Desde hace tiempo he cerrado los ojos, mi único objetivo está en la oscuridad

Es un hombre alto de un metro ochenta y siete, su apariencia es adulta más no anciana, ni decrepita como debería de ser pues los años que lleva encima, algunas marcas de la edad son visibles en su rostro, de cabellos castaños y ojos cafés, su cabello esta bastante corto, suele peinarse de dos maneras y ninguna otra más, su cuerpo debido a los trabajos forzosos que hizo cuando humano esta dotado de músculos y bastante fibra, es delgado pero macizo a la vista, su barba y bigote son apenas visibles pero se pueden sentir, tiene bellos en distintas partes del cuerpo, no en abundancia pero posee lo justo, sus extremidades son largas y están bien proporcionadas respecto a su cuerpo, suele ser cuidado de su aspecto personal por el simple hecho de encajar y no lucir repulsivo al resto, suele ducharse solo cuando es necesario, al estar muerto no es que necesite muchos baños y no es costumbre de la época hacerlo también, suele vestir en la gran mayoría de ocasiones ropa de gala o formal, en privado suele encontrarse desnudo o con simples pantalones sueltos, no es de importancia para él la desnudes o el morbo, él genera esto ultimo de diferentes maneras, muy diferentes. No posee ninguna marca personal en concreto, sus manos no son suaves pues estuvo largos años trabajando la tierra y los minerales usando diferentes herramientas duras y ásperas, sus uñas son un poco largas y filosas pero disimula todo esto bien con guantes.

Su personalidad por su no tan notable enfermedad es un mero trazo abstracto, algunos de los dones que le brinda su estado mental son bastante provechosos, sin duda el que más aprecia es este, el ser capaz de mostrar una personalidad cambiante, día con día, mes con mes, año con año, lustro tras lustro, siglo tras siglo, etcétera, todo se acomoda a la situación, a la personas o al lugar en el que deba estar, es parte de esto, parte de ser lo que es, todo y nada a la vez, el poder ser capaz de hacer y ser lo que sea en el momento que sea, aquella sensación con la que juega a ser Dios que es notablemente la causa de su megalomanía (Claramente no es el único factor que le genera esta sensación) Averno se va a desenvolver como cualquier persona normal (Si está rodeado de gente normal), es el secreto del psicópata promedio, aparentar ser parte de, cuando no lo eres en realidad, el secreto para “sobrevivir” en un mundo donde todos o casi todos son diferentes. Todos los vampiros disfrutan de la sangre, pero no la disfrutan como él lo hace, es una mera combinación entre sadismo, sustento y control que simplemente desemboca en más placer, sin embargo estas actividades son muy privadas y exclusivas para quien elija, Averno como vecino es muy callado, lo puedes encontrar leyendo un libro la mayor parte del día si es que está despierto y no dentro de su sótano, detesta la luz del sol, simplemente no la tolera por obvias razones. Es el vecino que no hace ruido, que pasa desapercibido, pero si por alguna razón le echas el ojo siempre te va a causar misterio, y quizá un poco de escalofríos, no se le podría considerar antisocial, sino asocial pues no puede o no quiero sentir empatía por la sociedad, por sus necesidades, por sus atracciones o por sus problemas, ahí es donde nace su egoísmo, pues simplemente existe para sí mismo, para cumplir con sus propios deseos, anhelos varios. Esto no significa que no pueda ayudar a alguien, pero cada acción que realice, no solo de este tipo, todas tienen un fin, un uso, una finalidad estricta, no da puntada sin hilo, en sentido figurado y textual ya que gusta de hacer su propia ropa muy a su estilo resaltante del resto, o incluso de unirse a alguien o compartir un gusto, probablemente tan solo sea un mero artificio para estar cerca de su próxima víctima o es una forma de buscar buenos prospectos para sus fines.

A lo largo de los años ha sido mil cosas, posee vastos conocimientos en diferentes materias, todos de un gran nivel, lo que es normal pues siglos y siglos de aprendizaje dan un notable efecto, psicología, teología, física, química, antropología, fisiología, anatomía, conoce muchísimo además sobre criminalística, conocimientos que le sirven sobremanera desde hace muchos años a pasar desapercibido la gran mayoría de veces, a través de los años su propia fama también ha ido cambiando, si tiene un nombre no lo recuerda, pero a cambio de esto siempre se ha movido en el bajo mundo por medio de sobre nombres, alias, etcétera. Es favorable que tras pasar cien años las investigaciones se cierren, pues cada alias queda olvidado, no por todos claro, siempre quedan las leyendas que se puedan contar, es extremadamente cuidadoso cada vez que finalmente decide finalizar su ritual o rutina si se quiere decir, posee reglas personales, según el tipo de suceso, parte su trabajo es planificar, pero parte de su ritual también lo es, aunque siempre están los llamados exprés, que nacen de un mero impulso, son muy poco comunes en él, quizá uno cada trecientos años, suele tomarse meses y algunas veces años en el proceso de selección, planificación y conclusión. Suele generar sus más magníficos trabajos o placeres con un libro o en su jardín mientras cuida de sus flores, se puede decir que se dedica también a la floricultura gran parte del tiempo en el que no está ocupado en otras cosas. Averno es su nombre actual, el falsificar documentos es algo del día a día aunque ha pasado mucho tiempo sin una identidad falsa pues no sale con nadie, ni es de ir a las actividades sociales, solo se le puede ver andando con la gente que planea asesinar o con la gente que va a seguir pues les considera prospectos o no, muchas veces a pensando en la opción de una doble vida, ¿ya saben? Casarse, convivir o algo por el estilo, sin embargo esto sería problemático y tendría más seres por los que preocuparse, no porque quiera cuidarlos, sino que serán un problema tanto económico como contra él, ya que tendría que ocultar también sus instintos y sus deseos de las personas que tendrá cerca día a día, pero quien sabe y cambie de opinión. Averno hará lo que sea para salirse con la suya, seducir, ser amable, fingir una relación, fingir amor, fingir odio, fingir interés, dar placer, generar confianza, aunque algo no le agrade, lo dará para terminar con su gusto.

Dando un simple resumen, Averno ha pasado los siglos asesinando, violando, torturando, engañando, escapando, y cada “logro” tan solo le ha amplificado más su deseo y el estatus en el que tiene su existencia, un vampiro egoísta, megalómano, y muy inescrupuloso, capaz de cometer cualquier acto sin sentir el mero remordimiento, él se considera la bestia que todo hombre desearía ser, el demonio que puede dar mil pasos sin sufrir, sin sentir culpa, sin remordimiento y ser extremadamente feliz. Una utopía echa realidad para muchos, un maldito bastardo sanguinario e infeliz para otros, ¿para ti qué es? Es Averno, puede ser todo y nada, es; el cuándo, el donde, el alcohol de un hombre con cirrosis, el estupefaciente del adicto, el tallo de la flor, la maldición de aquella vieja y polvorienta casa, el murmuro de unos labios venenosos, el sol del vampiro, la luna de un licántropo, es el talón de Aquiles, porque puede, porque quiere. En el trabajo es capaz de variar sus costumbres depende si el empleador así lo desea, matar por encargo le calma un poco, debe terminar sin falta su ciclo personal o pierde el control y esa falta de control es tal vez la debilidad que desea obviar, desterrar y jamás experimentar, es decir, ¿a quién no le gusta estar en sus "facultades"? Aunque claro, sus facultades son notablemente peculiares pero se logra entender. Pero perder su tino y su capacidad puede desembocar en su fin, algo que aunque piensa imposible en el fondo tiene presente, noche tras noche, cada vez que sale de su guarida de turno. Si bien tras tantos años y años de venir repitiendo los ciclos a logrado aburrirse un tanto, siempre encuentra nuevas formas de reavivar la flama, cada vez un reto más difícil, más alto y profundo, ya no tiene gracia sujetar del cuello o manejar la mente ajena, eso desde hace varios siglos dejo de ser entretenido, incluso por mera diversión obscena y vulgar, desde hace poco a descubierto la facilidad que puede tener para fingir ser algo, dado que muy pocas veces es él mismo por sus problemas con los trastornos de personalidad y demás, el aparentar ser un humano común (Aunque la idea le suene abominable y muy deplorable) A estado resultando mucho más entretenido, ¿entonces se puede jugar? Que se juegue, el pan sobre la mesa pide ser rebanado.

Poco sabe de su familia, y de sus primeros años, tan solo sabe que sus padres fueron dos simples campesinos hasta la hora de su muerte, dos simples campesinos que regalaron a su hijo con la edad de siete años al primer desconocido que se les cruzo y les ofreció dinero a cambio de él, ¿cómo? Como un simple y miserable borrego de cuarta, ¿la necesidad? ¿La falta de salubridad? ¿El dolor y la pena por no poder existir con dignidad les hicieron hacer esto? Probablemente, aun así aquella parte muerta de él jamás logrará perdonar a ese par de polvo de huesos. Se puede decir que aquella venta fue el candado abierto que desató la podredumbre, maldad y perdición en la vida y la no-vida de nuestro protagonista, tras la venta el muchacho estuvo viajando con este hombre a carroza pero ni siquiera iba con techo alguno, mera madera sostenía su cuerpo y este estaba expuesto al aire libre, la lluvia, la tierra, la arena y el viento fuerte, ¿un vieja agradable? Muy agradable sobre todo al momento de comer, en el cual se le atendía como fuera un perro y si es que el cochero se dignaba a recordar la existencia del muchacho que de sobra estaba desorientado, asustado y muy pasmado pues no entendía por qué le estaba pasando esto a él, ¿por qué sus padres ya no estaban? Y cual trapo sucio se encontraba aquí soportando y tolerando los abusos de un infeliz de mierda que no conoce y ya hace mucho dejo de soportar. Es ahí cuando aprende que la vida no es justa, ¿pudieron haber esperado unos diez años más? Al parecer no, tan joven y tan triste ya. Con el simple uso de su inmadura y escaza lógica comprende que tan solo debe aguantar y tratar de sobrevivir, pues ahora está solo y las personas que le cuidaban ya no estaban más, le abandonaron.

Cual sucio perro a un mundo de malestar, pena, soledad y dolor, así es como se sintió todo ese maldito viaje hasta que este concluyo, ¿dónde estaban? Ni la más remota idea, él tan solo conocía los pastos por donde hacía que el ganado se alimentara y nada más, estaba muy lejos de su lugar de origen, volver no era una opción, más porque no quería hacerlo que por no poder hacerlo, tras unos pocos meses pasados en este castillo lavando, fregando, cuidado de los animales, limpiando y moviendo cosas de lugar entendía lo que ahora era, fue vendido por sus padres para ser un mero esclavo de algún tirano, un tirano de cuentos como los que le contaba su madre para que durmiera, bellas épocas que no volverán y que tan solo recuerda con asco, siente rabia y al expresarla por fuera con la gente del lugar tan solo recibe más rabia, pues el que no respeta y no cumple ahí es tratado con la ley del hierro, y si sobrevives a esta mal por ti. Sus años como peón pasaron, hasta el punto donde decidió no desperdiciar más su vida, más de veinte años sirviéndole a personas que ni por el rostro podía conocer, ¿qué clase de mierda? En su digna ignorancia tan solo podía concebir esto como malo y escapar sería la única forma de conseguir la libertad que se le fue robada injustamente, y dicho y hecho, una noche oscura y de tormenta aprovechando el alboroto logró escapar junto a dos compañeros, los cuales fueron asesinados en el camino por los guardias, para su buena suerte o mala suerte él siguió caminando sin querer a un destino quizá peor que la muerte misma, ¿o mejor? Es tan subjetivo ante cada ojo que no se puede describir como bueno o malo, que juzgue el lector y punto. Una carrera maratónica sin agua, sin comida, bajo lluvia y llevando ropa inadecuada en qué podría desembocar, ¿en muerte, correcto? ¿Deshidratación? ¿Paro cardiaco? ¿Pulmonía? Todas muy probables y ninguna de ellas la causante de su perecimiento, algo curioso pues estuvo a punto de desfallecer de cansancio antes de que todo lo bueno en su ¿vida? Tomará lugar, aquel hombre de cuerpo maltratado, atlético pero mancillado, débil y fuerte a la vez simplemente se desploma sobre la cuenca de un rio, probablemente desconoce el nombre, como casi todo, negado a un pico, pala o batea jamás ha tenido la oportunidad de aprender algo de este mundo en el que esta, nada de cultura, de sabiduría que por dentro anhela, pero sobre todo, hambriento de poder y de buscar venganza.

Sentir el alba bastante lejano tan solo le quita las esperanzas de seguir, se sien te morir, y no poder ser partícipe de un último amanecer en libertad, como la que tenía de niño le cala dentro, conoce su destino, sus músculos no reaccionan, su mente está inmersa en la desesperación aunque su rostro no lo deje ver así, su moral da pataletas de ahogado por mantenerse centra y su orgullo, nunca tuvo uno, dicen que en nuestro afán de mejorar las cosas terminando empeorándolas, ¿será verdad? Aquella frase que escucho a uno de los trabajadores más viejos, es cierta, lo admite con desdén, gracias a su deseo de libertad dos de sus mejores amigos han muerto y él está a un simple paso del averno si es que este existiera, lo único que le permitieron aprender fue la religión, la cual jamás le gustó del todo, es curioso que lo que piensa son sus últimos momentos de lucidez y vida esté pensando en esta, ¿temor y debilidad? Probablemente. El hombre se resigna a cerrar los ojos y esperar que todo suceda sin más, tal vez su agonía no sea tan larga, ahora se ha percatado que tiene una herida sangrante y no por haberlo visto, sino por sentir como arde y que cada vez más su debilidad aumenta, unos minutos pasan y la atmosfera se altera notablemente, pisadas toman lugar en el escenario, ¿le han encontrado? Bien, tan solo acortarían su plañir, sin embargo no, ese deseo jamás se va a cumplir, abre los ojos y estos borrosos casi obsoletos logran definir una borrosa aparición, masculina y nunca antes vista por él, no es ninguno de los esclavistas asesinos, ¿quién es? ¿Qué quiere? Intenta preguntar esto pero las palabras no salen de sus fauces, no se ha puesto a pedir ayuda de todas formas, ¿para qué? No hay ser que le pueda ayudar ahora, eso cree. De su nebulosa desaparece la aparición y un fuerte dolor remplaza todo sentir, un profundo y agudo dolor en la herida y en el cuello, estaba muriendo ahora, ¿por qué? El asesino es otro diferente, se deja caer.

El asombro total llega de la mano junto a su despertar, está vivo, pero no, todo es diferente ahora, siente aromas que nunca antes a sentido, sus ojos ven perfectamente dentro de este lugar, no le cuesta más de diez segundos para saber que es una cueva y muy oscura pues la luz se nota lejana y se nota agresiva, ¿por qué? No hay explicación aparente, lleno de furia golpea fuertemente la pared de roca y su sorpresa es notable al no sentir dolor y notar gravemente dañado el mineral, ¿pero qué está pasando conmigo? Al apretar las fauces siente dos ancones en los labios y la sangre corre por su labio inferior cayendo en gotones al suelo, está confundido, pasa su dedo y ensangrentado logra palpar dos especies de colmillos, ¿en qué me convertí? La pregunta que dar inicio a toda la aventura de ¿quién? Su nombre es obsoleto, es pasado, es el nombre de un esclavo que lleva el apellido de dos rufianes, para qué usarlo, desde hoy es Averno, lo último en lo que pensó antes de ¿morir? Su confusión es gigante pero desea avanzar, al siquiera sacar su mano de la cueva esta quema y como auto reflejo retrocede muy asustado, ¿qué es esto? ¿Qué es esto? No hace más que repetir, ¿me convertí en esos demonios de historias? ¿Esto soy ahora? No se lo puede creer, que realmente existan, que se haya topado con uno y este le haya dado el don o maldición de ser lo que es, una pequeña sonrisa se divisa en el rostro del Averno, tiene lo que necesita para cumplir sus deseos y sus rencillas del pasado pueden ser saldadas ahora con facilidad. Y así poco a poco mientras vengaba su ser lo conocía un poco más, aprendía, la primera vida que se llevó fue una conocida, el hombre que daba los latigazos en el castillo, maldito bastardo sin control, las yagas en la espalda son difícil de borrar, pero no existe ser en la tierra que pueda devolverle la cabeza que le arrancó, el segundo fue el hombre que repartía la comida, ¿el piso un lugar agradable para comer? También para estar esparcido cuales tripas y restos, ¿todo esto estaba justificado? Quizá, no ayudaría a nadie, tan solo a él mismo, sacesaría su deseo de sangre, venganza, dolor y odio, pero los que una vez fueron sus compañeros no ganarían nada, por el contrario, lo más probablemente es que los hagan responsables y remplacen a estos a trabajadores asesinados, pero qué más, no le importa.

Los siguientes en su lista son la pareja del momento, los padres ejemplares, todo parece tan simple, con el simple hecho de encontrar un mapa y buscar la forma de leerlo, remembrar entre sus recuerdos más dormidos el nombre de su pueblo, las afueras, ahí los encontraría, dicho y hecho lo logró, ahí estaba pero sus deseos no podían cumplirse, no…Alguien le adelanto, la muerte, maldita muerte, no pudo con él y busca vengarse de alguna manera, ¿quizás sea eso? No importa, puede fingir hacerlo, como un desquiciado se retuerce entre los cadáveres de sus familiares a los cuales les amputa las extremidades con sus propias manos, lento y seguro, disfrutando cada instante, cada pedazo de musculo desgarrado cuenta por cada mala experiencia, por cada lagrima, por cada azote, por cada humillación que recibió por culpa de este par de ilusos, aparentemente murieron envenenando o de alguna extraña enfermedad pues ya se encontraban deformados y para su mala suerte no era obra propia, pero no había de que preocuparse, a fin de cuentas los meros torsos no daban mucho a la imaginación, solo como toque final quema el lugar, mata al poco ganado que quedaba, entierra en cenizas de forma figurativa todo lo que una vez fue, todo lo que su pasado representa en negativo, ¿para qué? Porqué Averno es diferente, desatado en una locura que por ahora desconoce, más adelante sabría todo, descubriría sus placeres, sus delicias, sus intereses, su vocación labora, la de ser un esbirro, un sicario que apaga las flamas de los inocentes a cambio de una buena suma de dinero, todo perfecto, Averno avanza, y perdura a costa del resto, Averno es feliz así, omnipotente y atemporal, ¿el cielo? Quién lo necesita cuando estando aquí lo posees todo, todo lo que buscas, todo lo que quieres, todo lo que deseas es fácil de conseguir en este estado, Vampiro, palabra que desde entonces lleva puesta en pedestal de oro, pues es lo que es, un vampiro, un asesino, un ser de esta tierra que se aprecia singular. Como objetivo se propuso recorrer toda Europa y dejar sus semillas en toda esta, además de ir de vez en cuando dejando sin mecha a las flamas.