Huyendo para toparme contigo? [Lou]

por **Louis J. Bouquet** Dom Ene 23, 2011 7:41 pm

Mi camisa se pegaba a mi pecho, blanca y abierta hasta el pecho, mientras mi pecho subía y bajaba. Corrí y corrí toda la tarde buscando alejarme de las calles del centro. Solo a mi se me ocurría haberme metido con aquella señora de gran talla. Creí poder encantarla con mi sonrisa de chico bueno. No había podido resistirme a ese enorme anillo con un rubí de gran tamaño.
Con gran maña, se lo habia logrado quitar, pero en un descuido, su guardia me había pillado. Y habían gritado como locos. No me apetecía ir a parar a un frio calabozo. Así que por ello, había huido hasta estos lugares, quizás, buscando llegar a las afueras, y que todo aquel pequeño lio se solucionase.
Con mis caracteristicas fisicas, posiblemente me tomasen por un pasante, y no una persona con los firmes deseos de estar alli al menos una buena temporada.

Era extraño que hubiese corrido hasta un lugar tan cercano a los calabazos. Pero, acaso, no decían que el lugar más seguro era la casa del enemigo?

Me apoyé en una de las sucias paredes de una de aquellas desvencijadas construcciones. Abrí mi mano, y alli estaba. Tan carmesí, como la sangre.
-Casi me pudiste costar una noche en el suelo sucio de las celdas... eh?

por **Lourdes Bourmont** Dom Ene 23, 2011 8:13 pm

Luego de entregar la comida a los reos, voy a respirar un poco de aire puro afuera, aunque haga frío. Esa comida es tan mala que creo que es otra de las formas de castigo y muerte del director de este calabozo...

Pero de pronto oigo una voz! Miro a los lados, nada. Me apoyo en la pared y encuentro justo abajo mío a un hombre apoyado en las paredes del calabozo:

- Buenas tardes monsieur! -pero antes que me conteste, me fijo que tiene algo rojo y brillante en sus manos- ¿Está herido? -miro alrededor y no veo a nadie más, sólo una línea de huellas en la nieve que llega a este hombre, con lo que concluyo que el ataque no fue aqui.

por **Louis J. Bouquet** Lun Ene 24, 2011 12:09 am

Me giré alerta, metiendo enseguida aquel objeto en los pliegues de mi pantalón, y levanté la mirada. Un muchachito algo raro. Le miré fijamente con mis ojos convertidos en dos finas ranuras. ¿Por que decía aquello?
¿Habría visto la joya roja? Quizás, estaba siendo demasiado paranoico, pero, en verdad, que no me agradaba la idea, de verdad, de estar dentro siendo pleno invierno.
Era cierto que podía escapar en mi forma de gato, pero, uno nunca sabe las cosas que hay más allá de las apariencias. Me separé de la pared, y le dije en un tono tranquilo, algo más amable que mi mirada
-No, descuide, estoy bien... ¿quien eres?

por **Lourdes Bourmont** Lun Ene 24, 2011 9:45 pm

- Pero yo ví... -me quedo sin palabras por un momento, pues juraría que ví sangre en su mano hace un instante- ¡Muéstreme su mano, s'il vous plaît!

Veo que no tiene nada y me relajo, pues el hombre no estaba herido ni nada:

- ¡Pardon! Me llamo Lour... Lou Bourmont, y trabajo aqui como celador. -saludo amistosa (amistoso) estirando mi mano desde la muralla. Si el hombre estira su brazo hacia arriba, nos podríamos dar la mano.

por **Louis J. Bouquet** Lun Ene 24, 2011 9:59 pm

Se la mostré con aire inocente, poniendo una cara bastante creíible, no vano, era actor. Pude haberme negado, pero el chico no me inspiraba algo... malo.Para cuando se presentó, mis finos oídos, no tanto como en forma animal, pero si sensibles, captaron algo extraño cuando me dijo su nombre, y estiró su mano para que yo la estrechase.
Estiré mi mano, tan delgada y fría por el esfuerzo de la huida, pero que, sin embargo, apretó la suya amablemente.

-El placer es mio, Lou- le regalé mi sonrisa más cortés. Le solté, y con habilidad, trepé el muro, no era muy alto. Estando a su altura, consideré adecuado decirle mi nombre Louis J. Bouquet...-Le miré analiticamente, no era un chico de talla grande, y era, seguramente tras todo aquello, bonito. Con al ceja arqueada, y tono divertido, le dije- Vaya, asi que tu eres quien cuida que no se escapen los presos, eh?

por **Lourdes Bourmont** Lun Ene 24, 2011 11:18 pm

El joven saltó con una agilidad casi felina y en instantes ya estaba a mi lado. Pude en ese momento observarle las facciones delicadas, la ropa fina, el cabello cuidado, y por un segundo pasó por mi mente la idea de que él también era una mujer disfrazada:

Louis Bouquet... ¡Somos tocayos! -agrego sonriendo con la coincidencia- Pues déjame contarte que ya he ayudado a detectar y detener a algunos reos yo solito! -veo su mirada de incredulidad y afirmo: ¿Tienes tiempo? Porque estaba en mi tercera semana de trabajo, cuando unos estafadores habían sobornado a otro guardia y se preparaban para huir. A mí no me hubiera importado si no hubiera sabido que eran prestamistas. Por ello, empecé a gritar y les lancé el balde de la basura a uno en la cabeza, y con mi escobillón le pegué al otro! -comenté animada, gesticulando bastante con mis brazos, casi repitiéndo mis movimientos de ese entonces.

De pronto, me detengo pues, como me sucede infelizmente a menudo, me pongo a charlar sin medir las consecuencias:

- Pardon, pero ¿qué haces aquí? ¿No estarás en algo malo? -pregunto preocupada, pues estamos muy lejos de la ciudad de las luces.

por **Louis J. Bouquet** Mar Ene 25, 2011 11:21 am

Reí un poco ante aquello, con los brazos cruzados sobre el pecho. Era verdad, nuestros nombres eran parecidos. Quizás sería bueno que le dijera algún otro de mis nombres, no fuera a confundirse o algo así, pero no me dió tiempo a agregar algo más. Se soltó con una historia curiosa, que, mi mente recreaba como hacía cuando leía un libro. La verdad, que si era cierto, el chico tenía habilidad o, solamente suerte.
Lo que si, era que por la manera en que me describia las cosas también con sus brazos, podría llegar a ser alguien como yo. Me pregunté si se lo habría planteado alguna vez.

-Vaya, es bueno saber que aún hay celadores que no están corrompidos y que tienen la decencia de cumplir con su trabajo y no dejar salir a los malhechores.Le dije en un tono suave, como si estuviera muy sorprendido.

-Oh! no te detengas, me gusta escuchar ese tipo de historias!-Ja! tenía que preguntarme precisamente eso!. Con un tono de lo más inocente, agregué-Ahmm yo? solo vine de paseo... ¿Acaso me ves cara de algo malo?- Esbocé mi sonrisa más angelical. Mero cuento.

por **Lourdes Bourmont** Mar Ene 25, 2011 8:55 pm

Lo miro fijamente y, pues, sus ojos son tan dulces que, aunque esté metido en alguna maldad, no debe ser nada serio:

- Está bien, está bien, te daré un voto de confianza! -digo riendo y pegándole un combo suave, a lo amigo.

Miro al cielo y veo la hora según la altura del sol:

- Ya pronto entrego mi turno. ¿Te molestaría compañía en el paseo? -hay algo que me llama la atención de Louis. ¿Será su mirada, con esos ojos tan diferentes? ¿O es su forma de moverse? O quizás, es sólo mi curiosidad por conocerlo más.

por **Louis J. Bouquet** Mar Ene 25, 2011 10:25 pm

La sonrisa que brillaba en mis labios, se hizo más pronunciada. Se habia creido mis palabras. O, bien, solo quería pasar por alto esas cosas.

-Vaya,gracias....-musité, mirandole algo extrañado por aquel golpecillo. No era un gesto que viera para conmigo a menudo, por un momento, me dieron ganas de revolver su cabello, como si fuera un niño chico.

-Mira que la suerte me sonrie. Claro, sería agradable caminar un rato acompañado por un chiquillo como tú...Si tenía intención de dejarlo pronto, aquella idea, ya se estaba diluyendo, como el sol tras el horizonte.
Quizás, necesitaba un amigo, alguien... un camarada, alguien a quien vería más como un hermano, que como posible conquista

por **Lourdes Bourmont** Miér Ene 26, 2011 10:13 pm

- ¡Très bien! Si me esperas aqui... -no puede esperar aqui adentro, o sino alguien lo encerrará- ... del otro lado, -le indico con el dedo para que salte- te paso a buscar y paseamos.

Una vez con todo acordado, corro hacia el interior y, luego de revisar con la mirada a los presos, dejo mi chaqueta de celador y me pongo mi gran abrigo, raído pero "de alta clase" para alguien de mi situación. Me ajusto el gorro, doy tres vueltas a la bufanda y cierro el portón. Casi corro al encuentro con Louis, claro que desacelero mi paso al llegar cerca, y lo encuentro apoyado en la muralla.

Su postura, su ropa, su forma de moverse, todo me indica que es extranjero:

- ¿De dónde vienes? -pregunto mientras empezamos a caminar.

por **Louis J. Bouquet** Miér Ene 26, 2011 10:35 pm

Asentí ante esas palabras. No me apetecía entrar, realmente, en caso contrario, me habría dejado capturar, claro esta.
Mientras el volvía dentro, yo salté, con la gracia de un gato. Apenas suponía esfuerzo. Me acomodé ben la camisa y todo, checando que todas las lazadas de las botas estuvieran bien atadas.
Meto las manos en los bolsillos, mirando al cielo,acariciando aquella joya, que bien podria vender...

Cavilando sobre donde sería bueno poner en marcha tal idea,el volvió. En verdad que es un niño pintoresco.
Mientras caminamos, el me hace tal pregunta.
Una pequeña risita escapa de mis labios, y le miro de reojo.

-¿De donde crees que venga? Ahora mismo,venía del centro...--dije de broma, luego, ya,en plan serio,agregué--No puedo negar de donde soy, ni que quiera ocultarlo. Nací en la tierra donde nace el Sol, Japón... por eso, también tengo un nombre propio de alli, sabes ?Eiri...Pero... hace mucho que nadie me dice así...-le dediqué media sonrisa, antes de añadir- lo preguntas por una razón en particular, pequeño Lou?

por **Lourdes Bourmont** Sáb Ene 29, 2011 2:10 pm

Sus palabras me hirieron en lo más profundo: sólo porque iba bien vestido no tenía porqué humillarme inventando esas cosas:

- ¿La tierra donde nace el Sol? Te burlas de mí... -mis ojos se humedecen y me enojo por ello- Te pregunté sólo porque no te viste como los parisienses normales, pero si no me quieres decir, no hay necesidad de inventar eso de Hapón... -digo en tono firme, aunque por adentro me estoy deshaciendo.

Off: Perdón, pero soy una analfabeta que viene del campo y nadie me enseñó nadie de geografía antes.

por **Louis J. Bouquet** Sáb Ene 29, 2011 2:35 pm

Me detuve en seco y le miré entre apenado y sorprendido

-Lo primero fue una pequeña broma. Pero, eso, no. No tendría por que burlarme de tí- Tomé sus mejillas y le miré. Sus ojos se veían húmedos y me odié. Quise abrazarlo, como si fuera un niño pequeño, pero contuve. No quería que pensara cosas raras de mí. Aunque bien, yo no tenía problemas con ese tipo de cosas.
-Y no lo he inventado! En verdad, existe, y es Japón Con J, al idioma local. Lo de "la tierra donde nace el sol", se podría decir que es la forma poética.... bueno, una especie de apelativo. - Dije con rapidez, soltándole y poniendo distancia.
-Fijate bien en mi color de piel y la forma de mis ojos, de mi fisonomía. Es lo que me hace diferente de los europeos, no tanto la ropa. Ahmm mi tierra es pequeña, y quizás por eso no la conocías. Es lo que más comúnmente, llaman Oriente....?- no sabía que más hacer para remediar la situación...

Off: X33 no hay problema :33

por **Lourdes Bourmont** Lun Ene 31, 2011 7:24 pm

Louis me mira y en sus ojos no encuentro burla, pero he conocido a varios sinverguenzas con piel de cordero. Sin embargo, él toma mi rostro en sus manos y algo en mi interior empieza a creer que lo que dice es verdad.

- Pero... es que nunca había oído de nada de eso del sol antes, salvo el de allí -apunto al sol- para las cosechas, y el día y la noche...

Él da un paso atrás y me muestra su rostro, y en verdad es diferente de todos quienes he conocido antes. Tengo la bufanda apretada entre mis manos, pero finalmente vuelvo a sonreir:

- Voy a creer de momento en todo eso que dices de Oriente y tu "tierra pequeña" -y con otro golpe a su hombre insisto- Pero ay si descubro que inventaste todo eso! -termino riendo y reanudamos nuestro paso.

Lo observo, con sus movimientos tan delicados, pero me aguanto de preguntarle qué hace para vivir, pues puede que me diga otro disparate y en esta fría tarde de invierno sinceramente quiero un poco de compañía, aunque sea de un desconocido.

por **Louis J. Bouquet** Miér Feb 02, 2011 11:51 am

Suspiré aliviado al escuchar que me creía. Vaya niño. Seguro que era aún más desafortunado que yo.
¿En verdad habíamos dejado atrás la edad media? Era un pena la desigualdad en que estaba sumida la sociedad. Demasiado grande la brecha entre una clase y la otra. Al sentir su pequeño puño, una risita se me escapa. Si sigue con ellos, me provocará un moretón...!

Oh! cielos, ¿eso es una amenaza, pequeño? Temeré entonces.-
En un impulso, llevé mi mano a su cabeza enfundada en el gorro, y la moví un poco, como si ese gorro no estuviera pudiera despeinarle.

Después avanzo unos pasos, con la espalda firmemente erguida y me giro para mirarle con una sonrisa.¿Tendrá familia? ¿Será tan pequeño como se ve? El frío se cuela entre los pliegues de mi camisa y no puedo evitarlo, el me causa algo, va más abrigado que yo....

¿No te esperan en casa, criatura?- Le pregunto, curioso

por **Lourdes Bourmont** Miér Feb 02, 2011 2:58 pm

Entonces él se ríe y me toma por el gorro. Empiezo a reirme, pues ya rompimos el hielo y ahora podremos disfrutar el final de la tarde como amigos.

La nieve suena bajo nuestros pies, pero con nuestro caminar el frío no sube a los cuerpos, haciendo el paseo más que agradable. Sin embargo, él me pregunta si me esperan en casa...

- No... Arriendo una pieza sólo para mí. -lo observo, y algo en su mirada me transmite soledad- A ti tampoco te esperan, ¿o si? -pregunto, pero luego me arrepiento, no vaya a ser que se enoje por mi falta de delicadeza.

por **Louis J. Bouquet** Miér Feb 02, 2011 3:22 pm

La nieve siempre me ha gustado, en especial, cuando acaba de caer, y esta totalmente inmaculada. No como ahora, que estaba algo batida por nuestros pasos y los de los demás que vagaban por alli.

Podría caminar toda la tarde, y no lo notaría. Siempre inmerso en un mundo de fantasía que era sol mío y al que casi nadie tenía acceso.
¿Sería Lou uno de esos?
-Oh... seguro que te gusta estar independiente... es natural...-
Después me dice aquello.Claro, a mi tampoco nadie me esperaba. A menos, que contara el hecho de que siempre podía colarme en la casa de una chica de clase alta que me quería como si fuera una especie de mascota. Eran esas noches cuando no me sentía tan solo. Con soltura, y un tono nada acorde con la mirada fugazmente triste que se le coló, le respondí, asientiendo levemente-No, nadie, solo el vacio del lugar donde duermo

por **Lourdes Bourmont** Jue Feb 03, 2011 9:36 pm

"Sólo el vacío del lugar donde duermo..."

Sus palabras me calan hondo, pues comprendo que él está tan solo como yo. O quizás más, pues mi familia está a unas cuantas millas de aquí, mientras que la suya está en ese Oriente que me hablaba:

- ¿Y por qué te fuiste de Oriente? Porque... -no sé por qué voy a confesarme, en parte, con este amigo que hace poco rato conozco- ... porque yo, huí de mi casa...

No lo había dicho en voz alta, y la verdad desde mis propios labios me duele... De repente me doy cuenta que tengo los brazos cruzados apretados contra mi cuerpo.

por **Louis J. Bouquet** Jue Feb 03, 2011 11:19 pm

Estaba por responder su demanda, cuando me dice aquello y me dejo por completo desarmado. Detuve mis pasos. ¿Había huido de casa?
Pobre niño! La de cosas que le han de haber sucedido para que lo hiciera...
Observé sus acciones, así, parece un niño desválido que se puede derrumbar con el más simple roce... No lo dude.
Al diablo con lo que pensaran! Corté la distancia y lo abracé fuerte, apretando su cabeza, como si buscara reconfortarlo con ello. No quise hostigarlo más. Suficiente había hecho ya con esa confesión...

-Me fuí porque no había nadie ya especial allí para mi...
Respondí aquello en tono suave. Era verdad. Al morir mi progenitora, no me quedaba nadie más, y un niño huérfano e hijo de una mujer que deshonraba la sangre de su tierra... No era muy bien recibido. Eso no lo tenía que saber. No esperaba que me cogiera lastima por algo así. Solo le abrace, como si fuera el hermano que nunca tuve

por **Lourdes Bourmont** Sáb Feb 05, 2011 9:01 pm

Escucho sus pasos detenerse en la nieve, y sin darme tiempo para reaccionar a ver por qué, siento su abrazo fuerte y reconfortante! De verdad, hacía mucho, mucho tiempo que no recibía un abrazo... Mucho tiempo antes de fugarme, y las lágrimas brotan al tiempo que estiro mis brazos y lo abrazo fuerte también.

-Me fuí porque no había nadie ya especial allí para mi... -escucho sus palabras y lo aprieto más, como una forma de retribuirle su cariño, ya que ambos andamos solos por este mundo.

Luego de un momento, me aparto y enjugándome las lágrimas, le digo:

- ¿Tienes dónde cenar hoy? Porque si no, te invito a una sopa de zapallo con papas! -finalizo con una sonrisa. Deseo permanecer más tiempo con Louis, quien por esta tarde está llenando el hueco de mi soledad.

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