Humillante pero a fin de cuentas, un trabajo { chase }

Si... aqui tiene - era humillante trabajar en aquella taberna de tres al cuarto pero por dios que como no cobrase un buen sueldo esa noche quemaria aquel local haciendo la primera mala accion de toda su vida, estaba sustituyendo a uno de sus compañeros que iba a ser despedido asi que no tuvo problemas en decir que venia en sustitución mientras su compañero estaba con su novia paseando. El tenia planes pero al verse subitamente cancelados fue el unico idiota al que acudieron para trabajar en ese lugar...se rascó la mejilla escuchando los gritos de algunos borrachos que le pedian a gritos su cerveza o su whisky e incluso los mas borrachos empezaban a inquietarle cuando le pedian cariñosamente que se acercase.

El odiaba beber, era abstemio o eso pensaba ( alguna que otra vez habia bebido y no le habia gustado los resultados ) cuando todos estaban satisfechos solo escuchaba los canticos de los hombres mientras otros lloraban o intentaban simular momentos eroticos vividos con alguna mujer, lo cual era asqueroso no poque fuera sexo o porque se asustase facilmente sino porque hablaban de la mujer como si fuera un objeto, ellas no eran un objeto claro que no. se sentó en un tiempo que tenia de descanso siendo el unico idiota que tomaba una taza de cafe para mantenerse despierto, cruzó las piernas con un libro de literatura egipcia escrito en su idioma nata, era dificil encontrarlos asi por eso le hizo ilusion que le regalasen uno.

Un hombre le llamo, el no tuvo mas remedio que desatender la lectura para colocar otra jarra de cerveza y llevarse la que estaba vacia, despues empezo a fregar, ya se habian acumulado un buen montón de tazas sobre el fregadero pero como ahi cada uno estaba haciendo lo que le daba la gana sinhué tuvo que ponerse a fregar el mismo, sabia por algunos sonidos que habia escuchado en el almacén que los demás estaban demasiado "ocupados" como para dedicarse a estar en la taberna- ahora voy -dijo en alto al notar que alguien entraba- Bienvenido

-Sonrió al muachacho nuevo, le agradaba al menos no tenia un aire de borracho como habia aprendido a reconocer en los hombres, unos estaban dormidos asi que sinhue no tuvo reparos en quitarles la cartera contar el dinero que debian pagar y devolverles la cartera sin haberse llevado ningun billete de más aunque tentación y ganas no faltaban, después de un rato los que dormian ya habrian sido buenos clientes y habrían pagado, asi no tendria que escuchar los gritos del dueño llamandole inutil-

- Oh Danny boy, the pipes, the pipes are calling~~-su voz sonaba algo temblorosa por la dificultad para respirar, había estado corriendo por las calles de parís con el viento en el rostro buscando algo que anulara aquel estado de aburrimiento en el que callo después de su encuentro con un gitano muy divertido pero algo amargado, se había detenido al tomar una copa en un bar irlandés y la música se había quedado pegada en su cabeza por ello un después de pagar la cuenta seguía cantando como un verdadero retrasado mientras intentaba recuperar el aliento , sin mucho éxito por cierto, ya que insistía en entonar mientras sus pulmones permanecían completamente vacíos.
Miro hacia adelante, ahí estaba el lugar donde encontró al gitano la última vez, no esperaba verlo nuevamente pero seguro que aquella barra le traería buena suerte y aunque los borrachos solían ponerse insoportables a él le parecía divertido observarles de vez en vez mientras perdían la cabeza tras una copa de licor, además, en esa clase de lugares los rumores corrían como el agua de las cascadas ya que al estar alcoholizados solían tener una lengua mucho más escurridiza que en un estado de sobriedad. Avanzo unos cuantos pasos entonando su canción

- 'Tis I'll be here in sunshine or in shadow, Oh Danny boy, oh Danny boy, I love you so…-se interrumpió a si mismo mientras era recibido por uno de los meseros de la taberna, ellos jamás habían hablado sin embargo Chase sentía una cierta familiaridad con el muchacho debido a que era una de las personas con las que más trataba a pesar de que no interactuasen directamente, sin embargo eso no quitaba que sirviese sus tragos cada vez que llegaba a beber como barril sin fondo, además, cuando no había nada más que hacer y sus compañeros de juerga ya estaban noqueados el solía sentarse a tomar licor con más calma y observaba al único cuerdo de la taberna, el pobre no parecía estar realmente a gusto con su trabajo ahí, de vez en cuando lo atrapaba leyendo algo que parecía los suficientemente complicado como para que nadie en toda la taberna quisiese preguntar acerca del contenido- Hey!!!!!-saludo agitando la mano de una manera algo confianzuda para acto seguido entrar y sentarse en una mesa mientras esperaba a ser atendido

Noto como el joven mesero tomaba el dinero de las carteras de aquellos que ya estaban demasiado borrachos como para poder siquiera levantarse y cobraba lo de los gastos del consumo, sonrió un poco dejando caer su rostro sobre la mesa de una manera algo perezosa, el camarero se comportaba con tanta naturalidad que se notaba que aquello era parte ya de su rutina diaria como trabajador en esa clase de lugares en los que se juntaba la gente problemática, más de una vez había visto al joven despachar a uno que otro pobre perdedor que solía comportarse demasiado cariñoso , ellos normalmente se excusaban diciendo que se encontraban pasados de copas pero, ese no era el caso la mayoría de las veces

- Seguro que trabajar aquí debe ser entretenido-comento sin pensarlo- conoces a toda clase de borrachos en este lugar-comento riendo graciosamente, era la primera vez que le dirigía la palabra para otra cosa que no fueran sus tragos pero antes no había sentido ninguna necesidad de ello

-Cuando aquel chico se acercó sinhue se sintió quizás algo más tranquilo, estaba cansado de tener que contar las jarras que se habia tomado cada uno, las matemáticas no se le daban del todo mal pero en ocasiones siempre tenia que ir al encargado decirle lo que habia tomado cada uno y finalmente cobrar lo necesario, aunque aun estaba familiarizándose con los francos, en egipto tenían otro tipo de moneda distinto asi que le era bastante raro la moneda que había aquí. Sinhue le miró cuando dijo aquello de "divertido trabajar aquí" o se refería sobre todo a las tabernas en general lo de los borrachos era cierto eran criaturas que nunca sabías como iban a actuar o una de dos o eran demasiado predecibles o tenías que andarte con cuidado pues como no pusieras identificar que tipo de borracho era tenías muchos problemas.

Sinhue tenía un largo pasado de trabajar con borrachos, los guardías se emborrachaban cuando él trabajaba, de ese modo había aprendido a diferenciar los borrachos inofensivos que eran aquellos a los que tomaba la cartera para el dinero de la consumición de los que causaban problemas, era un experto en esos temas después de lo que habia pasado a lo largo de los años, un mechón rubio se movía deliberadamente anunciando cuando se movía el gitano. Tenía apariencia bonachona de un hombre casi siempre tranquilo, una sonrisa suave con sus arrugas marcadas indicaban socarronamente que el gitano siempre sonreía y si no lo hacía pasaba algo parecido porque no abandonaba esa apariencia pacífica que tenía-

Si tu lo dices -Sus palabras no fueron una burla sino más bien curiosas, una mezcla de pensar si era entretenido lo que hacía o si de verdad lo que había escuchado era una ironía o una broma, lamentablemente uno de los borrachos le miró pero se calmó al instante eso si que era una buena noticia, no quería problemas en el trabajo- ¿Qué quieres de beber? -Se perdió un momento, escucháronse algunos sonidos hasta que salió con una pequeña marmita que utilizaban sobre todo para cocinar sopas o cocidos- Voy a preparar algo para comer ¿quisieras probar?.

Era algo bastante raro el hecho de que alguien no estuviera borracho se sentía algo solo por lo que se volvió algo parlanchin cuando alguien le daba conversación aunque debió darse cuenta de que estaba hablando más de lo normal porque se dispuso a volver a tomar los ingredientes, en verdad eran como sobras lo que estaba cogiendo por eso le habían dado permiso, hechó algo de agua para que ésta empezase a hervir mientras él cortaba la carne, las verduras pelando también alguna que otra patata con visible rapidez, sabía bastante sobre la cocina aunque no fuese un "cocinitas" al menos se defendía entre los fogones.

La frente de Sinhue se arrugaba brevemente mientras él fruncía el ceño para pelar las cosas sin malgastar la comida suficientes recuerdos tenía de cuanto se valoraba los alimentos en su tierra natal, en egipto no se comía demasiado especialmente los esclavos comían lo necesario para estar en pie, algo de agua una papilla y posiblemente si tuvieras suerte un poco de carne, el agua no faltaba pero no podías abusar porque ir al baño todo lo que quisieras tampoco era posible, mientras se perdía en sus pensamientos iba cortando y añadiendo a la sopa, finalizando con un gran hueso de pollo que le daría un sabor agradable al caldo condimentado que estaba preparando-

Silver sonrió al ver que el pobre camarero parecía relajarse un poco, el ambiente en aquellos lugares era agradable para los borrachos pero probablemente no lo fuese para los camareros teniendo que soportar a diario el olor a ebrio e incluso cuando se dormían el olor a crudo, anexando a la lista las impertinencias de algunos que no sabía manejarse correctamente cuando el alcohol tomaba control de sus acciones, podía imaginar que de seguro tenia alergia a los borrachos a esas alturas. Sonrió más ampliamente ante aquel pensamiento mientras se imaginaba al muchacho estornudando como loco al encontrarse cerca de algún ebrio, una alergia como esa seguro que sería de mucha utilidad en la sociedad, al menos las mujeres inventaría remedios caseros para contraer dicha alergia y los hombres perfumes para ocultar su problemas, a veces seguro que sería al revés.

Recargándose perezosamente en la mesa de madera la cual se encontraba adornaba con un montón de vasos vacíos, llevo una de las manos a su cuello jugando con un pequeño círculo de metal, se trataba de un relicario en el cual cargaba una foto de su Lucas, su adorado Lucas, hacía ya mucho tiempo que no le veía y le extrañaba como el infierno, desde que dejo Italia el era la unica cosa que lograba hacerlo levantarse por las mañanas eran los recuerdos de Lucas, mientras bebía pensaba siempre que si llegaba a emborracharse entonces podría olvidar a Lucas, pero el en realidad no deseaba hacerlo, además, el prometió jamás volver a embriagarse, él no podía estar con Lucas a menos que dejase aquel estilo de vida agitado que le caracterizo durante sus años de adolecente, aunque claro, ahora aún seguía viéndose como un adolecente

- Ammmm dame…-se quedó pensativo durante unos momentos mientras punzadas de culpa por el licor bebido llegaban a su pecho, aunque no lo admitiera jamás la verdad es que después de sus días de fiesta siempre se sentía culpable por haber tomado, esta vez el sentimiento llego un poco antes que la madrugada así que miro al camarero con el rostro un poco amargado durante unos segundos y después sonrió de nuevo recordándose a su mismo que si su ceño se marcaba cuando volviese ver a Lucas este sabría que le había puesto mala cara a alguien- Un café por favor-pidió enderezándose lentamente hasta que su espalda se dobló sobre la silla, se sentía tan perezoso cada vez que era consciente de sus movimientos, pero enseguida recupero energías al ver al muchacho trabajar, si tenía hambre pero no sabía que cosa pedir de comer, quería algo liquido así que cualquier cosa estaba bien- Vas a cocinar para mí?? Porque parece como si fueses un gran cocinero, yo por mi parte, no me alimento nada más que de carne cruda de animales cazados en el bosque, pan y agua-comento riéndose, la verdad es que siempre fue más fácil satisfacer sus necesidades cuando se encontraba en su forma de lobo- Y digo carne cruda porque a lo que hago no se le puede llamar cocido de ninguna manera!!!-exclamo exagerando la oración al darse cuenta de que podría estar cometiendo una imprudencia, siendo nuevo en todas esas cosas de los cambiaformas la verdad era que le costaba un poco ser discreto en cuanto a eso.

La verdad es que el mismo había utilizado las garras que salían de su cuerpo transformado para atrapar a sus camaradas cambiaformas, el jamás le dio muerte a ninguno ya que siempre dejaba ese trabajo a algunos de sus compañeros, en la inquisición no faltaba gente que amara el sabor de la sangre como la próxima respiración, y si podía aprovecharse de ellos pues no había otra cosa que hacer, su única prioridad en esos momentos era la de sacar a Lucas de Italia.

-Esperó con paciencia a que le dijese que era lo que deseaba tomar, mientras barajaba las opciones que tenía para satisfacer al cliente como la cerveza, el ron...por eso los dedos de sinhue tanteaban sin apremio las botellas que estaban dispuestas bajo la maraña de algunos vasos sucios imposibles de limpiar. Era el mejor sitio para que los borrachos perezosos no metiesen la mano del mismo modo que era también buen lugar para que no cogiesen las mejores botellas, estaban a la vista de todos botellas que parecían de gran calidad llegando a ser sino unas copias de las originales en vista de lo que sucedía cuando los hombres bebían más de la cuenta- Café -sus dedos se detuvieron sobre una botella de licor añadiendo a sus dedos un poco de polvo mientras no podía disimular la sorpresa en su rostro ¿café? nadie pedía cafe por eso fue imposible disimular aquella sorpresa que le había dado- Oh perdona, perdona -se dio cuenta de que habia estado mirando fijamente al muchacho sonriendo algo apenado.

Sinhue era un libro abierto en cuando a disimular sus reacciones o lo que quería decir mejor, que no podía mentir. Pocas personas en el mundo eran necias a la hora de mentir pero él era una de esas personas por eso su rostro cambiaba según pensara las cosas como por ejemplo ahora, de sorpresa ya que antes paciente estaba dedicándose a aquel vaivén de sus dedos con las botellas. Movió el pulgar con el índice zafándose de un poco de polvo que aún había incrustado en su piel, despojándose éste a regañadientes mientras salía al fin de su ensimiasmiento empezando a preparar el cafe, para ello tuvo que entrar de nuevo en el almacén para sacar una pequeña bolsa que tenía granos molidos de café ya preparados de primera mano para servir. Puso a hervir el agua en la cafetera hechando el cafe procurando que no quedase demasiado aguado- La gente de aquí lo que menos pide es café -se recordó a si mismo pero también en voz alta ya que al menos por el poco tiempo que habia estado allí cuando le tocaba sustituir a alguien la gente solo pedía alcohol en vasos demasiado grandes.

Una vez preparado el cafe lo depositó con un sonido suave que parecía incluso un suspiro por el modo en el que el plato reposaba ahora vagabundo en la mesa. Un ronquido fuerte arruinó el momento de silencio mientras el aroma a café le hizo sonreír involuntariamente escuchando lo que decía el muchacho ¿carne cruda? -tuvo que apurarse en mover la comida se estaba quedando pegada por el final y tuvo que poner empeño a la hora de mover lo que él estaba haciendo, un estofado en toda regla- Al menos la carne cruda no disminuye sus propiedades -dijo en tono de broma llenando un vaso con agua para beberlo. Se sentó nuevamente relajando los músculos de cada parte de su cuerpo mientras sus ojos ausentes vagaban por el alrededor. No se dedicaba 100% al ocio porque una parte de él siempre estaba pendiente de lo que era su trabajo e incluso aunque significase un comportamiento maleducado para la persona que le estaba hablando él seguía haciendo lo que significaba cumplir con su deber-

Podría venir cuando quiera -su voz obtuvo por un momento un nivel más neutral que el propio silencio volviendo una vez más a centrar su atención en la comida mientras miraba a los ojos de aquel muchacho con una sonrisa jovial- No es bueno que no te alimentes bien -como el estofado estaba listo depositó un cuenco al lado del café, el cuenco que a primera vista estaba vacío poco tardó en llenarse con las implacables cucharadas de Sinhue que no paró hasta contemplar que el cuenco estaba a rebosar de comida- va por cuenta de la casa -Esas palabras salieron con diversión al pronunciarlas, jamás había invitado a nadie a probar su comida que no era del todo buena por eso sinhue se hizo eco de algunos síntomas de timidez mientras esperaba que le gustase, cogió otro cuenco volviéndolo a llenar pero especialmente de caldo, le gustaban los alimentos con cuchara- lamento mi indiscreción pero -se trastabillaba en algunas palabras alzando el rostro mientras tomaba un sorbo de su cuchara, hacía ruido al sorber era inevitable asi que cuando tragó volvió a hablar- ¿te comes la carne cruda? no la aliñas aunque sea con sal o con aceite -para él no era raro eso, en egipto cuando tenías hambre hasta las cucarachas eran un manjar-

El joven parecía bastante sorprendido, una mueca como esa debió haber puesto el cuando se entero de que su querida hermana esta embarazada, con dieciséis tiernos años estaba esperando a una criatura sin padre, una criatura destinada a vivir en las sombras, ocultas de la sociedad curiosa de Florencia y posteriormente Venecia, lugares donde ella había llevado su condición de manera clandestina hasta que murió durante el parto, rio divertido, no era que la muerte de su hermana le pusiese de buen humor, no era eso para nada, lo que pasaba era que si hacían la comparación quizá su mueca fue mucho mas graciosa que la que coloco aquel muchacho en su rostro, ¿Qué tan atípico seria que pidiese café en una taberna? Bastante al parecer, con toda la experiencia que el mismo desarrollo en esa clase de lugares probablemente solo un 5% de los que llegaban a divertirse no pedía bebidas alcohólicas, sin embargo el debía bajarse ya consumido pues al día siguiente tenia trabajo en la inquisición, de modo que pasar la cruda lo mas rápido posible era lo mas recomendable

- Jajaja no te preocupes, supongo que no es tan común que tengas esa clase de pedidos!-Comento animadamente mientras le observaba hacer su trabajo, sinceramente le parecía una persona agradable, que como ya había mencionado anteriormente le daba un increíble sensación de familiaridad debido a las numerosas veces que visito la taberna anteriormente, muchas veces cosas cotidianas como esa le daban un sentimiento de pertenencia bastante agradable, su mirada siguió atenta todos los movimientos del joven quien había ido por los granos al almacén, probablemente la calidad de los granos que se manejaban en la taberna no se compararían para nada con los que había consumido en su amada Italia, en aquellos días en los que vivía la gran vida disfrutando de los placeres que Venecia le ofrecía, todas las mañanas el olor al café le despertaba de sus sueños haciéndole levantarse con el rubio cabello alborotado hasta la mesita en donde los sirvientes colocaban la bebida dejándolo ponerse presentable para que sus padres ignorasen cualquier trajine cometido la noche anterior- Delicioso!-exclamo sin sorpresa real al probar la bebida, sinceramente el café que le preparaba en su casa le traía buenos recuerdos pero siempre fue un café asquerosamente preparado, este sabia realmente bien, cosas que había podido deducir por el olor que emanaba de la taza humeante llena de aquel caliente liquido casi negro

- Lo hare, pensaba que la carne cruda era lo mejor, pero creo que me equivoque-exclamo después de tomar el primer bocado, después de tanto tiempo alimentándose de animales en el bosque aquello le caía de perlas, su estomago pareció resentirlo pues una tensión que no sabia que tenia acumulada se disperso rápidamente hasta evaporarse con el ambiente, ciertamente era mitad humano también y esa mitad humana esta exigiendo que le diesen el respeto que se merecía, su rostro se levanto evaluando la situación al escuchar las preguntas del muchacho, la boca llena que prácticamente devoraba cada trozo de carne en su plato comenzaba a volver mas lento el periodo en el que masticaba preguntándose mas o menos que contestar a aquello, sus pozas azules permanecieron como deslumbradas durante unos mínimos segundos hasta que trago la carne y tomo un sorbo de su café quemándose un poco la lengua- Como hormigas, chapulines y carne de conejo…-exclamo, ciertamente las dos primeras las había comido pero tostadas sobre el fuego, sin embargo la carne de conejo…bueno en realidad no sabia como llamar a enterrarle los dientes y arrancar-o venados… todos los como sin la piel y los cazo yo mismo en el bosque- termino por resolver al notar la manera tan natural en el la que le había preguntado acerca de sus practicas alimenticias-Tengo algunas costumbres extrañas de alimentación, es todo culpa de la iglesia que no paga lo suficiente- Exclamo de modo dramático pero que no denotaba en ningún momento una verdadera molestia para con la iglesia, en realidad no se quejaba de ello, tenia un techo y un sueldo, para él era suficiente con eso