I'll Beat, beat you up![Privado]

-Meditó que gilipollez estaba pasando por su mente enfermiza, se refería a si mismo como alguien enfermizo gracias a que con los años ya se habia dado cuenta de que no estaba todo lo bien que podia estar una persona de su categoría pero no habia llegado a su máximo esplendor lo que le dejaba un poco decepcionado, hizo una mueca de desagrado cuando un vagabundo quiso pedirle algo de dinero y tuvo suerte de que no le hubiese dado por alimentarse de él pero bien sabia que no tenia ni un mordisco estaba en los huesos, le dejó un claro recuerdo en la espalda de un puñal atravesado que el que se cruza con él de un momento a otro podía salir perjudicado. Se quedó reticente a entrar a aquel sitio que muchos vampiros odiaban, nadie seguia las escrituras sagradas que parecian decir abiertamente que los vampiros no existían porque no eran criaturas de dios y todo lo que no era una criatura de dios no tenia derecho para la existencia- Pues yo estoy aqui profanándote una vez más, señor

-Su ultima palabra salió casi como un reto a aquel hogar que estaba lleno de olores nauseabundos entre los que se encontraba el incienso, los movimientos de la tela de su camisa parecían fluir con elegancia mientras palpaba con la lengua como sus colmillos indefensos volvía hacia atrás escondiendose para parecer un humano, era uno de los pocos vampiros que podía matar por matar pero en esos momentos los pensamientos de cortarle la cabeza a algún angel de piedra y saltar sobre la ceniza le parecíamucho más divertido que cortarle la cabezaa un hombre y saltar sobre sus sesos "No quiero ensuciarme los zapatos" dijo mirando como brillaban, un limpiabotas se los habia abrillantado por un modico precio ¿porque los pobres no podían aprender de esa persona? cuando entró se sintió poderoso, notaba su pecho subir y bajar aunque no habia ninguna respiracion en él, todo era frío. Había visto salir a un hombre de ella como decepcionado también pero no le habia prestado atención, tocó los bancos como si en un segundo sus dedos se chamuscasen al tocar aquella madera que según los curas era sagrada.

Pero nada pasó, tocó una de las figuras, quien entrase creería en shaitan como si fuera un corderito que creía en dios pero no era así, sus dedos se colocaron sobre los ojos de una de las figuras acariciandolo, segundos despues sus uñas crecieron alargándose como un cuchillo atravesando aquel ojo que no explotaba ni lanzaba agua sagrada, solo una ceniza impotente llegó a su mejilla, rápidamente se puso en su pose habitual bajando el rostro con cierta desgana, cabizbajo se frotó la camisa para quitarse las manchas volviendo a fruncir el ceño- bu eso demuestra que nunca es bueno ilusionarse con nada - Salió a paso acelerado casi chocando de nuevo contra el hombre- Lamento mis modales -Divertido su acento ingles salió en aquella frase, acento que parecía decir a voces que era extranjero pero él lo habia querido así parecía que habían vuelto sus ganas por divertirse- Me he perdido por aqui -Miró a todos lados y puso gesto de desorientación volviendo a alejarse hablando para sí mismo "Cuanto tardará en acercarse" pensaba distraido-

-Movía las manos como un cuerdo que aburrido repetía ese movimiento, le gustaba aparentar cosas que no eran como por ejemplo que le gustaba la brisa marina aunque le produjesen náuseas, que por ejemplo era bueno hablando con la gente siendo amigo o planeando cosas en la sociedad algo que jamás se daría- porque...-canturreó "te los comes a todos" replicó en su interior con una risita en los labios. Acabó por esbozar una sonrisa mientras miraba a su alrededor ya que habia dejado de observar al suelo. Los hombres cuando veían a alguien como él mirar al suelo solían pensar en él como en una pelotita para jugar al balón prisionero.

Pero a lo mejor... a lo mejor eso quería que le atacasen para tener excusa en desmembrar a aquella persona, apretó los labios con una seriedad excesiva, si pensaba mucho en querer matar a alguien su sed de sangre iría por las nubes y no quería tener que meterse con alguien más, los testigos eran solo una mancha en su historial o un bote de sangre en su alacena. Podía buscarlos por el olor saber donde vivían que viniesen voluntariamente sobre todo si tenian familia.

sacó una fotografía, como si fuera una persona normal.La miró como si fuera un hombre normal mientras entrecerraba los ojos pensando a donde quería ir. Suspiró, sentía la mirada de alguien sobre él eso fue lo que le advirtió, prevenir era bueno especialmente cuando la paciencia era el arma fundamental de los que perdían el rumbo, los que no seguían con la acostumbrada monotonía...los que querían mancharse de sangre como si de un baño de masas fuera.

Siguió mirando la fotografía, de una mujer que estaba casi desnuda cubierta apenas con una sábana blanca, la mujer le sonreía. Lo había robado del interior de un bolsillo no sabia quien era pero cuando los hombres la veían increpaban que era un hombre afortunado, bueno le dejaban marchar cuando lo necesitaba ¿quien no se a encontrado con aquellos hombres imbéciles que te apretaban del brazo para que no te fueses y no te fueses. Le ponían nervioso, por eso usaba esa fotografía, para guardarlos cuando tuviera hambre nuevamente, para matarlos, lentamente-