Lo prohibido es algo tentador... [Luciana Himmel]

por Uriel Müller* Lun Sep 03, 2012 9:19 am

Era de día, al parecer un día normal más en la vida de Uriel, él había regresado de un viaje, había estado un tiempo en Alemania, de donde él provenía y sabía relativamente poco, estuvo vagando por calles, buscándose la vida incluso de mimo por las calles Alemanas en las que ganó muy poco dinero, eso no le era suficiente como para sobrevivir porque allí no había mercadillos como en Francia, en el que el felino podía usar sus técnicas para poder subsistir y comer tranquilamente un pescado o alguna fruta que o tenía que robar, o los propios mercaderes le daban al bonito gato, pero falso que se presentaba cada día para comer algo.

Llegó a Francia, a París, en donde él había pasado su adolescencia, durmiendo en aquel sucio y viejo colchón, y ahí estaba este, en el mismo puente en donde lo dejó, solo que esta vez, estaba siendo usurpado por otra persona. Se acercó hasta allí y vió a un pobre moribundo con dos enormes perros, un Pastor Alemán y un Husky Siberiano notablemente delgados, como si no hubieran comido en mucho tiempo. Se quedó parado en frente y ambos perros despertaron, comenzaron a gruñir al muchacho, este dio unos pasos atrás con algo de indiferencia, le daba lo mismo aquel colchón, podría sobrevivir por el momento, no hacía una mala época, era primavera y el París las provisiones venían agradables, Uriel vería que haría en todo el tiempo que le queda hasta que el frío se avecinara.

Uriel comenzó a caminar con las manos en los bolsillos, sin nada que hacer, solo paseaba por las grandes calles de París, llegando una zona residencial, no sabía donde se había metido, pero él... Uriel tenía sueño y temía que la gente viera mal que durmiera tirado en la calle, por lo que optó por transformarse en gato y poder dormir tranquilamente aquella noche, por lo que se marchó detrás de unos arbustos y se convirtió en un adorable gatito, dejando su ropa en los arbustos de una finca, en donde nadie vería nada. El gato salió de los arbustos y se mantuvo caminando por el jardín de aquella gran casa durante unos minutos, acto seguido, se tumbó en una esquinita de aquel jardín y cerró los ojos, quería descansar, lo que no sabía es que a la mañana siguiente, algo ocurriría, quizás Uriel no le agrade la visita que llegaría, o tal vez, sí...

por **Luciana Himmel** Vie Sep 07, 2012 10:45 pm

Ese dia queria dormir un poco mas,las clases del dia anteriror le habian dejado agotada, y es que ella se esforzaba por ser la mejor, Amaba ese arte. Tenia que practicar mucho si queria se el personaje principal de la obra, Y tenia muchas cosas a favor, su belleza, su gracia, su delicadeza y su tecnica de baile. Era perfecta para el cisne blanco, su maestra se lo habia dicho.Pero ella queria demostrar que lucharia por conseguir su papel,pues la competencia debia ser justa y habian otras chicas muy talentosas postuladas para este. y era muy optimista asi que se mentalizaba que seria para ella. Los rayos del sol se colaron atravez de las delicadas coritinas lilas de la habitacion desplazandose has hasta aquella parte de la cama donde resposaba su cuerpo deeniendose en el rostro angelical de la joven , quie al sentir el resplandor y la clides de estos lo abrio poco a poco, pestañeando al principio por la costumbre a la oscuridad durante las 8 horas anteriores, estiro sus brazos y solto un pequeño bostezo, era sabado y podia dormir hasta la hora que quisiese, pero a ella le gustaba levantarse temprano ese dia para regar y arreglar las flores de su jardin y mas cuando era soleado. selevanto de la cama y se dirigio hacia una de las ventanas, abrio la cortina y despues las puertas de esta. La fresca brisa primaveral y los calidos rayos del sol acariciaron su rostro. Era un dia bellisimo, sonrio ante eso y se dirigio la baño tatareando y dando saltitos, estando alli tomo una liga y se agarro agarrao el cabello en un moño alto se quito el camison y se metio en la tina dandose un baño muy revitalizante, despues fue a su closeth y escogio un hermoso vestido azul con finos encajes plateados en el area del busto, se vistio y bajoa tomar el desayuno.

Estando en la plata baja de la mansion, se dirigio a la cocina y saludo con una sonria a ala empleadas quienes le tenian perparados su desayuno favoritos pancakes con jarabe de fresas silvestres.tTodos la querian mucho, y por eso la consentian. Luciana era un joven dulce,respetuosa,alegre y consiiderada que nunca se iba de un lugar sin ganarse el corazon de alguien, su compañia siempre era placentera y su presecia llenaba de alegria y paz el lugar. A esa hora la mayoria en la casa estaban dormidos o por fuera,pese a ser temparno. Pua esu padre y su rtia por su condicion sobrenatural no podian disfrutar de los precisos rayos del sol, y sus hermanos...Posiblemente estarian entrenando...asi que esaba ella sola. -Solto un suspiro- Aveces se sentia tan sola...que temia que la unica compañia que tuviera en la casa por el resto de sus dias fueran sus plantas. por su kit de jardineria (pala pequeña, podadora,regadera y delantal) y corrrio hasta el jardin, deteniendose prmero en als rosas color lavanda que a ella le gustaban tanto, las observo sonriendo. Estaban preciosas...

-Este es el resultado de un trabajo con amor- se dijo- Y como manecieron mi hemosas florecitas,hoy las voy a areglar y quitarles toda esa fea hierba que crece as alrededor queriendo quitarles esa belleza- dijo a las flores que alli crecian,no creia ser loca por hablarles aunas plantas, ella decia que darles amor,hablarles y cantarles funcionaba mas, que el mejor de los abonos, fue asi que poniedose su delantal, los guantes y su sombrero para no quemarse el rostro, empezo a tararear una hermosa melodia que despues acompaño con aquella hermosa voz de sirena que poseia.Y sonriendo y cantando emezo por regar las plantas...

por Uriel Müller* Sáb Sep 08, 2012 10:00 am

Ya había amanecido y aun el cambiaformas se encontraba entre los setos, durmiendo plácidamente, comenzando a escuchar los carruajes que allí pasaban, los pájaros cantando y los niños y familias que de día existían, no al contrario que cada noche en la que los únicos que vivían eran aquellos llamados vampiros, los cuales se alimentaban de la sangre inocente y no tan inocente de algunos humanos.

La cosa es que una muchacha salió de la casa en la que vivía y era la misma finca en la que Uriel en forma de gatito pequeño estaba durmiendo en aquellos jardines, en la esquinita, debajo de un pequeño seto, la ropa, estaba en otro lugar algo más escondido para cuando saliera de la transformación estuviera donde él la dejó. No obstante, el gato fue mojado, y no sabía porque, abrió los ojos un poco y había una mujer delante de él, es más, casi pisando al gato, unas botas gruesas, un delantal, una regadera y algunas cosas más llevaba consigo aquella muchacha, por lo que salió disparado de allí, no le gustaba el agua como buen gato que era y quedó parado a unos metros de ella mirándola, se sacudió el poco agua que tenia y se quedó sentado mirando a la chica la cual no sabía si había percibido de la presencia del felino, Uriel solo se decicaba a mover la cola y a lamerse la pata delantera, como limpiándose aunque solo fueran la legañas, no sabía que hacer, y su casa había sido usurpada por aquel mendigo y sus dos perros.

Uriel pensó en ir como pantera para arrebatarles su hogar, pero de que serviría, es más, no era un lugar como para luchar por él, aunque fuera lo poco que tenía en su patética y corta vida. Aun así, el cambiaforma ya estaba despierto, lo unico que quería era dormir, y lo había conseguido, y si no hubiera sido por aquella mujer, seguramente aun estaría durmiendo, por lo que se giró 180º y se puso a caminar con sus patitas para cualquier destino, ni él mismo lo tenía claro.

(Es difícil hacer un post bueno si no hay interacción entre ambos, lo siento)

por **Luciana Himmel** Sáb Sep 08, 2012 5:16 pm

Estaba tan entretenida en su labor que no se percato de la precsencia del pequeño gatito solo hasta que se giro para volver a la casa y lo vio, el qpeuqeño se dirgia quien sabea donde, todo mojado, seguro habia estando durmiendo entre las rosas y ella por ser siempre tan despistada no le habia visto. Mucha tonta. se quito los guantes y el sombrero, tirando a ambos sobre el verde prado y fue tras el pequeño felino, que al parecer no sintio que esta le preseguia.- Pobrecito ...- penso- Luciana eres una idiota y una despistada, tonta! el pobre gato seguro que ntenia donde dormir y tu lo mojas.- alcanzo al pequeño y lo cargo.

- Hola amiguito, pero mira que mojado estas! - sonrio dulcemente y lo miro, el pobreestaba empapado- Perdona que te halla te halla mojado, es que soy una tonta no me fije que estabas.- levanto la cabeza y miro hacia ambos lados. ¿De donde habria venido? , las persona que vivian por alli tenian gatos mas... exoticos por no decir extrangeros?... en fin gatos tan pedantes como los mismos dueños solo por ser considerados de mejor raza. Afortunadamente a ella le gustaban las cosas sencillas y este apesar de lo mojado que estaba se le hacia muy mono- Mira que lindo eres! - Decia sonriendo - De donde habras venido... bueno, para compensara esta empapada te dare algo de comer- dijo como el pudiera entenderle, y este solo la observaba, se sentia como una loca, pero ella era asi.

Se llevo al gatito a la cocina de su casa, a esa hora no habia nadie ya, pues todos estaban en sus deberes; lo coloco en el suelo, fue por un plato que lleno de leche y se lo puso, le acarcio la cabeza y sonrio - Disfrutalo pequeño, ahora te traere algo mas...- saco unos panes de horno y partio uno dandole de comer al lindo gatito, pensando en como la vida de ellos es tan simple, y la suya en esos momento se encontraba atormnetada por sus asusno familiares... ignorando la sorpressa que se llevaria...

(la proxima mandame mp )

por Uriel Müller* Dom Sep 09, 2012 5:16 pm

El gato se estaba marchando ya de donde le molestaron, iba a ir a un sitio sin rumbo, donde sus pequeñas patitas lo llevaran, hasta que fue agarrado por la mujer que lo había mojado, una muchacha de cabello dorado y ojos color café. Lo subió a sus brazos pidiendo perdón y castigándose a sí misma verbalmente por haber mojado al gato, algo que le causaba cierta gracia a este. Ambos entraron en la casa, estaba en el regazo de la mujer.

Hacía mucho tiempo que no tenía contacto directo con nadie, mucho menos con una mujer, aunque fuera en forma de gato. Uriel estaba un tanto nervioso a decir verdad, y no era algo normal, no sabía que diablos le estaba pasando, y pensaba que era simplemente eso, el contacto físico directo. Estaba temblando y la mujer lo dejó en el suelo, mientra seguía castigándose con sus propias palabras. Le tendió un plato de leche el cual comenzó a devorarlo como si no hubiera comido en su corta existencia, y es que llevaba ya un par de días en ayunas, sin introducir absolutamente nada en su estómago, era obvio que tuviera hambre, por lo que dejó el plato vació en cuestión de segundos, sin embargo el pan de horno tardó algo más en comérselo, puesto que estaba muy caliente, por lo que esperó un par de minutos antes de darle el primer bocado al pan, el cual engulló en pocos segundos también, junto con el resto del pan.

Estaba algo saciado de comer y el gato se sentó y se limpió un poco el hociquito, el cual estaba empapado de leche. Se levantó y caminó hasta las escaleras de aquella casa las cuales subió para meterse en la primera habitación que encontró, un cuarto de mujer, tenía peluches, y algún tono rosado en ella, se encaminó hasta la cama en la cual se sentó apoyando la cabeza en la almohada que allí había. La chica seguramente lo seguiría, ya que los gatos no eran los únicos seres curiosos, si no las personas también.

por **Luciana Himmel** Vie Oct 19, 2012 12:41 am

La chica había llevado al mino a comer, se sorprendió de lo rápido que este comía,. Pero se veía lindo y adorable lamiéndose las patitas y limpiándose el hociquito, Luciana se paro desde el lugar donde se sentó a darle de comer y se dirigió al armario donde normalmente guardaba los utensilios de jardinería. Dejo el sombrero y el delantal colgados del perchero y se dirigió al jardín para recoger las tijeras, la regadera y demás cosas. No le gustaba que los empleados de la casa encontraran desordenada su área de trabajo, de hecho a nadie le gustaría encontrar desorden donde ya había organizado. Ella era muy considerada con ellos, les respetaba y le quería, al igual que ellos a ella.

Cuando hubo organizado todo volvió la lugar donde había dejado al pequeño gatito, encontrándose con la sorpresa de que este ya no estaba, empezó a buscarle por toda la casa,, en la sala, el comedor, debajo de los muebles, volvió al jardín…se pregunto si el pequeño ya se había ido. Cosa que le hizo sentir mucha tristeza, pues ella se encariñaba rápido y adoraba a los animales. Decidió ir a su cuarto, ya que la pasar por el espejo de la sala, noto que estaba hecha un desastre, su padre no debía verla si, suficiente tenia con que considerar que ella estaba convirtiendo su casa en un jardín botánico. Subió a su cuarto, y para su sorpresa encontró al lindo gatito acurrucado en su almohada, se veía tan tierno… Suspiro y empezó a acariciarle el lomo, mientras este ronroneaba por sus caricias, ella sonrió y lo dejo que descansara, se dirigió su closet y saco otro vestido y otros zapatos. Entro al baño y saco una bata. Se volvió a mirar al espejo.

-¡Luciana, que desastre! – Se dijo así misma con su particular acento italiano, y si, lo era, el vestido todo manchado de barro, los zapatos, su cabello desordenado a causa del sobrero– si vez minino…soy un desastre…Mi padre me llega a ver así y me regaña...- suspiro- bueno, nada que un baño y ropa limpia no arreglen – se quito los zapatos sucios de barro y empezó a quitarse el vestido ignorando que en su cama no yacía un animal.

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