Un largo viaje

por **Epoch** Vie Jul 27, 2018 5:27 am

La idea de viajar me encanta por la traslación, como si fuese la idea apropiada para seducir a alguien que no fuese yo. Toda la vasta visibilidad del mundo recorre en un movimiento de hastío colorido mi imaginación despierta; esbozo un deseo como quien ya no quiere hacer gestos y el cansancio anticipado de los paisajes posibles perturba, como un viento torpe, la flor del corazón que se estancó.

Y como los viajes, las lecturas, y como las lecturas, todo... sueño una vida erudita, en la convivencia muda con los antiguos y los modernos, renovando mis emociones mediante emociones ajenas, llenándome de pensamientos contradictorios en la contradicción de los pensadores y de quienes pensaron, que son la mayoría de los que escribieron. Pero la idea de escribir se me desvanece como un libro cualquiera, el hecho fisico de tener que leer me anula la escritura... de igual modo desfallece en mí la idea de viajar apenas me acerco a un lugar de embarque. Y así regreso a las dos cosas nulas en las que me siento seguro, de puro nulas que son también: Mi vida cotidiana de transeúnte incógnito, y a mis sueños como insomnios de desvelado.

Y como las lecturas todo... desde que algo se pueda soñar como interrumpiendo de veras el transcurso mudo de mis días, alzo los ojos de protesta pesada hacia la sílfide que me es propia, esa pobre que sería tal vez sirena si hubiese aprendido a cantar.

¡Arco de cielo! ¿Conoces la palabra aurora? Alguna interjección o sílaba caliente, que queme sin ver el bosque gris que no conoces... ¿Conoces la palabra "ay!" ? ¿Has dicho CARAJO alguna vez?
¿Conoces la palabra exterminio? ¿o el signo de interrogación? El adverbio de modo en que pregunto si conoces lo que pienso. ¿Conoces los puntos de las íes y el punto decimal que separa los enteros de las partes del destino de mi carta sin papel?

Como arena se me escapan las letras que no consigo juntar. La cúpula del cielo no responde a mis inútiles apelaciones y el mar canta con un largo monosílabo, no tengo mas remedio que quedarme sentado en la orilla a escuchar.

por **Harry Merkel** Jue Oct 04, 2018 2:12 am

Quizás por que yo pienso demasiado o sueño demasiado, lo cierto es que no distingo entre la realidad que existe y el sueño, que es realidad que no existe. Y así intercalo en mis meditaciones sobre el cielo y la tierra, cosas que no brillan bajo el sol o se pisan con los pies. Maravillas fluidas de la imaginación Me envuelvo en la luz de ponientes supuestos, pero lo que supongo vive de veras en la suposición. Me alegro al sentir brisas imaginarias por que lo imaginario vive cuando se lo imagina. Tengo alma en virtud de varias hipótesis, pero esas hipótesis tienen a su vez, alma propia, y me dan por tanto, la que tienen.

No hay otro problema que la realidad y este es insoluble. además de ser algo vivo y en constante cambio. ¿Que se yo de la diferencia entre un árbol y un sueño? Puedo tocar al árbol; sé que tengo un sueño ¿Esto lo hace verdad? ¿Qué es esto? Soy yo quien, sólo en la cubierta, puedo vivir imaginando sin perjuicio de la inteligencia, por decir algo a un hombre, melancólico sentado a la orilla, sumido en sus pensamientos.

Los días que hace calor dan sueño, duermo sin dormir por falta de energía y por eso pienso así. Es la influencia del sitio que ocupo la que pone frente a mi alguien distraído.

Un largo viaje

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