Buzón de B.G.

Londres ◥◣ Residencia Sunderland ◥◣ Noche

◥◣ Querido Grushenko:

Apenas acabo de dejar los bártulos en mi antigua habitación y ya he pedido que me dejaran solo, para poder tomar papel y pluma, para escribirte. Deseo realmente que estés leyendo estas líneas, que te acerques a mi casa a recoger las cartas como te pedí, yo cumpliré escribiéndote a menudo, para que sepas que nunca te olvido, que sigues en mi mente.

Ya la luna está bastante alta, he llegado tarde y aun así mi hermana estaba esperando. El viaje ha sido agotador, pero supongo que al igual que todos, ¿acaso sorprende? Ella ha sido tan amorosa como siempre, creo que es la única que en verdad me echa en falta en este hogar, pero me ha hecho muy feliz poder abrazarla de nuevo. El lugar me trae muchos recuerdos y mi pecho se llena de nostalgia, cómo me gustaría que pudieras estar aquí conmigo, que pudieras ver los lugares por los que me movía cuando apenas era un infante travieso e inquieto, repipi y regordete. Sí, siempre se metían conmigo y las señoras tendían a pellizcarme las mejillas con muy poco tacto.

Mi madre también me ha saludado, ha estado distante, pero creo que es simplemente culpabilidad. Ella fue la que me repudió cuando en mi casa las cosas se complicaron, por no perder su estatus, su posición. ¿Acaso es eso más importante que un hijo? Por eso a veces envidio la relación que tienes con tu propia madre, no puedo evitar admirarla. Sin duda, el dinero y los lujos no se pueden medir con una madre atenta o que te regaña cuando haces algo mal. Eres afortunado, aunque ahora no puedas disfrutarlo, lo volverás a hacer.

Aun no he querido ir a ver a mi padrastro, él es quién me ha reclamado, aunque sigo sin entender el motivo. No puedo negar que estoy nervioso y que me tiemblan las manos. Te hablé del hombre que amé alguna vez, ¿no es así? ¿Te dije tal vez que era el mismo hombre que se había casado con mi madre? Él me rechazó, igual que lo hizo ella, por eso no entiendo qué quiere de mi. Mi hermana dice que está enfermo, que probablemente no le quede mucho de vida. Quizás es el arrepentimiento lo que le ha llevado a reclamarme. Te necesito a mi lado, me gustaría que estuvieras aquí conmigo para darme fuerzas, pero sé que esto está mejor así, que aprovecharás este tiempo para preparar nuestro encuentro, que todo lo que hay dentro de ti volverá a estar en armonía.

Voy a comer y descansar, mañana me queda mucho por hacer. Te escribiré pronto con las nuevas. Si quisieras responder a mis cartas, por cualquier motivo, no dudes en hacerlo, pero si guardas silencio simplemente lo entenderé, como siempre. Espero que todo te vaya bien y que pienses en mi, por egoísta que sea.

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◥◣ Querido Grushenko:

Las cosas son mucho más caóticas de lo que habría podido imaginar. Al parecer, el arrepentimiento hace que los hombres recurran a cosas pasadas para descargar su conciencia. Mi padrastro me ha pedido perdón, como si eso pudiera sanar las heridas del pasado, como si pudiera borrar la soledad y todo lo que tuve que vivir durante mi tiempo en París. ¿Recuerdas cómo nos conocimos? No era más que un chico que vendía su cuerpo a quién quisiera pagarlo, sin ningún tipo de futuro, sin esperanza, sin necesidad de luchar por algo más que no fuera el simple placer del momento.

En cierto modo, no puedo evitar estar agradecido por todo ello, pues sigo pensando que fue todo ese cúmulo de situaciones las que me llevaron a tus brazos, y no podría agradecer nada más. Estar a tu lado es ahora mi meta y ya no estoy perdido. Puede que por eso no haya rencor en mi interior, puede que sea el motivo por el que me apiadé al verlo en tal estado, decidiendo cumplir su última voluntad. Sigo siendo débil después de todo, y ese hombre alguna vez fue mi amor y nos salvó a mi madre y a mi de la ruina. Demasiados sentimientos encontrados para alguien que ha pasado tanto tiempo sin querer sentir nada.

De cualquier forma, he prometido hacerme cargo de la situación una vez él no esté, cosa que pasará tan pronto que casi siento vértigo. Los negocios que deja atrás, la responsabilidad de cuidar de mi madre y la de encontrar un marido apto para mi hermanastra. ¿Te das cuenta? De un día para otro me he convertido en el cabeza de familia, sin haberlo pedido. Puede que ni siquiera deba contarte esto, pues es algo a lo que pienso poner solución en breve, pero al parecer también se tomaron la molestia de encontrarme una esposa.

Cuando se lleve a cabo el funeral y todo lo demás, ella vendrá para que podamos conocerlos. No me he visto capaz de discutir con él en su estado, pero cuando las aguas se calmen, buscaré la forma de romper ese compromiso sin perjudicar a la empresa o a la propia familia. Es una locura, ¿cómo podría pasar el resto de mi vida con alguien que no eres tú? Casi me entraron ganas de reír de forma amarga cuando me lo dijeron. De todas formas ya sé lo que tengo que hacer, buscar un hombre a mi hermana para que él se encargue de las cosas en la casa, y así yo poder regresar a tu lado. No creo que nunca me pueda librar de esta carga, pero si hago las cosas con cabeza, podría expandir el negocio y al mismo tiempo establecerme en París.

Deseo que llegue ese momento, y apuraré las cosas al máximo para poder regresar cuanto antes. No imaginas cuanto extraño ver tu rostro y sentir tu piel, escuchar tu voz...cualquier cosa. Te extraño, mi amor.


P.D: Cherry está genial, aquí en la mansión tienen más animales como ella y parece que ha encajado de maravilla. Pensé que querrías saberlo.

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◥◣ Querido Grushenko:

Tus palabras son dulces y amargas al mismo tiempo, leer tu carta fue para mi un completo huracán. Me alegré al ver que me escribías, porque tener un poco de ti, aunque sean letras en un papel, es mucho más de lo que ahora mismo podría imaginar, sin embargo no puedo evitar pensar que suena a derrota, que no te quedan ganas o fuerzas para luchar, y eso me aterra. ¿Realmente piensas que yo escogería una vida lejos de ti, por más normal que esta fuera? Si es así, debe ser que no me conoces lo suficiente, y eso me duele.

Mi padrastro ha fallecido, con lo cual ahora soy el dueño de todos los negocios y el que debe encauzar de nuevo a la familia tras su período de luto. En la comida que se hizo por su entierro, conocí a la muchacha que debía ser mi esposa, debo admitir que es bien parecida, y que por suerte, tampoco siente deseos de casarse con un completo desconocido, eso facilita sin lugar a dudas las cosas. Aun tengo que esperar un poco más de tiempo antes de que los empleados y socios me vean como a alguien en quién confiar para poder mostrarles las ideas de expansión que tengo, para poder navegar de nuevo a París, pero es mi meta en todo esto.

Aunque ahora, después de tu carta y de todas las cosas que me pasan por la cabeza, me pregunto si realmente vas a estar allí esperando por mi, si el tiempo no irá haciendo mella en esos pensamientos hasta convertirlos en una seguridad, o si simplemente nos olvidaremos de nuestros sentimientos. Tú tienes tu bestia, yo tengo esta nueva vida. Sin embargo, en las noches solo pienso en que volvamos a estar juntos. Tengo miedo, Basile. Temo que realmente la distancia y el tiempo sean un obstáculo tan insalvable como siempre se ha dicho.

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