Ficha: Sir August Black-Cross

DATOS BÁSICOS

DESCRIPCIÓN FÍSICA

August es un ser alto, de apróximadamente 1.86 metros de altura, relativamente delgado, con 76 kilogramos en su cuerpo, su cabello negro azabache ha llegado a aclararse, debido a distintos problemas que ha tenido en su existencia, sus azules ojos son fríos como la nieve nórdica, y su pálida tez es comparable con la fina seda blanca, traída de los lejanos parajes del oriente medio.

Su cabellera de mediano largo hace resaltar los finos y delicados contornos de su rostro, en su labio inferior, destaca una perforación la cual hizo con un material extraño, hermosamente, hace destacar sus labios, los cuales son algo rojizos y contrastan perfecta y armónicamente con su piel.

Las curvas de su cuerpo son delicadas, no llegando jamás a lucir femenino, gracias a su ancha espalda y sus alargados dedos.

Siempre viste muy elegantemente, siendo habitual el verle de trajes formales, hermosas caminas adornadas delicadamente, corbatas de lazo, entre otros. Amén de lo anterior, suele cargar un bastón, parecido a un báculo, cuyo extremo superior tiene adornos de mármol y ónix, dejando ver sus refinados gustos y su enorme afición por los seres de la noche, al haberse tallado preciosamente la cabeza de una especie de demonio en dicho instrumento, como corolario de ésto, y finalización de su bastón, se encuentran los tallados que detallan el contorno del mismo, haciéndolo una pieza de arte bastante refinada y tétrica.

DESCRIPCIÓN PSICOLÓGICA

August es un ser oscuro, de un carácter extremadamente solemne. Su aparente desinterés por el mundo en que vive radica en su ya avanzada edad, considera que la gente tiende a olvidar el respeto a quienes llevan más tiempo en vida.

Desprecia a los inquisidores, ya que, le arrebataron a la mujer que una vez amó.
Si bien, se trata de un ser aparentemente sereno y calmo, a la hora de luchar no está con juegos, salvo oscuros juegos mentales, en los que vierte todo su sadismo, a fin de llevar a su enemigo u oponente a un área de la que no pueda salir, o al menos, no con facilidad.

Su frío temple, se explica por su historia, como un romántico empedernido y un verdadero luchador. Siempre prefirió aislarse, desde que fue convertido, para no terminar dañando a nadie, salvo quienes voluntariamente, le diesen de su sangre.

Finalmente, cabe destacar, que durante los últimos 1000 años, ha desarrollado un fuerte odio hacia la raza humana, tanto así, que ha decidido consumir sangre de quienes no le han ofrecido, esporádicamente. Amén de lo anterior, su odio por cazadores e inquisidores, le ha llevado a niveles que en un principio, consideró bajísimos, tales como, manipular los recuerdos de los mismos, a fin de hacerles odiarse a sí mismos y sus familias, llevándoles al suicidio, por, casi siempre, la ilusión de haber sido hijos rechazados, sometidos a cultos satánicos y luego, revividos por medio de magia negra, a fin de entregarlos a una iglesia que pactó con Lucifer.

HISTORIA

Malkavian Eragos, nacido en Roma, al rededor del año 400 a.C., fue toda su vida un chico distraído, jamás prestó mayor atención a su entorno, no obstante el ser uno de los grandes prospectos en la academia militar romana.

A los catorce años fue enviado, por vez primera, a la guerra. Se trataba de pueblos germanos, o como se les conocía en dicha época, barbarii, durante dicha batalla, el jovel Malkavian salió levemente herido por uno de los hombres a los que asesinó. Dicho hombre, terminó, si bien, siendo un bárbaro o barbarii, sabiendo hablar en latín, el idioma de Roma, y le mencionó: "Dentro de poco, conocerás el verdadero dolor, mocoso. Entenderás que la vida no es como deseas, y arderás en ira.". Malkavian, sin comprender los motivos del soldado ajeno, ya que no había aprendido a odiar, le miró fríamente, haciéndole entender su poca comprensión sobre el tema, luego, aquél soldado, le comentó una leyenda que había pasado por generaciones en su pueblo: "Hay veces en que un alma que ha llegado al final de su existencia física carga tal dolor, que un cuervo puede traerla nuevamente a la vida, para enmendar lo que le atormenta, aquél nuevo ser que no está vivo ni muerto, vaga por las noches sin poder mostrar su rostro en el día, condenado por siempre, hasta que su venganza se concrete.".

Durante tres años, Malkavian recordó los dichos de quien había muerto en sus manos, siendo su adversario, en dicho funesto campo de batallas. Una noche de diciembre, fría como nunca, una figura familiar se manifestó en la vivienda de la familia Eragos, era, en efecto, aquél soldado enemigo, quien había vuelto a vengar su muerte. Cercenó, pues, a todos quienes vivían en dicho lugar, salvo a Malkavian, a quien condenó a vivir con dicho pesar, para luego esfumarse entre las sombras y desaparecer.

Vagando por las noches, a un año de dicha trajedia, sucedió algo inaudito, un ser oscuro condenó a Malkavian a vagar por la eterna noche, sin poder volver a ver el sol. Una damicela de negros ropajes, mordió el cuello de aquél joven, quien, por esos tiempos, se encontraba en angustia y soledad inconmesurables. Intercambió, pues, por medio de dicho incrustar de fauces en el cuello del joven, algo de su venenosa sangre con la de él, condenándolo sin mas remedio a caminar por la noche, desterrado de ésta vida, como dirían posteriormente, quienes se llamarían "Cristianos", a ser un "Hijo de Caín."

Y así fue, pues, a partir algunas noches posteriores, en que había sido transmutado, resguardado del azote de la luz solar, que él, Malkavian Eragos, comenzó su eterno vagar por las noches. Durante los primeros quinientos años, se mantuvo en su ciudad, pasando desapercibido, o al menos, intentándolo. A partir de él, surgieron algunas leyendas, le llamaban "et homo aeternus" o "el hombre eterno", asimismo, se decía que carecía de edad. Debido a ello, y a fin de olvidar lo acaecido hace ya tantos años, decidió emprender un eterno viaje; primero, dirigiéndose a la isla de Gran Bretaña, donde vivió cerca de mil años.

En dicha isla, habitó en un lugar alejado de los humanos. Un castillo construido al filo de un acantilado, fue su hogar durante el tiempo que permaneció habitando la hermosa isla. El oscuro e impío pasar de los granos de arena de Cronos, cortaba sus lazos con la vida fríamente, sus emociones iban perdiendo la sazón, su sonrisa se transfiguraba en templanza, su alegría en frialdad. La eclesia Católica, posteriormente llamada "Iglesia", ya era una realidad. Malkavian era perseguido, odiado y temido, por los seres que habitaban dicho lugar. Su eterna vida, no era un regalo de aquél a quien llamaban "Dios", sino, de aquél a quien conocían como "el Satán", aquél enemigo de la bondad, que, según ellos, tenía su "creador".

Finalmente, y a fin de evitar nuevos problemas y nuevas leyendas, decidió emprender retirada de aquél lugar, al cual había llegado un frío mes de agosto, donde había adoptado su nuevo nombre "August Black-Cross", donde había vivido en relativa calma, donde había terminado de dejar su cariño, a fin de inutilizar dichas emociones, al final del día, todo debía morir, incluso él. Así fue, pues, como vagó por el continente actualmente conocido como "Europa", llegando, tras doscientos años, iniciando el año mil seis cientos, a Paris, Francia.

Durante dichos años, y gracias a algunas de las riquezas que traía consigo, fue capaz de conseguir un pequeño lugar, a las salidas de la ciudad, un castillo residencial. Dicho lugar, que a partir de dicho minuto sería su hogar, fue decorado con un órgano eclesial, el cual, debido a su potencia, resonaba en todo el castillo, un piano de cola, y finalmente, el violín Stradivarius que August cargaba consigo, desde su último paso la península que le vio nacer, ahora llamada Italia. Dicho paso, fue realizado al rededor del año 1730, en que compró el Davidov-Morrini, por lo cual, dicha adquisición era, en efecto, de las más nuevas que poseía el eterno caminante.

De dichos años, a la actualidad, August se ha dedicado al arte, la interpretación, música y escritura, intentando jamás llamar la atención, salvo con su fría actitud. Gracias a los años, fue desarrollando tal concentración, que le permitió poder manipular el dolor de otros, a través de sus ojos y simplemente, por medio de la visión mental; amén de ello, y gracias a lo mismo, desarrolló la capacidad de manejar las memorias de otros, a fin de desaparecer de ellas, o bien, aparecer en ellas cuando él lo estimase conveniente; en cuanto, finalmente, a su salud, desde que fue mordido y transformado, su sanación ha sido superior a la humana, dejándole tiempos, según él, prudentes, para sus recuperaciones y similares.

DATOS EXTRA

Siempre carga anillos de ónix (ónice) en sus dedos anular e índice, a veces también en el medio, alternando la mano en que los usa.

Siente fascinación por la música de piano, por lo cual, posee uno en sus dominios, amén de poseer un órgano y un violín Stradivarius.

Se trata de un ser tranquilo, no obstante, provocarle puede ser un craso error.

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