La mirada melancólica encierra la más grande de las bellas tristezas

por **Eliane Mirbeau** Sáb Abr 21, 2012 12:25 pm

22 años / Humano / Cortesana / Orientación sexual: La que más me convenga / Origen: Paris, Francia

DESCRIPCIÓN FISICA

“Cuerpo; razón física de placer, alma…eso que no conocemos hasta que llegamos a extrañar.”

Antes de mi nacimiento, mi madre había pensado que yo sería un hermoso bebé agraciado por la belleza, no estaba equivocada según palabras propias; mi cabello ondulado color oro hacia juego con mis ojos azules, que con el sol brillaban, resplandecientes, atractivos. Mi rostro perfilaba rasgos muy tenues y delicados para una muchacha de mi status social, en mi mejilla izquierda un lunar coqueto la adornaba, una marca característica de familia, ya que mi madre también lo tenía. Mi apariencia campirana ofrecía a los extranjeros una atracción sin igual a los viñedos familiares, a los que frecuentemente visitaban tan sólo para admirar mi cuerpo curvilíneo cubierto por las acabadas ropas que usaba para trabajar cortando los racimos de uvas. Debo aceptar que mi cuerpo no le pedía nada a nadie, puesto que no gozaba de una extremada delgadez para ser casi parco, aunque era delgada, mi cintura se acentuaba con la cadera, mis piernas largas y mi busto, perfeccionaban mis rasgos.

Usualmente maquillo mis labios de colores rojos tan brillantes que contrastan con mi piel blanca aperlada.

Spoiler:

DESCRIPCIÓN PSICOLÓGICA

“Es prudente no fiarse por entero de quienes nos han engañado una vez”

¿Cuál es la razón para ocultar los sentimientos, las emociones, lo que soy? Describiría mis pensamientos, mis sentimientos, mis actitudes incluso, si fuera capaz de descifrarlos, poco es tanto, cuando tanto es tan poco para mi, quizá el enigma de los misterios de mi vida han hecho que me convierta en una mujer reservada y complaciente al mismo tiempo, podría darte todo de mi, si valiera la pena. Encontré la manera de esconder mis deseos entre susurros, risas y palabras, una careta bajo la profesión que adquirí sin desearlo. Decidida, entregada, apasionada, leal, serian las cuatro palabras que describirían a la mujer bajo la máscara; fría, calculadora, seductora, convenenciera es lo que luzco cuando la llevo puesta. Muchos han tratado de atrapar lo poco que me queda de libertad, libertad que experimento a mi gusto, sólo yo soy dueña

HISTORIA

Nací en un mes de mayo, cuando las flores de Paris están en todo su esplendor, los pájaros revolotean buscando un nido para comenzar su nueva vida después de un largo invierno. Muchas veces envidie a esas pequeñas aves que a mí me parecían inalcanzables, envidiaba la libertad que tenían, poder volar por todo un cielo, por todo un mundo, era casi imposible para mi, para mi familia.

Mis padres eran dos seres humanos hermosos, no en el sentido de belleza y hermosura ¿Pero quién determina que la belleza sólo debe ser física?, sus corazones determinaban sus acciones, mantenían el pequeño viñedo a las fueras de la ciudad de Paris, mi madre, me había contado grandes historias del lugar en dónde sus calles lucían como verdaderos cuentos de hadas, lo que ella no me decía, era que eso hace mucho había pasado, ahora la hambruna, la pobreza se había apoderado del pueblo, mendigaban comida, agua, un techo para medio vivir, me apasionó la ciudad, su vida galante, su corte.

Tras pasar los años de mi corta vida, mi adolescencia fue algo que marcó mi existencia en este mundo, pues mi madre cayó bajo una enfermedad de los bronquios muy difícil de erradicar, bajo nuestra condición era casi imposible brindarle un tratamiento o medicinas que pudieran ayudarle a sobrellevar su problema, que con el paso de los meses y días la fueron debilitando hasta acabar con su vida. Muchas veces me pregunté porque éramos tan desdichados en mi familia ¿Acaso era una prueba de la vida que teníamos que pasar?, no sólo había muerto mi madre, también hermanos y hermanas que no habían podido llegar a nacer del todo, fui testigo de la vida llena de pesadumbre y cansancio para mi padre, un hombre orgulloso, honesto –si así podría llamarlo- pero muchas veces con el vicio que marcaba la vida de alguien frustrado por no tener riqueza o comodidad: El alcohol.
Junto a mi madre viví una temporada de horror, tras el vicio mi padre quien cambio rotundamente, se volvió agresivo, machista, se encargaba de denigrar día tras día nuestra condición como mujeres, se dirigía a nosotros de forma despectiva hasta el punto de ser maltratadas, hasta que ella falleció. Era como si alguien hubiese robado el último suspiro también de mi padre, por las noches vagaba por los viñedos ahuyentando los fantasmas que le seguían, empecinado por ver a mi madre, cometió el peor error de su existencia; tras un arranque de locura, consiguió una soga resistente, lo suficientemente capaz de sostener el cuerpo de una persona, la enlazó en una de las vigas de la pobrecilla casa en dónde me había criado durante mi infancia y toda mi adolescencia para acabar con su vida.

“La mirada melancólica encierra
la más grande de las bellas tristezas”

Cuando regresé del campo aquel día, mis ojos se llenaron de terror, como una función dramática de teatro, dónde sus principales actores fueran la muerte, el horror, mi padre y yo, nuevamente la vida se estaba burlando de mí, me brindó una vez más la soledad y me lanzó a la tristeza ¿Se podría ser tan desdichado cómo lo era yo?.

Tras ser lo único que me quedaba, decidí vender el viñedo de mi familia ya que ese lugar tan sólo me brindaba recuerdos ingratos, dolorosos pero que a pesar de todo deseaba que se conservaran así como estaban, durante la venta de mi propiedad fui engañada y lanzada a la calle sin escrúpulos por una familia de mucho dinero y posición social acaudalada, burlada y sin nada más que yo y unas pocas pertenencias que alcance a rescatar de mi antiguo hogar, vi horrorizada como los arboles fueron incendiados, esos caminos de tierra suave que pisaba cuando yo trabajaba allí, mis recuerdos, mi vida entera había sido borrados de la faz de la tierra por personas sin sentimientos, sin conciencia.

“La venganza más cruel es el desprecio
de toda venganza posible”

Acuñe lo poco que me quedaba, mi espíritu mancillado se fortaleció, la mirada dulce y bondadosa que tenia cambio por una seductora y engreída, mis labios se pintaron de rojo para volver a obtener lo que yo quería materialmente o incluso más, en un acto desesperado, sin ropa, sin sustento, sin comida, sin un techo en dónde descansar opté por viajar a la ciudad de Paris, en donde trabajé escudriñando pisos, ventanas y hermosos jardines en casas de familias muy ricas, pero mi camino me llevó hasta lo que soy ahora; una cortesana, más no cualquiera, ya que mi grupo selecto de clientes han ido brindándome la categoría de la que ahora yo gozo, si ser lo que soy ahora me dará la vida que siempre he buscado y así poder mancillar los corazones, el orgullo de la familia que alguna vez lo hizo conmigo, así sea capaz de cualquier cosa, por lograr mi venganza, la venganza es un plato que se disfruta más frio ¿no?, continuaré y seguiré hasta encontrarlos.

CURIOSIDADES
- Vive en una pequeña casa en el centro de Paris, la cual fue obsequiada por uno de sus clientes.
- Acostumbra vestir de manera elegante pero sin llegar a la ostentosidad.
- Ama el vino y los gatos tanto como la vida misma.
- Tiene una gato llamado Medianoche
-No se ha enamorado por lo que procura no hacerlo, de ninguno de sus clientes, mucho menos de gente externa a su profesión.
- lleva un reloj de bolsillo con las insignias “E&U” al reverso, iníciales de los nombres de sus padres.

por Invitado Sáb Abr 21, 2012 3:06 pm

FICHA ACEPTADA
Bienvenida a Victorian Vampires

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