Amira Fajat

DESCRIPCIÓN PSICOLÓGICA

Tierna e  inocente, podría incluso llamársele ingenua puesto que ante sus ojos no se ha mostrado la miseria, el dolor, la violencia… así como tampoco se han levantado mil arcoíris, amaneceres ni atardeceres. La dulzura de su ser se refleja en el tono calmado y melodioso de su voz,

Alegre, tranquila, pacífica, su mente se mantiene serena a pesar de que la curiosidad la carcome a momentos; tiene un gran sentido de supervivencia e independencia… a pesar de que las cadenas de oro que nuestro padre ha colocado a su alrededor limiten su espíritu.

Centrada, madura, no conoce aquel sentimiento que corrompe el alma llevando a las personas a odiarse entre sí ¿será porque no es capaz de ver lo que el mundo ofrece a cambio? No es complicado tratar con ella, es reservada si… pero logra descifrar a las personas por el tono de su voz, entregando su cariño, amistad y confianza; ¿la traicionas? No importa realmente, no te guardará rencor, solo cerrará las puertas de su corazón para jamás volverte a dejar entrar, aunque no te negará la palabra y el trato cortés; ¿no es eso rencor? Le queda mejor el término precaución.

-Efraín y Natán Fajat-

HISTORIA

Al ser la única mujer que mi Padre tuvo como descendencia, me volví el pequeño tesoro y la joya más preciada de los varones en mi familia y más por… bueno ¿leerán mi historia?

¿Cuáles son mis raíces?
Mi nombre es Amira Salomé Fajat Yeneves
Soy hija del Primer Ministro de Israel Aarón Jeremías Fajat Zajor y Dana Belén Yeneves Zabule
La menor de cinco hermanos varones: Jonás,  Efraín, Abel, Jacobo y Natán
Provengo de la hermosa tierra de Jerusalén

Un poco de mi familia
Aarón Jeremías Fajat Zajor: Primer Ministro de Israel, es un hombre culto, respetuoso, justo y honesto, cualidades muy poco vistas en todas aquellas personas que mantienen tratos con la realeza o con puestos especiales que no distan de ser la mano derecha del rector de alguna nación. Cariñoso con su familia y por sobretodo… sobreprotector.
Jonás Fajat Yeneves: Mi hermano mayor, a sus 28 años mantiene un alto rango en la fuerza militar de mi país; como es de esperarse su carácter es duro, seco y directo… aunque todos tienen su punto débil ¿no es verdad?
Efraín Fajat Yeneves: Mi confidente y protector, tiene 26 años y es el más rebelde de todos, sorprende a cualquiera con sus ideas tan liberales y su carácter tan jovial, para él no hay imposibles solo muros altos que puede escalar.
Abel y Jacobo Fajat Yeneves: Los gemelos, tienen 23años e hipnotizan a cualquiera con sus fluidas conversaciones respecto a literatura, historia y política. Abel es más extrovertido, siempre tiene la palabra en la boca y jamás se queda callado respecto a opiniones o sentimientos; Jacobo es mas introvertido y reservado… es el observador y analítico de la familia.
Natán Fajat Yeneves: El más cercano a mí y por ende es con quien tengo un lazo más fuerte, tiene 21 años es un poco tímido pero sin llegar a ser asocial o miedoso, es callado, paciente, cariñoso y, aunque los demás digan que no, divertido y alegre; su risa es uno de los sonidos más maravillosos que yo haya escuchado jamás… aunque claro para llegar a oírla tienes que ser perseverante y haberte ganado su confianza.

¿Cómo fue mi infancia?
Ya he mencionado mi lugar dentro de mi familia, fui la consentida tanto de mi padre como de mis cinco hermanos y… ¿mi madre?, ella murió cuando yo tenía un año y  realmente no la recuerdo, además de que ni mi padre ni mis hermanos tienen el suficiente valor como para nombrarla, suelen decirme que es más que suficiente con verme para sentirla cerca… Desearía poder decir lo mismo.

Durante mi vida siempre me  he visto rodeada de lujos dados por el puesto tan alto sobre el cual mi padre ostenta el título de propiedad, la mansión siempre se ha visto rodeada de sirvientes, pequeños caprichos y unas hermosas cadenas de oro rodeando mis tobillos, ¿me creen esclava? para nada, simplemente que dada mi condición siempre vi mis pasos resguardados por alguna de mis damas de compañía o por alguno de los sirvientes de mayor confianza de mi padre.

No he conocido limitaciones en cuanto a mi educación se trata, maestros privados, clases especiales, actividades sin fin, viajes de conocimiento… Todo lo que alguien podría desear presentado en una pequeña jaula de oro se me ha sido proporcionado antes de que yo pueda osar pedirlo. Infinidad de relatores, trovadores, historiadores y poetas han inundado mi mente con los más maravillosos cuentos y han cultivado mi alma con la extensa historia de los más grandes hombres y naciones; un sin fin de músicos, instructores de canto, y orquestistas han deleitado mis oídos despertando en mi el placer por este rubro.


El secreto a voces…
No es que trate de ocultarlo puesto que es lo que me hace ser quien soy, es lo que me identifica y lo que me ha dado el coraje y valor para sobresalir por mi cuenta ¿A qué me refiero?, tanta protección tiene su origen el cual es el mismo que tengo yo.

Mi nacimiento fue una combinación entre heraldos de alegría, cánticos fúnebres, lamentos desmedidos y risas desbordadas; la felicidad tocó a la puerta en forma de un pequeño retoño blanco de cabellos del color de la arena que cubría los pasos de mis ancestros ¿señal divina? Eso solían decir los sirvientes de la casa, que Jehová había decidido bendecir el hogar de tan justo hombre con el acallado ángel que se movía entre las blancas sábanas teñidas de carmín.

Sin embargo la preocupación y agobio se hicieron presentes casi desde que logré abrir los ojos, los cuales, no se posaron sobre el rostro demacrado pero alegre de mi madre estaban carentes de vida aunque el brillo que despedían era singular, ese fue un pequeño detalle que, hasta que cumplí cuatro meses de edad, paso realmente desapercibido.

Los rumores comenzaron a correr por todo el reino, el mismo Rey compadecía el cruel castigo que el Todo Poderoso le había plantado a mi familia, más que nada, a mi padre. ¿Qué tuvo que haber hecho un hombre tan bondadoso y recto, para recibir la desgracia de que su única hija, fuera ciega?

Aún así, mi padre no tomó mi condición como el peor de los castigos, sino como la más grande de las bendiciones puesto que su amadísimo Dios le entregó una de las más grandes pruebas que para él existían y por tanto, tenía que sobrellevarlo con la cabeza en alto y tratando a ese pequeño e indefenso ángel como se merecía… mi madre no pensaba de la misma manera; quizás yo fui la causante de su desgaste, quizás yo fui la responsable de su muerte pero no creo que el dilucidarlo sea de mucha ayuda.

El desarrollo de una flor del desierto
Si mi infancia fue dentro de todo “normal” mi adolescencia no lo fue tanto, y es que ese sentido de aventura y la curiosidad innata que surge en cualquier joven a temprana edad no se hizo esperar en mi, aprendí cada esquina, bache, rugosidad y mueble que pudiera existir en la extensa mansión; recorrí los jardines memorizando los diversos aromas, texturas y bordes de cada árbol y planta en ellos existente.

Como es de esperarse, rara vez se me permite salir de la mansión y cuando esto sucede tengo que ir acompañada de alguno de los confidentes de mi padre, una dama de compañía y si se puede, alguno de mis hermanos… claro que esta última situación no me molesta en absoluto y más si se trata de Natán o Efraín puesto que son los únicos que al parecer no tienen miedo alguno en intentar mostrarme, a través de sus ojos, el mundo que frente a mí se alza.

La actualidad…
Se preguntarán ¿Qué hace en París si su natal Israel lo da todo para ella? y la respuesta es realmente extensa: cuestiones de trabajo de mi padre, arreglos con relaciones exteriores, fomento de lazos entre naciones, negocios personales y una gran amenaza contra mi vida.

Como todas las familias Israelíes de alta cuna, y a veces de baja, mi futuro se vio decidido desde el momento en que nací arreglando un matrimonio que le traería mayores beneficios y estatus a mi honorable casa; sin embargo, mi prometido no resultó ser lo que mi padre esperaba. Su sentido de posesión se volvió obsesivo a tal grado de quererme arrancar, por la buena o por la mala, de los cálidos brazos que me brinda mi hogar. Al tener un hermano de gran cargo militar, esto se volvió una batalla campal por lo que mi padre decidió alejarme de cualquier peligro que aquel contrato pudiese significar.

De acuerdo con él, los términos de aquel arreglo solo son válidos si permanezco en tierra hebrea; de acuerdo con mi prometido… el sigue siendo mi dueño. Esa es la verdadera razón por la cual me veo alejada de lo que conozco como mío, de mis allegados y de mis hermanos, puesto que solamente Jonás y Efraín al ser los mayores, nos han acompañado.

DATOS EXTRA

Tengo un león blanco como lazarillo llamado Shamir
Suelo escaparme a escondidas de la mansión Fajat, a pesar de toda la seguridad que se le ha colocado
Tengo facilidad para diferenciar aromas, incluso los más inverosímiles
Poseo, según mis hermanos, mi padre y sirvientes allegados, una voz maravillosa… aunque solo me gusta cantarle a quienes realmente quiero
Soy ciega de nacimiento… ¿Lo habéis notado?
Soy virgen… no deseo compartir mi cuerpo con quien no tengo atado el corazón
Cambiaría mi vida de lujo solo por un día de libertad ¿aceptas?.

gracias a αgusτınα• de sourcecode