Who are the Londinenses? | The World War of the Black Swans

Cammy es la hija primogénita del matrimonio de Thomas y Dayanara White pertenecientes a la casa Londinenses y próximos a obtener la administración general. Su familia es dueña de una poderosa red de rutas comerciales, puertos, negocios y tierras en África, son conocidos como los Cisnes Negros y la familia se ha dividido en tres casas, los Yorkshires, los Nottinghams y los Londinenses, haciendo referencia a los lugares donde tienen situada su residencia. Cada treinta años una de las casas ocupa la administración general sobre las otras casas y el tesoro familiar así como la capacidad de cerrar y abrir grandes negocios. Cammy nació dentro del gobierno de los Nottinghams pero para su juventud su familia tomaría el poder.

Por esa razón y al ser mujer. Sus padres depositaron su fe en ella, sería la primera mujer en liderar el Imperio Comercial de los Cisnes Negros, era una apuesta ambiciosa y totalmente descabellada para estos tiempos donde la mujer no podía llegar consigo un poder tan grande sin la compañía de un hombre. Sus padres la llevaron a España para que estudiara en el mejor lugar de Europa, un monasterio dónde no solamente fortalecería sus votos cristianos, sino también aprendería lo que sus padres consideraban más importante sobre todas las cosas, la humildad. No podía perder la cabeza con todo el poder que estaría a sus manos, tenía que ser inteligente, prudente y sabia. Mas se descubrió una extraordinaria capacidad de aprendizaje, retención de información y una comprensión extraordinaria pese a tener sólo ocho años. Viendo su gran potencial la Iglesia Católica pidió a los padres autorización de llevarla a los Estados Pontificios para que continuara sus estudios y se convirtiera en un diamante. Sus padres aceptaron si dudarlo y a los dieciséis años fue trasladada a una nueva academia. Aprendió de inmediato el idioma local, escribía y traducía extraordinariamente el castellano y pronto lo hizo con el toscano y el latín culto.

La Inquisición puso sus ojos sobre ella, podía convertirse en una gran tecnóloga, traductora o bibliotecaria. Pero las habilidades de Killer Bee no estaban encasilladas. Una de las actividades extraordinarias que realizaba era la gimnasia. Y un buen día un inquisidor soldado la vio practicando y la consideró con madera para espía o quizás hasta soldado. Pidió un entrenamiento especial bajo su mando y fue así como comenzó a entrenarse en el combate, la creación de estrategias y todo lo que se refería a guerras y batallas contra las hordas "del diablo". Descubrió entonces un mundo distinto al que conocía, ya la economía y la administración quedaron de lado, su instructor la alaba era una prodigio también en el arte del combate y eso hizo que su humildad se tambaleara. Aún no era una inquisidora pero su potencial era ya reconocido, su puntería, su inteligencia, sus reflejos, la manera en que aprovechaba la elasticidad y flexibilidad de cuerpo a su favor, en el que convertía sus debilidades físicas en fortalezas asesinas.

Y mientras ella se convertía en todo un fenómeno al ser la primera mujer inquisidora en la historia de la Orden, sus padres morían en viaje a Sudamerica tomando la batuta el hermano menor, Audrey White. Cammy ignoraba esa situación, ya se había convertido en una inquisidora a sus veinte años y andaba por cuenta propia. Se volvió famosa y él nombre de Camile White desapareció, era conocida por Killer Bee. Se volvió la asesina perfecta, sus números eran insuperables, su inteligencia la sacaban triunfante en combates contra vampiros, licántropos e inclusive cambiantes lo que para humanos eran presas difíciles. Pronto los métodos de Killer Bee fueron empleados por los mismos hombres, o al menos a los que se referían a la planeación y ejecución porque en lo que refería al combate cuerpo a cuerpo nadie podía igualarla, porque el secreto estaba en su anatomía y su inteligencia.

La inquisidora atrajo a nuevos reclutas y se encargó de misiones más complicadas, la que podía ser la mayor fue la de asesinar a su propio mentor por revelarse contra la Iglesia. Mas fue la tarea más sencilla, muchos la creían loca, pero ella confiaba ciegamente en que esa era la voluntad de Dios y guiándose con la palabra del señor era incorruptible ante argumentos que sus presas podían decir antes de ser asesinados por ella. Habían llegado muchas mujeres como futuras inquisidoras pero sólo una se convirtió en su alumna, una niña de nombre Inocenttia, que podía convertirse en su sustituto..