Conociendo al destino {Angelo}

Llamaron a la puerta temprano, el sabia que sus sirvientes estaban de vacaciones, se estaba quedando en un hotel por las remodelaciones, asi que no tenia caso que se limpiara cada dia cuando se tardaría mas en limpiar que ensuciar, venían una vez por semana a limpiar y organizar todo, de cualquier forma, mantenía todo cerradas las habitaciones en las que tenia cosas valiosas e iba a ver su casa por las tardes, revisando los avances, Ese dia llegaría el encargado de la carpintería, queria algunos tallados específicos y esperaba que el hombre que apareciese pudiese hacer el trabajo, el necesitaba aun artesano asi que tenia la impresión de que el hombre que llegase estaría entrados en los cincuenta tal vez, de constitución fuerte pero no grande, probablemente pequeño, con brazos fuertes pero nada impresionante. Un artesano en toda regla.

El sonido en la puerta le alerto que alguien llamaba, se quedo revisando los acabados de los techos y algunas cosas mas de su propia casa, le gustaban las cosas buenas y por ello la ampliación estaba tardando tanto, estaba tardando tanto, estaba cuidando cada detalle, la puerta volvió a sonar y frunció el ceño…por que nadie iba a abrir? Solo entonces capto que no habia nadie mas en la casa…diablos lo habia olvidado. Se encamino a la puerta y abrió sintiéndose extraño, no abría una puerta desde que era niño, era increíble como algo tan mundano y común se le hacia extraño, especialmente por la forma en que habia transcurrido su infancia. El no era viejo, andaba en los 30 eso le parecía una buena edad, pero cuando tus preferencias son contrarias a todo lo que dicta la sociedad y la religión uno podía sentirse bastante viejo y amargado aun a pesar de la buena apariencia.

Abrio la puerta y se extraño ante la imagen del hombre que se encontraba frente a el, su rostro lo reflejo y supuso que también la sorpresa al ver quien era- es usted el…carpintero?- pregunto con duda, no estaba seguro….posiblemente se habían equivocado de dia al enviar al hombre y vaya dios que hombre, tenia que levantar la cabeza para verlo a la cara, era bastante alto y dios mio que cuerpo era ese? Si no era el carpintero que posibilidades era de que fuese un cortesano? El pagaría por ese pedazo de… un momento un momento que diablos estaba pensando? A el no le iban los hombres grandes y menos uno que parecia estar al mando de todo, no señor el era siempre el que estaba al mando y eso no iba a cambiar sin importar lo endemoniadamente bueno que estuviese el sujeto frente a el- y quiero decir, adelante pase… solo pensaba que no tiene…la imagen que esperaba- comento y rápidamente recupero su seguridad habitual- le dijeron que era lo que deseaba? Por cierto, Mi nombre es Angelo, Pilato Angelo. Como puedo referirme a usted?- no importaba la clase que tuviese ahora, algún día había estado abajo y prefería tratar con respeto a todos, aunque no con familiaridad.

Se rió mientras entraba en el lugar después de que se le había dado permiso. Su mirada le recorrió casi desnudándole tan solo con ese gesto . Diablos, sí, le encantaría poder jugar con aquel lindo trasero -Bueno, no me han dado los detalles, pero sin duda soy el mejor -Sus palabras salieron con una deliberada doble intención. no importaba de qué se tratase estaba seguro de poder hacerlo mejor que nadie. Llevaba toda su vida en eso después de todo.

Aquella sonrisa estaba demsotrando aquella seguridad que se había ganado con el tiempo y además dejaba entrever aquel deseo que aquel le provocaba. Pero primero lo primero -Torrence - Contestó a su pregunta observando sus gestos. Sin duda acostumbrado a los lujos, muy al contrario que él hasta donde podía ver, pero eso no le quitaba para nada el atractivo. Su carácter era diferente a loq ue hubiese esperado. Observó por un momento la casa -Dime lo que quieres que haga con todo detalle - Dijo regresando a aquel rostro, humedeciendo sus labios con aquel movimiento lento y que era sin duda para que fuese notado por él. Solo estaba probando por ahora. Se movió rozándole los glúteos al pasar a su lado. Ni hablar, lo quería en la cama, ya estaba seguro de eso -¿Cómo debo llamarte Angelo Pilato?- Si, le hablaba con ese tinte de sensualidad porque realmente le daban ganas de tomarlo ahí mismo. Mm... había un problema aún mayor al parecer, aquella mirada...

No, no... más que un problema es que aquel tipo le excitaba. Podía ver en sus facciones relucir el orgullo, eso le ponía aún peor, quería tenerlo bajo su cuerpo, penetrarle con fuerza y verle gimiendo de placer por él.

No debía andar pensando en eseo ahora que estaba a punto dehacer un trabajo que probablemente no sería tan sencillo. Pero estaba bien, eso le daba el pretexto de permanecer cerca. Y bueno, tenía bastantes problemas, y justo en ese momento se le ocurrió una cosa que podía hacer, después de todo era un cambiaformas. Usaría eso de alguna manera.

Le observo, de reojo solamente, vaya que si el sujeto era orgulloso, frunció el ceño aprovechando el hecho de que no estaban de frente, no le gustaban los sujetos tan presumidos, ser seguro de si mismo estaba bien pero la arrogancia era un problema, además el sujeto era un grandulón, un fanfarrón, como los abusadores en las calles, no le sorprendería que el hombre tuviese alguna esposa por ahí y varios niños esperando que papa les llevase de comer, seguramente seria un hombre impositivo, si, si, como el lo veía podría ser incluso un golpeador. Mas relajado al imaginar la porquería de persona que aquel maldito sexy cuerpo podía ser se giro mostrando una expresión meramente profesional, como la que le mostraba a sus clientes.

- necesito algunos tallados, de hecho…varios, armarios, una barra para mi estudio y varias decoraciones, trabaja solo? Es mucho el trabajo que quiero pedirle y también me gustaría que se llevara a buen ritmo- rezaba por que el hombre trabajase acompañado, tener que verlo a solas no era bueno para su salud mental- y puede llamarme simplemente angeló descuide, de cualquier forma no creo que nos veamos demasiado, me gustaría ver como progresan las cosas pero no estaré sobre usted se lo aseguro- e intento convencer a su interior de la misma cosa, el no iba a estar ni sobre ni debajo ni de ninguna forma con aquel sujeto. Volvió a mirarlo y el hecho de que había gente trabajando constantemente en su casa le callo de golpe sobre el, por supuesto el ya lo sabia…pero era prudente estarce quedando en un hotel mientras todo eso pasaba? Es decir, el podría quedarse en una de las habitaciones lejos de la expansión y remodelación. No debería haber ningún problema, conseguiría algún sirviente que le atendiese por las mañanas y las tardes que era cuando se encontraba en casa, comería fuera, igual que en el hotel… claro, era lo mas sensato… puede que tuviese que toparse un poco mas con ese sujeto pero…estaba bien no era un cobarde- yo me eh estado quedando fuera pero pienso reinstalarme en una de las habitaciones esta tarde así que podríamos ir tratando obre por obra por separado y le pagare conforme las vaya terminando, eso esta bien para usted?

Escuchó con atención las instrucciones y una sonrisa de satisfacción algo visible apareció en su rostro cuando dijo aquello de que se quedaría por ahí. Así no tenía que buscar el hotel y esas cosas para poder acercarse, eso de alguna forma era un alivio, un poco menos de esfuerzo a la ardua tarea que tendría que hacer para lograr lo que quería.

Sobre el trabajo, estaba acostumbrado y lo que él había pedido era un poco tardado a veces, pero aunque le pagaban relativamente poco le gustaba hacer cosas como esa. Vio la expresión en su rostro y sonrió -La mayoría de las veces lo hago solo, pero traeré a alguien más para terminar más rápido - Era más para que confiara un poco, porque bien podía intentar hacerlo el mismo y probablemente terminaría en el lapso adecuado, además ya había pensado en lo que haría.

-Si, creo que de esa forma estará bien- Cada que clavaba su mirada en él era para analizar cada parte de su cara o de su cuerpo, una mirada por más insistente e insinuante, pero de verdad solo podía pensar en cosas poco decentes cuando le observaba. Supuso que el le ignoraría como hasta ahora y entre poner la suficiente antención y comérselo con la mirada no había ningún problema.

Ahora solo tenía que esperar a que diera la noche y se presentaría por ahí de nuevo, un poco más pequeño y con la firme intención de refigiarse allí, o entre sus brazos sería aún mejor. Aunque había visto la enorme conveniencia de tener una forma tan pequeña, no había agradecido nunca tanto ese hecho como en ese momento. Claro, habría cosa de las que se tendría que hacr cargo después si quería follarselo, pero ya iría viendo eso en el camino.

Sacudió la cabeza negando dando gracias al cielo por que el sujeto estuviese dándole la espalda- bien, le parece si hablamos de los honorarios? yo realmente no me involucro en nada de esto, asi que esperaría que usted compase el material se encargase del traslado e hiciera el trabajo, me daría cuentas de cuanto necesita para cada cosa y yo le pagare el material cada vez que lo necesite y su salario por obra terminada, eso esta bien?- comenzó a hablar, charlaron un poco hasta que todo quedo claro y el puso por fin despedirse del hombre. Ese dia decidió dejar que su contador se encargase de el trabajo, el realmente era un hombre responsable pero a aquellas alturas era poca la intervención que tenia en el negocio, sin embargo le gustaba enterarse de cada cosa que ocurría, sabia que si se descuidaba podría quedar en la calle siendo estafado en menos de un par de meses. Sin embargo un día no iba a llevarle a la banca rota, busco alguno hombres de confianza y se encargo de acondicionar la habitación que usaría, el resto de la casa permanecía cerrada, no quería que los estragos de la remodelación fuesen a dañar la casa, además no quería correr el riesgo de que alguien mas entrara. De momento el usaría un ala pequeña en la que tenia su habitación un pequeño estudio y el baño privado, todo lo que necesitaba para su estancia, dejo el hotel esa misma tarde y se la paso convenciéndose de que sus acciones poco tenían que ver con las ansias que le recorrían el cuerpo, posiblemente le había caído mal la comida… y esos estremecimientos eran un derivado de ello…

Por la noche estaba instalado y cansado como el infierno… solo quería irse a la cama pero sabia que debía tomar un baño o no estaría a gusto, bendiciendo las bondades del agua caliente dejo el agua corriendo, había cosas a las que nunca se acostumbraría y una de esas era a tener a alguien mas con el en el baño, prefería hacerlo por si mismo. Estaba por entrar al baño cuando escucho rasguños en la puerta y extrañado fue a abrir, por la altura se pregunto si seria un gato… a esa parte no podían llegar los extraños pero estando solo alguien podría habérselas ingeniado. Tomando su arma abrió lentamente la puerta y una preciosa bolita amarilla entro corriendo, extrañado volvió a cerrar la puerta viendo a la hermosa cosita corriendo por la habitación- oye…si que eres una cosita bonita- de donde había salido ese pollito? Sonriendo se acercó y noto lo amigable que era- lamento si tienes hambre amiguito, no tengo comida aquí… de donde saliste?- bien el podría quedárselo esa noche… - puedes quedarte aquí, pero te lo digo, no tengo comida- hablo levantándose y comenzándose a sacarse la ropa de camino al baño, graciosamente el animalito lo siguió y el le sonrió- quieres acompañarme? Bien, pero no puedes entrar, puede hacerte daño- hablo metiéndose al agua y cerrando los ojos, si lo pensaba bien…necesitaba una mascota.

Spoiler:

Vio al pequeño animalito batallar y entrar con el y soltó una risita divertida- que pretendes pequeño?- la pequeña cosa se movió contra el y comenzó a picar una de sus tetillas, eso le causo gracia y rio divertido- basta, te dije desde un principio que no tenia comida! - tomándolo en una mano y separándolo de el- ven aquí- dijo con una sonrisa, depositando un beso en la cabecita amarilla- eres realmente una cosa bella, espera posiblemente aun quede algo en la cocina- y dejando al animalito en el suelo salió de la bañera para terminar de lavarse rápidamente y colocarse algo encima, sentía que su cuerpo necesitaba algo mas para relajarse, llevaba cierto tipo de tensión sobre el desde la mañana... pero... tocarse frente al animalito se le hacia demasiado torcido... ya sentía suficiente vergüenza consigo mismo por lo que sentía como para agregarle mas.

Se vistió rápidamente con unos sencillos pantalones y una camisa, obviamente de la mejor calidad y salió de la habitación buscando la cocina, estaba sin usar desde hacia un tiempo pero debia poder encontrar algo, busco, rebusco y no encontro nada... de todos modos que comian los pollitos? serviria algo de fruta? pensando eneso camino al huerto, fresas... era invierno asi que no habia...tampoco habia mucho, recordo el durazno del pario y salio, habia un par perfectos para comer...bueno podia intentarlo. Regresando sobre sus pasos volvió buscando al animalito- pequeño traje esto pero no se si lo comas- hablo entrando a su habitación y poniendo los duraznos en el suelo. Era tarde y necesitaba dormir...tenia muchas cosas que hacer... entre ellas volver a encontrarse con aquel hombre- dios es tan sexy...- jadeo al aire y despues emno la cabeza negando- y un jodido gigante que mas da no pensar no pensare en el- Y se lanzo a la cama dispuesto a dormir. No iba a apagar las luces por el animalito, dejo las luces encendidas.... el...no podia dormir en la oscuridad.

Los ojos el pesaban, pero estaba despierto ya…o en camino de despertar, se estiro en la cama y sintió los huesos ceder, sonrió un poco, había tenido un agradable sueño, unas manos granes acariciando su cuerpo… se sonrojo un poco y se levanto despacio sentándose en la cama, movió el cuello, sus huesos nuevamente protestaron “me hago viejo” pensó con un suspiro interno, intento salir de entre las sabanas pero un peco extra sobre ellas llamo su atención, sonrió al notar que el pollito se había dormido a su lado y afortunadamente sin ningún incidente. Acaricio la cabecita del animalito- hora de levantarse aunque supongo que tu puedes quedarte aquí… - volvió a estirarse despertando por completo- ah…- bostezo- tengo que darme un baño y… ir donde ese sujeto no debe tardar en llegar- debía darle dinero para que comenzara a trabajar como era debido, aunque el tenia algo de material con lo que podía haber iniciado seguramente necesitaría cosas de las que el no tenia conocimiento. Esa mañana no seria un baño completo solo una ducha rápida para relajarse…oh si el agua caliente le vendría bien.

Se levanto teniendo cuidado de no tirar al pequeño animalito de la cama y fue al baño, le gustaba estar de vuelta en casa, se preguntaba como es que había podido vivir tanto tiempo en el hotel, no era lo mismo que estar en su hogar, donde tenia todo lo que necesitaba y a lo que estaba acostumbrado e su rutina diaria. Salió del baño mucho mas relajado, el reloj de la pared le decía que debería comenzar su dia pronto, se había tomado el día anterior así que hoy tendría que ir a supervisar el trabajo en las bodegas y el puerto también… sus trabajadores podían encargarse bien de todo pero no quería arriesgarse a perder el control sobre lo cuyo, se arreglo y vistió, pensó en desayunar pero como había comprobado el día anterior no había nada en la cocina, antes de ir a trabajar tendría que buscar sirvientes temporales para que se hicieran cargo de sus necesidades, de momento iría a desayunar al restaurante de Erico, con suerte lo encontraría y podrían desayunar juntos.

-pequeño- le hablo al pollo pero cuando lo busco no lo encontró… mmm posiblemente se había ido? Reviso debajo de la cama y cerca de los muebles… como diablos abría salido de la habitación? Estaba seguro de que había dejado la puerta cerrada…. Bueno. Ahora a ver si el neandertal ya había llegado.

Había pasado unos días horribles en los últimos días le había tenido que cerrar la puerta al pollito para darse un baño, era solo un animalito pero aun asi era extraño tenerlo ahí, especialmente cuando lo que deseaba ahí adentro era descargar su frustración y dejar que su mano le diese el placer que jamás iba a obtener de otro ser humano, era frustrante pero sabia que sus deseos estaban mal, que excitarse con otro hombre estaba mal, por treinta años habia podido esconder y controlar perfectamente sus deseos a pesar de haber pensado en algún momento en dejarse llevar en buscar placer en un burdel el miedo le congelaba, que si alguien le veía? Que si alguien hablaba y todos sabían su secreto?

Desnudo en el baño cerro los ojos y llevo su mano a su entrepierna, sonrojándose se acaricio no queriendo solo sentir, pero cuando las imágenes pasaron por su cabeza no pudo contenerse, un cuerpo masculino…duro… y de repente aquel cuerpo cobro forma, la de un hombre grande, duro, con aquella piel canela que le hacia querer lamerle por completo- ah…- jadeo acariciándose con mas fuerza y su trasero hormigueo…si…en su imaginación ese hombre le tomaba con fuerza, le jodia sin parar… el orgasmo le sobrevino y su mente se te quedo en blanco algunos segundos… cuando se recupero se sintió mas avergonzado que nunca y con rapidez se baño quitando los restos de su desliz… la erección mañanera era normal pero como diablos se explicaban las fantasia con un hombre? Con un hombre especifico para ser exactos?

Nervioso salió del baño, para variar el pollito ya no estaba, suspiro sabiendo que en la noche cuando volviese ahí estaría de nuevo, se vistió e intento alejar los recuerdos de su mente, cuando salió y vio a el protagonista de sus fantasías sintió que el calor en la habitación aumentaba, con cuidado de no verlo cruzo la habitación- buenos días- dijo en voz alta por mera educación y usando iba a salir cerro la puerta con fuerza, estaba arto de ese sujeto- no siente vergüenza de ver de esa forma a su jefe, un hombre debo recordarle!- como es que podía ser tan descarado cuando el se estaba muriendo de frustración?

Su dia había comenzado bastante… intenso, después de su ya acostumbrada sección en el baño que lo dejaba mas avergonzado que satisfecho había tenido que enfrentarse a aquella “cosa” que tenia su mundo de cabeza. En el trabajo había estado insoportable todo el principio de la mañana, sus trabajadores parecían haberse acostumbrado a ellos porque ninguno parecía ya mosquearse con su actitud, suponía que habían notado que a media mañana, cuando la frustración se calmaba un poco volvía a ser el hombre aunque distante educado y justo de siempre. Ellos al parecer lo entendían y si no lo hacían disimulaban bastante bien. Siempre le costaba comenzar a concentrarse en el trabajo, sus pensamientos iban de entre el negocio y el bien esculpido torso desnudo de su trabajador… completamente disponible y dispuesto, solo aparentemente esperando a que el diese un paso para tenerlo para el… pero no podía confiar en las apariencias, torrence era demasiado descarado para ser algo…seguro. El hombre era impresionante, aun si no estaba podrido en dinero las mujeres no debían faltarle y no dudaba que por las noches cuando se marchaba de su casa buscase alguna en la cual desquitar su lujuria olvidando por completo al aburrido hombre para el que trabajaba… Seria posible que torrence hubiese notado sus preferencias? Lo abria mirado demasiado insinuante la primera vez que se habían visto? Seria eso? Si torrence lo había averiguado probablemente se reía de el no solo a sus espaldas si no en su maldita cara cada vez que el se removía incomodo ante sus insinuaciones. Dios… aquella situación lo iba a matar, no podía tener mas tiempo cerca al hombre, al menos no de aquella manera…

Esa tarde cuando regreso a su casa agradeció que torrence aun estuviese ahí cuando entro, el sujeto parecía que había terminado su trabajo y guardaba sus instrumentos…verlo agacharse…moverse sin nada mas que los pantalones y los zapatos encima era una visión que por si sola lo dejaban atontado, pero no pensaba dar muestra en lo mas mínimo de ese hecho. Espero a que el hombre terminara antes de hablarle- buenas tardes…- saludo entrando por completo a la habitación y recargándose de la barra que el hombre estaba ya terminando…era un trabajo realmente precioso. O era lo que sacaba su mente antes de que la enorme mano del sujeto se apoderara de su trasero en un saludo… eso no era un saludo!! Sintió un torrente de emociones arremolinarse dentro de el, pero cerro los ojos y se dijo que tenia que calmarse…por mas que su cuerpo intentase dar respuesta a aquel sujeto el no debía permitirlo- haz terminado por hoy torrence?- pregunto intentando sonar lo mas calmado posible, debía hacerlo, el era el ser pensante de aquel dúo… claro…pensante… aunque de ser sinceros la cabeza que mejor reaccionaba ante la presencia del sujeto no era precisamente la que tenia sobre la cabeza- quieres venir a la cocina conmigo un momento? Te invito algo de beber, quisiera hablar un poco contigo…- era tiempo de arreglar aquel fiasco, no podía simplemente seguir veviendo de aquella forma.

Angelo frunció un poco el ceño ante la forma apresurada del otro de beberse su caro vino- hey disfrútalo, no es precisamente una bebida barata- era un pecado tomarse así aquella delicia, estaba seguro que el otro ni siquiera había podido apreciar el sabor de la bebida de la forma apresurada en la que se lo habia tomado… aunque… desvió la mirada a otro lado tomando aire, su garganta pasando el liquido habia sido una vista…buena, es decir no es como si lo hubiese notado demasiado.

Tomando un trago de su vaso vio de reojo al sujeto, es estaba siempre tan concentrado en no verlo que no había notado lo cansado que se veía…tal vez hablar con el de aquella manera no era la mejor idea…el sujeto merecía algo de descanso. Tenia que admitir que el trabajo habia avanzado bastante bien en los últimos días y que de hecho era mucho mejor de lo que el habia esperado, fuera de sus comentarios hacia un excelente trabajo y no podía quejarse de que alguien hubiese robado algo de su casa en aquel tiempo. El sujeto era honesto y eficiente, no sabia para que era que se esforzaba tanto, por lo que el sabia bien podía tener una esposa y una camada de niños esperando por el cada noche en casa… el solo seria una buena broma pero… por lo mismo no podía seguir permitiendo todo aquello. No tenia que encontrar una forma de decirle que todo aquel… lo que sea que fuera debía terminar… asi el podría conservar su cordura.

Sirvió un poco mas en su copa y buscando relajarse, tomar algo de valor para aquella incomoda conversación llevo la copa propia a los labios, el sabor exploto en su boca y cerro los ojos sintiendo que el licor comenzaba recorrerle el cuerpo.

“Entonces ¿quieres joder?”

La pregunta llego a sus oídos haciendo que escupiera parte de su valioso vino y algo mas fuera por el lugar equivocado haciéndole ahogarse y toser copiosamente intentando que todo fuese por su rumbo nuevamente. Tardo solo unos segundos que levantara sus ojos inquisidores increíble imbécil que le había hablado, su mente formo una respuesta perfecta “disculpe que dijo?” posiblemente el hombre se acobardaría o efectivamente había escuchado mal, de ser asi quedaría en ridículo si mencionaba algo y quedara de revelado los pensamientos que inundaban su cabeza. Su cerebro trabajo de la forma correcta, lastima que su boca no pareciere escucharle- imbécil - exclamo mostrando indignación y un visible sonrojo posiblemente venido de la vergüenza ajena, posiblemente por el ahogo que habia sufrido o tal vez simplemente por el latigazo de excitación que le recorrió el cuerpo- no pienso tener nada que ver con usted- y entonces noto su error, debería haber dicho algo que diese a entender que los hombres no le interesaban en lo mas mínimo, que le asqueaban como a todos, pero no, tenia que ir y decir que solo ese sujeto en particular no le interesaba… y no le interesaba, no era su tipo. A el le gustaban del tipo de yeremeya, pequeños y bonitos. De no se por su amistad y por que el chico era condenadamente joven posiblemente hubiese intentado algo con el… en cuanto saliera de su cobarde trasero. El hombre frente a el no tenia nada que ver con “problema” no para nada, era enorme y duro… se estremeció de preguntarse que tan duro estaría el sujeto justo antes de darse una patada menta- y eso quería decirle, la falta de respeto que muestra hacia mi podría costarle el trabajo- el no quería despedirlo… de hecho dudaba que se atreviera a hacerlo. Era estricto en cuanto a negocios se trataba pero… no podía con torrence… se justifico diciéndose que era por lastima.

Tomo aire dejando la copa de vino sobre la mesa y se dijo a si mismo que al menos ya habia comenzado con el tema, por mucho que el comentario de Torrence le hubiese sacado por completo de sus cabales. Descolocándolo de su punto de estabilidad.

“Seguro que no quieres mi pene en tu culo en lugar de tomar ese caro vino?”

Las palabras no llegaron a su cerebro, viajaron directamente a su entrepierna y su pene dio un respingo de aprobación mientras su trasero se contraía de pura ansiedad y deseos de que el sujeto verdaderamente se metiera bien adentro duro y de ser posible repetidamente… dios dios que estaba pensando, el sujeto no era su tipo!!! Tomo aire y aunque no lo sabia sus ojos se habían dilatado con el deseo de un niño al que le ponen caramelo enfrente, un niño muy muy caliente- claro que si…- susurro con un amago de voz y quería decir que claro que lo deseaba que lo hiciera ya, pero gracias a todos los dioses conocidos la cordura volvió a su mismo- claro…claro que estoy seguro- buscando la copa de vino en el mostrador, como esperando que tenerla entre su cuerpo y el muy deseable cuerpo ajeno le sirviese de escudo.

Dio un paso atrás y como un cobarde le dio la espalda, no podía verlo, si lo seguía viendo si lo seguía teniendo tan cerca se iba a dejar en ridículo a si mismo- que le quede claro Torrence, mi relación con usted es meramente de trabajo- oh dios el escalofrío que recorría su espalda no se estaba calmando- será mejor que dejemos este tema y esta- tomo aire- incómoda situación y me volvamos al trabajo, dígame que necesita para continuar.