EL ultimo adios

por **Dave Saint-Bonnet** Jue Sep 06, 2012 4:36 am

Dave era un muchacho noble, algo pícaro y majestuoso con lo que realmente le gustaba, como si hubiese nacido para ello. Su protección hacia los que le rodeaban era demasiado para alguien como él que tan solo se valía del día a día, sin saber que ocurriría más allá del medio día. El jóven trabajaba duro, ya cuando conseguía una considerable cantidad ésta la mandaba a su familia, pero hacía semanas que tan solo conseguía poco dinero, pues los seres de las tinieblas habían decidido esconderse de el ya que aun no había encontrado a ninguno.

Noches fueron las que transcurrieron hasta aquella misma, en la que Dave cavaba un agujero junto a un manzano. Aquel no era como el de una persona, sino algo más pequeño, y allí, oculto bajo una manta roida por el tiempo se hallaba su mejor amigo, el cual se merecía aquel entierro digno bajo un manzano, pues le encantaban las manzanas a aquel que su vida terminó de forma rapida e indolora.
Era un perro viejo, un labrador que fielmente llevaba junto a él desde casi su nacimiento, pues ya su vida se vió apocada con el paso de los años... pero ahora a su dueño le quedaba una enorme hondonada en el pecho, él era su amigo, y siempre le dedicaba mimos cuando lo necesitaba e incluso no se enfadaba jamás cuando le echaba la culpa de algo... siempre estaba allí presente, con una rama gruesa entre sus dientes dispuesto a jugar con él aunque llevase días sin comer... Dave siempre compartía su comida con su cánido amigo, que ahora descansaría en aquel lugar a partir de entonces.
El muchacho tomó el cuerpo del animal envuelto en la manta y lo arrojó con mucho cuidado al interior del agujero. Tras ello echó una manzana, algo de tierra y lamentándose para sus adentros logró despedirse de su amigo como era de esperar. Con una sonrisa en sus labios, muy lejos de parecer triste, el jóven tomó la pala y comenzó a llenar el hueco de tierra, aquella con la que daría sepultura a su mejor amigo.

- Adiós amigo...