Volver a París es como volver a casa...(Jacqueline)

por **Nereida Di Vaarsen** Mar Mayo 29, 2012 2:05 pm

Las cosas habían cambiado. Y mucho. Nereida había estado durante mucho tiempo fuera de París. Había hecho un viaje al Nuevo Mundo durante varios años, y durante ese tiempo habían ocurrido muchas cosas. Había crecido. Se había hecho una mujer...ya no era aquella joven de dieciséis años de París que no tenía ni un asomo de inocencia...o al menos eso era lo que ella creía.
Salió de su mansión, a la que había llegado hacía una semana después de su largo viaje al Nuevo Mundo y se encaminó hacia uno de los sitios que mejor conocía de todo París.
Llegó a la laguna, vestida con un vestido blanco de encaje, y contemplaba el agua como hipnotizada...¿cómo podía ser aquel lugar tan bello por la noche? Casi daban ganas de crear poesía...o algo por el estilo. O de hacer magia...de crear algo que saliese del agua, como Venus. Algo más sotisficado, por supuesto. Nereida sonrió con cierta nostalgia. La verdad es que había echado mucho de menos París.
De vez en cuando algunos caballeros se la quedaban mirando...y ella les lanzaba a alguno besos...y luego les ignoraba. No era de extrañar.Su belleza también había cambiado. Y se sentía muy orgullosa de ello.
¡Había tantas cosas por hacer! ¡Tanto que ver! Estaba ansiosa por poner en práctica todo lo que había aprendido.
Se agachó y tocó con una mano el agua. Se la llevó a los labios, saboreando la frescura del agua.
Y siguió mirando el agua...como hipnotizada, con una sonrisa en los labios.

por **Jacqueline S. Ritchway** Mar Mayo 29, 2012 2:13 pm

Frialdad...era todo y lo unico que en aquel momento necesitaba...Sentir mi alma librarse de mi cuerpo y sentir que mi cuerpo se hundia en la Bahia de la laguna que alli estaba. Sentia ahogo, una vil mentira de mi mente: una vez que estas muerto, ni aunque te tragues toda el agua de la laguna, moririas de nuevo. Solo te doleria un poco el cuerpo.

Me habia arrojado, con mi vestido y velo en una roca, solo con prendas intimas al agua y comence a nadar profundo. Abri los ojos y observe a algunas criaturas marinas acercarse curiosas unos momentos pero luego se alejaron gracias a sus instintos naturales. No me importo mucho. La remera sin mangas parecia ondear un poco, me sentia un poco rara, como si fuera una de esas criaturas de cuento. Sirenas? Que risa.
Eleve mi rostro hacia arriba, la luz de la luna llegaba hasta donde estaba yo. Parecia casi una señal divina de esas que los sacerdotes dicen en la Iglesia: "Ve hacia la luz".

Lo hice y fue cuando sali a la superficie, notando el rostro de una joven. Creo que con mi salida la asuste un poco.
-Lo siento.-dije riendo un poco incomoda.-Crei que estaba sola.

por **Nereida Di Vaarsen** Mar Mayo 29, 2012 2:54 pm

Nereida fue sacada de golpe de su distracción perenne cuando de repente alguien emergió del agua como si fuese una criatura marina. Soltó un pequeño grito de sorpresa e incluso dio varios pasos hacia atrás.
Pero, pasada la sorpresa, se dio cuenta de que no era una criatura marina. Era una mujer la que acababa de emerger del agua. Una mujer que parecía tener más o menos su edad...que se disculpó de inmediato por haberla asustado.
Al principio estuvo apunto de responderle con una grosería, con cierta grosería indistintamente sutil que sabía usar con tanta elegancia. Pero luego se la quedó mirando durante unos segundos...fascinada.
Aquella joven tan pálida parecía perfecta para un cuadro sobre la noche y el agua. Algo que le parecía bastante...interesante.
Así que sonrió delicadamente y dijo:
-No os preocupéis...esas cosas pasan.-dijo como si evidentemente fuese así, como si todos los días las chicas se bañasen en la laguna a plena noche...y cómo si otras chicas estuviesen solas contemplando la laguna como quién espera un regreso.
Se agachó y metió ambas manos en el agua. Luego se levantó y se llevó las manos a la cara, deseosa de sentir el frescor del agua.
-¿Está buena el agua a éstas horas? ¿Es agradable darse un baño a semejantes horas?

por **Jacqueline S. Ritchway** Mar Mayo 29, 2012 7:05 pm

Realmente la habia asustado, hasta grito un poco y retrocedio, crei que iba a reaccionar de una forma peor pero dijo que no importaba y asenti. Me observó unos momentos y no supe realmente si me convenia seguir mi rumbo o salir del agua pero luego la vi remojar su rostro y preguntarme sobre el agua. Si a que "el agua estaba buena" se referia a que considerandoo que aun estamos en invierno, que yo estoy muerta y que a ella el agua muy fria luego de un rato le daria hipotermia, si, esta perfecta para mi...pero no para los vivos.

-Un poco fria para mi gusto pero refrescante.-le dije sonriendole y de forma sincera. Algo me decia que aquella jovencita no era del todo normal pero daba igual, quizas solo era mi instinto, n oera del todo peligrosa asi que me relaje. Lleve mis manos a la cabeza para peinar hacia atras mi cabello.-Que hace una jovencita como tu tan tarde a estas horas y por estos lugares?-pregunte con un apice de curiosidad.

por **Nereida Di Vaarsen** Miér Mayo 30, 2012 1:35 pm

"Un poco fría pero refrescante" Nereida no pudo evitar admirar en cierto modo su osadía. Y no solamente por la supuesta frialdad del agua...sino también porque más gente podría verla de esa guisa en el agua. Gente a la que no le haría mucha gracia...pero a ella no parecía importarle esa posibilidad. Y es por eso por lo que Nereida comenzó a sentir cierta curiosidad.
Así que ladeó la cabeza y dijo:
-A estas horas todo es refrescante...a veces la noche actúa como un manto fresco sobre nuestra alma...-citó, recordando una poesía que había leído una vez, un verso que le había gustado mucho.
Luego dijo:
-Estaba...rememorando. Hace una semana que he vuelto a París después de un largo viaje de varios años por el nuevo mundo...y echaba esto de menos...-abrió los brazos, como si quisiese atrapar el lugar en toda su inmensidad, atraparlo o abrazarlo todo, como si París entera pudiera abarcarse en sus débiles brazos.-No nací aquí, pero estuve viviendo durante un tiempo antes de tener que marcharme...y es, en cierto modo...¡cómo volver a casa...!-exclamó con una sonrisa de felicidad.
Luego contempló de nuevo con curiosidad a la joven:
-¿Vos sois de aquí, mademoiselle? ¿O sois extranjera como yo?-su acento sonaba un poco extraño, pero valía la pena preguntar. En París te podías encontrar con una enorme variedad, y Nereida lo sabía perfectamente.

por **Jacqueline S. Ritchway** Miér Mayo 30, 2012 1:43 pm

No sabia si la habia convencido cuando le dije sobre cómo estaba el agua pero si se le ocurria meterse, lo iba a averiguar. Me sorprendio aquella cita que dijo en un tono algo tranquilo, me sono familiar. Quizas en alguno de los libros que he leido desde mi humanidad...Parecio alejarse un poco de la realidad, disculpandose luego. Entendia muy bien porque, siempre que uno regresa a algun sitio que hacia mucho tiempo no frecuentaba, la sensacion de añoranza y nostalgia se va, dejando un poco de alegria en nosotros y nada mas. El sentimiento de haber regresado a nuestro hogar.
-No hay lugar como el hogar.-dije repitiendo mi pensamiento, acercandome a la orilla y apoyando mis antebrazos en la hierba fresca.

-Soy extranjera pero tambien recidente. Vengo de Inglaterra, recorro mucho el continente pero tambien me gusta detenerme por un tiempo y visitar aquellos lugares en los que tengo lugar donde quedarme. Paris es uno de ellos y esta laguna es uno de mis sitios favoritos.-con un pequeño esfuerzo e impulso del agua, me sente donde antes tenia mis brazos. Quizas se asustase por el color de mi piel pero aquello no importaba.-Bienvenida a casa, lady...?-tarde me habia dado cuenta que no habiamos sido presentadas.

por **Nereida Di Vaarsen** Miér Mayo 30, 2012 4:00 pm

La muchacha comenzó a acercarse a la orilla y a apoyarse en ella. Nereida ladeó la cabeza de nuevo, pensativa. La piel de aquella chica era aún más pálida que la suya, casi tanto como...oh, pero no podía ser. Era mejor esperar un poco antes de asegurarse. La experiencia a lo largo de sus años no podía fallarle, pero Nereida era cuidadosa...siempre observaba con cuidado cada vez de dar un paso. Tendría que esperar un poco antes de asegurarse de aquel pensamiento rebelde que acababa de asomarse por su cabeza.
-¡Inglaterra! ¡Qué gran país!-había estado allí varias veces, en una de las visitas que más recordaba...antes siquiera de marchar a Francia por primera vez, a sus dieciséis añitos de edad-pero ojalá el tiempo no fuese tan malo. Estuve allí hace mucho, aunque hay muchas cosas que no recuerdo...quizás vuelva de visita algún día cuando me haya asentado un poco en París de nuevo...-dijo, sin poder evitar sonreír de nuevo ante la perspectiva de todo lo que le esperaba en París.
La muchacha se sentó dónde estaba, con las manos juntas. No tenía que preocuparse por el vestido. Era fácil sentarse...aunque claro, eso era algo que también se debía a la práctica...y Nereida tenía mucha.
-Di Vaarsen...Nereida Di Vaarsen. Un placer conocerla, madomaiselle...¿y vos sois...?-preguntó.

por **Jacqueline S. Ritchway** Miér Mayo 30, 2012 9:41 pm

Me encogi de hombros cuando hizo aquel comentario sobre volver a Inglaterra, no me espere que ella haya viajado alli pero bueno, el mundo es pequeño.
-Yo he venido aqui hace unos 3 meses si no me falla la memoria.-que ultimamente me jugaba muchas bromas.-Pues, no ha cambiado mucho. La Reina parece aun ser algo esquizofrenica y sus guardias no se mueven ni cuando les gritas "tienes un castor por sombrero."-y rei ante ello. Unos turistas hicieron ese comentario en la embajada y terminaron arrestados. Ojala conozcan un buen asesor...van a estar en prision un largo rato.

Note su ligera incomodidad cuando se sento casi cerca de mi. Seguramente ya habia sacado conclusiones respecto a mi piel pero hasta que no hiciese la gran pregunta, mentiria.
Olvide presentarme por lo que luego dije:
-Jacqueline Samantha Ritchway, mi estiamda.-dije haciendo un ademan con la mano y una sonrisita alegre. Senti algo de viento mover un poco mis cabellos humedos, la temperatura bajo un poco por estar mojada. Si bien mis piernas aun estaban un poco sumergidas, estaba muy comoda.-Viaja sola como yo?

por **Nereida Di Vaarsen** Jue Mayo 31, 2012 12:46 pm

Nereida no pudo dejar escapar también una pequeña risita. La verdad es que no le extrañaba nada, aunque tampoco podía decir mucho acerca de la reina de Francia...solamente la había visto una vez, y de lejos.
-¿3 meses? ¡Uf, qué deprisa puede pasar ese tiempo!-exclamó recordando los primeros 3 meses que ella misma pasó allí. Tiempos dulces...muy pero que muy dulces. Quizás incluso demasiado dulces.
-Un placer, señorita Richtway-dijo con una sonrisa amable en el rostro, con aquella sonrisa amable y dulce que dejaba escapar siempre para aquellas personas que conocía por primera vez. Ya luego, cuando la conociese mejor, la juzgaría, con todo lo que conllevaba aquello. Pero todavía no. Era demasiado pronto. Y a Nereida le gustaba conocer las cosas antes de aventurarse.
-¿Sola? Bueno...sí, pero desde hace poco. He estado viajando durante toda mi ausencia y mi primera estancia en París con mi querida dama de compañía...pero tuve que dejarla marchar por un problema familiar. Estaba muy resentida la pobre, no tenía yo derecho a retenerla...-dijo con una expresión triste.
Pero la verdad es que Nereida mentía. Lo que de verdad ocurría es que su dama de compañía ya no le servía. Se había hartado de ella...por lo tanto la había matado. Con un veneno mágico preparado por ella misma, muy sutil, para que todo pareciese un accidente.

por **Jacqueline S. Ritchway** Jue Mayo 31, 2012 12:52 pm

Entonces en cierta forma sí habia viajado sola, es una pena pero en si, mejor hacerlo porque a veces, cuando uno esta viajando, suele encontrarse con problemas que uno preferiria pasar a solas que con alguien.
-Lamento oir eso, pero debo decirle que es mejor asi. Cuando estuve en España, pasé por algunas cosas no muy agradables, y creame que a veces es mejor viajar sola y pasar las cosas uno que estar con otra persona y que la hieran tambien.-era mi punto de vista pero estar mucho tiempo en solitario tampoco era bueno.

Vi una rana a lo lejos saltar al agua y nadar, no muy habitual considerando la hora que era. Suspire y me estire un poco.
-Si, el tiempo pasa pero hay cosas que nunca cambian. Se han edificado un par de casas mas en los suburvios y quizas algunos prados se han convertido en parques pero aunque el tiempo pase, hay cosas que siguen igual.-un ejemplo? Yo.

por **Nereida Di Vaarsen** Jue Mayo 31, 2012 1:22 pm

Ahí también concordaba con Jacqueline. Sobre todo porque era uno de los principales motivos por los que había asesinado a su dama de compañía, al igual que había asesinado a su madrastra y a sus hermanastros. Nereida rememoró por un momento a su familia, sin añoranza, pero con cierta curiosida. A su padre no le habría matado, incluso de no haber muerto en aquella guerra. No es que le quisiera mucho...Nereida no sentía cariño por nadie, pero había que admitir que siempre se había sentido agradecida hacia él por haberla criado entre algodones a pesar de ser bastarda y encima la hija de una cortesana. No muchos hombres se molestarían en hacer eso. Por eso no le habría importado permanecer junto a su padre. Era la única muerte que lamentaba.
Pero luego apartó ese pensamiento de su cabeza y dijo:
-Desde luego...sobre todo en el caso de aquellas almas especialmente sensibles ante el dolor y la desdicha. Mi dama de compañía es una mujer muy sensible...a veces no entiendo como hay personas que pueden ser sensibles ante lo meros hechos de la vida...las cosas en el fondo no son tan complicadas...
No, no lo eran. Para algunos sí y para otros no. Para la misma Nereida todo era fácil. O casi todo. Todo dependía de la experiencia.
Nereida miró por un momento al agua, dónde una rana saltaba a aquellas horas. Qué curioso...luego volvió a mirar a Jacqueline y dijo:
-Es una pena que gran parte de las cosas cambien. Es como si todo fuese, en cierto modo, corruptible...tanto para lo bueno como para lo malo.

por **Jacqueline S. Ritchway** Jue Mayo 31, 2012 1:29 pm

Eleve una ceja observandola luego de aquel comentario sobre la vida. Que las cosas no eran complicadas? Vaya, de haber pensado asi, hubiera vuelto a morir luego de varios años pues si la vida era simple, porque cuesta mucho a veces vivirla? Porque es dificil a veces ser aceptado por otros? Si es facil la respuesta, porque es mas profunda cada vez que te lo planteas? Encontrar pareja, morir y volver a vivir, dudar, aprender a tocar un instrumento, curar a los enfermos, buscar ayuda en la fé, huir de la carcel...si todo eso es sencillo, entonces el mundo es un caos irremediablemente. Luego de razonar un poco en silencio, salio de mi una simple pregunta:
-Que edad tiene, jovencita?-quizas podria darme entonces una idea de sus palabras.

por **Nereida Di Vaarsen** Jue Jun 07, 2012 1:09 pm

Nereida juntó las manos de nuevo cuando le preguntó la edad. Tuvo curiosidad entonces por saber lo que pensaría de ella. Lo que podría estar pensando. La curiosidad era tan apremiante que sintió la necesidad de pasar a la acción y de comprobar de veras si sus sospechas eran ciertas.
Así que entrecerró los ojos y concentró la mirada en la chica. Estaba intentando hacer con ella algo que solía hacer a menudo con muchos mortales. Algo que se le antojaba sencillo, casi como un juego infantil.
Lo intentó durante varios segundos, quizás más, antes de responder a la pregunta de Jacqueline.
Pero...no funcionó.
No funcionó lo que intentaba hacer con ella. Y el don de Nereida solamente funcionaba con los mortales.
Esperando que no se hubiese dado cuenta, dejó escapar un pequeño ¡oh! de asombro y dijo:
-Acabo de cumplir los diecinueve, madame Ritchway. Y si no es mucha indiscreción mi pregunta...¿cuántos tiene vos? Parece tener más o menos la misma edad que no. Más o menos.

por **Jacqueline S. Ritchway** Miér Jun 13, 2012 6:49 am

Note como entrecerró los ojos y me empece a preguntar si fue buena idea haberle preguntado por su edad. A veces era motivo de enojo por parte de algunas mujeres el que le recordasen cuantos años tenian. Luego parecio estar en un especie de trance, ladee mi rostro de costado intenando entender que le pasaba.
-Señorita Nereida?-y en eso, asombrada, me respondio que tenia diecinueve años. Vaya, tecnicamente y hablando en terminos humanos, era unos años mayor que yo. Pregunto tambien por mi edad y no pude evitar en sonreirle tambien. Creo que le dire la verdad.-Tengo diecisiete.-bueno...jamas llegue a los dieciocho pero tampoco recuerdo si me habia quedado en mis dieciseis. Volvi mi rostro al agua.-Se me notan? A veces me han llegado a dar hasta 22 años...

por **Nereida Di Vaarsen** Sáb Ago 18, 2012 3:57 pm

-Pues parece algo madura para la edad que tiene, mademoisele...¿está casada? Es por curiosidad, espero que no le parezca muy indiscreta mi pregunta-dijo pensativa. Muchas jóvenes de su edad andan ya casadas o con algún hijo, como las damas de Verona en Romeo y Julieta. Ella misma había estado prometida varias veces antes de que desapareciera su padre, incluso después, pero ella se las había arreglado para rechazarlos a todos. No tenía ganas de casarse...demasiado pronto y demasiado poco apetecible para lo que ella deseaba, quitándole un par de cosa posibles, por supuesto. Un par de excepciones. Y por aquella época había tenido solamente dieciséis años.
Iba a comentarle algo más a Jacqueline, pero entonces recordó que tenía que hacer algo importante. Que se había olvidado de algo esencial que había dejado al azar, preparándose. Estarían esperándola.
La rubia se llevó una mano a la frente, apesadumbrada y maldiciéndose a sí misma por haberlo olvidado. Tendría que haberse acordado antes.
Así que con mucho cuidado se levantó, sin apartar la vista de la morena. Pensativa, y algo apurada:
-Lo siento mucho, mademoiselle, pero he de irme...he olvidado algo importante, ¡muy importante!-dijo volviéndose a llevar una mano a la frente.-Pero me habéis caído bien, tal vez si una noche frecuenta el palacio Royal o las calles del Norte de París nos encontremos de nuevo. Frecuento mucho eso lugares. O en otros sitios más insospechados. Au revoir, mademoiselle...-dijo haciendo una leve reverencia y marchándose de allí.

por Contenido patrocinado

Volver a París es como volver a casa...(Jacqueline)

Volver a París es como volver a casa...(Jacqueline)

Re: Volver a París es como volver a casa...(Jacqueline)

Re: Volver a París es como volver a casa...(Jacqueline)

Re: Volver a París es como volver a casa...(Jacqueline)

Re: Volver a París es como volver a casa...(Jacqueline)

Re: Volver a París es como volver a casa...(Jacqueline)

Re: Volver a París es como volver a casa...(Jacqueline)

Re: Volver a París es como volver a casa...(Jacqueline)

Re: Volver a París es como volver a casa...(Jacqueline)

Re: Volver a París es como volver a casa...(Jacqueline)

Re: Volver a París es como volver a casa...(Jacqueline)

Re: Volver a París es como volver a casa...(Jacqueline)

Re: Volver a París es como volver a casa...(Jacqueline)

Re: Volver a París es como volver a casa...(Jacqueline)

Re: Volver a París es como volver a casa...(Jacqueline)

Re: Volver a París es como volver a casa...(Jacqueline)