Hoy no es mi día {Privado}

por **Serenity Boissieu** Jue Feb 07, 2013 6:41 am

Con cuidado, todo en silencio. Tan solo unos pasos que separan la esencia de lo que debo hacer a lo que voy a hacer. Lanzo una cuerda, subo el muro de piedra con cuidado, haciendo el mismo ruido que haría un gato. Me agacho en las alturas, vislumbrando el suelo con tranquilidad, los soldados que hay alrededor protegiendo el lugar que voy a tomar en cuestión de segundos.

¡Abajo! Se sorprenden, pero no doy tiempo a más. Cojo un brazo, estampándolo contra la pared de piedra, un codazo hacia atrás, dando de lleno en la mandíbula de otro contrincante, una patada alta, un par de vueltas mientras salto, justo para alejarme y acercarme a la vez a la pared, donde poso mis pies para darme impulso en un nuevo brinco, haciendo que llegue con más fuerza contra otro adversario. Todos vienen, todos corren, pero no les da tiempo a avisar al resto. Patadas y puños hay por todas partes y a mi ni siquiera me consiguen dar. Más rápida, más ágil, más letal...

Cuando están todos en suelo me incorporo con tranquilidad y me encamino hacia dentro de la mansión, camuflándome entra las sombras...

Saliendo ilesa, como cabía de esperar, pero con una mala leche en el cuerpo que no puedo ni con ella. Estaba corriendo por el bosque, sintiendo como un maldito espía me perseguía. Ni punto de comparación a mí, obviamente. Corría como alma que llevaba al diablo, pero mi plan no era dejarle atrás, para nada. Me adentré en un claro y subí a un árbol de un salto, trepando con rapidez por las ramas hasta haberme ocultado por completo.

Aquel hombre se atrevió a quedarse parado justo debajo, tal como esperaba. Mis ojos lo contemplaban en silencio y, de repente, me tiré encima de él, agarrando su cuello y echándolo para atrás. Sentía sus manos en mis brazos intentando alejarme. Hubo un forcejeo, hasta que consiguió soltarse. Un par de volteretas hacia atrás y saqué un par de dagas mientras me ponía en posición de defensa y ataque a la vez, buscando sus puntos débiles y esperando el momento adecuado. Era como un gato, y él lo sabía, lo que no entendía era porque motivo no huía de mí. ¿Acaso quería demostrar que era mejor? Lo escrutaba con la mirada mientras con un grito se acercaba a mi a toda velocidad, con aquella espada absurda. Espera. Espera. ¡Ahora! Bajé más mi cuerpo, dando una vuelta sobre mi misma para quedar justo detrás de él mientras él seguía hacia delante. Una de mis dagas salió directa a su espalda. Un grito de dolor. De ahí no se rindió, empezó una batalla cuerpo a cuerpo en la que estaba más que claro quien estaba en desventaja.

por **Adrians Blancquart** Dom Feb 17, 2013 11:38 am

Queria perderme en el único lugar que podía hacerlo queriendo, donde podía salir de la misma forma que entraba.Tenía que ordenar mis ideas,en un lugar donde nadie me viera, quería estar solo, buscando la forma de decirle a madre lo que realmente pensaba sobre, su decision de quererme casar con alguien ni siquiera he visto, ni conozco.No me gusta la idea de tener que atarme a nadie, y menos de gente agena a mi entorno, y aún asi quiero estar solo hasta que decida lo contrario.

Camino haciendo zig -zag entre árboles viendo en el suelo como de la misma forma los rayos traspasaban entre ellos para reflejarse finalmente en el suelo, dandole un toque de color a tan verianego paisaje, todo florecido, un verde en contraste con lo amarillo-anaranjado de aquella luz.

Miro al frente, usando mi habilidad titere,eleve unas hojas no mas de un palmo del suelo, no iba gastar mi fuerza en lo inecesario, pero si por este corto periodo de tiempo, dejo caer las hojas cuando pasan por mi la doz a una velñocidad que solo unos pies mortales podian alcanzar , ni lento ni tan rápido, apenas puedo fijarme en su cabello elevado un tono rojizo, aunque el sol no me dejaba ver con claridad, tenia que entrecerrar los ojos.

-¡Ten cuidado, mocosa!- dije, demasiado tarde,para entonces solo veia caer las hojas , sacudidas por su ligero paso, ¿que es de lo que escapaba aquella chica?, no me quede con la duda y la seguía a mi paso, sería una buena forma de no pensar en aquella situacion , que solo me provoca dolor de cabeza.

La pierdo de vista, ¿donde se habia metido?, me dije, me agazape en los arbutos cercanos a uno árbole, donde vi sus últimas pisadas, queria verla de nuevo, pero tan solo vi a un hombre que parecia querer escabullirse de alguna situación, solo observo.La joven aparece y me quedo observando como despacha al hombre, se maneja bien, es habilidosa y rápida.Me quedo quieto, quería ver como acababa, aunque después de herirlo con tanta facilidad dudo que pueda aguantar mucho mas.Quiero retroceder, para it tras el ñarol y estar de pie, no me doy cuenta de las hojas resecas, que acaban por romperse bajo mis pies, me quedo quieto, escondido.

por **Serenity Boissieu** Lun Feb 18, 2013 5:22 am

Lo estaba viendo. Mientras evitaba los puños y las patadas, notando como cada vez estaba más débil a causa de la pérdida de sangre por la espalda, lo estaba viendo. Había un hombre observando, alguien que no tenía nada que ver con el asunto y estaba viendo tanto mi rostro como lo que estaba haciendo. ¿Era estúpido? ¿Por que no huía como hacía una persona normal? No podía comprenderlo y esa situación cada vez me ponía más nerviosa. Y no en el sentido de fallar y no saber reaccionar, no, en el sentido de me estaba cabreando como una mona. Además, ¿cómo era posible que el otro espía no se hubiera ni percatado de su presencia? Había que ser malo... Estúpido espía novato que iba a morir en cuestión de segundos.

Estuve poco más así, ni me molestaba en pegarle dado la probabilidad de que saliera de esa con vida. Nula e inexistente. Pero llegó un momento en que, al ver su cara, me dio verdadera lástima. Alcé ambas cejas, con un gesto que indicaba un claro lo siento y, a la vez, algo como "deberías haber previsto que a mi no me ganabas, insensato". Sin pensarlo dos veces lancé una de mis pequeñas dagas a su cuello, haciendo que la muerte fuera inminente y él no pudiera moverse, justo en el mismo momento en que aquel otro tipo hacía ruido con las hojas secas caidas de los árboles.

Me acerque al cadaver y saqué con tranquilidad las dagas de su cuerpo, metiéndolas en pequeño saquito y colgándome después en el cinturón. Después de la lucha, de que acabara llena de sangre, solía limpiar mis armas con un hondo cariño. ¿Por qué? Simple. Eran mis mejores amigas y siempre andaban salvándome la vida. Bueno, mejor dicho, siempre me ayudaban a matar otras vidas, pero visto desde diferentes puntos de vista.

-Sabes que lo que has hecho es extremadamente peligroso, ¿verdad? -Dije mientras observaba con atención la daga del cuello. Repleta de sangre carmesí que ensuciaba mis guantas negros.

por **Adrians Blancquart** Lun Feb 18, 2013 6:37 am

No tuve más remedio que salir de mi escondite, riéndome de aquella fugaz advertencia, que sin duda otro lo tomaría más enserio, e huiría del lugar por lo que vi, todo salió como intuía, demasiado malo para ser real, débil rival.

Me sacudo las ropas, y me apoyo sobe el tronco del árbol, donde me escondía, aunque menos de lo que suponía y la miro sin apenas pestañear, lo suficiente como para humedecer mis ojales azules, me cruzo de brazos, y muestro una mueca en mis labios, mirando alternativamente la daga impregnada de sangre del afortunado o desafortunado, dependía de cómo se viese, pero sinceramente, se mereció la muerte, ¿como pudo luchar así?, no le di demasiadas vueltas y me moví de allí a acercándome, tan solo di un paso.

-¿ por qué iba a ser peligroso?-mira a su alrededor-No veo nada que me haga sentir peligro, niña- sonríe de medio lado-¿acaso me vas a matar a mi también?- la intenta molestar, preparado por si osaba cercarse a mi, ¿mordería el cebo?, niega- mmmm no, no no..no podrías, no eres tan buena-sigue incitándola a que lo atacara.

por **Serenity Boissieu** Mar Feb 19, 2013 6:09 am

No le miraba, estaba más inmersa en el color de la sangre de mi daga o, simplemente,en como salían esos líquidos carmesí del centro de su cuello, llenando la verde hierba de un color que no tenía nada que ver con el suyo. Terminé de quitar lo que tapa su cara, vislumbrando su rostro por completo y sintiendo cierta lástima al ver a alguien tan joven. De mi misma edad, quizá incluso más pequeño. Un mísero novato al que habían metido en el peor sitio de todos. Aunque claro, ¿cómo iban a saber que sería yo la contratada? Seguro se esperaban a otro espía de pacotilla y no a alguien tan experto como yo.

Suspiré y cerré sus ojos con cuidado. Daba igual que fuera mi enemigo y lo hubiera matado, siempre hay que tener un respeto por la muerte y las víctimas, porque a mi me gustaría que lo tuvieran conmigo. Observé de re-ojo al hombre que hablaba, en especial sus ojos azules que era lo que más impactaban de él... No, lo que más impactaba era lo poco que se quería a si mismo. ¿Qué clase de suicida tenía ante mis ojos que, al ver a una experta asesina, en vez de huir se pone a intentar enfadarla. No me importaba. Era fría y meticulosa, así que probablemente, si era tan confiado, es porque tendría ases en la manga que no podía imaginarme. O si, dependiendo de lo que fuera.

-¿No lo soy? Soy Serena.- Me levanté y le miré con seriedad. Todos conocían ese apodo. Era de las mejores espías de Francia y también una gran asesina. Jamás había salido herida, jamás había fallado en una misión y todos lo sabían, me había ganado bien mi fama. Aunque mi juventud, y que realmente fuera una mujer, siempre sorprendía: tanto a mis víctimas como a mis contratistas.- ¿Me van a pagar por asesinarte? Lo dudo mucho.-Cogí las armas de mi contrincante fallecido y me las guardé en el cinturón. Lo único que dejé fue la espada. Demasiado grande para mi gusto.- Yo que tu cuidaría esa boca. No es difícil morir, ¿lo sabías? En realidad, es lo más fácil del mundo.

por **Adrians Blancquart** Mar Feb 19, 2013 8:32 am

No me muevo, puedo imaginar lo que pensaría por mis palabras, pero que importan tan solo era palabras conjugadas con el fin de hacerla reaccionar, Miro a un lado, donde alumbra los reflejos del astro sol, sin mirar directamente, para que esa manchas oscuras me dejaran ciego parcialmente hasta que desaparecieran; adelanto un pie, casi a ras de suelo para dar un minúsculo paso y girarme con intención de irme. Finalmente no lo hago, miro curioso como se encargaba del cuerpo , cierro sus ojos, ¿demasiado corazón?¿una aficionada?, pensé para si mismo. Jamás vi a alguien mostrar tanta nobleza y respeto a la muerte, y menos cuando uno mismo lo provoca, lo que me descoloca al verla hacerlo.

Nuestras pupilas coinciden y no aparto la mirada, si es lo que pretendía con sus ojales idénticos a los míos, muy hermosos, que destacaban sobre su piel pálida, sin llegar a la de un inmortal, con ello también lo hacían sus labios sonrosados; lo que la hacian ante mis ojos, alguien tan inocente, que incluso llego a imaginar que después de un suceso así eran de las que se escondería en una esquina en su alcoba, para llorar por la vida arrebatada.
Dejo de imaginar, por las apariencias que veía en ella, llevo mi mano derecha a mi barbilla para acariciarme el mentón, ladeo un poco el rostro y enarco una ceja, la miro serio- no no..mm no no lo sois, de hecho, hasta vuestro supuesto nombre no da miedo al pronunciarlo, ni produce escalofríos al escucharlo, o….¿deberia temeros?- dijo sonriendo de forma ladina, mientras murmuro mi ( no gesticulo con los labios), un hechizo protector que elevava frente a mi un escudo, por si usara su armas, podría quitarlo cuando quisiese, además no era un escudo irrompieble, pero que sabia ella, si no sabía quién era.. ni lo que era. De hecho no dije mi nombre, solo obtuvo y obtendrá mi silencio, al menos por ahora.

La observo levantarse, sigo sin moverme- se quienes querrían mi cabeza, si tiro de los hilos correspondientes- dije, con la misma seriedad que acontecía una situación así, mi semblante no cambia, mientras me muevo a pasos cortos, para observarla, la mano deja de acariciar mi barbilla y vuelvo a cruzarme de brazos.

No puedo evitar reir un poco, sigo sin tomarme en serio cuando me habla, hasta ahora solo eran palabras, y las palabras podían evaporarse como el agua, después de una mañana de rocío, abre sus ojos, no en su plenitud y contesta-¡oh! Vaya, no sabía eso-dijo burlón- tal como uno vive, muere, es un secreto a voces, niña Serena-dijo esto con cierto énfasis, su acabar;- Nadie me ordena cerrar la boca, y menos vos, novata –seguía provocándola, ¿peligro?, es compatible con mi impaciencia, asi que lo afronto, nola tema, lo deje claro, no retrocedo-¿ comprobamos que os equivocáis?¿que la muerte es fácil, dependiendo con quien te enfrentes?-sonrio, marcando lo oyuelos a ambos lados de mis mejillas.

por **Serenity Boissieu** Dom Feb 24, 2013 8:27 am

Si no fuera por lo estúpido que estaba siendo y esas absurdas y suicidabas palabras que salían de su boca, podría haberlo considerado hasta uno de los pocos chicos que me parecían monos que había visto. Pues claro, en pocos me fijaba yo lo suficiente como para decir aquello. Pero de verdad, que su forma de hablar tan infantil me estaba poniendo enferma.

Veía con claridad las ganas que tenía de enfadarme, de que sacará una de mis dagas y empezara a atacarle hasta dejarlo fuera de combate, pero claro, si estaba haciendo eso quería decir que no sería algo fácil, que tenía algún as en la manga que seguro me iba a sorprender. ¿Traducción? Analizar aun más la situación, intentar sacar información de sus gestos, de sus tonos al hablar y de todo cuanto le rodea. Aunque claro, esa forma de tratarme de niña y novata estaba consiguiendo sacar mi vena enfadada.

-Serena viene de que soy calmada y lo hago todo con tranquilidad.-Ese tio era idiota, no había otra palabra para describirlo.

Fruncí el ceño, replanteándome que es lo que debía hacer hasta que, entonces caí. ¿Qué mejor manera de jugar a su juego? Me comportaría como hago siempre con la gente de la nobleza, con la burla y las risas tan dadas en mi cuando no estoy en una misión, cuando es fingir lo que tengo que hacer y no ser como soy. Él me sorprende, pues toma en toda la cara. Vería mi faceta hipócrita y se dará cuenta de que no puede enfadarme ni tocarme las narices.

-Es que los secretos a voces no son secretos... ¿No te habías percatado de eso? -sonreí con inocencia aunque en mi vos se notaba ese atisbo de burla bien marcado.- ¿Quién se equivoca? La muerte es fácil. Una daga en la cara o por detrás sin que te des cuenta, y estás muertito en el suelo en cuestión de segunditos.-Le hablaba como si fuera un niño pequeño, marcando que si actitud era infantil y absurda, como la de un crio de dos años.- ¿Quieres que te enseñe lo que significa fácil y difícil? Seguro que aprender a sumar y restar te lleva todo tu tiempo.

por **Adrians Blancquart** Mar Feb 26, 2013 1:48 pm

Sonrio, apenas una minúscula mueca e mis labios, cambio mi gesto , mostrándome serio, dejando de lado mi actitud idiota puesto que ya dieron sus frutos, fue costoso, pero lo logré. Un enfrentamiento con aquella novata, sería divertido, más si era ta dura de roer, tal como vi con él difunto que aún yace en el suelo, aún es temprana hora para que su cuerpo se hinchase por los líquidos y gases que desean salir del cuerpo, demasiado reciente. Miro de reojo el cuerpo después a ella, como reacción a su argumento acerca de su nombre, enarque una ceja y volvía relajarla, me aguanta lo a risa, me quedo callado, fijándome en la silueta, perfectamente esculpida.

-Calmada- repite después de ella-demasiado…- comente por lo bajo, tapándome la boca con la mano los segundos en que lo hago, me cruzo de nuevo de brazos, mostrándome cómodo, escuchándola. Pongo los ojos en blanco y vuelve a mirarla-¡touché!-; machaco mi ironía con una semejante, me gusta su reacción quería ver más.

No me pude callar ante lo que prosiguió, con un tono serio y frio le argumento un poco-es fácil para quien se deje los flancos libres, sea lento como una tortuga como el chico que yace ahí tumbado- miro de reojo otra vez el cuerpo,de nuevo a ella- ¿una demostración, tú?, jajajajajaja- me llevo la mano al estómago, me callo de golpe-adelante, veamos que sabes hacer pequeña novata-abro los ojos un poco más de lo natural, para que su atención fuera a mis ojos. Tras de ella, ya los lados de ella, se levanta de golpe una cortina de arena que cae al tiempo que vuelve a su forma natura.

por **Serenity Boissieu** Jue Mar 07, 2013 4:34 am

Su expresión cambia a la seriedad, y a mi me da igual. No entiendo que es lo que pretende ese chico, ¿acaso acabar muerto en el suelo? ¿Tantas ganas tenía de morir que, no solo ve a una asesina y no se esconde, sino que empieza a intentar enfadarla? No podía comprenderlo, de verdad que era algo que no cabía en mi cabeza, pero yo mataba por encargos y trabajos, no por mero placer, así que no iba a tocarle ni un pelo a ese estúpido desgraciado que tenía ante mis ojos. Suicida, no se le podía llamar de otra manera viendo las cosas como estaban en esos instantes.

Negué levemente, suspirando y pasando de su rostro mientras miraba a mi alrededor. Tenía que ir a por mi mochila y ese tipo tan solo conseguía retrasarme. ¿Demasiado? Bueno, mi apodo de asesina viene por algo y, la verdad, me siento orgullosa de que así sea. Me hice famosa por algo y, estaba completamente segura, de que él no solo me conocía, sino que había visto perfectamente como me había cargado con tanta facilidad a ese novato que yacía inerte en el suelo. Pero, si era así, ¿qué pretendía? Tan seguro estaba de si mismo?

Fue entre esas preguntas en mi cabeza cuando sus palabras hicieron que volviera a mirarle con los ojos cruzados, atenta a todo cuanto pasaba a mi alrededor. Me percataba de la arena, de sus movimientos a mi alrededor mientras que no dejaba de mirar a los ojos a ese hombre que tenía delante. Ya comprendía.

-¿Un brujo? Interesante...-Me agaché unos instantes para coger, con toda tranquilidad, parte de la arena que había caído al suelo.- Alguna vez me han hecho matar a seres como tú. Han sido más difíciles, claro, pero mi padre me enseñó bien por si me topaba con alguno.-Miraba la arena haciéndole ver que de forma distraída, pero una buena asesina, jamás deja de estar alerta y pendiente de todo a su alrededor.- La verdad, como te he dicho antes, sino me pagan por tu cabeza, dudo que vaya a hacerte nada.- Dejé la arena y le di la espalda, alejándome de él.- Suerte en tu intento de suicidio.-Mi sonrisa era burlona y, aunque el no pudiera verla, estaba segura de que se notaba en mi tono de voz.

por **Adrians Blancquart** Sáb Mar 16, 2013 11:21 am

No me muevo ni un ápice , mirando lo que hacía cada segundo, lo cierto que se la ve demasiado tranquila, ¿me está subestimando?, si fuere así, no sabía tan bien de nosotros ,puesto que mucha parte de la población he información eran pura habladurías, que no tenían de acierto ni la primera palabra tan siquiera, pero por que no seguirle el hilo quizás pueda sacar algo a mi favor. Bajo la mirada en el instante que deja que os últimos granos de arena se escurren de entre sus dedos, un escudo que a mi antojo lo derribé para que viera como un fallo, cuando no lo era.

¿seres?, porque definirnos como tal, no somos antinaturales como para ser etiquetados así, asesina novata, somos como tú y no seres- dije con tranquilidad, doy un paso mas hacia adelante, manteniéndome dentro del límite marcado por una invisible línea,algo molesto por como nos llamaba- habladurías, seguro se os resbaló por alguna garganta de algunos, desoyéndolos, sin ser necesario un trozo de papel que te indique el matarlo por unos cuantos francos- enarca una ceja, su gesto seguía siendo frio, en su interior la analizaba cada palabra y gesto, tenía algo que no sabría describir- serena- dije con tono burlo dentro de mi seriedad- ¿suicidio?, no, solo que no me creo nada de lo que sueltas por esa boquita dibujada en tu cara- dije de manera que se denotase que aquello era cierto,la veo girarse, darme la espalda y niega. Me acojo a mi habilidad de hechicería me agacho y pongo la mano con la palma abierta sobre la tierra, entre los pelos de hierba seca, pronunciando un hechizo, que me permite que races, emergieran de la garganta, puede oírse un temblor lejano y otro algo más cercano, enarca una ceja- veamos si mi conclusión es equivoca, y que tan paciente eres- mientras la hablo las raíces van por debajo de la tierra al encuentro del enemigo, cuando esta cerca de sus pies rodea sus tobillos, antes de que dijera nada, estas apretan y tiran para intentar hacerla caer, pero lo mas que quiere es forzarla a quedarse.

Suspira y reincopora quedandome de pie, no dije nada mas, no era necesario, un poco mas de mi habilidad, el viento se va haciendo notorio a nuestro alrededor, afectando al ambiente, las nubes tapan el sol, se nubla.

por **Serenity Boissieu** Lun Mar 18, 2013 6:24 am

Seres o no seres... ¿Esa chorrada había conseguirlo enfadarle? La verdad es que en ningún momento lo había dicho como algo despectivo, al contrario, admirada, en ciera manera, aquellas cualidades que poseían. A mi no me importaba lo que fuera nadie mientras no me creara problemas y me dejaran en paz, momento en el que me di cuenta de un pequeño detalle. Había visto mi rostro. Si se le ocurría abrir la maldita boca respecto a como era, aun sin saber mi nombre, podría tener un grave problema. Maldije en mis pensamientos un sin fin de veces, no quería matarlo aunque se lo estaba mereciendo con creces.

Cada palabra, cada gesto, cada nota que le ponía a la voz para conseguir enfadarme. No lo conseguía en absoluto, pero si algo sabía es que no me dejaría irme así por las buenas. Él quería algo y, probablemente, no pararía hasta conseguirlo. ¿Traducción al asunto? las dagas que tenía escondidas bajo las mangas bien preparadas, sintiendo en mis tobillos la certeza de lo que estaba pensando. Iluso. Si pensaba que yo acabaría tirada en el suelo, expuesta para él, lo llevaba claro.

En cuanto noté las raices di un salto, apoyando mi peso en las manos. Me di impulso hacia arriba en cuanto mis pies estaban en lo más alto y giré en el aire, cortando las raices con las dagas en cuestión de segundos. Le miré con tranquilidad una vez estaba en una posición normal, sin raices, ni nada que pudiera atarme. Alcé una ceja, acercándome a él con las dagas ya mostradas en mis manos. ¿Qué narices le pasaba a aquel hombre? ¿Por qué quería desesperadamente la muerte? No podía comprenderlo.

-¿Te pasa algo con el mundo? ¿Tanto lo odias? -Negué con la cabeza.- Podría jugar contigo, de verdad, pero no voy a matarte.-Aunque darle una paliza cuerpo a cuerpo no estaría de más. Lo malo es que dudaba de su juego limpio, pero bueno, yo también tenía mis métodos.

por **Adrians Blancquart** Lun Mar 25, 2013 9:00 am

Me quedo en la misma posición aplaudo con cierta ironía esperando acabará por desacerse de mi ataque ¿fallé?, observando como se deshace de mis ataduras, las ramas secas rotas con habilidad, movimientos límpios, ágiles, flexible, parecia que tenía buen dominio en combate, pero no era suficiente con lo que se avecinaba.Bajo las tierras continuaba con la manipulación de las ramas , con la intención de que quedara atrapada y expendida entre los ramales.

No consigo hacer ningun rasguño a su coraza, a pesar de mis intentos, se muestra segura en su avance al igual que el empuñar de sus dagas.Se acaba el silencio, después de deleitarme con su silueta femenina, aparente juventud, que podría rozar los dieciocho o diecinueve años una mujer en la actual época, era realmente hermosa digna de esposarla con cualquier galán.

Él viento se eleva, esta vez sin mi habilidad, puesto que elevar la velocidad del elemento, junto a la manipulación de las raices, que continuasen con su "caminar", consumiría de forma acelerada mi energia, antes de lo que deseara, no estaba en mis planes.

- jueguemos-dije con seriedad, tactando tras mi espalda una daga curvada,apreto la empuñadura.Antes de que pudiera sacarla y de que las ramas resurgieran tras la espalda de la chica, detecto un aura diferente, oscura, que se acera de forma apresurada los árboles caen al paso de quien se acerca, los pájaros huyen,después de que sus nidos fueran destruidos, o de que sus alimentos se escaparan de sus picos, al igual que se me escapaba la oportunidad de iniciar un encuentro prometedor.

-¿pero que coño?-susurro, alzo la mirada los árboles caían, no me muevo, observo atónito como se aproxima,proyecto a mi alrededor un escudo, él inical del encuentro, dejándo libre de manipulación, sacando aquella daga-¿ te han seguido?-arrugo el ceño, molesto, creyendo que ella estaba detrás de todo esto- ya veo, mueñeca.. ¿un as bajo tu manga, eh?-dije mirandola y preparado para defenderme.Unos aullidos nos revelan que es lo que se acerca.

por **Serenity Boissieu** Vie Abr 12, 2013 6:15 am

Aquel hombre realmente se pensaba que podría conmigo. ¿Acaso no había visto lo que acababa de hacer? Sorteé con extremada facilidad todas sus raíces, podía hacer perfectamente que se deshicieran a mi antojo con cortalas con cualquiera de mis dagas o usando alguno de los artilugios que tenía en la bolsa de mi cinturon. Si quería, podría irme de allí en ese mismo momento sin que pudiera evitarlo siquiera. Estúpido. Memo.

Negué levemente, empezando a pensar que realmente había algo en aquel hombre que no comprendía. No pensaba matarle, porque no mataba porque sí, pero me daba cieta curiosidad. ¿Por qué quería morir tan joven? ¿Qué habría en su vida para que se comportara de forma tan sin sentido? Me había visto matar a un hombre con una facilidad extrema y, venía ahora, intentando que sacara mis dagas y las usara contra él por unos ataques sumamente idiotas. No. Tenía cosas mejores que hacer que atender a un criajo con aires de superioridad.

-Lo siento, tengo cosas mejores que hacer que jugar contigo.- Me di la vuelta, empezando a caminar cuando lo escuché.

Algo se acercaba a una velocidad vertiginosa, demasiado para ser un humano. Fruncí el ceño, escuchando en silencio cuando él habló. Lo pensé unos instantes hasta que escuché los aullidos, tensándome al instante. Si era lobos corriendo, mejor estar en alto y, si por un casual, era un tipo de ser tan jodidamente desagradable como un hombre-lobo, si es que existían de verdad, mejor salir de allí por patas.

-¡Cállate, estúpido! -Me di la vuelta, acercándome a él a toda velocidad y agarrando su brazo, tirando acto seguido de él para echar a correr. Había que ponerse a salvo como fuera.- ¡Corre como alma que lleva el diablo!

por **Adrians Blancquart** Sáb Jun 01, 2013 7:33 am

Apretando la mano sobre su empuñadura, sin quitarle el ojo a expensas de ver su reacción ya fuera para admitirlo o negarlo_ dejándola que se explique si es como debía de ser_ pero fue sorprendente, rompió mis esquemas de sus posibles salidas y así responderla con mayor o menor tolerancia como hice inicialmente.

Arrastrándome , decidida a llevarme de allí, no la entendía en absoluto, si le era molesto, ¿Por qué no me dejó allí?.El escudo se deshizo en el instante que me agarra, al principio de la andadura casi tropiezo aunque finalmente pude sobreponerme y correr a su mismo nivel. Pasando mi mano por la cintura de ella_no me reconozco ¿Por qué hice esto?_pense para si retirando de inmediato la mano. Miré a otro lado sin darle que pensar en esos sentimientos inexistentes. No puedo enamorarme a primera vista. No señor, sería y es una idiotez ¡no la conozco!.

“¿Por unos simples movimientos de esquive? ¿y un cuerpo bonito? ,Adrians despierta”, escuché que me golpeaba, abri los ojos, seguíamos corriendo hacia donde donde -¿pero que pretendes?¿huyes de los problemas?_ dije con tranquilidad-¿ peliroja cobarde…?-; No hable mucho, le quite la mano de su agarre. Y levante un muro de protección , de nuevo, para protegerme a mi.

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