que se hacia casi insorpotable,cuyo aroma era tan fuerte que ante el intento por concentrarme en la posible presencia de otros como yo.Era casi nula, el perfume barato violaba mis fosas nasales y casi no distinguia lo que era un olor y otro.Estaba a punto de levantarme, la función no habia empezado, y aún estaba a timpo.Y así lo hice, me levante, algunos parecian molestos, incluso hacian comentarios por lo bajo que me eran fácil de capatar, hice caso omiso a los mismos, pues eran comentarios similares a un niño pequeño molestando mientras intentaba conseguir algo, por el mero de echo de insistir.

Me detuve frente a un joven de ropas elegantes capa de terciopelo roja, con chaqueta negra y pantalones del mismo color una camisa blanca lisa adornada con una pajarita roja, sus cabellos largos a la altura de sus hombros, donde se posaban, puntas perfectas, bajo un sombrero de copa, que no tardó en quitarse.Descubriendo al mismo tiempo su suave piel, ojos marrones, nariz pequeña y recta, y unos labios, que pedían un beso.Beso..que se ganó de mis labios.Sí imaginais bien...un beso que acabaría en muerte, su muerte que no le daría ningún dios, ni el azar.

(...)

Parecía que acababa de sentarse,suponía que había accedido por el otro lado de las escaleras,ahora en frente, pero desde la escalera se veían a la izquierda.Me mantuvo la mirada unos instantes al igual que yo lo hice, retirando la misma al ver la posivilidad de sentarme cerca de este, me sentaba o eso pretendía hacer pero parece que alguien había cogido el asiento.
Coloqué mi mano sobre quien colocaba en el reposabrazos para tomar asiento.Fije mis pupilas de manera que este no podía evitarme, sonreí.

-Os equivocais de asiento,monsieur...- dije con tono de total convicción, haciendo notable mi acento francés.Su rostro quedó paralizado, no se si por mis palabras o por el contraste de su temperatura con respecto a la mía.Creo..creo que mas bien por esa segunda opción, que la primea.No puede evitar sonreírle al terminara aquella frase.

Y que si decía lo que era, le tomarían por loco,tampoco le daría la oportunidad de difundir lo que creía.O quizás mi imaginación me llevaba a situaciones extrañas.No creo que su mente frágil, diera con tanta facilidad la solución a tan difícil ecuación.Aquella noche era fría en todo Paris, asi que no si el frio podrían dar ese tacto frio en mis manos, mi presencia no sería revelada.Y en su mente quedaría la imagen de solo el fugaz tacto de mis manos heladas, muertas.

Me senté finalmente, a su lado, con cuidado de no arrugar demasiado mi atuendo,ese vestido rojo ajustado a mi figura y justo en mis caderas una onda, que dejaba ver el resto del traje de gala que había elegido para aquella noche, cortas y largas capas que daban fin al vestido tapando mis piernas, rozando mis pieses,mis orejas adornadas con pendientes de perlas, y mi carmin rojo en mis labios, un conjunto perfecto junto a mi vestido,descando junto con mis ojos verdes, en mi pielcasi pálida sino llega a ser por la ayuda del maquillaje improvisado.

(...)

La gente comenzaba aplaudir de forma ensordecedora ¡por favor que paren!, me decia a mi misma.Mire al frente la obra comenzó y finalmente captó mi atención prestando atención en todos ellos.No podía reirme muy alto, pero en mis labios podía dibujarse de vez en cuando una sonrisa, al ver como se tragaban toda aquella comedía.

Pedía libertad por quieen parecía tenerla retenida, imploraba su libertad ¿ no lo veían?, como leí una vez en los libros, no hay mas ciego que el que no quiere ver.¿Cuando abriran sus ojos?...

Era divertido pensar que aún crellesén la trama que se interpretaba en la escena.Yo misma anelhaba estar pisando aquél escenario.¿ Seria aquella noche cuendo regresaría a los escenarios?.

-Esmeralda...deja de implorar...la decisión está tomada...Tu alma, mi pequeña, tu sangre muerta ahora, tus lagrimas tan secas como tu vientre...Ya no deben volver a salir de ti y nadie más debe volver a verte.-se puso de pie y camino despacio a mi. Aprete mis ojos pero el simplemente se quedo acariciando mi mejilla. Tuve que mirarlo más tristemente.-Esos ojos...son tan bellos y jovenes...por favor, Esmeralda...he estado en este mundo más años de los que tu crees...No hay nada en ese mundo exterior del que no puedas aprender en una biblioteca...

Tenia que retroceder y llorar. Me costo un poco pero apegandome al guion y evocando momentos tragicos para mi ser, era "pan comido"

-Porqué...? Porqué insistes en tenerme aqui?! No te das cuenta de que no quiero estar más a tu lado?! Mi cuerpo esta inerte y frio, mis ojos no beben de la luz ya más, el sol, mi antes eterno amigo, ahora es mi enemigo mortal! Cometiste un horrible error al transformarme!-luego sali de la escena corriendo y llorando.
Tras bambalinas no pude evitar reirme un poco con otros actores más mientras el hombre de escena seguia actuando.

¡oh si dramatísmo! no pude evitar reirme, que se hiciera notoria y con ello algunas miradas hacia mi persona, no contuve mi risa leve a pesar de ello.¿Pensaba intimidarme?¿Era una forma de callarme?.Fué fallido su intento, no mas, me dió ganas de reirme aún mas.Pero supe parar, no queria alborotar a las gentes.Les miraba de reojo mientras mi mano derecha se apoyaba en el reposabrazos corrspondiendo, haciendo callar mi risa y volviendo mi ateción al frente.Pero me fué interrumpida, el contacto visual fué desviadoa la misma mano que habia apoyado mientras la otra la tenía sobre mi regazo.

Él, de nuevo tocando el dorso de mi mano, y sin ser de forma accidental como la anterior, quizás quería comprobar que lo que toco no fué una mero coencidencia, o quien sabe para que fin.Muevo el cuello hacia mi izquierda observandole fijamente, haciendo un movimiento rápido y cuidadoso, para colocar mi mano sobre la de él.Entrelazando ambas manos.

-Vuestra manos...son frías...- dijo el muchacho buscando mi mirada, la cual enuentra, pues no había movido desde entoces mi pupilas para observara a otro lado.

Mientras tanto seguía oyendo aquella obra, comenzaba tonarse a una trama aún mas entretenidas- dejadme que os la caliente...-continuó hablando.Me quedé callada y solo observe, manteniendo mi seriedad.
Continuo mirandole, él enarca su ceja derecha, esperando respuesta que saliera de mis labios.
Un corto Flash en mi mente,una imagen sádica, divertiendome con su castigo, saciandome con su sangre, haciendole creer que me tenía,deshaciendose de sus harapos, confesando que lo sabe todo, que quieres ser lo que somos nosotros.

Me negué a mi misma, no pensaba dar este Don a quien me lo pidise, es mas no vería el siguiente amanecer,¡Humano inépto!.Puede que allí mismo le tomara, pero era demasiado estúpido, más si pretendía ser descubierta, pero quien sabe si esos idiotas no se lo tomarían como parte de la escena.


Cuando volvía mirar al frente, la escena diferente, ahora quien la tenia presa hizo llorar a quien tenia o eso veían los demás.Volvía mirar al chico y le sonreí mientras acercaba a mis labios a su oido próximo-¿quieres tu minuto de gloria?¿verdad?- dije sonriendo de nuevo.Miro a quien queda solo en el escenario, y alzo la mano del muchacho y para que alce su mano, sin perder de vista quien miro.¡mátalo!, pensaba para mi misma.Quise obligarle a que alzara su voz pero no lo hice.

Le bajo la mano mientras me levanto, tiro de su muñeca- bien así lo quieres, así lo tendrás- dije para que me siguiera.Haciendole pensar que su plan iba bien.

De nuevo gente protestando, al levantarme, los propios del escenario piden silencio.Miro quien me lo pide y lo observo unos segundos.Solo quería quitarme de encima a este idiota.Esperaba entrar en escena, si sabían quien era..sabría mi fin... y sabrían como meter una corta escena en la que todos fueran testigos de su muerte y de mi regreso entre las bambalinas.Era hora de volver a comenzar...era hora de estrenar la situación sorpresa.

O quien sabe...si aquella noche no era para mi.La Obra continuaba y yo inicié mi rumbo a la salida, bajando las escaleras, para salir por las puertas traseras del teatro,allí darle muerte.

Me rei un poco, junto con los demás actores. Algunos me aplaudieron y otros parecian mas que nada reirse de mi. No me importaba porque francamente yo no era actriz, solo era una sumplente que de la nada pidieron para que actuase aquel extraño papel. No me molesto en absoluto, además, estaba consiente de que habia muchas otras personas que actuaban mejor que yo.

Mire al escenario y escuche atentamente el monólogo de Dominick, quien interpretaba a mi "padre" por transformación. Le habia escuchado ensayar sus lineas en los camerinos y ahora, verle recitandolo, siendo muy largo de aprender pues ocupaba casi dos hojas del libreto, era algo...increible? No tanto pues cualquiera podria lograr aprenderse esas lineas, sino que...me agradaba escucharle recitar. Se centraba en su papel y ya no temia a las miradas de un publico con posible desaprobación.

La primera escena habia finalizado y ya no eran requeridos mis servicios alli, por lo que simplemente salí por la salida de artistas, que daba a un callejon. Alli vi algo que no me espere...una vampireza con un mortal...

Nadie me llama ni me interrumpe, tampoco me molesta, ya habría mejor manera de regresar al escenario, que no de aquella manera absurda.Ahora lo entiendo, y me río al recordar por que razón quería hacer tal acto, aquello estaba muy visto, y no sería sorpresa, que delante de todos los ojos que había allí dentro, lo tomaran como algo sorprendente, cosa que no estaba dispuesta depués de todo.

Un hueco al fondo a la derecha, la salida, puertas de color negra, material no sabría decirlo, aunque si me arriesgase diría que de, no no, mejor averiguazlo vosotros, y no por que no me lo recuerde o... por que no tenga ni idea...¿o si?.Coloco mi mano sobre el agarre que parece flexionarse hacia adentro al presionarla hacia adentro.
Mi alrededor vacio, todos ellos dentro, incluso los que debían vigilar las puertas del tetro delantera, suponía, manteniendo su atención en tan falsa trama, y que solo unos cuantos llegarían a tomarselo como algo novedoso, divertido, incluso inolvidable con intenciones de repetir.

Comenzaba a manusearme, las caderas, mis nalgas, me mantengo quieta dejando que continue su juego que pronto acabará, una vez cruzara las puertas.Le miro de reojo y le observo, lamo mis labios y le amago con un beso en el moemnto que intenta robar uno, cosa que no permito,solo hay alguien que podría, pero en esta ocasión no me acompaña y no tiene el caso de mencionarlo él sabe.

Pero ahora no es momento de ponernos ñoños, y seguiré narrando por donde me había quedado...


Agarro su mano con fuerza, obligandole a ir hacia delante, al mismo tiempo que mantenía su mano a la espalda de este, con ligero movimiento y combinación de manos y pies, lo estampo con cierta brusquedad. en la ampliapuera, volviendose a cerrar la puertaal quitar mi mano, para quen mi mano izquierada pudiera apertar los ma sposible,y para no darme en mi propio brazo.Obligandole a apoyar la parte derecha de su rostro, aplastando su mejilla, viendo su ojo entrecerrado al estar en esa posicion, sus labios lo único que no son dañados, auqnue dependía donde ejercía la fuerza.

-Abre la puerta.. y te daré lo que deseas...pero aqui dentro no-dije con tono serio, manteniendole en la posición, al igual que la tensión que se podía masticar en el ambiente.

Él abre la puerta como le indica, no tengo habilidad ninguna que me facilite el que me obedezca, pero se le ve tan obsesionado, que no duda en hacerlo.Me sorprende en cierto modo,¿tanto deseba la condena?,je, aunque definitivamente no lo tendríá.


Atravesamos las puertas, le suelto de golpe,veo como se frena de golpe para no estamprse contra el ladrillo sucio del callejón.Observo a mis laterales, no hay nadie.
Silencio salvo por mis tacones, que hace un sonido hueco, sonoro a su vez, al hacer contacto con la acera.A nuestro alredeor cubos de basra, repleto hasta arriba, el olor es molesto, pero lo ignoro, tanto que solo me conectro en mi víctima.Le miro de frente y el me mira del mismo modo, su mano de nuevo alzada para tocar mi cadera y llevarme contra él, contra su cadera.Toco su mano antes de que vuelva a tocarme, apreto su muñeca con fuerza y se la parto con facilidad, sus huesos son frágiles con respecto a mi fuerza sobrenatura.

La misma mano la dejo caer para tomarle por su mentón de manera que mi dedo gordo queda a su lado izquierdo del cachete de la cara, y en el derecho el resto de mi mano.Apreto con fuerza y le obligo a torcer el rostro a un lado.Observo su palpitante vena que me llama, que empieza a enceder mi sed.

Habian salido al callejon, de alguna forma me empezaba a imaginar lo que harian pero realmente no era mi incumbencia. Aunque no era una epoca como la de antes, y si aquel mortal era su pareja? Mmm...que yo sepa asi no se tratan a las personas...Un amigo y jugarretas bruscas? Tampoco, casi le tuerce el brazo. Esposo? Muchisimo menos...yo lo trataba con mucho cariño y respeto para ser mortal y esta joven lo utilizaba casi como un juguete. Lo estaria secuestrando? Eso es mñas logico por el como se lo llevó. Debia intentar meterme en medio, pues yo siempre estaba atenta a los malhechores de la ciudad...Pero no esta vez. Ella era una vampira y quizas el su futura cena.

Debia intentar hacer algo, ese joven podria estar en peligro...pero y si resulta ser otro lujurioso o algun tipazo de aquellos que quieren pasarse de la raya con una mujer? Ahi le permitiria hacer lo que sea con él.
En cuanto en una parte le vi el rostro a la vampira recorde algo...se me hacia familiar...Golpee mi frente, pero claro! Era la actriz que me pidieron para suplir! Quizas podria aprovechar eso.

Dije su apellido mientras salia de la puerta, simulando una busqueda.
-Debo hablarle de su regreso al teatro, Madmoiselle!-intente aparentar que la estaba buscando desde que la vi.-Madmoiselle Eilen! Tiene que volver al escenario!

Noto su corazón acelerado, marcando la nota más sonora a medida que mis labios se acercaban al cuello, que iba a morder, en mayor o menor tiempo.La boca se me hacia agua y deseaba tanto penetrar mis colmillos en su piel, tomarle, provocarle hasta el punto de exitación,que cuando quisiera relajarse hacer algo sería demasiado tarde.

-pareceis nervioso monsieur- dije quitando la mano de su mentón para que por si solo me mirara.Deslizando ese mismo dedo por su mejilla, mirandole con dulzura, mostrando mis labios rojizos en una sonrisa, parcialmente también mis dientes sin dejar ver del todo mis colmillos.

Ahora su gesto no era una cara de deseo, era mas bien una mezcla de odio, junto a los gritos que salían de su garganta.Me reía con cierta educación, aunque no dejaba de ser sombría- y ahora,¿ quieres seguir siendo..... lo que buscais...?- detuve mis palabras por un momento, para luego añadír, al ver su gesto de dolor -¡oooh, te duele demasiado veo..!- dije en tono burlon observandole, acercando mi labios de nuevo- si lo hago... podréis sanaros con facilidad- dije revelando parte de lo que no debería ser revelado por ningún vampiro a pesar de su insignificante proporción revelada a cualquier mortal.Ciertamente, me daba igual, teniendo en cuenta que no veria la puesta de Sol, ni tampoco renacería en la próxima luna o como yo lo llamaba "el despertar a las Tinieblas".Como ya dije no doy el don en vano y menos tan increiblemente idiota y que por su ropas solo aparentaba elgancia, pero no lo que era.Dejaba a desear, si fuera lo contrario.Pero solo era un estúpido que creia saber de todo, cuando realmente no sabía nada.Pero mejor me pararé en este punto, sino acabré por decir todo tipo de incoherencias a su persona.No sin antes revelar que su atuendo solo era un faról de lo que era en apariencia,os aclaro,solo me bastó aquel contactó esporádico y que luego repitió por su cuenta.


(....)


Bien por fin se puso interesante el momento, ya su deseo desparecía, su odio también, convertido ahora en miedo- Ya no os parezco deseable veis....-añadí en un susurro, para despues apoyar mis labios sobre la piel de su cuello.Entrecerré mis ojos observando como ahora temblaba- ya no sois tan valiente al parecer- río, pero me es interrumpida por las pocas palabras que salierón de sus labios, las únicas- ya no deseo nada- dijo con teblorosa voz, tragando seguido un poco de saliva- am...¿por que?¿ por el dolor?¿por la muerte?¿ por no despertar o la posibilidad de que ni vivas?-abrí mi boca para que mis colmillos rozaran su piel, mi mano de nuevo se mueve, haciendo el recorrido a la inversa.Viendo como seguía paralizado, y solo me miraba.

Relajaos....no te dolerá-dije mirándolo de reojo.

Finalmente mis colmillos penetran en su piel, observo de reojo, sin cerrar por completo mis ojos, veo salir su sangre que se desliza por su cuello, su hombro.
Suave caricia en mi paladar,el liquido carmesí entraba por mi garganta, casi serpenteando a lo largo de su recorrido, provocando en mi extasis notorios.Podía oirle, su corazón se daba por vencido casi, sus fuerzas flaqueban.Su Corazón se iba a para, así que le dejé caer.Como todo vampiro sabe, debes dejarle en el punto que su corazón se debilite casi cuando su corazón extinge el latir , era el mejor momento, antes de que su muerte tellevara con ella.

En ese instante, con mis labios manchados de su sangre,escuchando como caía como peso en plomo.Miro a lo lejos alguien grita mi apellido,seguidamente mi nombre completo.Observo a quien se acerca a una joven de cabellos oscuros piel blanquecino y con ropas formales, mas omenos.Me mantengo en silencio y la observo-sabeis,..tan bien como yo...que la función termino hace unos minutos...al menos en el momento que yo debería paarecer..madam.. aunque......-dije relamiendo mis labios, muevo a una lado y a otro mi cabeza,haciendolo crugir suave mi cuello.Exálo.Delicioso, pensé.

-Y decidme..que..que buscais..en este callejón...-Dije mirandola, sin apartar la mirada,esperando una extensa explicación.

Bueno, ya era tarde. Desde mi posicion se olia la sangre, en fin...vampiro satisfecho, vampiro más calmado. Una explicación? Ups...digamos que esa parte de la coartada estaba en blanco aun pues eso pensaba hilarlo en el camino. Pero veo que ahora debia cubrir este detalle. Se me ocurrio una idea.
-Sé muy bien que acabo, Madmoiselle. Sino no estaria aqui.-mantuve una sonrisa.-Es que la vi salir y queria hablarle porque la he visto actuar varias veces aqui y siempre he querido verla de nuevo.-y el toque de gracia...-Yo...la admiro...-mire hacia el suelo simulando alo de timidez.-Cuando me dijeron que debia reemplazarla me senti horrible porque senti que le robaba su papel, además, mi actuación fue muy mala...y seguro deshonre su nombre...

Luego el aroma a sangre me empezo a molestar un poco por el simple hecho de que me daria sed y no era momento para pensar en mi garganta.
-Veo que bebio un poco...-me hice la inocente, como si jamas hubiera matado a nadie... ( xD )

Aún manteniendo mis pupilas reflejadas en la suyas, observandome en su retina mi rostro, mientras esperaba su respuesta, palabras que me dieran una explicación.Niego con la cabeza mientras sigo mrándola, mientras la escucho,¿aquello que estaba haciendo, era improvisar delante mía?, río para mis adentros, mientras que al exterior, mi rostro se mantiene frio, sin gesto alguno que revele lo que si o no podría pensar ante falsas palabras.Asiento, con la cabeza, tan solo al inicio de su argumento, almenos en eso no mentía, nadie eme superaba en eso, o almenos que yo estuviese enterada.

Hago una mueca, chasqueo la lengua, al escuchar que sentía admiración por mi, me sorprendió ese detalle pero no se lo hice saber, o no del todo, enarque mi ceja derecha y camino hacia ella.Paso por su lado e inalho su fragancia, mis ojos cerrados, los abro de nuevo estando a su espalda,observo su largo cabello,miro al frente de nuevo y luego me giro para pasar de nuevo a su lado,me detengo unos segundos y coloco mi mano sobre sus cabellos, pasando por debajo de los mismos, tocando su hombro, haciendo ligera fuerza, mientras observo a quien yace muerto en el suelo, tras alimentarme de su sangre.

Quito mi mano y adelanto unos pasos mas, hasta colocarme delante de mi víctima, me agacho lo suficiente como para coger por uno de sus tobillos, el derecho y así poder arrastrrar su cuerpo.Se escucha a la perfección como el cuerpo es arrastarado, en tan silencioso callejon, donde lo unico que estaba presente eran los vidones de basuara, y ahora también quien me buscaba,quien me admiraba, quién me sustituyo en mi presencia en el escenario, o eso dijeron su labios y su aparato de fonación,que le ayudaba a hacer creer sus palabras a quien escuchaba.

Lo arrastro hasta el contenedor,alzo la tapa del mismo y lo alzo lo suficiente como para que caiga hacia adentro, muevo con bastante asco las bolsas de basura para colocarlo encima del cuerpo, cierro la tapadera, bajo la mirada al mismo tiempo de que veo como el sombrero de copa que llevaba, lo tomo con mi mano derecha una vez soltado el agarre de la tapa del contenedor.Me acerco a quien me buscaba y le coloca el sombrero.

-tomadlo como un regalo madam....- dije cuadrandole el sombrero, mientras la muiraba de frente.Retiro mis manos y me coloco a su lado-y ahora decidme como han ido las cosas desde mi ausencia....quiero detalles todo y cada uno de ellos.Hace tiempo que no me paso por esta zona y necesito saber- dije con tono serio, avanzando lentamente esperando que ella me siguiera, y me digera, mientras saliamos del acellejón.No era correcto volver por donde salí.. y menos cuando aún mi sed no estab calmada.Sería demasiado,..¿ como decirlo?, a sí,tentador.

Fue la primera vez que le temi a una vampireza: se movio con una gracilidad y un modo que me parecio un poco escalofriante; su cuerpo estaba muy exaltado, cuanto tiempo habria pasado aguantando el beberse a ese joven? No lo sabria ni tampoco me interesaba averiguarlo. Aun asi, me quede quieta y si estaba enojada o algo, lo entenderia pero luego desapareceria de aquel callejon.

No pude evitar cerrar mis ojos cuando toco mi cabello. A la vista y por mi velo, parecia que era corto pero era más largo de lo que a simple vista se podria apreciar, y no logre contener un suspiro ante esa zona erógena mia.
Lo que si me tomo por sorpresa fue el sombrero que colocó en mi cabeza. Aun estaba vestida con la ropa del teatro: era un atuendo de jovencita oscura y no quedaba nada mal aquel sombrero con mi atuendo pero me encogi de hombros cuando salio del callejon. La segui simplemente porque doblo por el camino que tomaba para irme a mis santuarios.

Detalles?
-Trataré de proporcionarle la información que quiera pero tenga en cuenta que no soy una actriz bajo contrato por lo que solo estuve poco tiempo aqui.-aclarado eso, me lleve la mano al menton, pensando en como podria empezar.-Pues...el director anterior renunció poco antes de mi llegada y se fue a Londres por otros asuntos y un actor preguntó por ti, el que interpreto a mi "Maestro", no mostro interes en los ensayos conmigo. No le di importancia pero quiza se debia al papel que debi interpretar.-le explique con calma y sin mirarle. Parecia aun algo exaltada, algo peligroso para los humanos que pasaban junto a nosotros.

Paso lento. aun sonorós pero menos a medida que lograba salir fuera de este oscuro callejón, mezclandose entre el bullicio de las gentes y el poco tráfico que había esta noche.Aún no me seguía pero tampoco me detuve en esperarla, necesitaba retirarme de allí antes de ser vista por otros mortales que usasén como atajo aquél lugar, aún que mas bien lo hacia por mi, más que por ellos mi sed no descansba y deseaba más.


Sabía que me tenía que detener, sabía que debía controlar mi sed, pero había llegado a tal punto que sería algo costoso sacarme a mi misma de aquél circulo.No conocí a mi creador ni tampooco lo e visto jamás, por lo que soy mi propio maestro a la vez que mi propia alumna, me siento orgulloso por lo que consigo por mi misma, sin saber si quiera que ocurrío con exactitud con quien me hizo.Pero eso será en otro momento, otra historia que deberé hilar en algún momento, cuando se digne a aparecer ante mi, y me diese determinadas explicaciones que espero ,desde entonces.

Continuo caminando, miro a al gente que pasa de refilón, a mi lado, su aroma me embriaga y no me hace olvidar mi sed, eso no me ayuda en momentos así.Me contuve por el mero hecho de que no quería converime en una bestia sin control, que mantener mi apariencia mi esencia humana, aunque solo por uno segundos, no humana en el mas estricto sentido como humano, bien sabeis me refiero a la compostura, el saber estar en situaciones así, donde la sed no ganara terreno, y empezara a matar por doquier y sin sentido,je.. aunque ya lo hago, pero ya me entendeis, con control sobre mis actos, me refería.



Bien, pero ahora continuemos, quien me acompañaba como yo, otra inmortal, que iba ser si no, aunque quien podía adivinar que su blanquecina piel, podría o no, ser parte del disfraz que llevaba, aunque también se veía similar a aquellos que imitan el aspecto gótico, una nueva moda, una nueva cultura que se llevaba.Aunque no era su apariencia quie revelaba lo que era.Su olor.

Salté a unos pocos, algunos me golpeaban el hombro derecho izquierdo alternativamente con ciertas pausas, o bien se lo golpeaba yo al intentar andar deprisa y alejarme de semejante de grupo y/o ganado del cual era mi único alimento.Debía mantene rmi anonimato lo mas posible, no era cuestión de ser revelada ante todo mortal, y no solo serían ellos quienes vendrían en búsqueda, también aquellos no tan mortales.

Me detengo lo suficiente, para manterme a la par con la muchacha desconocida,asiento y hago ruidos similares al "aham", como señal que seguía escuchandola.Necesitaba que diera prisa en andar entre ellos o mi vena de asesina estallaría y no habría quien me parase, esperé demasiado tiempo para tomar de aquel idiota que ahora está entre la basura, cuando podría haber calmado mi sed en aquél instante,entre la muchedumbre.



El director marchó , pero ¿a quien dejarón a cargo?, quizá a alguno de los viejos vampiros incluso el "maestro" como le menciono ella, eran de los mas experimentados y quienes llevaba mas tiempo bajo aquellos cimientos.Se detiene y coloca su mano en su hombro derecho- excusez-moi madam ( disculpadme madam), pero... no se tan siquiera vuestro nombre.. mientras que vos si sabeis del mio- dije retomando el camino.Antes de que pudiera decir algo mas la miro de reojo y añado- a proposito.. quisiera continuar hablando con vos.....¿donde se aloja?- no paré y continué- no andamos muy lejos.. de mis aposentos.. auqnue antes quisiera conocer los vuestros- me quedé en silencio y la observé caminar-....y decidme.... algo más ¿ como que no os prestó atención..., Jacke?-miro a un lado y a otro- es extraño.... no suele ser así a menudo.. jeje.. reconzco que a veces es muy raro, incluso mas que yo, pero..de ahí a no prestaros atención...-dije volviendo al frente.Un nuvo chioque de hombros con otro, este no olía a mortal, me hizo girar de golpe y observarle de espaldas, aa quella túnica negra que le o la ocultaba.

La joven caminaba rápido, se notaba mucho que estaba algo nerviosa pero más bien apurada por el extasis que llevaba encima por beber a aquel mortal. El olor de los demas era embriagador pero con el tiempo, me he acostumbrado a andar entre las muchedumbres sin quebrarme ante el apetitoso olor que despedian sus cuerpos. La segui y escuche sus palabras. Me avergoncé un poco y me incline en reverencia.

-Jacqueline Samantha Ritchway, my lady.-le dije con una sonrisa y luego retomando su paso.-En realidad mi...am...hogar queda cruzando el bosque, es un viejo castillo al que muy pocos entran. Me he hospedado en el hostal cuyo dueño es de nuestra estirpe y un buen amigo mio.-ignorando la gente y quedandome a su lado, le hable en un tono que solo ella oiria.-Su sed se está incrementando, le sugiero que busquemos un sitio más calmo lejos de los humanos para charlar si lo desea. Cualquier lugar esta bien pero sería peligroso que alguien como usted pierda sus dientes en cualquier cuello...

Me encogi de hombros. No entendia aun porque aquel actor parecia distante de mi; se supone que hay que llevarse bien uno con otro en las obras para ensayar, no?
-No sé porqué aun. Si bien no soy actriz de profesion, no creo que mi forma de interpretar a la joven haya sido tan pésimo...pero sí, no queria ensayar mucho conmigo; en una ocasion, dijo que tenia que salir del pueblo una tarde. A la noche lo vi entrando a un bar con dos jovencitas tomandolo del brazo.-elevé una ceja por ello.

Sigo mirando hacia atrás, intentando seguirle con la mirada, pero me es imposible, como si fueran una manada, se agolpaban cada vez mas, dando por nula el alcance de quien visualizaba.Por lo que vuelva incorporarme, parpadeo un par de veces seguidas, mientras vuelvo a mirar al frente,apreto mi mano ,cerrandola, formando un puño, apretando mis dientes, no era buena señal.

Por unos minutos me distraí con la charla que de nuevo iniciaba, Jaqueline, sí, así se presentó ante mi, quien me sustituyo mientras dormitaba y después me alimentaba,mientras volvía a coger las riendas de mi ser,para evitar convertirme en la bestia descontrolado, que en otras ocasiones se calmó bebiendio a aldeas, casi enteras,ninguno sin oprtunidad de ser lo que y soy,asegurandome de que estuvieran casi muertos, alternando el retorcerles el pescuezo, otros decapitación y otras simulacion de torturas,que parecían travesuras de bandidos, me pareció divertido en ese tiempo, pero alfin de cuentas, eso es el pasado, no el presente.

Vuelvo en si y observa a la muchacha, un pichazo en mi pecho, mi corazón despertando,¡¡¡tenía que salirrrrrr!!!,La agarra del brazo con cierta brusquedad, ella sabia de mi sed, tampoco podía esconder lo que soy,Esta era la segunda señal antes de que se desatara lo impropio de una señorita, como acostumbraba a darme a conocer.Avancé con ella, con paso ligero mirando al frente, mis ojos comenzaban a tornarse, solo el derecho se tiñó de rojo rubí, pero no tardaría mucho en que lo hiciera el izquierdo, de momento podía pasar por aquellos humanos que usaban lentillas de colores con extraño look u otros que tenia el ojo de diferente color.

Las palabras de la joven,, las escuchaba coomo si fuesen un eco en mi cabeza, notaba mi rostro tenso-¡¡llevadme a un lugar cercano donde pueda servirme de compañía masculina!!-dije con voz carraspente, sombría, sin que dejara de ser casi un susurro -necesito divertirme un rato- dije con el mismo todo quizás este sonando mas tetrico, sombrio,todo estaba por empezar.Necesitaba calmar mi sed, y pronto.

La sed la habia segado o al menos eso estaba por pasar. Me tomo con algo de rudeza y yo solo podia hacerle caso, mejor evitar una masacre en la ciudad. No habia otra opción; a la hosteria no podia llevarla por lo sí o sí debia llevarmela a mi castillo. La tome de la mano y nos dirigimos a un callejon corriendo.
-Confie en mi! Sé exáctamente lo que hago!-le grite desde adelante para luego tomarla de su cintura, que ella pusiese su brazo sobre mi hombro y asi, emprender vuelo lejos de alli. Lejos de los humanos que podrian estar en peligro. Iba a llevarla en una diligencia pero hubiera sido peligroso, quizas atacase al cochero.

Sobrevolamos la ciudad y las calles, todo lucia más pequeño y esperaba que mi acompañante no se sintiera muy incomoda. Cuando comenzamos a sobrevolar el bosque, comencé a desender pero doble bruscamente a la derecha, luego a la izquierda hasta llegar a un claro. Alli fue donde baje. La luna estaba oculta aqui, el cielo estaba más nublado y, ante nosotras, mi castillo.

Suspire, soltandola.
-Disculpe por tomarla asi pero hubiera sido peor otro medio de transporte.-le explique un poco avergonzada pero esperaba que me entienda.-Bienvenida al Castelul Tepes Ritchway, mi segundo hogar.-voltee a mirarla y le explique con una sonrisa:-Mis sirvientes son todos vampiros y encontrará alguna que otra cara bonita...y si tiene más sed, hay humanos en los calabozos, listos para consumirse cuando usted lo quiera.

Mi sed, mi necesidad de posesión de aquél esquisito majar rozando mis labios con suavidad, junto a mi lujúria, mi energía,convertida en una bomba de relojaría, que no tradaría mucho mas en explotar, mantando, llevandome conmigo a quien tuviera por delante.

Me dejé llevar por el brazo de la muchacha, el latir de mi corazón sonaba fuerte, retumbaba en mis oídos, una suave melodía de las típicas representaciones del teatro, simulados por tambores en un tempo lento de miedo, en le momento de tensión cuando el mounstro o el ser malo se acerca a su víctima, cuando la sigue, y este escucha su latir, sus pasos, algo similar en mi interior, pero mi caso no solo era una, sino toda aquella persona que osara interponerse en mi camino, acabaría por darle muerte, revelandome ante todos,ante todo el mundo, obteniendo el mismo problema, ser perseguida por los mortales y no tan mortales, para darme caza y muerte en el instante.Mi fín, no podía ser ese.

Soy arrastarada por su mano, casi pego un traspies, pero, me detengo quedo frente a ella, en mis labios una sonrísa sombría, juguetona a su vez, mi instinto se despertaba cada vez más, incluso estuve apunto de tomarla en aquél momento a ella, aunque obvio no se hubiese dejado, esto solo una pequeña hipótesis, mi instinto despertaba,sí, pero me suelo contener y no atacar mis congéneres.Creí en sus palabras, y esperé que saliéramos de allí, aunque fuera a través de los tejados, pero hicimos mas que eso, cuando ella me tomó de la cintura, no me lo espere, pero tampoco me asusté,curiosa habilidad,al notar como me levantaba del suelo.

Mis pies flotando en el aire, al igual que mi cuerpo miro a la mujer, y no tengomas opción que agarrame a su cuello con ambas manos, con cuidado de no caer, ni ahora, ni cuando estuviésemos mas alto que aquellos poco metros.Me dejo llevar por ella, viéndose aún mas pequeño y mas pequeño , cada vez mas lejos quedando bajo nuestros pies, incluso las nubes , las traspasabamos, espléndida habilidad, no la poseía, pero tampoco era mucho mejor con alguna habilidad que yo posellera.

Puedo otear el horizonte, al norte al este, observando todo lo que me rodea, incluso de reojo a aquella mujer que me llevaba, y que hizo posible explorar de lejos, las entrañas de París.¡oh, merci, est belle!, exclamé en mi interior, mientras seguía observando y escuchando la muchedumbre bajo msi pies, las gentes , él tráfico, hasta el mas pequeño murmullo, sin mostrar gesto, solo aquella sonrisa ,esos colmillos desesos de probar.


Comenzamos a llegar a las zonas de bosques, bosque enormes y de hoja abundante, lleno de arbustos entre otra clase de árboles,no sabría decir, solo él o la experto/a en temas de plantas.Veía como el paseo en volandas se iba acortando,llegando a un claro, traspasando de nuevo las nubes bajas, porfín mis pies tocaba tierra firme,mi sonrísa se amplía.Observo a la muchacha al escuchar lo que parece ofrecerme entre lineas, nuestros congéneres, allí dentro me contube, y la miré, lamí mis labios en el instante que escuche, que quienes estab prisioneros, serían mi alimento,de refilón se me pasó por l a mente una imagen, alguién con bello rostros, pálide notoria, uñas cristalinas, otra imagen enlazada observando en primer plano su vena palpitante.

Corrí, incluso tropecé ,esta vez cvaigo,, sin hacerme demasiado dañoe, mas bien las finas hierbas, que cesarón bajo mi caida.Me incorporo y miro a la muchacha, le hace una seña para que la acompañara, su propiedad, no debía desobecer sus posibles normas, y lo mejor aún debería decirme el lugar de las celdas, aunque, si el olor era notoeio al entrar, o simplente el latir de su corazón, podría ayudarme a encontrarlos sin su ayuda, pero me contube.

Apresuré mis pasos para llegar al largo portón al castillos, dos guardias custodian la puerta no puedo entrar, en el peor de los casos me saltaría las normas y empujjaría a ambos, para tener paso libre.Sus lanzas se cruzana ante mis ojo.Cierro mis ojos con fuerza, lo abro, ambos rojos, mi sed, el latír de sus muertos corazones me llamaba para morder, abrí la boca, mientras apretaba mis puños, iba abalanzarme sobre uno de ellos, pero otra voz ve detuvo, y con ello mi acción.

-Alto!-grite alzando una mano hacia ella. No la toque, estaba más que enfurecida...o exitada por la sangre, cualquiera se diria correcto. Estaba muy exaltada y casi a tropezones quizo entrar en mis dominios. Gelick y Alazar estaban vigilando. Se los habia pedido por unas noches, ya que habia un rumor de que llegarian algunos gitanos del sur. Mejor evitar muertes innecesarias para mi. No hacia falta que descubriesen y corrieran la voz de este sitio casi secreto. En fin, los guardias me miraron y levantaron las lanzas con la cabeza gacha.-Nada de peleas en mi castillo. Retiren sus cascos y saluden a mi huesped, Miss Nirole Eilen.-les ordene.

Apoyaron sus lanzas en el muro y se retiraron los cascos, reverenciandola. Gelick le sonreia ampliamente, sus rasgos eran muy atractivos. Era un moreno de tez muy blanca y ojos finamente grises. Alazar, en cambio, era un joven rubio más robusto de ojos más oscuros. Estaba un poco más serio pero le sonrio a la dama. Nos abrieron las puertas en cuanto yo me acerqué más y entraron con nosotras, cerrando el gran porton detras de mi. Me volvi hacia el pasillo. El recubierto ojo, la alfombra con detalles en rosas blancas, el espejo, un par de estatuillas...Oh...que lindo se sentia regresar. Los sirvientes lo habian mantenido muy bien: no habia polvo en ningun sitio, el aire se sentia igual de puro que estando afuera y no se oian los gritos. Todo estaba en calma total. Tome unos de los candelabros para alumbrar nuestro futuro camino.

-Ven conmigo, iremos a beber algo, te parece?-le dije a ella ofreciendole mi mano para que vayamos juntas por el camino al sotano donde nuestras futuras presas aguardaban.

Mis manos quedarón en el aire, al escucharla, encojo mis dedos y miro de reojo a Jaqueline, mis ojos aún rojizos, por mi sed , que esperaba saciar en cuando me fuera permitido traspasar aquellos portones del castillo.Sus lanzas por debajo de mi cuello,un leve choque de las maderas de por debajo del acero de sus lanzas, mi mano derecha de forma intuítiva sobre el mango de acero, sacando parcialmente la hoja de la espada, atacaría si lo hacian.Sonreí y miré de reojo a cada uno de ellos, mientras la dueña de sus actos les pedía no atacar, no atacarme, exactamente, no puedo evitar reir y observar a ambos, eran dignos de mi compañía, de que yo misma les diera muerte, pero no hubo ocasión, fuerón detenidos antes.

Tomo mi postura inicial, y observo como retian sus lanzas de mi cuello, al mismo tiempo que yo procedí a retirar mi mano, dejándola caer dentro de la baina, observo sus actos, que tal y como le ordenaban, después de retirar sus lanzas, se dejarónn ver, sus rostros cubiertos con un yelmo, donde solo podía verse sus ojos, en conjunto con la armadura que llevaban encima, y que por la anchura, pude deducir de sus cuerpos.
Ambos me sonriéron, uno tardo más que el otro, pero no le di importancia, a sus gestos, les observé por encima del hombro para fijarme en sus rasgos, cabellos morenos y rubios, con la misma similitud, su palidez, nuestra palidez, cerré mis ojos, para inalhar el olor que desprendían, para concentrarme.No me dio tiempo a decir nada, tan solo de abrir de nuevo mis ojos, al sentir un ruido seco y arrastrante, escuchando en conjunto las bisagras algo viejas, por su sonar.

Entraron los guardias también, delante de nosotras, deteniéndose y retirandose a lados contrarios, quedando uno a cada lateral de las puertas, molesto ruido de ojalata que se apartaban, dejando que sonaran al unisono nuestros pares de zapatos, al contactar con el suelo en cada pisada sobre los de madera lisa.Me detuve al mismo tiempo que ella lo hizo para tomar los candelabros y proseguí el caminar, observé de reojo su mano , la cual me ofrecía para llevar a un lugar donde saciar mi sed.Mi corazón con ansias, mis colmillos de osos de atravesar sus pieles delicadas, y de que mis labios saborearan el inicio del festín, que disfrutaría mi cuerpo, envuelta por el éxtais y la lujúria , que llegaba a setir, además de placer mutuo.

Me bastaba con caminar al lado de ellas, sabría seguirla, junto a su candelabro que la acompañaba,reí para mi misma, cuando cogio el candelabro, acaso no sabia de la habilidad común de ver en las oscuridad, o tal vez ¿era por aprentar ante sus prisioneros?.Miré a mi alredor,pudiendo ver de varios del personal del servidio, pude oler su miedo, su olor de temor,tenían que ser humanos,de nuevo reí, pero sin poder evitar que Jaqueline oyera el final de la mismama.Hice rotar mis pupilas para quedarme mirando al fren, viendo de reojo a un par de hombres de elgantes ropas, y ojos atrayentes tanto para una inmortal, tanto mas, para los mortales , que encandilaban con su mirar.

(....)

Llegamos a unas cortinas rojizas, las retiró, dejando visible unas escaleras bastante largas, con numerosos peldaños, sostube la cortina entre lso dedos de mi mano izquierda y la deje caer tras de mi, y la seguí, parecía el inicio de un pasadizo, desconocía su largura, pero igual le seguí, comenzaba a oler mi perdición mi razón de sed, me sentía exitada, cerre ambas manos en un puño, con fuerza,hiyendo con lentitud, sonando hueco nuestros pasos, en un lugar estrecho, donde solo cabiiían si se iba en fila, nunca uno al lado del otro, sería imposible circular.

Manos agitaban los grilletes, parecía querer escapar de ellas, y no lograbán, ese acero eran más fuerte que cualquier intento de sus fuerzas por querer deshacerse de ellas.En cualquier caso, ellos serían mi alimento,les haría obsequio de mi compañía y del placer que suponía el ser mordidos.

El camino para encontrar a los prisioneros era largo y cualquiera podria encontrarlo agotante. Pero no habia mucho para andar haciendo. Algunos, de milagros o astucia, logran escapar de sus celdas pero nadie ha logrado subir lo suficiente como para que mis guardias no los detengan. Además de que este castillo es demasiado viejo como para que alguien logre mover un tabique de los muros, no eran paredes convencionales. Si alguien hacia algo para quebrarla y tratar de huir, me enteraba. No pregunten porqué.

Sentia detrás de mi los pasos de la joven Eilen. Estaba demasiado exaltada, sabia que eso acabaria pronto cuando comiese algo. Ya habiamos llegado a las celdas. Algunos al ver la tenue luz de las velas se quitaron de los barrotes y trataron de encontrar refugio en la oscuridad. Algunos aun agitaban sus grilletes en un inutil intento de huir de ellos. Era algo tonto pero "la esperanza es lo ultimo que se pierde". No sientan pena por ellos, son criminales. Mis sirvientes siempre buscaban ese tipo de sangre; criminales, ladrones, asesinos, violadores, blasfemos, todo tipo y más, acababan aqui.

Saque mis llaves y abri una celda, la primera. Alli se encontraban cuatro humanos. Con una sonrisa macabra, mire a Nirole y le dije:
-Bon apetit.-abri despacio la reja para que ella entrase y se alimente de lo que guste.

Los pasos seguían resonando junto a los de Jacqueline, parecía no haber fin, demasiado largo, pero mis pies habían echo otras travesías mas largas, que como este simple paseo a lo que sería una simple vuelta alrededor de mi mansión en Paris.

Observo frente a mi el candelabro que llevaba en manos mi acompañante, lamo mis labios al sentir el olor cada vez mas cerca que al principio, la boca se me hace agua, la piel de mi rostro se tensa, mis colmillos junto a mis labios desean ya probar bocado, tomar de ellos provocarles el mayor momento de éxtasis mientras que de la herida que le hacían mis colmillos, emanara tan delicioso oro de rojo carmesí por el que me desvivía y me descontrola en los momentos como este, en la que mis ansias pueden con mi persona, con lo que soy en los momento en los que mi sed fue saciada.

Lamo mis labios, escucho aún los grilletes, veo a quien me guía entrar a la derecha en una vertura se detiene , me detengo y observo a mi alrededor.De mis labios sale un sonrísa, parecían animales enjaulados, aunque después de todo eso es lo que eran ganado, un ganado diferente a los animal los cuales carecían de habla respecto a ellos, la semejanza, lo que los definían, seres vivos y que tanto unos como otros morirían por alguna razón.Pero ahora no me detendré en ellos, y siendo sincera,no perderé el tiempo en palabras y haré lo que debo.

Miro a ambos lados,hay una única celda de proporciones desiguales, pero donde puede caber un humano o los que unos le viniese en gana, el lugar alumbrado por una antorcha que amenazaba con apagarse.La comida se le servían en cuencos que veía en el suelo vacíos, algunos llevaban días pues su olor era asqueroso y las moscas revoloteaban a su alrededor deslizando su peluda y diminuta lengua sobre los restos de los cuencos,llenandolo con su gérmenes, al levantar la vista a mi izquierda observo a alguien que está en el suelo, sentado con las piernas cruzadas balanceándose hacia delante y hacia atrás, sin acerse, la vista fija , mirando a ningún lugar en específico, sus cabellos morenos , corto, rostros sonrosados, color natural, y labios aún más pálido de lo que podía considerar en cuanto a su piel, observo palpitante de su vena, que se revela ante mis ojos.Me abalanzo de golpe sobre lo barrotes, mis ojos casi desorbitados, rojizos., acercando mi rostro entre los barrotes, una sonrisa tétrica.Roto mis pupilas para mirar quienes le acompañan dos mas sujetos en grilletes, uno con el rostro bajo , parecía mirar el suelo, movía la cabeza con lentitud, y poco a poco lo levantaba para mirarme.Dejé que me mirara y le dejé escuchar mis sonrisa macabra, mientras mi mano hacían fuerza en los barrotes, mis desperación era tal que ni me percaté de que Jacqueline me había abierto las rejas, segundos después.

Paso sigiloso, tanto como los pasos de un felino cuando sigue el rastro de su presa para llevárselo a sus fauces.Pero mis últimos pasos dejaron de serlos, mientras me acercaba a quien me miraba, a quien ahora sonrío le muestro mis colmillos, su rostro asustadizo, pero con carácter, pes poco antes de poder acercarme y tomar su cuello, quiso abalanzarse, pero los grilletes hicieron su trabajo y lo dejaron con los brazos tirantes al igual que sus pies.Vuelvo a sonreír, alzo mi mano derecha, frente a sus rostro levanto solo mi dedo índice para colocarlo sobre la frente del muchacho y lo empujo suavemente, pero lo suficiente como para que su cabeza se eche hacia atrás, aunque su estupidez le volvía querer enfrentarse a mi.

-¡¡Suéltame!!! ¡¡suéltame!! maldita mujer.¡¡¡¡¡Ven si te atreves, ven si tenéis agallas!!!-Dijo el encadenado, y río de forma descarada mientras mi mano la misma que levanté mi dedo, le cojo de los cabellos y le fuerzo a que su cabeza se eche hacia atras.Mi otra mano se cierra en un puño y le golpea la nariz, provocándole un punto abundante de sangre, pero lenta.Su cabeza cae por si sola hacia delante, y vuelvo a tirar de sus cabellos y le hago mirarme, mientras estiro mi mano, mis dedos, para tomarle del mentón y empujar hacia arriba, tensando su cuello.Se escucha un flojo sonido proveniente de sus boca, bajo mi ojo noto la humedad, y miro careada, por ser escupida.

-No sabes con quien te metes,¡ maldito estúpido!- dije finalmente, cansada de su escasos pero ofensivos actos con su palabrerio.Odiaba la gente con ese carecter.Observo su ropa descuidada, con ciertos agujeros que dejan ver su piel, vuelvo a mirarle y acerco mi rostro-No desearía haber hecho esto, muchacho de nombre Eleidar, creo que tu familia correrá la misma suerte- dije en tono sombrío, molesto- será divertido como luchan. mientras se intentan escapar de la soga que les pondrán en el cuello- dije sonriendo mostrando parcialmente mis colmillos, viendo de reojo su cabellos, su oreja y la vena palpitante que me llamaba.Ya aguanté demasiado.

Le mordí con todas mis fuerzas, tanto que no era placer sino dolor lo que sentía, no pensaba perder el tiempo y mis ganas de juego con alguien como él de tan baja sociedad, un sucio pícaro.

Al contrario que él, sentí satisfacción mientras con lentitud tomaba de él, haciendo más doloroso, mordiendo en mayor o menor densidad, cuando parecía querer hacer algo, ayudándome de tirones de sus cabellos para que no se moviera, mientras le provocara dolor.Mi cuerpo siente la calidez de su sangre, los vasos de las venas y arterias se hinchan y bañan con la sangre que recta en zig-zag durante su recorrido, expandiéndose por cada una de mis extremidades que también ansiaban la carica.Gemía de placer en silencio, mientras esa sensación envolvía mi sed.

Pero me veo obligada a parar, sin todavía llegar al limite de su latir antes dejar de tomar, cuando soy cogida de mis cabellos, hacia atrás no caigo, pero me balanceo dando un paso hacia a tras.Mientras mi mano derecha tomaba la empuñadura de la espada de mi cinto, me giro sobre mis talones ,aún siendo cogida por el cabello, no es tan fuerte como para hacerme quedarme quieta.Me giro sobre mis talones y con mi mano izquierda lo tomo del cuello, con fuerza y lo alzo de manera que sus pies dejan de tocar el suelo, sus manos tocando la mía intentando quitarse de mi agarre.Mi apariencia y gesto son de molestia de cabreo ante su acto, miro de reojo sus piernas como se mueven queriendo golpearme, mi mano se aferra más a su cuello, lo hago con mas fuerza, mi dedo gordo apreta su vena mas importante, dejando que el oxígeno no llegue a su celebro,se asfixiaba poco a poco y abría la boca intentando tomar aire, gesto inútil.

-Madam Jacqueline, no tenéis mejor, compañía que darme- dije mirándola de reojo, por un lateral del brazo izquierdo de quien sostenía.Quien dejo de patalear-está compañía me aburre no.....no.. no se si me entendéis- dije sin apartarle la mirada rojiza, mientras mi lengua lamia mi labio inferior y seguidamente el superior.Bajé la mano y tiré con brusuqedad.Mi sed seguía latente, y quería más diversión y placer, que estos no me daban.