Arthur G. Evans ID

D. PSICOLOGÍA

¿De dónde viene la locura? ¿De dónde nace exactamente?  Supuestamente nace de aquellas almas perdidas en lo más oscuro donde la luz no llega a rozarles la esperanza. Escéptico e hiperactivo, siniestro en algunos comportamientos pero extra tímido cuando alguien muy brillante o simplemente superior a él aparece demostrándole que no está solo en el universo, que hay más mentes como la suya.

Compulsivo algunas veces en estado de ansiedad, lugares cerrados es lo que más teme, siempre asegura las salidas de todos los lugares antes de seguir adelante, pone semillas en el camino para no perderse y el silencio, ha aprendido a estar con él. Distante la mayoría del tiempo cuando posiblemente sea lo contrario lo que quiere, ser querido, aceptado por lo que es.

No puede evitar encerrarse por horas sin comer dentro de un pequeño laboratorio que se ha fabricado él mismo debajo de la modesta mansión francesa de su padre adoptivo del cual no sabe nada, se esconde y cuando sale puede haber pasado dos días y medio, come y sigue. Sale de noche a buscar a sus víctimas y la mayoría son prostitutas que coge de la calle con la excusa de que esta solo y con ello ha adquirido una estrategia, una manera de engatusar al género femenino.

Suele enfadarse con rapidez pero nunca ha golpeado a una mujer excepto si la anestesia que usa no le funciona en sus experimentos. Bastante demente la mayoría del tiempo, muy maniático, orden y pulcridad que se mantenga siempre en su sitio y nunca, nunca consigue estarse quieto o su mente es la que le mueve a él.

Historia

Nunca eches atrás las oportunidades que te de la vida. Arthur, un muchacho que nació en el seno de una familia obrera, su padre, un albañil dado al alcohol y su madre trabajaba de costurera incluso hacia horas nocturnas en el burdel, creyendo Arthur que su madre trabajaba como doncella en la mansión de alguna familia adinerada. Su brillante inteligencia era un don que tenía que prematuramente, supo que necesitaría alimentarla para no perder tan valioso regalo que le había dado la vida, lo único que le hacía sentirse vivo y especial. Sus hermanos que habían comenzado a burlarse de él por ser el menor de tres hermanos y porque siempre traía un libro o dos en sus manos, había conseguido un pequeño puesto insignificante en la librería que su paga era un libro o dos para poder alimentar su mente voraz y demasiada curiosa para dejarla en paz mientras que por otra parte, sus hermanos trabajaban con su padre como nuevos albañiles.

El jefe de Arthur lo tuvo a su cuidado varias veces cuando este era echado del techo de su familia para que viviera en la intemperie, el librero se encariño con el muchacho que acabó adoptándolo como si fuera su propio hijo. A tiempo, pagó sus estudios en el colegio con más prestigio de Londres, ayudando así mismo en la biblioteca del colegio, nuevamente las burlas recayeron sobre su persona, haciéndole alguien retraído y poco social.

Solo tuvo un amigo o dos pero que con el tiempo, estos cambiaron de parecer, dejando al pobre Arthur a solas, sin amistad alguna en la que poder apoyarse. Pensó que podría haber algo maldito en él o que tenía alguna deformidad de la que no se había percatado. La única deformidad era que su mente era infinitamente más inteligente que la del resto. La soledad era al parecer su acompañante, su más fiel compañera en aquellos días de soledad que pasaba en la biblioteca y de ahí a su nuevo hogar.

De vez en cuando paseaba por donde estaba su anterior familia y no habían cambiado nada excepto de que su hermano mayor mediano estaba discutiendo con una joven de cabellos rubios y mirada tosca, con…sin entrecejo, dientes torcidos y al parecer con un bombo de 5 meses. Observando se quedó durante varios minutos por si veía a su madre por alguna parte, pero al parecer había sido sustituida por una despampanante rubia de ojos claros que se sobaba contra el cuerpo deforme de su padre alcohólico.

¿Cuántos años habían pasado desde que se había marchado? ¿5 años? Sospechando lo que le hubiera pasado a su hermosa y bondadosa madre, fue al puesto más cercano de su antiguo hogar donde preguntó sobre el paradero de Martha Simmons, preguntando así por su nombre de soltera nadie sabía de qué hablaba pero al nombrar su nombre de casada cayeron todos enseguida, mostrándose la mayoría con un rostro afligido. Arthur preguntó el cómo y le dijeron que una noche un depredador deambulaba la villa, que se oyeron gritos y que después hubo fuego y después no más que silencio.

Al cementerio con un ramo de flores en mano se fue, encontrando así la tumba de su querida madre repleta de lirios, rosas blancas y girasoles. La locura se desato en su interior dejando lentamente el ramo sobre la tumba de su madre y aquella misma noche, con un rostro furioso y en silencio, dirigiéndose hacia su antiguo hogar tomo la parte frontal y trasera de la vivienda bloqueando cada salida existente, roció el exterior de esta con petróleo desechable, con aceite, juntando todo lo que pudiera arder alrededor del hogar donde vivía su anterior padre y hermano, mientras estos dormían plácidamente ya había encendido la llama de la venganza sobre un enorme tronco de madera acoplado a su fuerza, introduciéndolo en el interior de la vivienda y quedarse frente a la vivienda viendo como comenzaba a arder la vivienda , escuchando los gritos de su padre y su cuñada, de su hermano. Sonrió, su sonrisa estaba ensanchándose de lado a lado, lo que veía estaba complaciéndole de sobre manera que llegó una risa malévola desde su interior.

Al día siguiente de aquello volvió para ver que ya no había quedado nada de nada. Cuando entró en el recinto sin techo, vio el cuerpo de su cuñada, el de su hermano y el de su padre, lleno de sangre y por lo que vio, la causa de la muerte fue un golpe en la cabeza que se la dejó medio abierta. Probablemente el fuego no fue demasiado violento pero él mismo sentencio su muerte.

Ya hacen dos años de aquello y mantiene el secreto para sí mismo. Ahora tiene 20 años, y viaja con una médium que se considera medio bruja y la que sirve de transporte al espíritu de su madre asesinada por su primer padre en el interior de un colgante mágico. Ambos se dirigen hacia París para una supuesta ceremonia  de iniciación de la bruja que tiene que hacer. Arthur es supuestamente su “guardián” pero él en cambio, tiene otros planes para Paris.