Yulianna Záitseva; sus relaciones

Aunque ambos se dirijan a un mismo punto en común, Yulianna podría enumerar todas y cada una de las características en su persona que la diferencian de su mellizo, Stiva. La perfección absoluta está en la mira de ambos, sin embargo es Yulianna quien ha demostrado a lo largo de aquella transición por la que Odín la ha llevado, que no solamente basta con fingir lo que uno pretende ser ante los otros para que estos lo crean, no, Yulianna está totalmente segura de que si ella cree en lo que demuestra, nadie jamás podría descifrar su verdadero ser, uno que resguarda un alma llena de codicia y que solo ansía la victoria absoluta, aquella abrazada por el poder, la belleza, y la inmortalidad pura, misma que trasciende a la no vida de los hijos de Lilith.

Frente a la sociedad, una joven dama admirable pese a lo poco que se sabe de ella, pues la reserva de Yulianna es fundamental; nadie sabe cómo llego hasta donde se encuentra, pero ninguno de los que le rodea se atrevería a preguntarlo jamás. La amabilidad y dulzura en la rusa pareciesen ser estrictamente proporcionales a lo estricta que ésta puede llegar a ser cuando los extraños se entrometen en sus asuntos o su vida personal.

Atenta, culta y servicial, Yulianna luce ante todos como el prototipo excepcional de damisela de su época, sin embargo toda aquella actuación perfectamente realizada no es más que una falsa pantomima que oculta lo que pasa justamente a sus espaldas.

Sin su hermano ella jamás hubiese conocido a Odín, por ende su corazón siente que le debe mucho, pero no todo. El deseo de la rusa está enfocado en su mellizo, y a pesar que otros hombres han pasado por su vida –generalmente para conseguir algo en concreto- ella sabe que nunca conocerá a un hombre como Stiva. La rubia le adora silenciosamente, pues sabe que no es bueno ni siquiera pese a su lazo de sangre demostrar tanto afecto para alguien que como meta tiene algo mucho mejor que el amor ajeno.
Sin embargo, bajo aquel manto de sentimientos puros y lujuria, es la codicia infinita en el alma de Valentina quien le advierte de tener cuidado con su hermano, hasta el punto de invitarle a cuestionarse ¿Si Odín solo solicitase un elegido para gobernar la Tierra, acabarías con la vida de tu hermano para obtener tu tal poder? La frialdad que nubla en ocasiones la mente de Yulianna es bestial, inclusive peor a la de Stiva, pero este comportamiento no tiende a trascender más que el terreno de los pensamientos por el momento. Lo sádico, maligno y tétrico de su ser se vuelca completamente a la hora de conseguir víctimas y llevarlas orgullosa a los altares de sacrificio para su Dios, la voz más pura de todas; la del gran Odín.

PADRES
Svetlana Záitseva - Madre - Fallecida
Vronsky Záitsev - Padre - Fallecido
HERMANOS
Stiva Záitsev
OTROS