ahora no (libre)

por **Weston Davis** Jue Oct 05, 2017 10:21 pm

Erase una vez, un bosque encantado….- relataba uno de los actores de la obra que estaban representando en esos mismos instantes en los que Weston se encontraba dispuesto a encontrarse con algo diferente. Sin embargo siempre acabaría siendo todo monótono para el. Todo al fin y al cabo se repetía para él en una repetitiva monotonía.

Weston se había levantado con aire pesado pero con el pase de las horas todo había pasado bastante rápido y ahora estaba como siempre. No pasaba ni un segundo que pasara en el que no pensara en su futuro, el estar junto a una bella jovencita que le correspondiera y que no lo juzgara por su rango social.

Hubo una vez que colándose en una fiesta, pudo conocer a una dulce jovencita pero de inmediato le confundieron y acabo por hartarse de aquel lugar con tanto nivel social. No Era para él. A lo mejor su media naranja no había nacido. Weston caminaba sin tener un rumbo fijo. El teatro al aire libre había sido divertido, ahora caminaba y fue adentrándose en los bosques parisinos, caminaba y caminaba hasta que se paró en el sitio.

Observo donde se habia quedado y estaba en un claro en el bosque. Podia ver detras suya la hermosa Paris. Una cuidad que tenias que entenderla para poder haver algo siquiera. Tambien tiene el idioma, Weston no lo domina bien, pero siempre está esforzándose en todo lo que puede para poder ser el mejor.

Entonces, de la nada, una ligera brisa le hizo estremecer de repente. Donde estaba eso queria saber ahora mismo. Lo mismo en algun rincon de algun bosque estaba ahora mismo sin saber el como poder volver hasta la ciudad.

-¿se ha perdido? - escucho una voz femenina detrás suya - no se preocupe no voy a comerle.

-lo lamento mi señora, es que me ha sobresaltado - rie Davis entre silabas, sin tener que verse obligado a estirar mas la cara por el susto que h obtenidom

por **Bernadette Guibon** Mar Oct 24, 2017 3:04 pm

-Lo lamento, no fue mi intención.- Se disculpó aproximándose cautelosa aunque sin terminar de salir de las sombras. -Pero le he visto tan solo y divagante... que no he podido retener mi curiosidad.- Le observó detenidamente y dio unos pasos más hacia el saliendo de las oscuras proyecciones de los arboles y con cuidado cubrió sus labios con su abanico negro de forma delicada e incluso coqueta.
-y dígame si no es demasiada intrusión, ¿qué anda buscando por un sitio tan lóbrego como este? No es aconsejable pasear por los cementerios cuando ha caído el sol... la oscuridad trae consigo auténticos monstruos...- Sonrió ligeramente mientras revoloteaba a su alrededor con curiosidad. -¿O a caso es usted uno de esos monstruos de la noche? -Rió tras su abanico.
Finalmente se debuto a una distancia prudencial, pero frente a él, no deseaba faltarle al respeto, pero entre miradas fugaces, prestó más de su atención a vigilar su delicada vena yugular, que palpitaba al ritmo de su corazón como si danzara junto a él en un gran vals que jamás se detiene; excepto para ella, su vals se detuvo hace ya unos siglos...

por **Weston Davis** Dom Nov 05, 2017 6:06 pm

Weston estaba escuchando a la mujer que estaba delante de su persona. Algo no le olia muy bien y era que había pisado una cagarruta de caballo por lo que estuvo un rato limpiándose el zapato de lo manchado pero luego miro de nuevo a la mujer con una sonrisa tenue.

- Bueno yo soy un cacho de pan. Los animales me adoran – dijo refiriéndose a la profesión que estaba estudiando y que deseaba ser, un veterinario experto y que supiera tratar bien al mundo animal. Le encantaban los animales y por ello no dejaría de estudiar su profesión – y he debido de perderme pensando en mis cosas que no me habré dado cuenta de por dónde han ido mis pies.

Se quedó un momento sin saber demasiado que poder decir. No parecía muy perdida la mujer.

- ¿Esta aquí por llorar a algún ser querido? – Weston pregunto con sumo respeto a la mujer que no conocía su nombre y del que no quería saber ya que se crearía un vínculo entre ambos aunque no fuera personal, pero estaría relacionado con ella ya que se habían conocido esta misma noche. No quería problemas, quería conocer a una joven que la entendiera y quisiera por lo que es y que no lo despechara por ser de clase media. No quería a ser más exactos alguien de la alta sociedad. Teniendo los problemas que tuvo no quería tener ninguno más.

Weston quería tener su vida como veterinario y los problemas de su oficio sí que querría tenerlos. De todas maneras, estaba quieto en el sitio pensando en sus cosas que podría estar dando mala imagen.

- Bueno, ya sé por dónde debo de ir….Hasta otra señorita. – Weston se despidió con suma cortesía y esperando a que estuviera despejado se fue por el camino de piedras que empezaba el cementerio encontrándose así con la salida del mismo.

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