Elhena - Serena

- Nombre del Personaje: Elhena Van de Kamp / Serena Van de Kamp
- Edad: Aparentan 25 años / Reales aproximadamente 50 años.
- Especie: Licantropas
- Tipo & Clase Social: Clase Alta
- Orientación Sexual: Homosexuales
- Lugar de Origen: Inglaterra
- Habilidad/Poder: Sentidos Aumentados - Agilidad & Reflejos Sobrehumanos / Sanación acelerada - Longevidad - Sentido del peligro (Ambas)

Ambas completamente iguales en lo que a físico se refiere. De estatura mediana rondando el metro sesenta y cinco. Delgadas. No musculosas pero si fuertes gracias a esa habilidad sobrehumana que les concede la maldición de su naturaleza. De cabello rubio tirando a oscuro con reflejos castaños; en una melena que llega aproximadamente algo más allá de los hombros. Ojos grandes color verde agua, muy expresivos en ambos casos. Nariz fina y delgada. Labios ligeramente gruesos color rosados. Los de Elhena habitualmente maquillados con color carmín y los de Serena naturales. Piel fina, aparentemente delicada. Blanquecina con un toque dorado aunque es Elhena quien más disfruta del sol, a Serena le gusta poco. Ambas poseen una belleza femenina extraordinaria, cada una en su estilo. Mientras que Serena se decanta por la elegancia natural y poco ostentosa, a Elhena le encantan las joyas, los lujos, los vestidos caros y el maquillaje; llevando su elegancia a un nivel más extremo.
Iguales en apariencia pero bastante diferentes en el carácter. El Ying y el Yang. Y, sin embargo, la una no podría vivir sin la otra.
Empezaremos con la peor, Elhena.
Aparentemente perfecta. Si la elegancia tuviese nombre o apariencia, sería el suyo. Sofisticada en extremo. Inteligente. Simpática. Extrovertida. No hay persona que dude de su nivel como mujer. Ahora bien, en privado, es una persona maliciosa. Estratega. Ambiciosa. Desde pequeña siempre la ha interesado mucho el dinero. Avariciosa y materialista. Es una persona, una mujer, pero con muy pocos sentimientos verdaderos. Sus relaciones siempre han sido puro placer físico, nunca ha llegado a creer en el amor aunque si que lo ha fingido. Como muchas otras cosas. Se podría decir que la única verdad dentro de su vida es su gemela. La única que la conoce como verdaderamente es y a la única que de verdad quiere. Solo ella puede hacerle sentir amor o preocupación, el que tenga su propio rostro es algo que desde siempre le ha afectado mucho. Además de ese "vínculo" especial entre gemelas, vínculo que solo conocen ellas.
Por el contrario, Serena.
No pierde la elegancia con la que ambas han sido "bendecidas" puesto que ha recibido los mismos estudios que su hermana. Formal en la palabra aunque solo en los momentos precisos. Es tímida. Sencilla. Humilde. Todo lo contrario a su gemela, completamente opuesta. Y, a pesar de eso, la quiere con locura. Tanto como Elhena la quiere a ella. No le gusta la mentira ni las apariencias que utiliza siempre su hermana pero la respeta como es. Ella por su parte es buena persona y sincera, casi el cien por cien del tiempo. Se preocupa por los demás. Es romántica, demasiado. Inocente. Risueña. No le gusta ostentar con el dinero que tiene si no es para ayudar a otros aunque su hermana odie esa parte suya. Debido a la sobreprotección de su gemela ha crecido algo ingenia fuera de esa estupenda vida que llevan, llena de lujos. Aun así es espabilada, aprende rápido. Trabajadora. Luchadora. Y la única persona que puede hacer más humana a Elhena.
Ambas fueron mordidas por la criatura que ahora ellas mismas son pero afectó mucho más a Elhena que a Serena.

Nacidas en Londres aproximadamente sobres el 1.750d.C y abandonadas en las puertas de un orfanato con a penas tres meses de vida. Por aquel entonces y en la zona donde vivían la pobreza abundaba en cantidad y, aunque les dieron techo por el echo de ser unos bebes, eso no significaba que viviesen como reinas. Ni mucho menos. Allí pasaron sus primeros tres años de vida hasta que el director murió y no hubo quien luchase por el lugar. Y ellas no fueron las únicas en quedarse en la calle, obviamente, los otros niños también quedaron sin hogar. Al principio estar juntos les ayudaba a sobrevivir pero llegaba un momento en que eso no era suficiente. Comida. Ropa. Necesitaban muchas cosas que no tenían ni podían llegar a tener. Fueron mordidas durante los años que pasaron como vagabundas con a penas cuatro o cinco años en un ataque al barrio. Teniendo en cuenta los peligros de las calles ya era mucho que no les hubiesen echo algo todavía peor siendo dos curiosas niñas completamente iguales y, muy bonitas. Pero no, les pasó algo que a muy pocos les pasaba ¿Ser mordido por un animal que te convertía en él? A penas eran unas niñas como para comprenderlo. Y, de echo, hubiesen muerto de no ser porque curiosamente la humana que se escondía tras esa bestia -llevada por los remordimientos.- las adoptó como hijas suyas. Y, junto a su marido, las ayudó a llevar una vida lo más normal posible. Juliette y François Van de Kamp. Una pareja Francesa que vivía en la zona alta de Londres únicamente por los negocios que mantenía el hombre. Empresario importante dentro del negocio que proporcionaban las guerras. Y, por otra parte, Juliette que tenía un par de negocios en el país natal y allí, donde había abierto uno nuevo.
Ya desde muy pequeñas Elhena se las apañó para sobrevivir y para cuidar de su hermana Serena. Tenía un carácter inteligente y, sobretodo, ansiaba los lujos que nunca habían tenido. Y que fue lo que las llevó a estar en un barrio que no tenia nada que ver con unas vagabundas como eran ellas por aquel entonces. Una vez que consiguió lo buscado tanto para ella como para Serena su carácter fue evolucionando y no precisamente en un buen sentido. Crecieron juntas y Serena por su parte desarrolló un carácter totalmente diferente, más parecido a esa madre que, aunque no fuese biológica, si era la verdadera para ellas desde que les salvó la vida. Elhena aprendió más de su ambicioso padre, el que le enseñó sobre los negocios. Sobre el dinero. Sobre la sociedad y sobre el como ganarse a la gente. Algo por lo que Serena tenía nulo interés.
Han pasado más de cuarenta años desde entonces y ellas mantienen su juventud igual que lo hacen sus padres; ambos con el mismo punto en común. Su maldición. Y la manera en que alguna vez todos fueron mordidos por la bestia que cada uno llevaba dentro. Viajando de un lugar a otro sus vidas continúan como personas totalmente iguales en apariencia pero completamente diferentes en su interior.

- Se desconoce los padres biológicos de ambas o si están todavía vivos. Puesto que ellas fueron mordidas vivirán bastantes más años. Tampoco tienen interés en conocerlo. Elhena solo querría conocerlos para matarlos aunque no lo haría porque Serena se lo impediría.
- Se profesan un amor extraño que iguala al vínculo que tienen. Sin embargo, no es romántico, solo fraternal. Aunque a veces si resulta físico. Elhena no cree en el amor romántico por alguien que no sea su hermana. Serena si cree que alguna vez se enamorará de alguien. Ambas ligeramente celosas con las compañías ajenas, Elhena más.
- Las dos desarrollaron las mismas habilidades sobrehumanas producidas por la maldición aunque a veces les cansa más usarlas si no están juntas.
- Aunque Elhena no cree en el amor, si lo hiciera, solo podría sentirse así por una mujer. Tal vez, por lo extraño que siente por su hermana. Pero los hombres solo le atraen físicamente y muy de vez en cuando. Por su parte Serena tiene los mismos gustos y pensamientos en ese aspecto. Los hombres le agradan muy de vez en cuando para el acto sexual, teniendo en cuenta que no lo practica muy a menudo. Y que cuando lo hace la mayoría de veces es con mujeres.