~~Las piezas se mueven sobre el tablero de ajedréz. A veces predispuestas a una derrota, y otras; encabezando la victoria

por **Lucifer** Dom Jul 29, 2012 1:36 pm

" A donde vas... ¿Cuando no sabes hacia dónde te diriges? "
~~Las piezas se mueven sobre el tablero de ajedréz. A veces predispuestas a una derrota, y otras; encabezando la victoria Z219422401

~~Las piezas se mueven sobre el tablero de ajedréz. A veces predispuestas a una derrota, y otras; encabezando la victoria Z219422401

Año 3200 Antes de Cristo.
No estoy seguro.

Caminar a través del desierto era la verdadera aventura del hombre en aquel tiempo. Yo me aventuraba desierto a dentro en busca de respuestas. Quería respuestas, pero no sabía donde encontrarlas. Durante infernales días y frías noches, caminé siguiendo el horizonte, junto al río que bautizaríamos con el nombre de Nilo. Quizás fue obra de Horus el mantenerme con vida. A el debía mi nombre, y hasta probablemente el mantenerme con vida.

En mi incansable búsqueda atravesé tormentas de arena. Descubrí nuevos oasis que me refugiaron de los viejos trucos del desierto. Pero aún así faltaría mucho camino por recorrer, el horizonte parecía burlarse de mi, alejarse por cada paso que avanzaba. En vida di pruebas de mi fuerzas. De ser merecido de las respuestas que buscaba. Y así los dioses me contestarían. Nada era más que Amón-Ra al medio día, ni siquiera el fuego se le puede comparar. Es un dios exigente, que pide mucho mas de lo que crees que podrías entregar. Te obliga a descubrir mas allá de tus límites físicos.

Pero Bastet, quien es el brillo del dios supremo; me sostuvo con su música. La música alegre de la ciudad que llegaba a mis oídos a pesar de estar a Kilómetros de distancia; caminando sobre las arenas ardientes del Antiguo Egipto. Tal vez, tan sólo eran ilusiones, espejismos. Trucos del desierto para reír de los condenados a morir en sus faldas.

Pero no fue mi caso. Camine varios días, muchas noches cegado por mi ambición...

Aún no logro recuperar los recuerdos de esa noche. De la cuarta noche antes de llegar a costear el mar. Había soñado algo esa noche. Algo que alentó a continuar mi camino al día siguiente, y al próximo, y al subsiguiente de este.

Probablemente, deba probar suerte en otra ocasión.

[Continuará...]