The art of the shadows || Privado

por **Julyne/Sebak Worthing** Mar Dic 20, 2016 9:41 pm

Problemas

Propias Traiciones

Las autoridades del hotel habían sido muy consideradas al invitarlo a aquel evento único y especial para muy pocas personas, Sebak se consideraba afortunado de ser de los pocos invitados no acreditados. Si bien estaba acostumbrado a recibir invitaciones de aquel tipo todo el tiempo, el gesto no dejaba de ser igual de amable hacia su persona. Le habían dicho que se trataba de una presentación de una nueva cadena de hoteles que, según afirmaban ellos, revolucionaría la época y muchos se mostrarían interesados. Ésta presentación iniciaría con un previo programa de entretenimiento variado, exóticas damas danzando, pequeños números de magia, e incluso importantes orquestas que acompañarían toda la velada. Desde que había muerto su padre, una larga lista de clientes amigos se habían mantenido en contacto con él y su hermana y era como tarea de ellos el mantener esas relaciones en honor a lo que representaba la imagen de su padre, aunque ambos estaban en medio de la disputa por ser el sucesor de toda esa fortuna.

El carruaje pasaría por su puerta a las nueve en punto por lo que debía estar listo antes para ser llevado hasta el hotel principal en el que se realizaría dicho evento. El reloj le marcaba que faltaba un par de horas y aún debía ir a por el traje que había encargado especialmente al sastre de su confianza. De un brusco saltó se había despegado de la cama y vistiendo con una simple camisa blanca y un pantalón que había tomado por la mañana salió de la calidez de su hogar para correr hasta la sastrería donde seguramente llevaría un poco de tiempo si es que debía realizarse algún arreglo de último momento. Cuando creyó que no podía demorarse más, y con poco menos de una hora, regresó a la residencia para afeitar su rostro, ducharse y cambiarse sin demora. Al mirarse al espejo podía decirse que estaba bastante aceptable, mejor de lo que esperaba. Se alisó un poco el cabello y cuando salió a supervisar si el carruaje estaba ya frente a su puerta recordó que no había tomado la invitación. Fue por ella y salió bajando los escalones del porch con prisa ya que su transporte ya estaba listo. El camino no era demasiado largo, el hotel se encontraba a unos quince minutos lo que le dio tiempo a recordar los confusos nombres de los invitados que seguramente tendría que saludar.

Al menos su hermana lo hubiera hecho mejor y más elegante y eso era lo que le remordía la consciencia hasta el punto de salir enojado al ver que ella no estaba en la mansión que aún seguía de viaje.

por **Gretel Döhler** Vie Ene 20, 2017 6:17 pm

“Para casos desesperados, acciones desesperadas” Abrí la puerta que daba a la parte trasera del banco, saliendo y percatándome del largo pasillo. ¿A quién se le ocurría construir éste lugar tan cerca de las zonas comerciales? No representaba más que meras tentaciones para los mano larga. Por ahora agradecía estar lo más lejos posible de Jacqueline. Una mujer tan pequeña no podía ser tan detestable, ¿Pensaría eso de mí?

Avancé por los pasillos del hotel, sabía de la reunión social que se daría y a la que fui invitada como nueva Duquesa del Sacro Imperio y a la cual debía acudir sin más premisas de demora, pero antes necesitaba saber a qué parte daba ese pasillo. Miraba a todas partes, percatándome de los pequeños faroles que iluminaban el camino, si bien ayudaban a realzar un poco el tapiz elegante en tonos rojos pero nade nada ayudarían para evitar un atraco.

Me detuve giré tan rápido como me fue posible. Nada, tras de mí no había nada, y al frente se miraba desierto. Una de las puertas se abrió pero nadie salió, ni siquiera Jacqueline que tenía un oído tenaz. El corazón se me había acelerado terriblemente, era imposible no alterarse. Me puse en movimiento nuevamente, alcanzando el final del pasillo que daba a una enorme ventana de vidrios azules con tonos dorados. Nada, igual de solo se veía por las calles.

Enfadada y alterada, di media vuelta para volver era mejor no presentarse esa noche en esa bendita fiesta, salí lo más rápido y sigilosa que pude hasta que un cuerpo masculino se detuvo a escasos metros de mí. Por instinto, mi mano fue hasta mi espada baja, ahí dónde se encontraba la pistola y el sai; saqué la primera con mucho cuidado. Quité el seguro y la pequé lo más que pude a mi cuerpo. “¿Por qué no le veía el rostro?” El sujeto no se movía. Llevaba unos pantalones y camisa de lo más normal pero, nunca había que fiarse de nadie. Podía ser el mismísimo diablo y yo ni por enterada. Sentía sus penetrantes ojos en mí. Era terriblemente incómodo, pero comencé a detallarlo mejor. Parecía listo para atacarme en cuanto moviese algún pelo.

Dejé de respirar en cuanto me fijé mejor en lo poco que alcanzaba a ver de su rostro. Tenía la barba que perecía ser de unos cuantos días. El cabello ligeramente alborotado y negro, muy negro. Las cejas pobladas enmarcaban sus ojos. No podía ser él, no podía. Parpadeé en repetidas ocasiones, imaginando que aquella silueta se desvanecería. ¿Y si era un demonio? Era posible, alguien que se burlaba de mí haciéndome ver lo que yo quería ver.
Ansiaba acercarme, mirarlo más de cerca, tocarlo, abrazarlo. “No, no puede ser él” Un nudo se formó en mi garganta, lo que me hizo imposible tragar.

por **Julyne/Sebak Worthing** Vie Ene 20, 2017 6:25 pm

Problemas

Propias Traiciones

La entrada de aquel elegante hotel había sido adornada con inmensos estandartes con el emblema del edificio y un pequeño grupo de trompetistas daban la bienvenida a cada uno que ingresaba subiendo las extensas escaleras alfombradas. Cristopher bajó del carruaje agradeciendo al conductor y tras acomodarse el saco para que no estuviera arrugado, se dispuso a ingresar al hotel, con las expectativas de encontrarse con una puesta única para aquel evento, y es que del modo en que había sido presentado no podía esperar menos. Finalmente al ingresar se encontró con mas gente de la que esperaba, él creía que no había mas de unas sesenta o setenta personas pero podía jurar que allí ya había aproximadamente unas cien. Apenas pasó al salón principal un empleado del servicio lo recibió y lo invitó a llevarlo hasta su mesa correspondiente, con un simple movimiento de cabeza educado lo siguió y tomó asiento donde le indicó, en la mesa no permanecían muchos sentados, sólo dos damas que se abanicaban y observaban el resto del salón entretenidas. Al parecer la mayoría de los invitados paseaban por el lugar, buscando relacionarse entre sí, estudiando mejor el lugar. Cristopher se dirigió hacia las dos damas y las saludó educadamente con un pequeño beso en el dorso de sus manos, luego volvió a su asiento sin decidir hacer lo mismo que el resto o quedarse sentado hasta el comienzo de la ceremonia, finalmente fue hasta su asiento y esperó.

Luego de lo que pudo calcular como una media hora más, las puertas se cerraron y el sonido fue cesando mientras se dirigían a sus mesas, el resto del murmullo fue apagado por la música que comenzó a sonar indicando que ya era el momento de que comenzara todo. La iluminación disminuyó hasta dejar el inmenso salón en penumbras y una pequeña puerta contigua se abrió por donde hicieron su entrada el primer número de baile de la noche, Cristopher miró concentrado a las bellas mujeres que comenzaban a bailar primero en el centro para luego distribuirse por el salón entre las mesas. Si querían llamar la atención de los presentes desde un principio, entonces lo había logrado, todos disfrutaban de aquel espectáculo en silencio, excepto quizás las damas invitadas...como la que volvió a ver luego de aquella “reunión social” en su casa con su hermana, ahí estaba tan segura y algo enfada como siempre quizás él podría arruinarle o mejorarle más el ánimo si se podía claro.

Con una sonrisa ladina extendió la mano a la mujer que no creía lo que veía nuevamente, pero con la mirada oscura dejó ver que si era real.

por **Gretel Döhler** Sáb Abr 15, 2017 10:36 pm

Se levantó del sofá y se mordió el labio inferior, echándose el pelo hacia atrás. — No entiendo nada — Dijo finalmente, se cruzó de brazos rascándose la frente. — Y encima eres un genio, que no es por nada, pero vaya ironía — Seguimos con los tiritos ¿eh? — Y sí, duermes en el sofá — No iba a dormir con ella, mucho menos con Cassie, a Andy aún le quedaban muchos años por vivir. Miró un momento hacia la tele. Eso era, se veían una película no tenían que hablar, él se entretendría y ella pensaría en algo para poder echarlo cuanto antes. ¿No estaba siendo muy cruel? Volvió a mirarlo a la cara. Maldita sonrisa. — La pizza tardará en llegar así que ponte cómodo — Pero no demasiado. Seguro que si Cassie hablaba con su madre, y a su vez su querida tía Cris con sus padres su huésped sería evacuado en poco tiempo, después de todo las Rhodas eran la voz de la razón mientras que los Lindström, bueno, eran espíritus libres. Se puso de rodillas en la alfombra y abrió el armario dónde tenían uno de los pequeños tesoros del piso, los DVDs. — ¿Quieres ver una peli? — ¿Cuál podrían ver? Luis se agachó para poder ver bien todos los nombres, en ese momento tenía mono de La princesa prometida, pero se negaba a ver tal película con él. ¿Dónde estaría lo que estaba buscando? La loba tuvo que agacharse todo lo posible, hasta llegar al punto de apoyar los antebrazos en el suelo para leer mejor los nombres y comprobar que no se había caído ninguna. ¡Joder! Miró un momento hacia atrás, para encontrarse con la penetrante mirada de Alex. — ¿Sabes? Las niñeras no miran los culos de las personas a las que tienen que cuidar — Y sonrisa forzada. Miró una vez más y.. ¡Bingo! Rock of Ages. La cogió la metió en el DVD y fue directa a la cocina a hacer palomitas. Total, así picaban algo mientras esperaban a la pizza.

por **Julyne/Sebak Worthing** Jue Abr 20, 2017 6:22 pm

Problemas

Propias Traiciones

Vi como el carruaje seguía andando, algunas personas iban en sus carros como los llamaban, si autos pero para un baile prefería la magia de un carruaje.
-Es cierto.. mi madre algo dijo de que esperara cerca de la entrada a alguien... ehm... mart.. mat.. mats.. algo así es su nombre..un amigo de ella al cual conocía... vaya no recuerdo mucho.. claro por eso me dejo ir sola, tendré que encontrarme con aquel hombre- murmure para mi resignada dando un suspiro, trate de hacer memoria sobre aquella persona hasta ahora misteriosa y tuve un leve recuerdo en la mente, solo logre recordar una conversación amena que tuve con alguien a quien no recuerdo -Bueno.. espero no sea un aristócrata mas, que solo piensa en la fortuna y todas esas cosas materiales- pensé suspirando al tiempo que sentía que el carruaje se detenía y alguien abría la puerta, era un hombre con traje, extendía su mano para ayudarme a bajar de aquel carruaje, antes de tomar su mano me coloque un chal negro para abrigarme hasta entrar al salón de baile, luego tome su mano con delicadeza y baje del carruaje, aquel hombre de traje elegante me guió hasta la entrada del salón al tiempo que el carruaje se alejaba luego hizo un gesto, una pequeña reverencia y volvió a la entrada, le agradecí la ayuda y sonreí, ahora me encontraba sola en aquel gigantesco salón de baile, la decoración era hermosa, típica de los salones, muchas parejas ya bailaban y otras personas en grupo conversaban, se escuchaba un vals tocado por la orquesta era un ambiente agradable. -Si tuviera a mi príncipe azul esta noche seria tan mágica, sin embargo debo resignarme a encontrarme con el amigo de mi madre espero no tener una velada aburrida con temas comunes- pensé mientras miraba como bailaban y esperaba en la entrada a encontrarme con quien seria mi acompañante esa noche.
Mientras esperaba me quite el chal ya que no tenia frió, una señorita amablemente me dijo que lo guardaría por lo que se lo pase agradeciendo con una sonrisa gentil, de todas formas los bailes me parecían mágicos mientras no estuviera mi madre y lo disfrutaría de una forma u otra, era lo que mas me gustaba de la alta sociedad.. y creo que lo único realmente..

por Contenido patrocinado

The art of the shadows || Privado

The art of the shadows || Privado

Re: The art of the shadows || Privado

Re: The art of the shadows || Privado

Re: The art of the shadows || Privado

Re: The art of the shadows || Privado

Re: The art of the shadows || Privado