Antonella Giordano

por **Antonella Giordano** Vie Mar 11, 2011 11:44 pm

Nombre del Personaje
Antonella Giordano
Apodo
Nell, Nella, Nellie
Edad
20 años aparento 20 años. [Recién convertida]
Especie
Licántropo
Tipo y Nivel Social
Nivel alto
Sexualidad
Bisexual
Lugar de Origen
Palermo, Italia
Habilidad/Poder
Sanación acelerada
Sentido del peligro

Antonella Giordano Descripciones

Descripción Física:

El que me mire podrá pensar que soy hostil, borde y que tengo un genio de la fruta, podría incluso pensar que podría pegarle o simplemente soltarle alguna bordería antes de marcharme pero jamás se le ocurriría que durante el tiempo que dure nuestro encuentro, está en peligro de muerte. Mido 1.60 de estatura y peso 56 kilogramos y a simple vista puedo no parecerte la gran cosa, pero no te entusiasmes demasiado porque puedo inmovilizarte en unos segundos, sé técnicas de defensa personal de las que ni siquiera has escuchado hablar y para ellas no necesito demasiada fuerza bruta. Soy pelinegra y llevo el cabello algo por debajo de los hombros. Siempre desordenado y siempre viéndose bien, es de una textura sedosa que te dan ganas de acariciar, eso claro, si no te importa que te arranque el brazo justo después y te golpeé con el mismo hasta dejarte inconsciente. Mi piel tiene un tono blanco uniforme porque siempre trato de broncearme completa de cuando en cuando. Mi rostro es adornado por un zafiro y una esmeralda. Antes de ser licántropo tenía visión borrosa en el derecho precisamente por la peculiaridad de tener un ojo de cada color, tan profundos que ni te darías cuenta que detrás de esos ojos hay una mujer espiándote, son mis fieles aliados porque nunca demuestran lo que en realidad estoy sintiendo gracias a años de práctica frente al espejo, también una boca cuyos labios carnosos y rosados dedican sonrisas que a menudo son ladeadas y falsas para todo aquel que se me aparece en el camino. No sé porqué tengo que decirlo pero estoy muy buena, tengo el cuerpo que todas las mujeres envidian. Tengo todo puesto donde debe de ir y estoy bien dotada sin llegar a la total exageración, el único defecto que yo podría decir que tengo es que las cicatrices de mis batallas me zurcan algunas partes del cuerpo, la más especial y más marcada, la que tengo en un costado del torso que fue la del colega que me convirtió. Tengo las manos delicadas y los dedos largos, en un pasado lejano tocaba el piano y lo tocaba muy bien, son manos que no deberían estar manchadas de sangre de sus enemigos pero así son las cosas. Uso ropas de acuerdo a mi nivel social con la elegancia, sensualidad y el contoneo de caderas que se requieren para el trabajo. Si logras romper las barreras que siempre tengo expuestas y te acercas a mí sin que yo te rechace, puedes percibir un aroma a canela que juega con tu sentido del olfato y te embelesa hasta que yo le pongo fin con una mirada que podría congelar el Infierno mismo. No tendría que decirlo pero pecaría de falsa modestia así que lo diré: Soy perfecta.

Descripción Psicológica

Psicológicamente hablando, me gustan las cosas claras y conmigo no hay medias tintas, tampoco me tiento el corazón pensando si mis comentarios pueden herir sentimientos. No pido perdón a menos que seas alguien importante en mi vida porue si no lo eres y te he hecho la vida imposible, probablemente te lo mereces. Soy alérgica a las demostraciones de afecto y suelo maldecir demasiado. Odio que se acerquen más de lo normal y tu vida corre peligro si invades mi espacio vital. No voy a presumir, no me defino como inteligente sino como astuta, escurridiza y letal. Por lo general obtengo lo que quiero a las buenas, a las malas y a las peores. En mi universo hay sólo tres formas de hacer las cosas: La correcta, la incorrecta y la mía, por lo tanto, puedes decirme lo que tengo que hacer pero es difícil que me obligues a hacerlo si yo no estoy de acuerdo, es más, creo que es imposible que lo haga aunque esté de acuerdo. Soy sarcástica e irónica, voluble y desorganizada, dramática y exagerada, también soy hostil, borde, bipolar, no suelo mostrar mis sentimientos a menos que seas de mis escogidos amigos. Suelo terminar con la gente irritable golpeándolos o gritándoles alguna bordería. No me importa lo que la gente piense tampoco y por eso mismo me tachan de ermitaña. Hablo poco, pienso mucho y soy directa cuando de hablar se trata. Realmente no soy como cualquier chica. Básicamente dejo ver un aura totalmente hostil de una persona que no le importa nada aunque todo le importe más de lo que pienses, puedo darte miedo o simplemente caerte mal pero como bien dije en su momento: Nadie podría siquiera pensar que esta chica podría matarte a sangre fría antes de que te des cuenta de que estás en peligro.

Historia en Retroceso

Hace apenas tres meses que me convertí en licántropo. Salir del hospital sabiendo que cada luna llena te convertirás en un monstruo sediento de sangre sin poder evitarlo, no es precisamente la mejor forma de celebrar tu cumpleaños número 20. Que tus padres decidan mandarte de viaje porque se avergüenzan de lo anterior, tampoco es como para hacer una fiesta. Llegar a Paris a donde nadie te conoce, con un montón de dinero patrocinado por tu padre y una promesa de más con tal de no mencionarlos como tus progenitores es verdaderamente una grosería.

Cuando desperté de mi inconsciencia sólo podía sentir que mi cuerpo entero palpitaba como un gran corazón del dolor que se instalaba en cada célula de mi cuerpo, escuchaba cosas raras como a la señora que respiraba en el cuarto de al lado, el tintineo de los instrumentos sobre las charolas en el quirófano improvisado y los llantos de mi madre me perforaban el oído. A saber cómo había llegado a esa clínica clandestina después de mi ataque y a saber cómo habían contactado a mis padres. Nunca pregunté. Abrí los ojos despacio recibiendo la sorpresa de que veía bien con mis dos ojos y casi me maravillé, hasta que el médico me soltó la gran noticia: "Te ha mordido un hombre lobo" Tardé más de lo normal para procesar la información y para cuando logré ubicarme en el tiempo y en el espacio, ya me habían soltado una diatriba de un montón de cosas que podía y no podía hacer. Mi madre aullaba limpiándose la nariz, lo cual era irónico porque yo era la loba en ese momento y mi padre me miraba como si la princesa que siempre había soñado con sentar en sus piernas y que nunca había tenido, se esfumara por fin y para siempre. Luego vino la negociación. ¿Conclusión? Ahora soy huérfana de padres y no tengo relación alguna con ningún Giordano existente en el planeta. Ellos perdieron una hija en el hospital después de un ataque sangriento.

¿Que qué recuerdo antes del hospital? Luna llena. Caminaba sola porque siempre fui la rebelde de mi casa y andaba con malas compañías, de ahí que a mis padres les pareciera muy fácil deshacerse de mi. Un alivio casi. Escuché un ruido detrás de mí y apreté mi navaja en la mano que escondía dentro del bolsillo de mi abrigo. Empecé a caminar más rápido y los pasos detrás se hicieron más rápidos y cuando me di cuenta ya estaba corriendo. No tenía oportunidad. Ni siquiera sabía qué era lo que me perseguía pero no era humano. Me desvié entre callejones, utilicé mi estatura baja y mi poco peso para ganarle un poco de tiempo pero nada de lo que hiciera me salvaría. Un tropiezo. Un zarpazo. Un grito. Forcejeos. Una mordida. Dolor. Silencio. Oscuridad.

Antes de ser mordida tuve una vida casi normal. Y digo casi porque aunque mis padres intentaron inculcarme un estilo de vida de acuerdo con nuestro nivel social, la época que vivíamos y el status de nuestra familia en Palermo, yo siempre terminaba encaminada en el camino incorrecto. Esto no se modificó al ser mordida, yo ya era antisocial y rebelde desde antes. Lo llevo en la sangre. Malas compañías, malos pasos, malas palabras, cosas que no debía hacer, cosas que no debía decir, rompiendo las reglas, cuestionando a la autoridad, cero femenina y con tendencias a la violencia. Muy diferente a mis hermanos que eran caballeros hechos y derechos y más grandes que yo.

La migraña de mi madre, el decepción de mi padre, la pesadilla de mis hermanos desde que tenía uso de razón.

Datos Extras
~.Tengo la capacidad de beber alcohol a lo bestia sin perder el conocimiento.~
~.Sufro de insomnio crónico y puedo pasar días sin dormir.~
~.Cuando estoy obligada, suelo comportarme como la gente decente.~
~.Gracias a mi madre que es una erudita en estos artes, sé bailar todo tipo de bailes de salón a la perfección.~
~.Sé abrir cualquier cerradura que le pongan al alcance de la mano.~
~.Llevo simpre una navaja conmigo por precaución.~
~.Ahora mismo, no me molesta en absoluto ser como soy.~
~.Hay gente que me cae bien y hay gente que no me cae bien, no hay distinciones de razas, es sólo buena o mala suerte.~
~.No me gusta el contacto físico a menos que yo tenga ganas.~

por Invitado Sáb Mar 12, 2011 9:40 am

FICHA ACEPTADA
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