Cora A. Samaras

- Agilidad y reflejos sobrehumanos: Habilidad para moverse con más soltura por un sitio, utilizando brazos y piernas reaccionando mas rápido que un humano normal.
- Sentidos aumentados: Aumento de percepción en los sentidos de la vista, el olfato, el gusto, el tacto y la audición.
- Sanación acelerada: Habilidad para curar rápidamente de cualquier lesión. El tiempo de recuperación varía según el personaje.
-Infringir dolor por medio de la mente: capacidad que consiste en infringir dolor a una persona. Esto sólo funciona por medio de la concentración mental y el contacto visual.
- Clarividencia: Es la habilidad de encontrar a cualquier persona, aún sin haberla visto, teniendo como referencia algo de la persona o una foto.
- Persuasión: Capacidad de hacer que otras personas realicen acciones, sin que éstas puedan negarse, mediante palabras con entonación imperativa, es decir, ordenándolas.

Spoiler:

De humana era una  persona amable, sincera, siempre con aquel pequeño problema al momento de expresarse, lo que hace que siempre se le haga difícil el buen trato con las persona. Pero luego de cierto tiempo en la eternidad se volvió muy fácil para ella encontrar la diversión en la maldad y lo cínico. La comunicación no llegaba a ser mayor fuerte, pero siempre busca mantener las cosas claras y no dejar nada a merced de las especulaciones.

Se puede decir que es alguien que nunca le gusta estar sola, siempre buscara la compañía, siendo a la fuerza, su mayor recurso. No es una persona que necesita ser protegida, pero le sensación de que alguien necesite ser atenido y protegido por ella. Cuando tiene sus rabietas puede ser una persona muy peligrosa. Es de naturaleza celosa y egoísta, no puede ver a una persona con lo que considera de su propiedad porque puede tener aquella sensación de amargura, que la hace hacer locuras. Aunque casi nunca lo demuestra a la primera, sus intensiones siempre van mas allá de la venganza, pero simplemente su inexpresivo rostro no llega a demostrar señales de sus planes. En ocasiones puede llegar a tener aquella adorable, busca siempre mantener a las personas felices, pero siempre teniendo en cuenta su beneficio y criterio.

Como pueden ver puede ser contradictoria, cambia con facilidad, puede pasar de ser serena a fascinantes o pesimista o amorosa. Fantasiosas, ama la libertad e independencia, pero no puede evitar encantarle, la esclavitud y la sensación de poder que este conlleva. Su lado positivo es que es muy fácil adaptarse a nuevos entornos, es una persona muy versátil. Tiene gran elocuencia, es muy intelectual, algunas veces cariñosa e inteligente. Tiene mucha energía y vitalidad, en ocasiones parece que nunca se le acaba.

Su lado negativo es que en ocasiones puede mostrarse un poco superficial. Puede ponerse nerviosa y tensa con alguna situación difícil para ella. Es muy calculadora y exigente.

Vivió desde muy pequeña en la ciudad capital de Grecia, en el año 400 AC, En donde pudo entrar a una de las mejores escuelas de arte. Su familia tenía una línea de grandes artistas griegos; su madre había sido en su tiempo una gran escultora, una de las pocas que pudo trabajar libremente y su padre un pintor solicitado por los mas altos mandos de aquellos tiempos. Cora odiaba todo lo que tenía que ver con el arte, parecía que era la única que no podía captar la belleza como normalmente los artistas hacían. Aquello la frustro de sobremanera, amargándola de por vida.

A comienzos de su adolescencia comenzó a ser una chica rebelde, había dejado atrás aquellos sueños de su familia de que fuera una artista como ellos, pero aquello produjo tanto en su entorno como en ella un gran prejuicio, ahora la miraban como una mujer incapaz de hacer gran cosa. Indignada se propuso a ir en busca de algo que si podía hacer, pero todos aquellos planes fueron desechos, cuando su madre y su padre la encontraron tratando de escapar de casa. Luego de eso no la dejaban salir de casa, mantenía su educación dentro de aquella hermosa mansión que daba vista a la gran metrópolis que se formaba en aquel tiempo.

La soledad la consumió, estaba prácticamente abatida cuando apenas tenía unos 19 años. ¿Qué había hecho para estar en esas circunstancias? el ser si mima no era algo que estaba permitido, debía comportarse tal como sus padres le informaban. Era irónico que la obligaran a buscar inspiración en un lienzo, cuando algunos padres rogaban que sus hijos fueran grandes soldados o amas de casas esplendidas. Cora no era nadie, no tenia propósito, no estaba siendo útil para la sociedad.

Ser inútil la comenzaba a consumir a tal punto de querer suicidarse, pero todo lo que encontró con aquel día de desesperación fue atraer a una hermosa dama de cabellos prácticamente blancos, pero que tenía un rostro tan joven que podría decirse que era un espectro no de este mundo, un hermoso vestido blanco comenzó a acercarse a la sangre que en la muñeca de la joven aparecía, brotaba y se derramaba, poco a poco, la mujer desconocida comenzó a absorber aquel liquido vital para Cora. Parecía que todo estaba acabado, Cora sentía que aquella mujer era como una diosa que había sido enviada a arrebatarle la vida y con eso estaba feliz, pero antes de que su corazón se debilitara sus padres había entrado. Pudo escuchar el grito de su madre, la criatura gruño para luego salir con el cuerpo moribundo de Cora en brazos.

-toma pequeña… serás mi hija de las tinieblas… - una voz le llamaba, sentía algo que a sus labios llamaba. Era algo delicioso… pronto comenzó a beber de tal manera que parecía que aquello no bastaría. Se había convertido en una novicia, aquella mujer le veía sonriente mientras los ojos perdidos de Cora parecían buscar más sangre. Su creadora la crio como su hija, su hermana y compañera. Parecía que ella había encontrado a alguien con quien tener una relación sana, mientras que Cora había encontrado una razón de existencia, ser protegida por ella le daba felicidad, porque se sentía útil. El cazar nunca se le hizo difícil, al parecer parecía mucho más calculadora y sanguinaria que su madre.

Duraron varios siglos completamente juntas, disfrutando las riquezas de cultura de Asia y los continentes lejos del occidente, a su madre no le gustaba Europa, siempre mantenía residencias lejos de ella. Asia menor, era su lugar favorito para todos. Lugares hermosos pero difíciles de adaptarse. Cora le gustaba mucho las cosas inusuales y en ese lugar había por montones pero ya estaba cansada de aquello, le parecía ya aburrido estar siempre con la misma persona. Amaba profundamente a su madre pero ya tenía unos 500 años y sus personalidades eran totalmente diferentes. Ella comenzaba a desear ser más independiente y su madre buscaba ser más sobreprotectora, a Cora le gustaba, pero ya comenzaba a verse fastidiada.

Por suplica de Cora había viajado a Persia, en donde conoció a su primer esposo, aquel vampiro más viejo que ella, aunque su rostro era totalmente más joven que el de ella. Irónico. Ella adoraba lo irónico, lo inusual y versátil, pero había un problema, su madre odiaba a aquel hombre, eso evito que ella comenzara alguna conversación con él, era mantenerse alejada de aquel hombre o sufrir las consecuencias. estaba de cierta forma cansada de su madre, a ella comenzaba a pegarle los síntomas de ya no poder soportar más aquella eternidad, muchas veces le decía en broma a Cora que debía encontrarse a una persona que cuidara de ella, ya que su madre se iría pronto, pero nunca le dio importancia.

aquel día que su madre se fue, ellas dos estaban danzando entre los sembradíos persas, iban ya de regreso a donde dormían, estaba muy pronto la salida del sol y su madre parecía que comenzaba a detenerse, Cora la apresuraban siendo su cuerpo pesado, podía ya sentir el calor del sol cerca así que corrió sin importarle su madre y ella se resguardo primero, cayó en un sueño profundo que solamente despertó a la noche siguiente sin tener a su madre cerca… ella se había ido para siempre, era algo que sentía en lo más profundo de su corazón.
Ya era completamente libre, podría hacer lo que quisiera, aunque la muerte de su madre le pego un poco, siguió con su vida, tuvo varias parejas, que no llegaron a nada, siempre terminaban en un mal termino y ella encontraba otro camino. Se volvió alguien más dura, un corazón frio ante tanta decepción, pasaron siglos hasta que decidió encontrar algo de diversión. Se había residenciado en Paris, se hacía llamar Anastasija, su segundo nombre, pero en ese lugar parecía que era mejor ser llamada Anastasia, era una mujer hermosa, pronto encontró un prometido, otro más para su lista, pero ya no quería a más personas en igualdad, parecía que eso no servía, así que. Fue presentada como su prometida a su familia, en ese lugar conoció al hermano de su prometido, un joven hermoso que comenzó a buscar pues se había interesado en el. Se había encaprichado con él, lo quería para ella, no le importaba lo que tuviera que hacer para conseguirlo. No le importo mucho el convertirlo en vampiro, gracias a sus años sería fácil manipularlo, si no quisiera hacer las cosas por las buenas. Aun así, no había dejado a aquel humano que se había convertido en su prometido que solamente era un simple juego, en donde todos morirían y ella se quedaría con todas sus riquezas y por suerte con su nuevo juguete. Su regalo de boda fue Adrik, como aquel joven novicio se llamaba, el no podía hacer nada, más que solamente cumplir sus caprichos, mientras su esposo se moría de vejez. Su marido murió en un “accidente de caballo” el viejo también murió de vejez-supuestamente-, ella se había quedado con todo, su gusto por las mascotas había crecido, pero todos terminaban enterrados, solamente hacia uno que nunca la aburría.
Ahora ella se comportaba como su madre, Adrik, la seguía, sin importar lo mal que lo tratase, tal vez porque era apenas un bebe que no sabía cómo sobrevivir solo, pero el muy estúpido la traiciono, hizo algun trato con los únicos sobrenaturales que podrían llegar a ser un peligro para ella, una familia de licántropos que buscaron atacarle, pero una vampiresa con tantos siglos encima, no se dejaría vencer fácilmente, ellos comprendieron que era mejor tenerla de aliada a ella que a un simple novicio. La ira entro en ella y su venganza se volvió contra Adrik, no le importo que ellos lo mataran. “hagan lo que quieran con el” le habían dicho dándole completamente la espalda y abandonando aquel lugar, para buscar realizar otro capítulo en otro lugar. No podía evitar sentirse dolida con la muerte de la única persona con la que duro suficientemente para poder quererla un poco, pero se trago todo y siguió con su vida eterna

ahora era nuevamente libre… pero estaba sola… nadie con quien estar. ¿Qué sucedería? salió hacia de parís, unos cuantos siglos, pero volvió después de aburrirse del nuevo mundo por pura casualidad de la vida al mismo lugar en donde había encontrado su mayor tesoro, era el único que conocía y eso era por la enemistad que existía entre ellos y su pasado. Comenzó a indagar, en donde estaría su cuerpo, pero ella con aquella búsqueda comenzó a nacer necesidad de sentirse nuevamente con aquel poder de someterlo, se encontró con la noticia de que no había muerto, con sus poderes fácilmente lo encontró nuevamente. Aunque no sabía exactamente qué era lo que pretendía con él, comenzaba en ella a nacer un sentimiento muy fuerte hacia él y solamente sabía que quería tenerlo de nuevo en su poder, como si fuera uno de aquellas obras de artes que coleccionaba y buscaba por todo el mundo.

Le gusta: Hablar, leer, hacer varias cosas a la vez. Disfruta  lo inusual y la novedad. Cuánto más variedad en su vida, mejor.
No le gusta: La soledad. Sentirse limitado o atado a una situación o un sitio. No le gusta estar mentalmente inactivo. ..
Se dedica a buscar obras de arte que tengan que ver con su familia.
Ha tenido varios apellidos y nombres a lo largo de su vida, pero siempre termina utilizando su nombre de soltera, luego de que termina de sacar todo lo que quiere de esa familia
Se casa con hombre ricos para tener sus tierras y su riquezas, valiéndose de su inmortalidad