Eris Vasiliev

Eris Vasiliev

-Nombre del Personaje: Eris Vasiliev es el nombre que más utiliza, pero no es el original. Renegó de él cuando se fue de casa y ya lo ha olvidado.
-Edad: Aparenta 18 años pero tiene 78.
-Especie: Vampiro
- Tipo y Nivel Social: Clase alta
-Lugar de Origen: Rusia
-Fecha de Muerte: 1740

-Habilidad/Poder: Control mental, Sanación acelerada, agilidad y reflejos sobrehumanos y sentidos aumentados.
-Descripcion Fisica:

Spoiler:

Tiene el pelo negro, liso y largo, más de media espalda ya que no lo ha cortado desde que la transformaron. Sus ojos son una mezcla de azul y verde, pero suelen variar dependiendo de la luz. Están rodeados de largas y espesas pestañas negras, lo que los hace destacar aún más en su pálido y afilado rostro, de hecho, es lo único que destaca en él. Tiene una mirada penetrante y gélida, y más que su fuerza o su condición de vampiro, son sus ojos los que realmente asustan a la gente. Sus labios son finos y blanquecinos que le confieren un aspecto mortecino y cansado; suele morderlos cuando las cosas no salen como a ella le gustaría.

Es bastante delgada y sin grandes curvas por lo que no acostumbra a llevar escotes ni faldas que acentúen las caderas, pero sí le gusta vestir corsés como los de las cortesanas. No es especialmente alta y no tiene intención de disimularlo con tacones o alzas. Suele vestir de negro por lo que mucha gente piensa que está de luto, pero no es cierto, simplemente cree que ese color es el suyo, el que va más con su personalidad.

Sus manos son pequeñas y de dedos finos y largos, tan pálidas que parecen echas de porcelana, pero a pesar de este delicado aspecto, tienen una fuerza sobrehumana que nadie debería pasar por alto, ya que podría salirle caro.

-Descripcion Psicologica:

Es una chica introvertida, seria y en extremo desconfiada. No le importa en absoluto hacer daño a los demás ya que piensa que así comprenderán como ella se siente por dentro. Es manipuladora y no se irrita con facilidad, aunque cuando alguien consigue enfadarla es muy impulsiva y no duda en herir a dicha persona; en situaciones corrientes, suele pensar bien cual será su próximo paso. Suele recurrir al sarcasmo en sus frases y es ácida como la que más, pero ni una sola sonrisa (ni siquiera irónica) aparecerá en su rostro mientras tanto.

No está familiarizada con las emociones y jamás reconocería que le asustan al dejarla demasiado expuesta a los demás. Se cubre con una coraza que no deja penetrar ningún tipo de sentimentalismo en su oscuro corazón por lo que no llega a trazar con nadie una relación de amistad, compañerismo o amor. Se siente herida por el pasado y odia esos momentos de nostalgia que la hacen regresar a tiempos más alegres y agradables, cuando aún era humana. Es algo sádica y los combates a muerte no le producen más que una agradable sensación de entusiasmo, sobre todo si reina la sangre.

Es brutalmente sincera y sólo mentirá si cree que ese es el camino más fácil para conseguir lo que quiere, porque cuando se centra en algo, no hay quien pueda detenerla para alcanzarlo, no le importa lo que deba hacer. Si encuentra un obstáculo que no puede saltar, buscará otro camino para llegar a su objetivo. De todos modos, dados sus pocos escrúpulos hay pocos obstáculos en su camino.

Se considera una persona refinada, por lo que no suele mezclarse con humanos si no despiertan realmente su interés y no le gusta beber directamente de ellos, sino que prefiere el ritual de sentarse a la mesa con una copa en las manos aunque la sangre pierda ligeramente su gusto. Ve a los humanos como seres inferiores, simples bolsas de sangre para satisfacer a los vampiros, aunque ella misma fuese uno de ellos en el pasado. Sin embargo, a pesar de que le gusta el refinamiento, nunca viste con ropas propias de las clases altas, no le gustan los bailes y no vive en una casa grande, sino que prefiere vivir en hoteles y demás para ahorrarse el riesgo de encariñarse con un lugar y perderlo después.

También cabe destacar que hay algunos temas intocables en su presencia. El amor y sus padres son los dos más importantes.

Por último, diré que a pesar de lo difícil de su personalidad está buscando a alguien que la saque de su coraza, que ayude a dejar de lado la oscuridad en la que se encierra y le enseñe que puede perdonarse a sí misma por lo que hizo.

-Historia:

Tiempo atrás era una persona enérgica, amable e inocente, no muy dada a sonreír pero no le era difícil hacer amigos o agradar a los demás; una de sus principales virtudes era la confianza ciega que depositaba en sus seres queridos. Llevaba una relación buena con sus padres, que tenían muchos motivos para sentirse orgullosos de ella.

Así, a sus dieciseis años, Eris se enamoró por primera vez de un muchacho terriblemente atractivo, tanto física como psicologicamente. Le amaba con cada fibra de su ser, por lo que nada pudo hacerla tan feliz como saber que, de algún modo, era correspondida. Sin embargo dicho chico jamás le confesó su condición de vampiro, esperando tal vez poder ocultarlo y así facilitar las cosas entre ellos. Casi todas las noches se escapaba para alimentarse de algún transeúnte despistado, y una de ellas Eris le vio mientras salía de su casa en la oscuridad.

Ella sabía que no era apropiado ir por la noche a casa de un hombre que aún no era su esposo, pero su necesidad de verle fue tan fuerte que simplemente dejó que sus pies la llevaran. Cuando vio que este salía de casa se extrañó y el miedo de que fuese a visitar a alguna cortesana o a otra mujer le atenazó el corazón, por lo que le siguió. No obstante, esta fue una decisión de la que aún se arrepiente, porque cuando le dio alcance vio algo que jamás habría imaginado, ni siquiera en sus peores pesadillas.

El chico estaba mordiendo de forma salvaje a un hombre, que sangraba profusamente por el cuello. El grito de Eris llamó la atención del vampiro, que dejó al hombre. Antes de darse cuenta, la chica ya estaba en brazos de su futuro marido, con sus largos colmillos clavados en el cuello y sintiendo que la vida se le escapaba por esa profunda herida. Una vez saciado, el vampiro se horrorizó por lo que había hecho y pensando que había matado a la chica la dejó abandonada en medio de la calle. Sin embargo, Eris seguía atada a la vida por un fino hilo.

Cuando despertó estaba en su casa y de la herida sólo quedaban un par de cicatrices en su cuello, pero Eris notó que algo había cambiado. Sentía una sed desquiciante y aún así el agua no conseguía saciarla ni por asomo. Quería preguntarles a sus padres qué había ocurrido y por qué se sentía así, quería explicarles lo que había ocurrido con su prometido y abrazarles, pero cuando les vio, lo único que ocupó su mente fue la urgente necesidad de alimentarse. En ese momento ni siquiera le importó quienes eran ni la relación que tenían con ella, lo único que importaba era que iban a apagar su sed. Los mató en menos de un segundo y se alimentó de ellos, de su sangre, por primera vez.

No obstante, cuando observó lo que había hecho, creyó que enloquecería. Había hecho lo mismo que su prometo había hecho con ella, y su primer instinto fue huir de allí tan rápido como pudiese, escapar a otro país y buscar la manera de deshacer aquel horrible cambio que había experimentado. Así, decidió cambiar su nombre y empezar de nuevo. Le pareció apropiado llamarse Eris al ser el nombre de la diosa de la discordia, y el apellido le llegó impuesto por un posadero de su país natal, Rusia, que exigió tener un nombre y un apellido al que cargar la cuenta de la reserva. El hombre pensó en el último huésped que se había hospedado, cuyo apellido era algo parecido a Vasiliev o Vesiliv.

De ese modo llegó a París, siguiendo el rastro sangriento que dejaban los vampiros del lugar. Buscó durante años la forma de librarse de su condición de vampiro, pero después de tanto tiempo, ha abandonado la búsqueda y lo único que quiere actualmente es encontrar al vampiro que la transformó y darle muerte.

-Datos Extras: - Siente cierta admiración por la gente que consigue todo lo que se propone, que tiene iniciativa y que no se rinde ante nada.

- Prefiere beber sangre de mujeres, porque tiene un sabor más suave.

- Le gusta mucho jugar al ajedrez, así que si se presenta un digno jugador a Eris no le importará su raza.