Arianne Lena Neveu.

-Nombre del Personaje: Arianne Lena Neveu.
-Edad: 18 años. Aparenta menos, quizás doce o quince.
-Especie: Humana, bruja.
- Tipo y Nivel Social: clase baja.
-Lugar de Origen: Francia.
-Habilidad/Poder: empatía.
-Descripción Física:
Aniñada, frágil, la apariencia física de Arianne ha dado pie a muchas confusiones. Quienes la ven por primera vez no tardan en creer que se encuentran frente a una chiquilla preadolescente que no alcanza apenas los trece años. Qué equivocados están. Arianne alcanzó la mayoría de edad hará un par de meses, pese a que nadie lo diría. Posee un rostro de facciones delicadas e infantiles: grandes y expresivos ojos color verde oscuro, que pueden lucir tanto la más inocente de las miradas como la más letal. Nariz pequeña, algo respingada, labios carnosos y mullidos en una boquita diminuta. No es muy cuidada a la hora de vestir, y más si tenemos en cuenta que es de clase baja, por tanto no resultará extraño que en más de una ocasión la veas vistiendo harapos. Como otros datos, es liviana como una pluma en cuanto a peso, apenas alcanzando los cuarenta quilogramos, y no mide más de metro cincuenta.




-Descripción Psicológica:

Arianne. La incomprensible Arianne, la extraña Arianne. No caigas en el error de considerarla prontamente la niña dulce e inocente que aparenta ser. Sí, sus miradas y sus caídas de ojos dan a pensar que se trata más bien de una chiquilla tímida y silenciosa, pero nunca juzgues un libro por su portada. Arianne no tiene un pelo de inocente; es más, ha visto muchas más cosas que la mayoría de adultos que hay a su alrededor, por lo que se podría decir que su forma de pensar es, sin lugar a dudas, la de una adulta hecha y derecha. Centrada, madura, observadora y cauta, Arianne posee una inteligencia tan desarrollada que mas de uno ha llegado a considerarla diabólica. Es intuitiva como ninguna, y parece como si pudiera saber hasta tu más oculto secreto con solo echarte una mirada con esos impactantes ojos verdes suyos. No podrás esconderle nada a ella, así que ni lo intentes. Sería una pérdida de tiempo.

No la infravalores, actuará desde las sombras para hundirte hasta lo más oscuro de tu ser y dejarte encerrado ahí. No es sádica, pero sí sumamente vengativa. No trates de manipularla, tomará los hilos de tu manipulación y los romperá uno a uno. Y sobretodo, nunca, repito, nunca… trates de preveer su próximo movimiento. Fracasarás estrepitosamente.

-Historia:

No hay mucho que decir de Arianna. Nacida de una madre soltera de clase baja que arrastraba el linaje de una familia de brujos, Arianna fue criada lejos de la civilización, en el bosque, donde aprendió las artes tanto oscuras como blancas de su familia, además de otras cosas como la caza o la recolección. Se convirtió en una superviviente nata desde el origen de sus tiempos.

Nunca estuvo en contacto con niños de su edad, nunca se planteó que había más allá de esos árboles y cuevas. No necesitaba saberlo. Su vida en el bosque le era más que suficiente, y jamás tuvo interés en integrarse en la sociedad… hasta que su madre desapareció.

Una noche sencillamente no regresó al hogar y Arianna esperó. Esperó por dos, tres, hasta cinco días su regreso, y su madre siguió desaparecida todo ese tiempo. Hasta que Arianne tomó la resolución de ir en su búsqueda en la ciudad de París, el ultimo lugar donde su madre había estado antes de desaparecer.

La búsqueda duró años, pero finalmente dio con su madre… o más bien, lo que quedaba de ella. Recuerdos. Información. Pero no un cuerpo sobre el que llorar.

Porque, en efecto, su madre había muerto, y de la peor forma posible. Asesinada por una horda de vampiros que la habían capturado de regreso a su hogar.

Lo más raro de todo fue que Arianne aceptó esa noticia con tal estoica calma que resultaba imposible. Nada cambió en su carácter, nada hizo pensar que estaba triste, asustada o airada. Y sin embargo, si alguien hubiera sido capaz de dar una ojeada a todos los pensamientos llenos de sed de venganza que pasaron por ese momento por su cabeza (y aun hoy lo hacen), se habría preguntado como pudo Arianne mantener tal perfecta expresión de calma.

Expresión que ha mantenido intacta hasta día de hoy.